Partida Rol por web

Terra Antiqua

Estación de Prima Porta 327

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17/03/2010, 10:42

El General no te dice mucho más. Insiste en que estés atenta a las reacciones de Alfred Borden y el Cabo Helborg, pero sin darte una tera concreta. Te dice que, obviamente, como oficial superior, tus sugerencias serán tenidas en cuenta, más aún por el Sargento Stibbons, pero que este seguirá llevando el mando de la unidad. 

Así pues, con todo hecho, te reúnes con el Sargento y el Cabo en la lanzadera. 

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25/03/2010, 23:55
Director

Una vez la Teniente se presenta frente a la lanzadera, os dan el equipo. Un rifle de asalto M-3200, con dos cargadores más el que lleva el arma, un total de 3000 balas, 1000 por cargador. Además, os dan un chaleco antifrag, rodilleras, botas, guantes y un casco, el equipo de la infantería ligera. Cada uno de ellos, con el rango correspondiente, además del nombre. 

Es obvio que todo aquello se ha organizado con mucha prisa, pues os dan el equipo y el armamento justo antes de subir, como para que os los pongáis una vez dentro de la lanzadera. No hay informes, el General prefiere que se prescinda de todo el papeleo posible sobre el asunto. Una vez allí, la escuadra encargada os dirá lo que debéis saber. 

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26/03/2010, 00:00
Director

Finalmente, una vez todos dentro, la lanzadera despega. Es un vehículo que no necesita de presencia humana, pues va unido a su punto de origen y destino gracias a una serie de raíles aéreos, generados por varios campos de raíles, puestos en cada diez kilómetros de recorrido. El ordenador de a bordo os informa de que contáis con una hora exacta antes de llegar al destino. No hay ventanas, ojos de buey u orificio alguno que os permita ver el exterior. La lanzadera está completamente cerrada, por seguridad. Está pensada para llevar equipo, y personal en casos de emergencia. 

A vuestros pies, tres cajones, con el chaleco, casco, rodilleras, botas y casco, además del arma, grabada a vuestros signos vitales. Un arma que no se puede robar, y no la puede usar nadie más, salvo el propio usuario. Vais solos. 

Notas de juego

El ordenador de abordo tiene una terminal, desde la cual se puede acceder a información, y demás. Si queréis deciros algo, pues adelante ;). Si no, pues seguiré hasta la llegada al puesto. 

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26/03/2010, 00:25
Xavier "Xav" Helborg

Me pongo el equipo, comenzando de abajo hacia arriba

"Empieza ya, ya comienzo a notar la emoción de la caza, y eso que aún no sabemos ni quién es el enemigo"

Lanzo una risita y me ajusto el casco, antes de recoger el rifle con gesto experto.

VUelvo a sentarme en mi lugar y enciendo un cigarrillo, uso mi mano derecha para fumar mientras con la izquierda sujeto el arma, apuntando al suelo.

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28/03/2010, 18:12
Vera Irth-Agozet

Silenciosa, Vera comienza a ponerse el armamento. Mientras la lanzadera cruza su camino y ninguno de sus acompañantes parece dispuesto a iniciar una conversación, va calzándose las botas, ajustándose las rodilleras, con movimientos tranquilos pero visiblemente diestros. A diferencia del Cabo, que lo hace de forma rápida y experta y ya está presto para salir disparado, Vera se toma su tiempo pues parece tener la mente en otro sitio. Se ajusta el chaleco mirando al ordenador de a bordo. Ajusta más, hasta que el andrógino elemento de protección comienza a curvarse ligeramente para adaptarse a su cuerpo femenino. El casco y el arma quedan en la caja y ella se levanta, accede al ordenador, y manda la orden de información.

Planos de la estación 327.

Y luego de un momento, otro comando.

Informanción de los fallecidos en la estación 327.

 

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29/03/2010, 22:41
Suerio Stibbons

Rapidamente, sin muchas explicaciones, me meten en un tren con la teniente y el cabo. El equipo, el cual nos dicen que nos coloquemos, a estrenar y, a mi gusto, bastante basico.Pero al parecer, ellos tambien lo han planeado con poca antelacion, asi que no puedo pedir mucho. Al menos voy a llegar con algo a la mision, no tendre que esperar varios dias por los suministros.

