Partida Rol por web

Habitación 350, dos camas individuales, un escritorio grande, una armario para cada uno, y obviamente calefacción ya que es indispensable para este clima.

Avanzo con los chicos ayudando a llevar las maletas de Yuki y tras adentrarme en la habitación las dejo al lado del escritorio. Bien, ya estamos aquí, espero que os guste, es exactamente igual que la mía. Que por cierto, es la 345, venid cuando queráis. 

Voy cargado con mi mochila de excursionista a los hombros (no tengo maletas, es la primera vez que viajo fuera de Hokkaido), la guitarra dentro de la funda sobrecargando mi hombro izquierdo y la bolsa de deportes colgando del otro, donde llevo el laptop y otras cosas igual de imprescindibles. Y aún llevo una mano ocupada cargando una de las maletas del crío, que cojones llevará en ellas? Si tiene más complementos que la Stacy Malibu!

Entro en el cuarto, dos camas. Suelto la maleta de Yuki en el medio.
-Y donde se supone que duerme el que llega tarde? Colgado de la lámpara?- tiro la bolsa de gimnasia encima de la cama a mi izquierda, luego dejo con sumo cuidado la guitarra enfundada en la cama, de lado, contra la pared, a salvo de cualquier accidente; y por último, me descargo la mochila en el suelo, a los pies de esta.
-Bien, cojo mi pequeña reserva y nos vamos.

No hay otro, las habitaciones son de dos, Zack duerme en otra con Santiago, y no os asustéis si cada 20 minutos vienen a molestaros, los alumnos de cursos superiores se encargan de vigilarnos, uno por cada habitación, el de la mía creo que es español por que se llama Pepe... algún día os hablaré de el para que nos sorprenda si lo veis en ese sitio al que iremos ahora.

Observo con detenimiento las maletas de Yuki, no entiendo por que lleva tantas, seguro que son sacos y sacos de caramelos y cosas dulces que sin duda nos irán muy bien cuando estemos fumados. Me siento en la cama de Ogura y doy unas palmaditas en el colchón para que se siente. Espera, quiero ver por que Yuki lleva tantas maletas, algo me hace pensar que tiene material suficiente para montar una tienda de caramelos.

Cuando se sienta con un rápido movimiento le quito la marihuana y la huelo. No esta mal, pero yo prefiero Orange Bud. Le guiño un ojo mientras sonrio y se la devuelvo.

La mía es la 346. -Comenta Zack, un tanto sorprendido por el descaro con el que tratan el tema de las drogas. Aunque tampoco se escandaliza mucho. Los pijos también se drogan así que ha visto a sus compañeros de clase tratar ese tema y otros más duros (cocaina y pastillas en fiestas, cuando los padres abandonan la mansión o el hermano mayor de alguien consigue que le dejen las llaves del yate familiar), aunque siempre con más discreción. A él nunca le ha llamado ese mundo, con un vodka con zumo de manzana o ron añejo con cocacola le bastaba para ponerse muy muy alegre.

*Contemplara la tercera cama con interés ¿Qué clase de posters u objetos personales ha traído su español favorito al internado? Por la cabeza se le pasa la típica escena de película de robarle una prenda de vestir o una sabana. 

Entro en la habitación dando saltitos (a pesar de lo mucho que se queje Ogura-senpai) y exclamo un "kawaaai" al ver la habitación. Dejo las mochilas en el suelo y salto sobre la cama, dando un par de saltitos para comprobar la elasticidad de la misma. Aún de pie sobre la cama, dejo de saltar y hago una reverencia para Alexey-senpai y otra para Ogura-senpai.

- ¡Gracias por ayudarme con las maletas! -Sonrío y cojo la que llevaba Alexey, cargándola con esfuerzo hasta mi cama y abriéndola. Vuelco el contenido y efectivamente, descargo un buen alijo de golosinas. Caramelos, chicles, piruletas, donuts, galletas, regaliz, tabletas y más tabletas de chocolate son algunos de los dulces que más tengo en cantidad, pero por debajo de todo este montón debe haber algunos dulces pica-pica, otros con sabor especial y algunos más que pillé así deprisa, porque se iba el tren-bala sin nosotros.

Además, de otra de las maletas (la que cargaba Ogura-senpai) saco libros y más libros. Recetas de cocina y/o de postres, novelas adaptables a teatro, los siete libros de Harry Potter, algún que otro manga (casi todos Shojo) y, ah, sí, los libros del curso con su embalaje original.

La tercera maleta no la abro por el momento, sino que me giro a mis nuevos amigos.
- Podéis coger lo que queráis -Exclamo, señalando mi pila de dulces.

