Partida Rol por web

The Last Blade 2

Capítulo IV: Se avecina tormenta

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14/02/2018, 13:58
Yuki

Al contrario que su hermano, Yuki había caído al suelo, sobre sus rodillas con la mano al pecho, casi sin respiración. ¿Y aquellas lágrimas? ¿De dónde salían? A duras pensa podía recordar la última vez que había llorado y ahora tenía los ojos anegados. ¿Qué era aquella sensación? 

–¿Qué... qué ha sido eso?–las mismas palabras que Kaede, la misma angustia en la voz– He sentido... No sé...  cómo si algo me retorciese el corazón. La última vez que se abrió la puerta no fue tan...

Las palabras dejaron de brotar de su garganta, como si no se atreviese a pronunciarlas. Por primera vez en mucho tiempo se sentía desvalida y débil. Agarrándose al caballo, logró ponerse en pie y miró con preocupación a la montaña. La discreción era lo de menos. Como decía la sacerdotisa tenían que darse prisa. La discreción era secundaria. Sin preocuparse ya de ser vista, la chica giró la cabeza buscando a la lechuza, buscando su reacción ante aquello.

–Tenemos que ir por el camino más rápido. Sea el que sea.– murmuró. Sus ojos, aún húmedos, pasaba del lugar donde habían visto el destello al monte sagrado.– ¿Es posible que sea "ella"?  Pero ¿tanto dolor?

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14/02/2018, 16:41
Zantetsu

Zantetsu no sabía lo que había sido que abrieran la puerta antes, pero lo que estaba claro era que el tiempo apremiaba. Sin más, hizo un movimiento con su capa, y de pronto estaba completamente camuflado. Intentaría pasar al otro lado, y ver si podía generar una distracción o algo, para conseguir que los guardias atendieran o... ya se le ocurriría algo. 

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15/02/2018, 18:33
Juzoh

Juzoh se había quedado bastante confundido por la sensación desagradable que había notado al ver aquél destello. Pero por lo que parecía, no era ni de lejos tan intensa como la percibida por Kaede, Yuki y Akari.

Akari, ¿qué...? ¡Wow!

Estaba a punto de preguntarle a Akari qué podía haber sido exactamente aquello, cuando Zantetsu literalmente desapareció ante sus narices. De pronto, era como si nunca hubiera estado allí. El grandullón miró el aire vacío con los ojos muy abiertos.

¡Es increíble! ¿Cómo puede hacer eso?

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15/02/2018, 18:36
- Narrador -

Zantetsu no perdió el tiempo. Cruzar una empalizada como aquella era un juego de niños para él, no tenía más que apoyarse sutilmente en unas rocas y pasar por encima como un viandante pasa a través de un puente sobre un arroyuelo. El viejo ninja no tardó en aterrizar al otro lado de la empalizada.

Mientras tanto, Yuki miraba a su alrededor, vigilante, tratando de comprobar si la lechuza aún les seguía. Y así era. Estaba muy alta en el cielo, pero describía círculos sobre sus cabezas. Su silueta se recortaba en las nubes que tenía detrás. La mañana clara y despejada había ido poco a poco dejando paso a un cielo cubierto del que empezaban a caer algunos copos de nieve.

Notas de juego

Ni siquiera hace falta que Zantetsu tire, es muy fácil para él colarse por un murete como ese.

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15/02/2018, 18:40
- Narrador -

Camuflado aún con el entorno que le rodeaba, Zantetsu aterrizó sobre la hierba del otro lado de la empalizada sin hacer el menor ruido. Ante él se extendía la parte norte de la provincia de Ise, con sus llanuras y pastos que iban ascendiendo hacia el macizo montañoso que servía de frontera con las provincias más septentrionales. Era una zona amplia del país, con montes y bosques salpicados aquí y allá.

Pudo ver algunas poblaciones pequeñas en la distancia, y más cerca, algunos campamentos de tiendas blancas. Al sur, no muy lejos, la Tokaido continuaba serpenteando hacia el mar, y había un grupo de viajeros creando un atasco similar al que habían visto no hacía mucho delante del puesto fronterizo, en el lado de Omi.