Mientras me voy colocando las protecciones, hablo serenamente .- ¿A alguien le han dado instrucciones sobre que hacer alli, o solo es contactar con los destinados en la posicion? A mi me dejaron en la inopia tras la reunion con nuestro agradable general. No parece mala persona, aunque si un poco demasiado brusco.

Una vez terminado de colocarme el equipo,  compruebo el arma, para luego tratar de conectar mi terminal de muñeca con la informacion del ordenador de a bordo, para no tener que molestar a la teniente, la cual veo interesada en la pantalla. Me interesan los mapas y datos de la anterior dotacion, ademas de los listados de logistica, donde se vea que cosas han entrado y salido de la estacion durante la estancia de la antigua dotacion. Nunca se sabe que vamos a encontrar ahi.

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31/03/2010, 03:58
Vera Irth-Agozet

Vera permanece un momento mirando hacia la pantalla, esperando, y luego mira al Sargento.

- No - contesta sin ningún atisbo de duda - No he registrado ningún tipo de misión militar explícita, además de la misión que se me ha asignado referente a la opinión profesional psiquiátrica de lo sucedido. Imagino que se hará un reconocimiento de la zona y de la estación, seguramente porque nuestra misión oficial involucrará contacto con varias de estas estaciones y se teme que algo en ellas, o en las condiciones del entorno abierto de las que, según la idea, las estaciones deberían proteger a quienes se encuentran en el interior - echa un vistazo rápido a la pantalla de la terminal, que aún no ha dado los datos que espera y que continúa con un desesperante cartel de Procesando, aguarde un momento - Pero no más que eso. Al menos, por ahora.

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08/04/2010, 20:41
Suerio Stibbons

De acuerdo Teniente, entonces un reconocimiento y a esperar ordenes- Miro al cabo- Cabo Helborg, deberia tener cuidado con el cigarrillo al salir de la lanzadera, recuerde las posibles bolsas de gas de las que nos hablaron. A proposito,¿Prefiere que le llame asi o de otra forma que me diga?

Mi voz no tiene ningun matiz de reproche, mas bien de indiferencia hacia lo de fumar, aunque no sea algo que termine de gustarme. Cuando le pregunto por como prefere que lo llame, cambio algo el tono de manera que sea mas distendido, no tan formal como hasta hace unos momentos. Mientras me siento, mientras espero que el ordenador de muñeca termine de acceder a la informacion que he pedido, que va demasiado lento para mi gusto.

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09/04/2010, 21:31
Director

El viaje se os pesado, y largo, incluso más que lo que debería durar el viaje. Kilómetros y kilómetros de ruinas llenan el horizonte allá donde se mire. Puntualmente, encontráis algunos equipos de exploración, pero por lo general, llanura. Un grupo de lobos devora a una presa desafortunada. Poco a poco, no obstante, las ruinas desaparecen, y se rebela un puente, aún en pie, parecido a un gran puente, suspendido en el aire. Al poco el puente termina, de forma brusca, y empezáis a ver bosque, y mar, a lo lejos. Es un prado, y un bosque, que se come, muy poco a poco pero sin compasión, lo que queda de la ciudad. Es verde y frondoso, muy parecido a los terrestres. A lo lejos, un acantilado, que corta el paisaje para dar paso al mar. El refugio está ahí, cerca de la línea del acantilado. A primera vista, ese lugar parece de todo menos deprimente. Es mucho peor el estar en el espacio puerto. El transporte aterriza, y salís de él, a pocos metros de la puerta de la estación 327. Pisáis hierba fresca, que probablemente nunca ha pisado el hombre, hasta hace muy poco. El aire del mar y su sonido, sedante, dan una sensación muy grata. Parece un balneario. Parece el último sitio en el que alguien se volvería loco. 

Tras pocos segundos de llegar, aparece un Sargento, que se cuadra y os saluda, al modo militar. 

-¿La Teniente Vera?- Dice, mirando directamente a la Teniente. -La esperábamos. Y a ustedes. Vengan conmigo, les llevaré al interior de la estación, y les pondré al corriente.- Parece serio, aunque podéis notar que habla deprisa y parece que se tropiece consigo mismo al hablar. A veces, incluso es complicado comprender sus palabras. 