- ¿Qué es Orange Bud? ¿Eso es hierba? -Pregunto, con curiosidad. No, nunca he fumado ni estado cerca de alguien que fume porros. - ¿Por qué llevas hierba en una bolsa, Ogura-senpai? ¿Te gusta la jardinería? -Ladeo la cabeza, confuso. Ogura-senpai no tiene pinta de ser un buen jardinero, aunque no lo diré por si le ofendo.

De un salto me abalanzo sobre los mangas, tal vez haya alguno que me guste, en mi casa no puedo leer mangas a no ser que sean seinen o mis hermanos se burlarian de mi y mi padre me castigaría. A mi me gusta el shonen-ai aunque jamás lo admitiría, si por casualidad Yuki tuviera algo de eso no me separaría de el en ningún momento.

Cojo en brazos a Yuki para bajarlo de la cama y me aparto con el al otro lado de la habitación para evitar que los demás nos oigan y susurrandole en las orejas le pregunto Psssch Yuki, ¿¿¿¿tienes shonen??? shonen de esos ya sabes... especiales como Kyō Kara Maō!, Gakuen Heaven o Gravitation.

Shonen-ai... no se si sabes de que hablo termino diciendo rojito como un tomate.

Me quedo algo confuso contando, a ver si sólo hay dos camas y antes ha dicho que podía trasladarme a su cuarto, donde cojones iba a dormir si ya están ocupadas las dos camas? Me rindo, es demasiado dolor de cabeza para mí. Cierro la puerta del cuarto, me siento al lado de Alexey y abro la bolsa para sacar la parte que vamos a consumir hoy, he de racionarla, al menos hasta que encuentre a un proveedor aquí.

-Que pesadilla, es que los rusos no habéis oído hablar del derecho a la privacidad y eso?- respondo ante su aviso de la vigilancia continua. Tras meter unos cuantos cogollos en una bolsita hermética más pequeña, guardo la grande en la mochila de nuevo, no sin antes sacar una sudadera negra con capucha, el libro de supervivencia zombi y la biografía de George A. Romero. Ambos libros tienen las esquinas de las portadas con signos evidentes de relectura constante y manoseo, con las puntas curvadas y los filos medio deshechos. Los dejo sobre mi almohada para la noche.

-Orange Bud? Vale, los puntos que perdiste antes por tener un gusto patético para la música, han mejorado con eso- afirmo categóricamente, sonriendo cínicamente al rubio nadador. Abro los ojos como naranjas cuando veo el peazo cargamento que lleva el niño en sus maletas.

-J-O-D-E-R, una tienda no, por lo menos dos...- murmuro alucinado con todo lo que lleva encima. No se irá a comer eso él solito no? Porque le veo cagando colores durante meses en el cuarto...

-No, no soy jardinero Yuki-chan, sólo disfruto de los productos de la madre-tierra- respondo algo sarcásticamente, de verdad que me va a dar mucha faena este crio. Bueno, al menos no sabe que es, es fácil de engañar.

-Eh Nueva York, siéntate, que me da grima verte ahí de pie, plantado como un arbusto. Y tu conejito encantado, como eso atraiga hormigas y cucarachas al cuarto te lanzaré por la ven...- y me callo, joder, putos ojillos de bambi, me ponen de los nervios. Definitivamente el Rubio y el enano van a ser mi fin -Quiero decir que espero que tengas insecticida para evitar que se coman tu alijo y de pasada a nosotros- rectifico, aunque no sé yo sin mucho acierto. Con mi hermana suele funcionar, pero ella es mi hermana y me conozco todos sus trucos de princesita malévola.

Mi colección de manga no es gran cosa comparada con la de mi hermana, es más, la gran mayoría de los que tengo aquí son suyos. Además, casi todos son shojo como Card Captor Sakura (¡mi preferidísimo! he traído casi todos los tomos), Ultra Maniac (mi segundo preferidísimo), los 23 tomos de Fruits Basket, los 19 de Vampire Knight y la gran mayoría de los tomos de Nana, entre otros sueltos.

Siento un vuelco en el estómago cuando Alexey me agarra en brazos y me levanta, notándome de golpe muy alto. ¡¡Mii~~!! Sonrío, pensando que es algún tipo de explosión de felicidad hasta que me deja en el suelo y se pone en modo secretos. Oh. Hm, hm. Asiento con la cabeza, con repentina seriedad y oculto mis labios de los ojos de Ogura-senpai y Zack-senpai con mi mano extendida, para que no vean lo que estoy diciendo.

- ¡Sí! Kyo karah maou lo tengo -Susurro, todo en plan sigilo ninja. -También tengo Yami no matsuei, Lawful drug y Tokyo babylon. ¿Quieres que te los deje? -Pregunto entusiasmado, olvidando que estábamos en secreto. Sonrío, divertido por su apuro por pedir manga (supongo), así que le acaricio la cabeza como antes hizo él conmigo. - ¿Sabes japonés? Te los puedo traducir a ruso, si no sabes.