Lo preocupante era la seguridad, bastante férrea. Había patrullas inspeccionando la zona y vigilando el perímetro de la empalizada. No eran numerosas, y seguramente podrían derrotar a una de ellas con facilidad. Pero si los soldados lograban dar la alarma y pedir ayuda al resto, podían verse superados con rapidez. No obstante, si lograban pasar inadvertidos hasta alcanzar de nuevo la Tokaido, podrían mezclarse entre los viajeros y continuar su camino sin demasiados problemas.

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15/02/2018, 18:47
- Narrador -

Akari notaba escalofríos de vez en cuando. No veía nada anormal a su alrededor, pero podía percibir que la línea que separaba el mundo físico del espiritual se agitaba y convulsionaba. Lo que fuera que acababa de pasar aún tenía eco... y no era un eco agradable.

Sin embargo, tampoco se parecía a nada que hubiera experimentado el año anterior, cuando la Puerta del Infierno estuvo a punto de abrirse. De algún modo, era diferente. A ratos parecía menos amenazador... y al momento siguiente muchísimo más peligroso. ¿Qué podía estar pasando?

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15/02/2018, 20:22
Zantetsu

Zantetsu se giró, una vez al otro lado entendía que no había demasiado peligro de que le pillaran. No obstante, trató de mantenerse oculto el tiempo que pudiera.  Buscaba una forma de meter al grandullón. Si bien era cierto que podía crear una distracción, esperar que ellos la aprovecharan sin tener contacto directo era demasiada apuesta. Y a los ninjas no les gustan las apuestas. 

Asi que buscó alguna rendija, algún lugar donde la vigilancia fuera menor, o donde crear una distracción fuera más fácil. 

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16/02/2018, 13:39
Yuki

–Supongo... Supongo que intente crear una distracción– comentó Yuki frotándose los ojos algo avergonzada–. Deberíamos estar atentos.

Mirando de nuevo a las colinas, la chica se volvió a la sacerdotisa. Que ella sintiese las perturbaciones de la puerta abriéndose era normal. Pero Kaede y ella no tenían aquel poder. ¿Cómo era posible que les hubiese golpeado así?

–¿Crees qué es la puerta? ¿No es posible que sea la Dama? ¿ O quizás otra cosa?– preguntó preocupada– La última vez, Kaede y yo no... Y además, la puerta no estaba allí.

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16/02/2018, 14:27
Juzoh

Juzoh escuchó las palabras de Yuki algo confundido.

Bueno, para mí tampoco ha sido agradable mirar esa luz, pero... no ha sido para tanto —dijo—. ¿Tan mal os habéis sentido?

Un copo de nieve le cayó en la punta de la nariz y miró al cielo frunciendo el ceño. El cielo cada vez tenía peor aspecto y la nevada crecía en intensidad.

Más vale que crucemos pronto y busquemos un refugio. Sólo nos falta que nos caiga encima una ventisca...

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16/02/2018, 14:41
- Narrador -

Gracias a su legendaria habilidad, Zantetsu podía moverse con total libertad por la zona, aunque eso sí... teniendo cuidado. Si algo le desconcentraba o ponía un pie donde no debía, podía quedarse a la vista y sería peligroso. Seguramente escaparía de los guardias sin demasiada dificultad, pero si estos redoblasen la guardia, el grupo lo tendría casi imposible para cruzar por allí sin ser visto.

Por suerte, Zantetsu no tuvo que buscar demasiado. La empalizada era sólida, pero estaba hecha de troncos de madera atados con fuerza. Estaba pensada para impedir el paso, no para bloquear completamente las miradas, y había rendijas entre algunos troncos. Sería fácil comunicarse por una de ellas con el resto de sus compañeros para trazar un plan. Y sería mejor que se dieran prisa, porque la nieve empezaba a caer con más intensidad y no sería bueno que se encontrasen a campo abierto en mitad de una ventisca...

Notas de juego

Hazme una prueba de Sigilo para ver qué tal te ocultas mientras estás en el otro lado de la empalizada. Tienes 12 en la habilidad.

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16/02/2018, 16:20
Zantetsu
- Tiradas (2)

Notas de juego

Busco también alguno lo suficientemente grande y descubierto como para que pase Juzoh... 

