Partida Rol por web

Os he creado una escena para que podais hablar tranquilamente cuando esteis en la habitacion durante la escena inicial. Mas sencillo que estar editando mensajes.

Desempaco la maleta de Garth con desenfado. Se que a veces me sobrepaso con las responsabilidades de trabajo, pero ese lugar me da mala espina. La idea de dormir ahí me desagrada por completo, al igual que no poder cumplir con las reuniones y el papeleo que tengo pendiente. 

- Veremos, bajemos a beber algo y revisamos eso. Pero bueno, sabes bien que no me puedo quedar mucho tiempo en este lugarsucho. Las responsabilidades nos agobian, al menos a mi. Lo sabes bien. Venga, bajemos... Me haría bien un martini seco.

Miro mi celular, resoplo de bronca. En la editorial me echarían la bronca por esto. Tomo mi cartera y me acerco a la puerta. La abro y espero que Garth me siga.

 "Esa es mi chica" piensa Garth cuando por fin la ve convencida de aparcar un rato el trabajo, relajarse y tomar una copa. Quizá eso era todo lo que Sally Jones entendía por desmelenarse, pero esa era una frontera que quizá exploraría esta noche... el caso era no pensar en el jodido trabajo aunque sólo fuera por un rato. Tener la vista centrada en los papeles tanto tiempo debe dejarte bizco... como poco.

- No, no y no... - advirtió negando con la cabeza cuando la ve coger su cartera - ... estas vacaciones son culpa mía - se coloca justo detrás de ella, coge la cartera y la lanza encima de la cama - ... no voy a dejar encima que tu cargues con los gastos... o bien podemos pasar la tarjeta y que pague la editorial ... - sonríe de forma macabra mientras comienza posa sus manos sobre sus hombros, abre la puerta y se propone que salgan de allí lo antes posible.

- Y deja de resoplar, que vas a desinflarte... - poco a poco la saca de la habitación y tras salir él también cierra la puerta tras de sí.

Bajáis al bar, y lo encontráis vacio, pero al poco de entrar escucháis pasos en el pasillo y aparece la mujer que cuando llegasteis hablaba con Graham.

- Vaya, ¿Llevan mucho esperando? Mil disculpas. Meredith, la camarera, a bajado a servirle algo a uno de los clientes en el Jacuzzi, pero subirá en seguida. Si me dicen que quieren yo se lo serviré señores.

La mujer tiene un tono agradable, aunque su rostro refleja cierto cansancio, y esta claro por sus ojeras que no ha dormido demasiado la ultima noche.

 Parece que alguien ya le estaba sacando rendimiento al jacuzzi. No era mala idea, tal vez luego se lo propusiera a Sally pero por el momento conseguir que viniera hasta el bar ya había sido todo un logro. Observó a la mujer de marcadas ojeras, pese a su mirada dulce y servicial tono, su aparente cansancio no transmitía mucha tranquilidad. Garth se acomodó donde pudo.

- No, de hecho... acabamos de llegar - dijo omitiendo cualquier expresión de su cara. Había tres personas con él en la sala... para Garth Loeb eso ya era una multitud casi - Ella quiere un martini seco - se volvió hacia Sally - ¿no es así? - le preguntó - yo creo que... ¿tienen algún licor especial? Me apetece probar algo más... - paladeo la siguiente palabra - ... artesanal. - y a ser posible de graduación considerable.

Se volvió hacia Sally de nuevo, mientras extiende y apoya los brazos sobre la barra, recostándose sobre el borde de la misma.

-Total... no sé para que vamos a revisar nada. Luego llegará el editor o mucho peor esos lamebolígrafos de la productora y harán lo que les salga de la bisectriz de su ángulo principal - sonríe cargado de cinismo con actitud algo derrotista.

Miro a Garth con fastidio. Con una pequeña sonrisa, irónica por supuesto, le digo con voz firme:

- Mira compañero.... Si bien estoy cansada del viaje y de todo el trabajo, TENEMOS que revisar estos escritos te guste o no. Y tomaremos sólo una copa, es suficiente. Vamos concéntrate que este lugar y tu actitud no me hacen gracia.

¿Compañero? Garth alza la ceja mientras se apoya en la barra y espera la bebida.

- Querrás decir jefe, Sally. Y ahora tu jefe necesita tomar una copa. Revisaremos eso en cuanto termine.

Lo cierto es que en vez de relajarse estaba consiguiendo que él se estresara aún más. Pero así era siempre su relación. Ambos acababan casi siempre contagiándose el uno del otro, en una montaña rusa de emociones con altos, bajos e incluso loopings y rizos.

Finalmente Garth ladea el rostro y la mira dulcemente.

- Lo sieeeento Sal - le susurra - Ya sabes lo poco que me gusta andar revisando papeles. Haremos una cosa, tomaremos algo e intentaremos liquidar ese trabajo cuanto antes para que tú también puedas relajarte y disfrutar un poco. - trata de tomar su mano un segundo, de forma delicada - espero que pronto este lugar comience a gustarte... lo de que mi actitud te guste ya lo doy por perdido - comenta bromeando mientras le guiña un ojo.

Despues de un rato que se os antoja un poco largo una mujer entra en el bar con una bandeja, que la identifica como la camarera. Os sonrie y se pone detras de la barra frente a vostros.

- Señores, bienvenidos al refugio. Lamento haberles hecho esperar pero estaba atendiendo a otro huesped, espero sepan perdonarme. ¿Puedo servirles alguna bebida por cuenta de la casa como disculpa?

La mujer habla con un tono suave y servicial.

