Partida Rol por web

Antes de la aparación de Proctor, estaba mucho más decidido a ir hacia la selva que ahora mismo, pero ahora, parece que haberlo pospuesto me hace replantearme si es buena idea. De todas maneras...¿que vamos a hacer si no?, ¿ir allí a volver a empezar?

- Creo que lo mejor es que nos pongamos en marcha, ya están avisados y todavía no han respondido...si dentro de unas horas de reposo no obtenemos respuesta, quizá lo mejor sea asomarnos por allí para echar un vistazo rápido - digo mirando brevemente a Marcy - por cierto Bali, ¿les has escrito también para decirles que Marcy y la niña están bien?, ¿momento selfie?...y por cierto, ¿me puedes prestar un móvil?

Las dudas siguen surgiendo, pero en algún momento u otro nos tenemos que decidir. No podemos perder más tiempo de cháchara, me siento impotente estando aquí de pie. Aún así, trato de ver el lado positivo de las cosas. Asiento levemente a las palabras de Adrien para añadir:

-Si pasa cualquier cosa estaremos más cerca estando en la isla que aquí y podremos entrar en acción más rápidamente.

Tras mi escueta aportación, miro a Bali expectante.

- Lo de los estos que haces tú, vamos lo de salir de los espejos como la de The Ring ¿sabes, no? pues eso, que eso que tú haces te tiene un poco confundida. Estamos en la isla. En la costa oeste y la selva está como bueno, pues eso, como en medio de la isla eh, la de los Correctores es otra isla, obvio, a unos veinte kilómetros de aquí. 

Pero sí, por mí salgamos, Daisy ya estará lista para salir si nos necesitaran pero con lo de la niña y tal una movida ¿no? 

Ruda, nena, tú nos guías. 

400...399...

Al llegar al final del pasillo me paré. Mi respiración estaba agitada por el esfuerzo, pero tampoco era algo exagerado. Mis dedos se deslizaron por la pared mientras mi cabeza daba mil  vueltas en busca de respuesta.- Debemos encontrar... Una salida.-Volví sobre mis pasos, alzando la mirada un poco en busca de algo que sirviese.- Podríamos volver sobre nuestros pasos, pero eso sería perder minutos ¿Creéis que algún conducto podría tener una trampilla de salida? O quizás algún pasillo.-Me llevé la mano hacia el cabello apartándolo hacia atrás.- Será mejor que pensemos rápido, el tiempo apremia.-Mi mirada intentó analizar todo nuestro entorno, aunque la oscuridad era una gran traba para nosotros.

Había asentido a las palabras de Evolet. " Regresar solo nos haría perder mucho tiempo. Pero buscar por los pasillos oscuros es jugársela."

- ¿ Michael puedes abrir un boquete en el techo? Mantendré el escudo en todo momento. Se me había ocurrido repetir estrategia. Solo que esta vez era para ir subiendo hasta llegar a la superficie.
 

Yo en estos casos poco puedo hacer salvo tocar las narices con mis comentarios sardonicos. No es el momento para bromas y sólo me queda seguir a mis compañeros que para eso de la aventura son más duchos.

Ethan piensa, un poco para si mismo y un poco para los demás.

- El "amigo" de Shell le dijo que tenía la clave para la salida y para el transporte. Con todo el tiroteo, evidentemente sabía donde estábamos. Por descarte, la salida no puede estar muy lejos. Vamos, busquemos, no puede estar lejos de donde estabamos antes - se apura.

Miro a Vadik con gesto cansado en mis pétreos rasgos.Desde que habia legado el mensaje que me confirmaba que Marcy estaba fuera de este infernal antro , todo el cansancio acumulado y el estrés de las heridas me asaltaron de repente.

-Puedo intentarlo , si es lo que queréis.

Vadik y Michael se intercambian una mirada. El irlandés estaba buscando algún mueble para romper el techo cuando se le ocurrió lo mismo que estaba pensando el ruso. Una versión de la "bola especial" que habían hecho en la playa. Una pequeña dosis del poder repulsor de Vadik podía propulsar al Golem a través del techo, abriendo, sin duda, una salida. 

