Partida Rol por web

Aquello si que era inesperado y cuando se la saca se queda impresionado, le cuesta hablar. -Ya... y Ogura me arrastro a mi... Sí... es muy grande... Me gusta mucho (Zack se sonroja muchisimo, pero no quita la mirada del rabo de Alexey. De repente se da cuenta de que él también está escitadisimo y empalmado)

Esto no puede ser real, ¡es igual que un eroge! Desde luego no me esperaba esta respuesta ni la reacción que se percibe bajo su pantalón. Sonrió maliciosamente, ya lo veo digo señalando el bulto que cada segundo crece más bajo sus pantalones.

Doy un par de pasos hacia el, cojo su mano y la pongo sobre mi polla.

Sujetando su mano la muevo a lo largo de mi rabo atrás y alante un par de veces. ¿Es muy suave verdad?

Guiño un ojo a Ogura.

Sonrío a Zack y acaricio su entrepierna. Con mi mano libre desabrocho su pantalón. Yo también quiero ver que es lo que se esconde bajo tu ropa interior.

Cuando la suya esta fuera con la misma mano que lo desabroché se la acaricio. Me gusta. Acaricio su pene con el mio. Gimo. Suelto su mano y con la mano que la sujetaba acaricio su cuello. Hago un gesto con mi barbilla hacia mi pene erecto. Tal vez quieras verlo más de cerca.

Aquello es demasiado. Al sentir su piel caliente en la mano, Zack pasa de estar a mil a diez mil. Se la acaricia siguiendo el ritmo que su dueño la marca, sintiendola grande y dura.

Alexey empieza a desnudarle. -Ey... yo no... protesta inultimente, la suya, mas cerca de lo normal (15 cm), sale a la luz mientras Zack gime, muy muy excitado. el roce entre sus dos miembros le hace temblar, pero es sin duda cuando con la mano le acaricia el cuello el momento que más tiembla y gime, nervioso...

Por un lado le pide que se la coma con la sutileza de un elefante en una cristalería, por otra le acaricia el cuello como un amante cariñoso, de una manera que le sabe mas dulce que comerse el contenido de una maleta de Yuki.

-¿Puedo besarte antes? pregunta. Como no puede tener las mejillas más rojas, cuando repara en que Ogura lo esta viendo y oyendo todo, son las orejas lo que se le ponen rojo.

No respondo, al menos no con palabras, suelto su cosa y lamo la mano con la que la sujetaba. Beso su frente. Después con esa misma mano alzo su barbilla. La mano del cuello sigue en su sitio.

Acerco mis labios a los suyos y nos besamos durante... no se cuanto tiempo, tal vez 5 segundos o 5 años ya que el sentido del tiempo desaparece. No tienes que pedirme permiso. Pensé que no querías hacerlo y que solo te interesaba lo otro.

Le produce un escalofrío el ver como lame su mano pero lo que viene después lo deja sin aliento: el beso en su frente la forma en la que le sujeta la barbilla con delicadeza, la dulzura de su beso. casi se olvida de respirar, sus lenguas juegan en su boca y las suaves caricias del pulgar de alexey en su cuello le hace temblar. Se olvida de ogura, simplemente cierra los ojos, abraza al nadador y lo besa más y más fuerte, con el corazón a mil. Esta tan tembloroso que casi no se tendría en pie de no ser por apoyarse en Alexey. 

Pensé que no querías hacerlo y que solo te interesaba lo otro.

El sexo es divertido... pero el morbo no es incompatible con el cariño ¿no? Para demostrarselo baja a besarle la barbilla, morderla suavemente mientras sus manos van soltando los botones de la camiseta de Alexey, mostrando su torso desnudo que va besando y lamiendo conforme baja. Cuando la camiseta está abierta Zack está de rodillas sujetandosela con la mano y acercandose la punta a los labios... No puede evitar mirar de reojo a Ogura.

Bajo el libro y miro hacia la puerta del lavabo, notando un leve olor bastante raro e intenso. Me dan ganas de ir a mirar a ver qué hacen, pero me han dicho que no es asunto mío (en pocas palabras) y yo soy un chico obediente que no mete las narices en asuntos ajenos.

Dejo el libro, me levanto y abro la tercera maleta, sacando su contenido uno a uno y con especial cuidado de no arrugar nada, colocándolo todo en mi armario. Se me cae al suelo la diadema con orejas de conejo, lo recojo y lo dejo encima de su correspondiente vestimenta y cierro la puerta del armario. Vacío la maleta de la ropa antes de lo que esperaba, aunque no sin haber ocupado mi armario en casi su totalidad. Miro el armario de Ogura-senpai, quien seguro que no lo llena. ¿Y si le pido un hueco?

(La puerta principal de la habitación se abrio rapidamente y el sonido de unas ruedas llamo la atención de los chicos)-Pues esta es su habitación, espero que le guste, estará con dos alumnos nuevos, espero que no se mosquee, ya sabe un veterano siempre tiene mucho respeto, y esas cosas...(el procurador ve a Yuki en la habitación e inmediatamente el resto de maletas)..oh, que oportuno, parece que no es el último en llegar, hola, Yuki-chan, soy Len su procurador, le traigo a su compañero de cuarto, Oyevu Forbes...