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09/04/2010, 21:41
Director

Según lo que has leído, los muertos son un Cabo, dos Sargentos, un Capitán y dos arqueólogos, un equipo de recuperación, más el equipo responsable de la base (el Capitán y uno de los Sargentos). Sus muertes son horribles, crímenes atroces surgidos de una mente realmente retorcida y enferma. Cuesta trabajo creer que fueran capaces de hacérselo a ellos mismos. Cuesta trabajo pensar que eso es capaz siquiera de hacerlo un humano, por cruel, enfermo o loco que esté. 

Poco más dice. Hay información sobre la estación, que de poco sirve, pues un equipo te guiará por su interior y responderá a tus preguntas. Los informes de los oficiales y el personal militar y civil muerto son normales, todos ellos con una cartilla sanitaria limpia, tanto física como mental. Sin indicios de traumas, trastornos mentales o enfermedades físicas, siquiera. La superviviente es una chica joven, una niña prodigio de la arqueología, a la que han encontrado con el cuerpo cubierto de sangre y el mono de trabajo desgarrado, y hablando en una extraña lengua, desconocida por cualquier banco de datos. 

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12/04/2010, 17:15
Vera Irth-Agozet

Vera había pasado el resto del viaje en un estoico silencio, sólo roto por pequeños movimientos. La pregunta del Sargento había caído en saco roto, pues el Cabo no se había dignado en contestarle nada. Vera no había intervenido, pero con su mirada había navegado entre uno y otro, en la conversación rota que uno había intentado mantener y el otro había rechazado. Quizás era un indicio más de aquella irreverente necesidad de desafiar a la autoridad, aquel desprecio que claramente había mostrado hacia ella cuando se había dado cuenta de su rango. O quizás simplemente no tenía ganas de hablar. Vera sacaba sus conclusiones sin decir nada, y observaba a la pantalla. Cuando la información apareció en esa superficie, se sumió en la lectura sin perder tiempo.

Al bajar, permanece con el casco en una mano y el arma en su sitio. Los pocos segundos en los que se encuentran solos, fuera de la nave, Vera los pasa mirando a su alrededor como si el ambiente le fuera completamente inesperado. Y lo es, en realidad, comparado con su planeta de origen, con las estoicas condiciones de clima que habían contribuido a determinar su carácter. Pero los demás no lo saben, y sólo la ven mirar, guardar silencio, y dar la vuelta cuando escucha su nombre pronunciado por un desconocido recién llegado.

Asiente.

- Teniente Irth-Agozet, Sargento Stibbons, Cabo Helborg - responde, con una calma totalmente contraria a la agitación y atropello del hombre - Le seguimos.

Siguiendo sus propias palabras, y tras un gesto hacia sus acompañantes, Vera se dispone a entrar.

- ¿Qué lo tiene tan alterado, sargento?

Notas de juego

Una pregunta. ¿No necesitaban filtros de atmósfera, para respirar, o estoy confundida?

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13/04/2010, 10:19
Director

Notas de juego

Cita:

Una pregunta. ¿No necesitaban filtros de atmósfera, para respirar, o estoy confundida?

Ahí, no. En principio, esos filtros los lleváis "por si las moscas", por si hay algún vertido que emane gases tóxicos en alguna zona, por ejemplo (obviamente, el mismo traje os avisará a kilómetros de distancia de darse el caso).  

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13/04/2010, 15:36
Xavier "Xav" Helborg

Había permanecido callado, ignorando la pregunta del Sargento mientras fumaba tranquilo, pensando en el paseo que nos esperaba. Para entretenerme había sacado una baraja de poker y la había ojeado, para luego hacer trucos de manos con ella, recordando a quien me había enseñado a jugar, un viejo amigo de nombre Sebastian. Al pensar en él una sonrisa me aparece por reflejo en los labios "Ese hijo de perra sí que sabía jugar", quizás esos momentos con su unidad rebelde, cuando él tenía 14 años habían sido los mejores de su vida.

Cuando aparece el otro sargento no puedo evitar escupir hacia un lado, mientras le lanzo una mirada al paisaje, mientras respiro profundamente, cerrando los ojos mientras mis pulmones se llenan del aire salado que llega del mar "Joder…esto es un paraíso comparado con la última campaña de pacificación en el Desierto de Garlan"

Me agacho y rozo la hierba con la mano antes de seguir a los demás.