Mientras la camarera os ofrece una bebida, ois que alguien entra en el bar, y al giraros veis a una de las huespedes que ha venido con vosotros.

Entre por la puerta vi que estaban Sally y Garth , el bar salón estaba una camarera que era pelirroja, me fui donde estaban Sally y Garth .

Hola ¿Como estáis del viaje? Un poco cansado supongo , yo subí y me di un baño relajante.

La camarera vino hacia nosotros y nos trajo una bebida le sonreí y le dije:
Gracias

Observo a esta mujer con un poco de desconfianza. Quien es esta señorita tan atrevida que viene a nuestra mesa y nos habla, hay personas que no saben ubicarse evidentemente. Giro la mirada hacia Garth dándole a entender que haga algo para que esta chica se vaya.

- No tengo tiempo de baños relajantes, ni de conversaciones con extraños tampoco....

Ofuscada por tantas molestias me doy vuelta y miro la ventana.

Garth sonríe a la camarera mientras les sirve.

- Supongo que en un lugar como éste tendrán algún licor artesanal - le guiña un ojo - creo que hoy mi paladar se ha levantado algo caprichoso... gracias - inclina la cabeza en señal de agradecimiento.

De pronto y como un huracán, acompañada de su habitual verborrea hace aparición la chica que estaba en el autobús. Karen dijo llamarse. "Lo cierto es que lo del baño relajante sonaba de fábula, y en compañía mucho mejor. No piense mal, querido lector, servidor ya es perro viejo para meterse en la bañera con jovencitas de tierna edad, en cambio, me basta volverme para ver a una irresistible rubia a la que no le vendría nada mal relajarse un ra..." Garth interrumpe su reflexión para sí mismo cuando cruza la mirada con Sally y observa que la presencia de la chiquilla le incomoda bastante.

- Estábamos intentando relajarnos, ¿Karen era, no? - le comentó a la joven mientras la miraba fijamente, tratando de ser amable - ... hasta que uno de los dos recordó que tenemos un montón de trabajo que hacer. Trabajo que  además, no puede esperar.

Se encoge de hombros ante Sally. ¿Cómo espera que largue de aquí a una jovencita que aunque algo verbosa y charlatana no hace ningún mal? Tuerce el rostro hacia Sally y la mira con ojos de cordero degollado.

- ¿Ni siquiera cuando terminemos de revisar el papeleo podremos darnos un baño? - se cruza de brazos - a veces Sal creo que más que mi asistente eres mi carcelero... aunque eso supongo es que haces muy bien tu trabajo.

- Tenemos un licor casero de almendras. Lo prepara el propio Graham. Le servire una copa encantada.

El tono de la mujer resulta suave e insinuante, especialmente cuando pronuncia la palabra "encantada". En seguida, viendo que nadie pide otra bebida, comienza a preparar una copa de cristal algo basto, pero sin duda apropiado para la decoracion. Al cabo de un momento vuelve y sirve la bebida a Garth, tras lo que hace ademan de retirarse.

- ¿Si no desean nada mas?

Dice mirando a las dos señoritas.

Note que a la joven  Sally le molestaba mi presencia y parecía no acordarse de mi , puede ser que no me haya visto en el viaje.
Perdone ya me voy pensé que podría estar con vosotros en ver de sentarme sola, y como habíamos venido del mismo viaje no pensé que os molestaría mi presencia a los dos...
mire a señor Garth y le conteste:
Y Si Garth me llamo Karen 

Luego escuche a la camarera que era la única que podría ser un poco mas amable y me dirigí a ella la mire con simpatia cosa que no hice ni con Sally ni con Garth pues note un rechazo de ellos hacia mi parte.

Si puede ser que mas adelante desee algo no se preocupe por ahora, yo estaré en la otra mesa .

Me levante de mi asiento y cogí mi copa y me dirigí a hacia otra mesa.

No se porque pero me dio la sensación de que Sally era una mujer posesiva, que se pensó que me gustaba el señor  Garth ¡Ja! no es de mi tipo ni mucho menos, pues para ella solita enterito, yo solo quería estar un rato acompañada de alguien pues nada  me sentare en aquella mesa con mi copa.

Preferiría no tomar nada gracias. Garth dejémonos de tonterías, a ver... trae esos escritos.

La camarera observa a Sally con una mirada dificil de describir, y en un tono absolutamente servicial añade mirandola directamente.

- Señorita, disculpe si la he importunado ofreciendole una refrigerio, pero estamos en medio del ninguna parte, en un lugar de relajacion y tranquilidad, y creo que usted necesita liberar estres mas que nadie. ¿Puedo sujerirle algo? Vera, ademas de camarera, soy masajista profesional.

La mujer mira en ese momento a Garth durante un instante antes de volver la vista a Sally.

- No se sorprenda. Todos en el Refugio de Graham somos profesionales cualificados en varios campos, el propio Graham trabajo en Wall Street antes de fundar este lugar. Por eso quisiera ofrecerle algo como compensacion por lo que le haya molestado. Si me lo permite, cuando termine de servir a todo el mundo, puedo llamar para que me sustituyan, y estaria encantadad de darle un masaje relajante sin ningun cargo.

Por su voz, casi parece que te suplica mas que ofrecerte el masaje.

Ivan llega al salon justo cuando la camarera esta terminando de hablar con Sally:

Cita:

Ademas de Ivan en la puerta, en la estancia se encuentran Garth y Sally sentados en una mesa con la camarera de pie junto a ellos. Alejada de estos se encuentra Karen, sentada sola en una mesa y con cara de pocos amigos.

Ivan llega algo sorprendido por ver a tanta gente, o mas probablemente por el fragmento de conversacion que ha oido.