El punto elegido, como dijo Ethan era cerca de donde estuvieron antes, evitando el primer agujero por donde podría haber soldados. 

Evolett que buscaba trampillas, busca ahora objetos de almacén que apilar para hacer la subida más fácil. 

- Vamos, dame ese empuj-----ooooooon

Michael no ha terminado de hablar cuando una fuerza empuja su cuerpo contra el techo, que al igual que cedió a sus golpes, ahora se agujerea con facilidad al paso de su cuerpo de piedra propulsado. Afortunadamente no ha agujereado más que ese nivel. Masajeandose la cabeza comprueba que está en el pasillo sur, diez o quince metros de la encrucijada donde abrió el boquete. 

Ahora no hay soldados disparando. El nivel -3 está vacío salvo por el ruido constante de la alarma y de pasos invisibles tratando de evacuar el edificio. 

Comprobando que está todo despejado, el resto sube por el boquete. Evolett tiene que ayudar a Shell que parece ida y turbada. 

Vadik vuelve a coger el mando de la situación

- A mí me traían por este pasillo, debe haber un acceso a otro nivel cercano, Ethan, ¿alguna idea de a qué se podía referir ese hombre que hablaba con Shell? 

- Al norte tenemos el ascensor personal que nos trajo, puede referirse a eso. Vamos, corred, debemos ir cuanto antes. 

Efectivamente llegan a la estancia por donde descendieron y donde salvaron a Vadik de sus captores. Los soldados muertos aún siguen allí sin saber que pronto se desintegrarán junto al resto de la base. 

En el miniascensor sólo caben tres personas. El resto tendría que hacer un segundo viaje o subir por las escaleras, pero puede que eso les desvíe del "rumbo" trazado por las enigmáticas palabras del Corrector Suicida. 

Y hay otra dificultad. Está cerrado y pide una clave de acceso... 

303...302...

Al salir de la casa rumbo a la selva empiezan a escuchar un ruido lejano. Parecen sirenas. 

- No quiero ser o sea, ya sabes, como paranoico, pero como que parece que eso viniera de la Isla ¿no? Pero incluso durante el ataque no se escuchaba...¿qué ha pasado? 

Alexiss saca su móvil

- ¡Las autoridades están diciendo que hay un accidente en aquella isla y que nadie se aproxime en un radio de veinte kilómetros... hablan de ... una gran posible detonación y una cuenta atrás! 

El alba rompe. 

Adrien mira a Daisy. Ya estará cargada y a punto si quieren ir a ... Luego mira a la selva. Jamás le había parecido tan segura y acogedora como ahora que es la alternativa a una enorme explosión. 

No puedo evitar pensar que anteriormente Bali también me había dicho que no se habían planteado cómo iban a salir de allí. No podemos dejarles allí a su suerte, pero tampoco tiene sentido ir para allá sin tener la certeza de que nos necesiten...Joder!. Si estuviese sólo sé lo que haría... y aunque ahora también podría irme hacia allí yo solo y dejar a Marcy a cuidado de Bali en la selva (o viceversa), pero nos volveríamos a separar y otra vez tocaría jugar al ratón o al gato...

Sin ni siquiera pedirle permiso, cojo el móvil de Bali y llamo a Ethan...espero que no esté emboscado en plena operación de sigilo.

Que nos localicen. Ya saben donde estamos nosotros y también, donde están ellos

Me golpeo los dedos sobre la sien y me abro paso hasta el teclado de código. Los dedos de mi mano derecha se colocan sobre las teclas y, tal y como dijo mi chico, marco la contraseña que debería de ser: C-E-S-A-R-E

Pongo esa cara que se pone cuando esperas un click de éxito en interacción con objetos electrónicos.

Bali se dedica a enseñarme cómo están ubicadas las islas de la zona, como si acaso tuviese un GPS en la cabeza. Aunque creo que me ha malinterpretado. La cuestión es largarse de aquí y hacerlo cuanto antes; ellos me trajeron a su casa. O colabora con ellos o nos tiene a más de uno en seguimiento y pueden localizarnos en cualquier momento y en cualquier parte del mundo. Qué idea tan… Bueno, en fin. No puedo ser pesimista ahora mismo.