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17/02/2018, 14:25
Yuki

Yuki se quedó unos segundos en silencio, tratando de explicar a Juzoh porque le había afectado tanto, pero no fue capaz de hacerlo. Era demasiado profundo. Finalmente se encogió de hombros ante el comentario de Juzoh, pero no estaba nada convencida y se le notaba en la cara. No creía que aquello fuese "normal" ni tampoco que fuese la puerta... o al menso no como pensaban. ¿Pero qué otra cosa podían hacer salvo seguir adelante? 

–Creo que es tarde–dijo mirando el gris plomizo del cielo– Se avecina un temporal y no tardará mucho. Espero equivocarme.

Una ventisca era lo peor que podía pasar en aquellos momentos. Necesitaban avanzar a cualquier precio... aunque por otra parte, una buena nevada ocultaría sus pasos y podría servir para dejar atrás a algunos de sus enemigos.

–Bueno, quizás pueda venirnos bien. Si alguien nos sigue, se lo pondrá difícil.

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17/02/2018, 20:45
Kaede

Sacudí mi cabeza buscando quitarme ese sentimiento de encima y poder reaccionar, no me había sentido así antes, el destello amarillo...por alguna razón pensé en Shingen-sama.

-Creo que debemos esperar a que Zantetsu-sama nos pueda dar información, pero mientras podriamos alejarnos más del camino y buscar algún punto desde dónde cruzar-

Notas de juego

Master, logre atraer a alguna serpiente?

EDIT del Master: Nop, no hubo suerte.

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18/02/2018, 17:43
- Narrador -

Zantetsu se esforzó por seguir pasando desapercibido, mientras inspeccionaba la empalizada. Era sólida, y de ninguna manera podrían conseguir que ninguno de ellos pasara por las rendijas entre los troncos, mucho menos Juzoh. Sin embargo, algo captó la atención del anciano ninja.

A unos ochenta pasos del lugar donde había cruzado la empalizada, había un arroyuelo que bajaba de las montañas del norte y pasaba por debajo del vallado. El hueco era lo bastante ancho como para que todos cruzasen por allí. El grandullón quizá pasaría un poco justo, pero debería poder lograrlo.

Sin embargo, había dos problemas. La abertura estaba bloqueada por una reja de estacas de bambú, que parecían bastante sólidas. Quizá pudieran romperla o cortar las cuerdas que la sujetaban, pero aquél sólo era el primer problema. El segundo era que para hacer eso tendrían que librarse de los dos guardias que estaban apostados allí, y que parecían tener la tarea de vigilar que nadie se colase por aquél punto débil de la defensa.

Notas de juego

Tirada suficiente para que no te vean.

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18/02/2018, 17:53
Juzoh

Mientras esperaban al viejo ninja, deseando que no le atrapasen, los otros cuatro viajeros notaron cómo la nieve caía cada vez con más fuerza y la brisa se convertía en viento. Juzoh se frotó los brazos para conservar el calor.

¿Y... qué vamos a hacer con los caballos? —preguntó.

Los dos caballos en los que Zantetsu y Kaede habían alcanzado al resto seguían con ellos. Pertenecían al templo Ichijo, y eran buenos caballos, pero sería muy complicado que lograsen traspasar con ellos la empalizada.

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18/02/2018, 21:14
Yuki

–Te vas a congelar– señaló Yuki a Juzoh, que seguía con la misma ropa que cuando emprendieron el viaje– Espera, metimos por aquí...

Yuki abrió uno de los fardos y, efectivamente, ahí estaba una capa gruesa y grande. Puede que por el momento Juzoh aguantase bien, pero si como pensaba el tiempo iba a peor, sería mejor estar preparados y aunque el resto no iban demasiado abrigados, el grandullón vestía de forma que le convertía en un firme candidato a una pulmonía. Mientras volvíaa meter todo en su sitio, la muchacha miró de nuevo al horizonte. Aquello era todo tan condenadamente raro...y familiar. La pregunta sobre los caballos le sacó de los pensamientos en los que estaba sumida. Realmente era un problema. Y se le ocurrían un par de opciones, aunque no demasiado buenas.