Me giro para mirar a Ogura-senpai cuando me llama conejito encantado (no preguntéis por qué sé que me llama a mí), sonriendo hasta que advierto que su tono es peligrosamente enfadado. ¿Pero qué he hecho ya? Joooooo...
-Oh -Pienso en ello unos segundos, mirando mi montaña de chuches y viéndolo todo desaparecer por culpa de indeseables hormigas. ¡NO! Voy a la maleta de las golosinas con decisión y saco bolsas y bolsas herméticas para las comidas. Me lío a ponerlo todo en las bolsas, separando lo rico de lo extremadamente rico, lo delicioso de lo asombrosamente dulce y lo que está bueno pero mancha, de lo que no.

Como si de un surtidor se tratase de mi nariz salen grandes chorros de sangre mientras miro anonadado a Yuki. Pronto, cuando la sangre deja de manar mis ojos se anegan en lagrimas de felicidad y sin poder contenerme alzo en brazos a Yuki y comienzo a girar con el por toda la habitación riendome como un loco psicopata 

Yuki-chan!!! Eres mi héroe!!!. Sin soltarlo lo abrazo fuertemente y con una mirada furiosa me giro hacia Ogura señalandolo con un dedo del brazo libre. Ogura!!! No te metas con Yuki o pagarás las consecuencias de hacerme enfurecer!!!!

Al darme cuenta de que tal vez lo esté apretando mucho suelto al chico y me tiro a sus pies mirandole con carita de pena. Yuki-sama!!! si me traduce esos mangas cargaré todos los días con sus cosas y le protegeré de los abusones!!! Finalmente cojo sus manos con las mias y en tono serio le digo ante todos como testigos  Seré su fiel yojimbo a partir de hoy!!!!

Concentrado en guardar mis chuches, suelto un gritito de sorpresa de lo más femenino cuando Alexey-senpai me levanta por los aires y me da vueltas, haciendo que todas las golosinas que tenía ya acumuladas en una bolsa se desparramen, acabándolo todo en un abrazo del oso mortal que me deja... eso, muerto.

Cuando por fin me deja en el suelo, me siento un poco mareado, pero me alegra mucho ver lo feliz que le haga de traductor así que sonrío enormemente.
- ¡Haaai, ganbaru! -Hago un saludo militar, riendo después.

WTF??! Joder que les pasa a estos dos ahora?!! Mierda que raros que son estos rusos, les cogen "cosas" así de repente sin venir a cuento. Veo como Yuki desparrama tomos de manga por todos lados, miro de reojo pero no hay ninguno que me llame la atención, prefiero el Seinen, aunque en casa tampoco es que llegue mucha cosa, eso es más de Tokyo y Osaka. Doy un bote en la cama cuando me apunta Alexey con el dedo y me amenaza con más pelea grecorromana.

-Pues vendrás tu a matar bichos cuando se nos inunde el cuarto de cucarachas, moscas, arañas y gusanos por culpa del azúcar- le gruño. No tengo problema con los insectos pero menudo ascazo y pereza me da liarme a pisotones con ellos. Y ahora le promete amor incondicional a un crío, COMO UNA CABRA, definitivamente.

"Joder es como ese dios occidental, Janos, da miedo" pienso para mis adentros. Pero he de reconocer que me cae mejor Este rubio que el estirado y sometido de antes de la pelea del gimnasio. Es que no tienen nada que ver. Creo que realmente podremos ser buenos amigos.

"Y podría ser peor, me podría haber tocado compartir cuarto con Hulk" me encojo de hombros para mí mismo.

-Eh Nueva York, sabes si hay consolas de videojuegos en este culo del mundo? Me he traído de casa el Left 4 Dead por si acaso.

Zack se sienta en una de las camas, donde están los demás (La otra hace parecer amargo al candy crush por comparación), quitándose las zapatillas para subir los pies encima y mirar el momento hiperactividad en el que están enfrascados sus compañeros. 
-Me alegro de que os llevéis bien al final- le comenta a Ogura mientras este manipula drogaina,... Los otros dos están en una especie de baile llevando el alto al bajito por el techo y jurándole protección a cambio de que le deje unos libros de títulos extraños, que al final resultan ser mangas. 

-Alguna habrá supongo. Eso si que sería divertido pasar las horas matando bichos digitales. 