El plan ha salido mejor de lo esperado, estos occidentales son unos facilones, he de buscarme mejores retos. Sinceramente, creía que Zach pondría más pegas al tema, ni siquiera he tenido que susurrarle al oído para que se lanzara sobre el Rubio. Era cosa hecha. Y apenas he tenido que esforzarme para lograrlo. Je. El porro medio consumido acaba finalmente en mis manos, le doy un par de caladas, para darles tiempo a que entren en materia. Uhm... no hay nada que me relaje más que un porro y un plan "maléfico" que sale de puta madre. Parecen dos niñas enseñándose el rabo pero es gracioso. Estoy tentado de sacar mi móbil del bolsillo y hacerles una foto pero Alexey me cae bien, así que descarto la idea. Cuando ya no están más que por follar como conejos decido hacer mi estrategia de retirada. Siento algo de cosquilleo en la zona baja pero estoy lo bastante inmunizado como para controlarme o serían tres nabos en el baño. Exceso de nabos, diría yo. Sonrío maliciosamente, apago el porro, me lo guardo en el bolsillo y salgo discretamente del baño, con la mínima rendija para salir, no quiero que Yuki vea nada, es sólo un crío, no necesita ver estas cosas todavía. Cierro la puerta bien tras de mí.

Entonces me topo con el intruso de pelo plateado. Pilladón. J-O-D-E-R.
-Mendokusai...- murmuro por lo bajo, tengo que pensar rápido o nos caerá una buena, especialmente a los dos amantes porhibidos.

-Ah Yuki-chan te dije que no dejaras tus chuches esparcidas por ahí o tendríamos PROBLEMAS!!- digo a grito pelado para que se enteren los del baño. Espero que se callen y sean un poco más silenciosos y se estén quietecitos hasta que el procurador porculero se vaya y pueda "situar" al recién llegado. Cojo mi guitarra y la saco de la funda para revisar su estado tras el viaje. La dejo sobre mi cama. Luego cojo la lámpara de la mesita, la arranco del enchufe de un tirón y la lanzo hacia la pared donde está la tercera cama, con la ventana, a lo ataque psicótico.

-ABAJO EL SISTEMA REPRESOR EDUCATIVO!!!- Y alzo el puño a modo revindicativo. Hay que distraer al procurador de algún modo y que se vaya conmigo o sin mi, me da igual que me castiguen, estoy acostumbrado. Tras mirar mi obra de arte de lámpara hecha puré me giro hacia los dos recién llegados y les miro desafiante, sonriendo maliciosamente. "Qué vas a hacer procurador?" le miro malvadamente.

Mierda!!! Hemos de salir Zack, ese idiota está matando a Yuki.

Le doy unos golpecitos en la cara con mi polla y lo levanto para darle un beso. Lo siento Zack digo apenado y sin subirme los pantalones salgo

Aún duro como una piedra abro la puerta con la ropa interior ya subida y los pantalones todavía por los tobillos. OGURA DEJA EN PAZ A YUKI!!!!. El ruido que hizo y los gritos a Yuki me hicieron pensar que lo estaba haciendo cosas malas, pero cuando veo al procurador y al otro chico me quedo sin palabras.

No se me ocurre nada inteligente por los nervios asi que digo lo primero que se me ocurre Yo.. yo... el baño estaba atascado y estaba... bueno, eso,  estaba desatascandolo. 

Ejem. Esto... el cinturón me queda grande y a veces se me cae.

Zack se queda paralizado al oír los gritos. Lo de que le de con su rabo en la cara no termina de motivarle mucho, es una fantasía muy porno, pero no le parece muy correcto. se queda sentado en la bañera negando con la cabeza (con la super gota de sudor en la cabeza, un par de pelos tiesos fuera de lugar) Se viste rápidamente atento a no oír gritos de Yuki ¿El beso de después le ha gustado? Cree que si, aunque no entiende la forma de actuar de estos rusos (y parientes de rusos) ni japoneses. Que lios, espera que Yuki este bien. 

-Lo que estabais haciendo esta claro...(dijo el recien llegado al interpretar esta escena)...más os vale, vestiros y estar visibles al salir, no creais que tengo nada en contra de vuestro modo de vida, bueno, miento...tengo unas cuantas, pero no quiero saber nada más de esto en lo que resta de año en esta habitación, no os conviene tener problemas...y soy Oyevu Forbes...hola a todos..(dice mientras pone sus maletas al lado de la única cama que quedaba libre)...¿y usted es?...(le dice al jóven de cabellos rubios, cantarín).

?? Joder, no me ha hecho ni puto caso. Tenía que haber roto la ventana, está claro. Y, que yo sepa, estoy vestido, no me he desnudado en ningún momento, como mucho debo apestar a porro y ya. Vaaale. Plan B. Liarla más parda.

-Ivan, se llama Ivan- respondo yo, con toda mi calma,  por el rubio cantarin -Y aunque sea un poco atontado, no estaba haciendo nada raro, sólo cagando, yo sólo he entrado a darle papel de bater- digo con suma frialdad, mirándole de forma helada y directa los ojos al tal Forbes. Me antepongo entre Alexey y el tipo autoritario para evitar que el Rubio la cague más aún -Creo que no hay ninguna ley contra necesitar papel de bater pa'cagar- finalizo con el mismo tono gélido y algo amenazante -El crío se lo puede decir, verdad Yuki-chan?

La ventana abierta ha dejado el baño bien frío (como se descubrirá cuando alguien entre) , unas pisadas en la nieve salen de debajo de la ventana y llegan hasta el sendero del jardín que conduce a una de las entradas del edificio. Zack entrara furtivamente en el Hall se apoyara en un radiador hasta estar libre de copos de nieve y  la sensacion de estar a punto de morir de frío, despues caminará con normalidad a su cuarto en el que se encerrará