Partida Rol por web

Sin pensarlo dos veces obedezco a las órdenes de Kyle y comienzo a escabullirme mientras él intenta detenerle. Las manos me tiemblan e instintivamente intento buscar la salida más próxima, ya sea por la ventana o por la puerta. No puedo evitar una mirada atrás hacia Kyle... pero él ya arriesgado demasiado por mí y no es justo poner en peligro la vida de ambos por comportarme como una tonta cobarde...

El T-800 no duda ni un segundo en dirigir la boca de su arma contra Kyle. El disparo resuena como un cañonazo dentro de la habitación. Kyle se lanza hacia un lado cuando parte de la mesa tras la que se cubría desaparece en una nube de astillas. Parte de las postas le desgarran la chaqueta y la piel del costado izquierdo. La herida empieza a sangra profusamente.

El hombre disparó contra la máquina con el revólver que le había entregado el comisario el día anterior. La bala alcanzó al Terminator en el hombro izquierdo. No le hizo ningún daño pero le desvió la escopeta lo suficiente como para que el segundo disparo cayera sobre la cama haciendo volar el relleno del colchón.

Sara aprovechó el momento para escabullirse por la ventana del baño y salir a la parte trasera del motel. Varios vehículos se encontraban ahí aparcados y la mujer se dirigió hacia ellos con la esperanza de que Reese la siguiera.

El Terminator iba a terminar lo que había empezado. Debía acabar con el humano. Sin mas dilación comenzó a caminar hacia el escritorio, disparando hacia el mismo con la esperanza de darle

El asesino era impasible, y Sarah parecía haber salido. Era hora del plan B y huir él también.

-Aún no has ganado.

Dijo a la vez que sacaba una de sus nuevas adquisiciones y le prende fuego. Antes de salir corriendo hacia la ventana más cercana, lanza el objeto hacia el Terminator.

Reese corrió hacia el baño detrás de Sarah cargando con la bolsa de deportes. El Terminator avanzó tras él y abrió fuego nuevamente. El humano saltó hacia el interior del baño pero no fue lo suficientemente rápido. Parte de la descarga cayó sobre su brazo derecho. Un dolor lacerante se le extendió por todo el cuerpo a Reese. Girándose como pudo, Kyle sacó un cilindro de la bolsa y lo encendió con un mechero.

-Aún no has ganado -dijo antes de arrojarle el cilindro.

La bomba explotó con fuerza a los pies del Terminator lanzándole hacia atrás. La máquina chocó contra la pared cuando la metralla causó más daños en la cubierta orgánica. Todo en la habitación saltó por los aires dándole a Reese tiempo para arrastrarse por la ventana dejando tras de si un reguero de sangre y cayendo por la parte de atrás donde Sarah le aguardaba cerca de algunos vehículos.

El Terminator comienza a analizar sus datos... su cuerpo se encontraba dañado, y uno de sus ojos no funcionaba correctamente. Además, su piel humana estaba casi destrozada, y ya no podía disimular mas su cuerpo mecánico, aunque eso no le preocupaba mucho.

A pesar de las heridas, aún estaba plenamente operativo. No podía dejar que se escapasen... vuelve a caminar por el fuego, ignorando la habitación vacía, hacia el lugar por donde se han escapado los humanos. No iba a permitir que huyeran de nuevo...

Kyle corría hacia el vehículo, con gesto de dolor por la herida causada por el robot. Aunque por suerte, había ganado algo de tiempo con la bomba.

-Vámonos de aquí cuanto antes- dijo acercándose a la zona de los vehículos.

Al ver llegar a Kyle herido, mis pulsaciones se disparan y prácticamente no puedo controlar los nervios, sin embargo, haciendo acopio de todas mis fuerzas intento hacerme con el primer coche que me topo y ponerlo en marcha para poder irnos de allí en cualquier momento.

Apenas cruzo una mirada nerviosa con Kyle... sin poder encontrar las palabras en este momento...

Cuando Kyle ha salido por la pequeña ventana del baño, Sarah ya ha roto la ventanilla del conductor de una furgoneta y conseguido ponerla en marcha. Kyle se sube al asiento del copiloto y el vehículo pone rumbo de nuevo hacia la carretera. El Terminator rodea el motel a tiempo para ver cómo sus presas escapan otra vez. Sólo que en esta ocasión no iban a dejarle atrás. Sin perder tiempo, la máquina se dirige hacia su coche y, con un chirrido de neumáticos, sale tras los dos fugitivos.

La carretera, con dos carriles para cada sentido, se encontraba esa noche con escaso tráfico. Aún así, Sarah sorteaba los pocos vehículos que encontraba en su camino. Por el retrovisor podía ver el coche del Terminator, que les seguía infatigable.

El Terminator acelera con su coche. su objetivo es bien sencillo: intentar sacarlos de la carretera. Para ello, comenzaría a golpearles por detrás para hacerles mas difícil el manejo del coche. Luego, y en función de sus posibilidades, ya vería que hacer a continuación.

-Písale a fondo- le dijo a Sarah mientras agarraba su arma.

Si creía que podía tener la oportunidad y se le ponía a tiro, no dudaría en disparar a aquella máquina. O a su coche, lo que se rompiera antes.

La persecución continuaba a través de la carretera. El Terminator pisó a fondo y embistió desde atrás al coche de Sarah momento en que Kyle aprovechó para disparar casi a quemarropa sobre el vehículo perseguidor. El neumático delantero izquierdo estalló y el coche del T-800 dio un bandazo. Incapaz de controlarlo, el coche empezó a dar vueltas de campana.

Tampoco Sarah pudo hacer nada. Poco acostumbrada a la conducción peligrosa, el volante cobró vida en sus manos y la mujer lo soltó. El coche primero se lanzó hacia la derecha y luego hacia la izquierda donde se arrastró junto a la mediana haciendo saltar una nube de chispas. Tropezando con un badén, el coche dio un salto y también volcó.

Unos quinientos metros más atrás, el T-800 salió de debajo de su vehículo justo a tiempo para ser atropellado por un enorme camión que venía embalado y no se había percatado de nada. El camionero pisó los frenos a fondo y con un chirrido espantoso y un olor a gomas quemadas, el enorme camión se detuvo con el Terminator atrapado debajo.

Análisis internos... comprobando...- el Terminator había sufrido un duro golpe. Por mucho que su tecnología fuera muy resistente, por mucho que su equipo fuera muy moderno, tenía un límite. Y estaba llegando a ello. No le preocupaba su estado, a decir verdad, eso era irrelevante. Pero tenía que estar en condiciones para acabar con su objetivo, el cual, seguía logrando escapar de él.

Si el Terminator tuviera sentimiento se encontraría frustrado ante la situación actual. Pero no los tenía. Y ahora solo quedaba analizar y continuar. Y en ello estaba.