Yo tengo la PSX4... en realidad aun no la saqué de mis maletas, por que temía que se burlasen de mis juegos... son otomes y eroges. Miro al suelo avergonzado y finalizo la frase. Yaois

Ahora no me queda nada mas que hacer que esperar sus risas y burlas sobre mi. Sigh... al menos tengo los magas shonen ai y a Yuki que sin duda querrá jugar conmigo

-Nee, una vez le quitas a Hulk de al lado, el Señor Rubio surge y todo está en paz con el mundo- respondo al comentario de Zach -Todo está bien Nueva York, nos llevaremos bien, nuevo sitio, nueva familia, desu ne? Y si no hay videojuegos, tengo novelas de zombis para aburrir, te puedo prestar las que quieras, también tengo alguna de Sci-Fi por si te interesan. Y si quieres alguno de esos mangas de Yuki-chan te los puedo traducir al inglés sin problema, el de Yami no Matsuei está bastante bien, va de shinigamis, ángeles de la muerte- le aclaro -Y un psicópata en serie. Es divertido. Mi prima hace colección de ellos- aclaro que no soy yo el propietario de ellos, aunque sepa de que van y me los haya leido.

-Y el de Kyo Kara Maou es de fantasía, igual te va más, dijiste que te molaba la fantasía no?- lo digo todo con total indiferencia, mientras estoy trinchando un par de cogollos para evitar tener que llevarlo todo encima. Levanto la cabeza ante lo que dice Alexey.

-Ah pero eso existe? Pues bien por ti, Señor Rubio- sonrío cínicamente pero sin darle mayor trascendencia, ya nada me puede sorprender tras visto lo visto. El mundo exterior es raro, muy raro, I can accept that -Pero Nueva York y yo te enseñaremos como se juega de verdad matando zombis, será toooda una experiencia. Te lo prometo- añado en tono sibilino, guiñándole un ojo.

Sí, me encanta la fantasía y el sci fi, aunque no estoy muy puesto en manga ni comics soy de novelas y películas. Y sera un placer matar a zombies a carretadas si conseguimos una tele y una consola. 

Mira a Alexey, que parece esperando burlas sobre su ya evidente sexualidad. ¿Eso son chicos japoneses seduciendose ¿no?

-Bueh depende, tienes el yaoi que puede ser erótico o romántico y luego tienes el lemon que es porno gay. Para gustos los colores- me encojo de hombros, tratando de explicarle al yanki el tema, que puede ser confuso para los no-japoneses.

-Entonces te va el lemon o sólo lo romantico, Rubio?- le pregunto en el mismo tono indiferente mientras continuo troceando maria.

Si, contesto de forma escueta, ahora será Zack quien se burlará de mi estoy seguro. Pero no solo hay chicos... humanos quiero decir, tambien hay kamis, aliens, shinigamis de esos y cosas asi.

Hay chicos que son muy adorables... Como Yuki o como tu digo agachando la cabeza y esos son los ukes, y otros tios como Ogura, Ivan o yo que son los semes. Normalmente el seme debe conquistar al uke por que es un tsundere. Aunque hay diversos tipos de ukes y semes suele ser basicamente así y... bueno, eso, me gustan los chicos.

Cuando hace esa maldita pregunta Ogura me siento en el suelo y les miro a todos con cara de pocos amigos, me la esperaba y conozco lo que pasará después de mi respuesta Pues depende del juego, aunque si que tengo varios lemon. Ahora es cuando vienen los tipicos comentarios de culo a la pared, no te pongas detrás de mi nunca y cosas de esas sigh.

Zack decide sincerarse, si van a estallar las burlas no iba a dejar que el muchacho rubio las pasara solo. Vaya... es todo un mundo nuevo... yo...yo... (Toma aire y se obliga a terminar lo que ha empezado) creía que era hetero, por inercia o por educación. Hasta que, hace unos meses, tuve un encuentro en una ducha... no viene al caso  no fue nada muy importante, pero desde entonces ando muy revolucionado y... creo... creo que me gustaría ver tu colección yaoi... bueno siendo sinceros... ya he visto algún dibujo animado de esos y me va más el porno de toda la vida con gente de verdad gravada, desde la ducha esa he descubierto un mundo nuevo.

Bueno, eso acaba de explicar los huecos que me faltaban. No ha sido tan dificil.

-Bueeno, no ha sido tan dificil Señor Rubio, no?- sonrío torcidamente. Levanto la mirada por unos segundos de mi trabajo para observarle -Nee no te enfurruñes, ni que fueras un asesino en serie confesando sus crímenes, estamos en el siglo XXI, no es la gran cosa. Además me atrevería a decir que la mayoría de aquí piensan igual- me encojo de hombros con indiferencia -Pero la próxima vez no bajes la mirada ante Hulk si realmente eres Seme- y esta vez si le miro directamente a los ojos, con suma frialdad e intencionalidad -O te aostiaré por ello -Y le mantengo la mirada.

-Nee Nueva york, cálmate, que te va a dar algo- suelto una risotada.

Acaricio el pelo de Alexey-senpai, que parece deprimirse por momentos.
- Otaku -Me río ligeramente, sin mala fe, para levantar los ánimos. Después miro a Zack-senpai y a Ogura-senpai, quien con sus palabras me hace sonreír enormemente. - ¡Eso, cabeza alta! -Exclamo con energía.