Me acerco a Daisy con Alice de la mano. La señalo y digo:

-Mira Alice, como el barco de tío Tony. ¿Te acuerdas cuando el verano pasado fuimos a celebrar tu cumpleaños en el lago, en su barco? Eras muy pequeñita, no creo que te acuerdes… -le acaricio la cabecita y la aúpo para llevarla en brazos.

En ése momento, se oye un ruido que hace que prácticamente todos estemos unos segundos en silencio escuchándolo. Una sirena, Bali tiene razón. Es una maldita sirena. Y viene de la isla de los Correctores. Alexiss nos da la mala noticia. Me quedo petrificada. Duele imaginarse que todos los que han hecho posible el rescate de mi hija sigan ahí adentro. Un vacío angustioso en el pecho me recuerda que eso no está bien, no es justo. Miro a Adrien, el cual toma un teléfono y hace una llamada.

-¿Cuánto puede durar una cuenta atrás? ¿Un minuto? ¿10? ¿1 hora? ¿Dice algo de eso la noticia?

Sí, básicamente una idea bastante loca está pasando por mi cabeza, pero sin tiempo es inútil que la inicie.

- Están hablando que en cuestión de cinco minutos todo va a explotar

- No llegaríamos a tiempo, o sea, no way, Mmm, Ethan no llevaba teléfono, era Shell la de su equipo quien sí lo hacía, es como la súper última llamada ¿no? 

yen lleva días en su agradable pueblo, en su comodo y placentero pueblo en el que nunca se sintió tan extraño, tan forastero, ese pueblo que durante décadas fue su vida nunca fue tan angosto y claustrofóbico como ahora, la traición le puede no soporta haber dejado allí a sus hermanos y siente como si su corazón se volviera negro y correoso como una pelote de brea, el que siempre se dio a sus vecinos sin importarle ni su vida ni su bienestar ahora ha traicionado a sus compañeros a sus hermanos
el unico consuelo que le queda es saber que fue por un fin superior, la misión que le enconmendo su padre
un padre al que nunca conocio

los primeros días pensó que llegarían ordas de correctores tras algún tipo de señal que enviara la aguja pero aquel trozo de metal no parece ser mas que eso, un trozo de metal

puede que fuera tan fácil como enterrarlo el suelo en un lugar que nadie frecuentara?? a veces lo sencillo es lo mejor, pero entonces por que su padre montaria todo esta búsqueda?
quiere volver con sus compañeros pero no puede ir con la aguja en un bolsillo, ¿donde podría esconderla?
y por otro lado....¿donde estarán?

Ethan espera a ver si el código ingresado por Shell es correcto. De ser así estaba determinado a ir en un segundo viaje. Las mujeres debían ir primero, y luego cedería el lugar a alguno de sus compañeros, aunque todo dependía de ver si se abrían las malditas puertas. Si no, bien podía comenzar a rezar. Mientras tanto, miró a ambos lados intentando determinar si había algún peligro inminente cerca. Bueno, excepto por la cuenta regresiva que significaría el fin de sus vidas. Game Over, y todo eso.

Evolett, Shell y Vadik suben en la primera ronda. La australiana se asegura que Ethan y Michael conozcan bien la clave que les abre al ascensor personal de los Editores (supervisores de la Base). Y aún así se preguntan si sabrán salir de allí. 

Uno de los botones del ascensor parece ser la solución: HANGAR. 

Se despiden y se cierran las puertas. 

Un segundo de terror cuando las luces se agapan y el ascensor vibra, luego en otro instante todo recupera la normalidad. El ascensor está subiendo. Empiezan a oír los gritos de los hombres de la base tratando de evacuar. El ascensor se abre y se encuentran al aire libre, pero en un espacio cubierto. En lo que parece un gran porche, pueden ver a lo lejos a hombres correr en todas direcciones. Algunos están corriendo hacia el mar. 

Otro segundo de desconcierto hasta que Shell advierte frente a ellos, en una exclusa flotando una lancha motora: La vía de escape que su esclavo le ha asegurado. 

El ascensor vuelve a bajar. En cuanto suban tendrán que salir corriendo. Evolett parece saber encender el motor al menos.