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14/04/2010, 21:25
Suerio Stibbons

Tras un viaje en el que el cabo se ha negado a hablar con nadie, la lanzadera para en un prado desde el que se escucha el mar. El mar, que recuerdos de mi infancia en Gadisia, viendo a mi padre partir hacia la mar para ganarse el pan y poder darnos a la familia una vida digna.

Tras un momento de reflexion, veo salir por la puerta a la teniente y al cabo, viendo como este ultimo tenia cierto momento parecido al mio, aunque quien sabe en que pensaba. La teniente saluda a un compañero de oficio bastante nervioso que sale a recibirnos, mientras yo hecho un ultimo vistazo por si algo se queda en la lanzadera, para salir despues con el fusil colgando a un costado, apuntando hacia el suelo, con el cañon casi a la altura de mi tobillo.

Saludo al compañero cuando la teniente me presenta, y cuando nos dice de seguirlo lo hago sin mas preguntas. A ver si sacamos algo en claro de la mision, y mas tarde puedo mirar la informacion que descargué del ordenador de la lanzadera.

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14/04/2010, 22:59
Director

El Sargento os acompaña al interior. La puerta de entrada resulta ser solo una de varias. Lo primero que veis del interior es una sala de no más de treinta metros cuadrados y tres metros de altura. Una voz artificial inunda la sala. 

-Esperen, por favor. Descontaminación en progreso.- Una luz azul llena la habitación dos veces, para luego centrarse en un foco que os empieza a examinar muy lentamente, como si fuera un escáner. Básicamente, os están irradiando una sustancia a cantidades moleculares que destruye cualquier tipo de radiación o sustancia dañina. No es el primero que veis. El Sargento, un hombre alto, de pelo rubio y corto, ignorando el escáner, se gira hacia vosotros. 

-Espero que... En fin, tengan las entrañas en su sitio y los huevos bien puestos... Lo que van a ver no es agradable... O sea, todos hemos visto heridas de guerra muy feas pero lo que se han hecho esa gente...- Niega con la cabeza. -Casi mejor espero a que lo vean. Es una mierda.

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19/04/2010, 07:02
Vera Irth-Agozet

Vera se entrega al escáner con calma. A pesar de haber visto el procedimiento antes, mira a su alrededor mientras el Sargento que los ha recibido habla. No es el primero que les dice eso, ni será el último, ni tampoco será el primero a quien Vera le hablará de las prácticas psiquiátricas que ha tenido que pasar. La guerra es de rabiosos perros de territorio, incluso de mercenarios, matando por la utilidad y rigiéndose por el principio de la economía de los riesgos: si puede ser un tiro limpio, mejor; e incluso si puede no desperdiciarse una bala y hacerlo rápido, mejor todavía. La guerra es utilitaria, incluso su odio es utilitario, y pocas son las salas de interrogatorio y tortura que vayan más allá de eso. Otro cantar son los asesinatos por otros motivos. De esos, de lo retorcido, lo impensado, lo innecesario, lo que espantaría hasta a la Muerte misma personificada, Vera se encuentra hasta arriba. Pero no lo dice: no es necesario. No puede vanagloriarse de los gajes de su oficio. No, ya tiene las pelotas muy bien puestas. Años de entrenar a sus pelotas, inexistentes, para hacerlas de platino.

- ¿Cuántos llevan ustedes en contacto con esta situación? - pregunta al Sargento, suavemente, dándose vuelta hacia él - Si llevan más de treinta y seis horas, y me lo permiten los superiores, recomendaré que los destinen hacia otro punto del planeta.

El escáner continúa subiendo, formando círculos sobre el cuerpo de Vera y de todos, acercándose cada vez más a sus cuellos. Es bueno que los cuatro allí sepan que están en territorio conocido, aliado y relativamente seguro, pues a veces era imposible no despertar los instintos de defensa más dormidos debajo de la piel al ver y sentir aquella luz, que tan bien podría ser un láser de altísima frecuencia de onda, acercándose tan impunemente a sus gargantas. Vera acomoda su casco, sin dejar de prestar atención al Sargento.

- ¿Cómo está la situación entre los demás destinados aquí? Me gustaría que pudiera decirme quiénes, además de usted, están en la base y qué han hecho desde que han llegado, respecto de lo sucedido.

Notas de juego

Gracias, director.