- Tiradas (1)

Notas de juego

EDIT del Máster: Atención a los destinatarios. xD

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18/02/2018, 23:06
Akari

En un abrir y cerrar de ojos, Zantetsu desaparece y se cuela tras la empalizada. El problema viene cuando hay que decidir cómo seguirlo y cómo reconocer la señal que les indique que ya pueden pasar. Pero la cosa no va con ella, su mente está perdida en otras cosas. Esas sensaciones no son normales, no son como cuando se abrió la Puerta, pero si que indican que algo poderoso ha entrado o está intentando entrar en su realidad. Magia poderosa se está desarrollando en aquellas montañas al norte. Hay algo... 

El tiempo empeora y comienza a nevar y está el tema de que no tienen refugio. Y que no pueden dejar a los caballos ahí.

-Dos de nosotros podemos tomar los caballos y esperar al otro lado. Nos llevará menos de un día si cabalgamos rápido. Solo queda decidir quiénes serán.

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19/02/2018, 10:51
Juzoh

Juzoh cogió la capa que Yuki le ofrecía con una sonrisa ancha de puro alivio. Era justo lo que necesitaba. Pero se quedó un momento mirando a la guerrera.

Tú... tampoco llevas mangas —dijo—. También podrías coger frío... ¿Tenemos más ropa de abrigo?

Después escuchó la sugerencia de su hermana, pero no acababa de convencerle del todo.

Pero Akari, no sabemos hasta dónde llega la empalizada. Podríamos tener que cabalgar muy lejos y después quizá no pudiésemos reunirnos...

Ya se habían separado de Okina y no había sido una buena idea. Aunque los caballos seguían siendo un problema. Pero entonces a Juzoh le ocurrió algo que no era habitual en él... tuvo una idea. No estaban muy lejos de la Tokaido, y seguro que los transportistas con los que habían viajado seguían en la cola para entrar en Ise.

¿Y si se los confiamos a Kuro y Reiko? —propuso—. Ellos podrían llevárselos a Edo, y al menos sabríamos donde están. Cuando todo termine, podremos ir a buscarlos. Seguro que a padre le parecería bien que los dejásemos con personas de confianza.

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19/02/2018, 11:02
- Narrador -

Yuki no podía sacarse de la cabeza aquella sensación. Todavía estaba un poco mareada después del impacto que había supuesto para su mente. Se esforzó por saber a qué podía deberse, y por qué le había afectado a ella más que al resto... pero no lo logró. Sólo podía revivir levemente lo que había sentido, un dolor intenso en el corazón y una gran nostalgia.

Era una sensación familiar, algo que estaba segura de haber notado antes. Pero... ¿dónde? ¿Y cuándo?

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19/02/2018, 16:50
Yuki

–Yo estoy más acostumbrada– replicó con una sonrisa recordando el frío que había pasado los primeros meses en su tierra natal–. Pero no nos vendría nada mal. A todos.

Yuki había barajado tanto la idea de Juzoh como la de Akari, pero planteaban el mismo problema. De modo que, ante aquella sugerencia movió la cabeza de forma nerviosa. La sensación de familiaridad no se le iba de la cabeza. Lo más parecido a aquel sentimiento había sido cuando perdió a su padre o cuando se separó  de sus hermanos.

–El problema de eso es que Zantetsu-sama nos dará paso en breve, y sería problemático que lo hiciese justo cuando alguien está llevando los caballos. Eso nos plantearía el mismo problema de... esperad un momento. ¡Akari podría pasar sin hacer cola! Es una onmyoji , seguro que le darían prioridad, ¿no?

Yuki sabía que, a menudo, a los sacerdotes se le concedían ese tipo de privilegios a cambio de una bendición. De aquel modo, podrían pasar juntos al otro lado sin mayor problema. O volver a reunirse con rapidez. Al fin y al cabo, si solo iban dos, tendría que dar menos explicaciones. Y además, si iba con Juzoh no solo sería una sacerdotisa, serían dos miembros de los Ichijo. Podrían cruzar tranquilamente sin ser molestados. No tenía la menor duda.