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20/04/2010, 13:17
Director

-Descubrimos todo esto hace apenas 24 horas, Teniente. Nadie lleva aquí más que eso. Yo, y mis tres hombres somos los que han estado aquí desde el principio, el resto, dos psicólogos, los doctores Foster y Andrews, además del Dr. Dherbel, médico y especialista en cirugía, creo, y el arqueólogo... Ellos llevan aquí entre cinco y diez horas. No hay nadie más. En cuanto a la base, puedo asegurar que no hay peligro en la base, hemos registrado todo el complejo varias veces.

Justo cuando acaba de hablar, el rayo azul acaba de registraros, y se abre una puerta, justo al lado contrario de la puerta por la que habéis entrado. Llegáis a una sobria sala de espera, con dos filas de sillas, una mesa, un ventanal que permite ver el interior de una sala de control y dos puertas, una por la que entráis y otra por la que habéis salido. El Sargento se dirige al ventala, y frota su mano contra la pared justo bajo el cristal, materializando un panel de control. 

-Vale...- Susurra, observando un teclado numérico que acaba de dibujarse en el panel de control. -Y la clave era...- Su dedo va a pulsar una de las teclas, pero vacila y lo retira. Suspira y niega con la cabeza. 

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21/04/2010, 19:15
Suerio Stibbons

Me acerco al Sargento y le hablo- Tal vez si no recuerda la clave con mi juego valga, supuestamente estaré al cargo de esto. Puede que ya tenga acceso.

Me acerco abriendo el archivo con toda la informacion que me han dado, mirando mi clave de identificacion- Ya que estamos, vamos a pasar el mal trago pronto.- Le ofrezco los datos que tengo y por si necesita mi huella o voz me quedo cerca de el, preparandome para lo que me espera.

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24/04/2010, 19:21
Director

El Sargento permite a Stibbons teclear su clave, y esta da acceso. Entráis en la base, propiamente dicha. Es cuadrada, de unos dos cientos cincuenta metros cuadrados, de seis metros de alto, con varias divisiones, varias paredes. Una, en la esquina a vuestra izquierda, según entráis, por el centro de la pared sur, que ocupa casi un cuarto del espacio total, es la sala de estar, con máquinas dispensadoras de bebida, comida, una mesa de billar y cuatro sillas alrededor de una pequeña mesa. Una de las paredes permite desplegar una pantalla con varias opciones de entretenimiento. En la esquina contraria a la "sala de estar", otra similar, con dos baños. El resto de la estancia contiene, a la izquierda, un muy pequeño laboratorio, muy básico, y a la derecha, un cómodo banco, un par de sillones y una mesa de forma rectangular. 

En el centro de la pared norte hay otra puerta, que accede a una estancia aneja, de forma igual a la anterior, de unos dos cientos metros cuadrados. La puerta da a un pasillo, y a derecha e izquierda, dos puertas a cada lado dan acceso a una pequeña estancia de unos cuarenta metros cuadrados con una mesa, dos taquillas y dos literas. Finalmente, al final del pasillo, hay una puerta más, pero esta requiere autorización, aunque está abierta. Según el Sargento, conduce a los laboratorios, donde están los cuerpos, bien "embolsados". No veis a nadie, aunque eso no es alarmante. El Sargento avisa de que están todos en los laboratorios. 

Notas de juego

Si queréis hacer algo aquí, adelante. Si no, os posteo los laboratorios. Si necesitáis un mapa, avisad, que hago uno por paint ;). 

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27/04/2010, 09:00
Vera Irth-Agozet

Cuando el Sargento Stibbons se da vuelta para verificar que los demás fuese con él, traspasando la puerta abierta, Vera asiente en su dirección como si notoriamente aprobase su accionar. Se cuelga el casco del cinturón en el cual pende su arma, y con las manos libres camina en la dirección que la puerta les indica. No ha contestado al Sargento local acerca de lo que le ha dicho, posiblemente porque no ha contado con tiempo. La realidad es otra. Una observación en la actitud de aquel hombre le ha llevado a conclusiones que, si bien se guarda, modifican su accionar principal.

- Por favor, Sargento. Indíqueme el sitio donde fueron encontrados los cuerpos.

Notas de juego

Si pudieras hacer un mapa, te lo agradecería enormemente ;)