Partida Rol por web

Pero no me habeis puesto de destinatario hasta ahora. Eso es que no estoy, no?

Zack se ha ido a su cuarto, se ha lavado la cara y tumbado en su cama a persar. Mirando sus maletas sin ganas de deshacerlas. Asi que finalmente, desesperado, se anima a salir de nuevo. Tiene que hablar con Alexey y los otros. Se le ha ido la cabeza. Es una persona pacifica pero a veces algo le hace perder los papeles... Aunque una vez que da no hay marcha atras, respaldara su deshaire con el pijo hasta el final.

Tras merodear por el lugar encuentra un pub? estaran alla dentro? Quiere encontrarlos? solo de pensar en alexey y oruga se pone rojo y nervioso, sobretodo con el nadador,, pero tiene que afrontar lo que ha pasado.

Vaya... mirad quien está ahí digo señalando a la puerta. Eh Zack ven aqui lo llamo alegremente pero al recordar lo de antes rápidamente miro a otro lado por la vergüenza, y joder, al que me encuentro al hacerlo es a Ogura así que me giro hacia Yuki intentando disimular mi sonrojo, ?Yuki-chan que tal está el batido especial que te pedí?

Zack se acerca a ellos, no va a avergonzarse de lo que ha pasado en el baño, ni su repentina conversión en mike el fontanero. Se acerca a ellos y les sonríe. Hola chicos, ya perdonareis, pero el pijo insufrible ese me enfado muchisimo, preferí irme a calmarme un poco. 

Sientate, yo invito Zack doy un par de golpecitos en el sitio a mi derecha para que se siente allí. Sigo sintiendo vergüenza por que seguro que Ogura hace algún comentario gracioso de los suyos pero aún asi decido sobreponerme y aceptarlo con naturalidad

Zack se sienta al lado de Alexey. -Mi más sentido pesame por vuestro compañero de cuarto. Dice mirando a Yuki y ogura.

El yanki pone su mano izquierda sobre la pierna derecha de alexey escondido bajo la mesa, un poco más burdamente que el elegante movimiento que habia planeado, aunque esperando que solo el se de cuenta. No sabe que tiene ese chico pero algo tiene. No es por la fantasia que tuvo con el en el comedor, tiene miles de fantasias al cabo de la semana, ni por la casi mamada del baño. Lo que le pone nevioso a Zack quien hasta ahora solo ha tenido una experiencia sexual es el beso que se dieron. Joseph simplemente entró en la ducha y se adueño de el, Zack lo gozo pero se sintio muy sucio, sobretodo con sus besos sin pasión metiendole la lengua hasta la garganta. El nadador le guio con mano firme sosteniendo su cabeza, (sí, le gusta que le controlen un poco, o mucho), pero alexey lo hizo con sutileza, preocupado por darle placer y no solo por recibirlo. No puede evitar sentirse escitado al recordar su mano en el cuello o alzandole la barbilla.

Oh,joder, otra vez, al sentir la mano de Zack en mi pierna noto como tengo el mismo problema que antes en la habitación. 

Sutilmente, o tal vez no tanto jejejejeje pongo mi mano sobre la suya para acariciar suavemente su dorso con mi pulgar. Me acerco a su oreja como para decirle algo y se la muerdo con cariño intentando disimular ante los otros.

¿Como que pésame? será qué... ¿lo mataste con tu llave inglesa? digo medio en broma mientras dirijo una mirada pícara a su entrepierna

Cuando siente la mano y sus caricias sobre la suya se siente muy feliz, todo el temor a ser rechazado desaparece, se siente conectado con el nadador rubio, no es solo sexo, quiza sea amistad con derecho a roce, o... tal vez... Nota los dientes en el lobulo de su oreja, una vez más se siente entregado a Alexey pero de una manera morbosa y complice.

No hace falta ser un genio para darse cuenta que lo que sea que el nadador le este "diciendo" esta provocandole una reaccion muy fuerte.

En su imaginación pone su mano en su pecho acariciandole, él sabria ver en sus caricias un permiso para morder un poco más fuerte pero cuando tensara la mano una petición de parar, se entregaria a él pero sin que lo degradara o fuese violento, no más alla de lo que Zack considerara morboso.

Joseph me marco el cuello con un chupon no consetido. El que me aras tu te lo pedire y te correras solo de la forma en la que me haras gemir y temblar con tu boca en mi cuello.

vuelve a la realidad, alejandose de sus pensamientos lividinosos y la pelicula que se ha montado el solito en 10 segundos mientras le comian la oreja. Mierda otros calzoncillos empapados en precum piensa tratando de disimular sus pensamientos y su reaccion...

¿Como que pésame? será qué... ¿lo mataste con tu llave inglesa? 

Eh no, no seas bobo, me refiero a que es una desgracia la que les ha caido encima. No he matado a nadie, y mi llave es estadounidense,... 

La forma en la que le habla y dice bobo tiene más azucar que un campo de caña y su aspecto es tal que:

Es... tan... es tantas cosas a la vez, adorable, dulce e inocente que al ver su carita al decirme bobo  no puedo evitar darle un puñetazo cariñoso en la barbilla. Claro es americana, y seguro que funciona mejor. Comento al poner mi mano sobre ella.

Miro a nuestro alrededor a ver quien hay. Lo de siempre, unos cuantos alumnos, un par de profesores, los camareros y nosotros. Nadie presta atención a nuestra mesa, en realidad escogí la más apartada por eso, de modo que me decido a hacer una cosa que jamás habría pensado hacer en mi vida.

Como antes en el baño cojo su barbilla y giro la cabeza de Zack hacia mi. Lo miro a los ojos, y después de unos segundos en silencio mirandolo fijamente le digo: Zack tengo algo para ti no se si lo querrás pero te lo daré de todos modos.

Rodeo su cuello con ambos brazos y por segunda vez en un día lo beso en la boca.

El beso es largo. Dejo que nuestras lenguas jueguen sin prisa y sin importarme que nos miren o nos digan algo, lo cual hasta hace unos días era impensable para mi. Sonrio. Acaricio sus labios con mi pulgar y con una sonrisa digo: Espero que te haya gustado. Si es así tendrás muchos más.

Este sitio es enorme, esta parte se la saltó Ojisan y desde luego no dijo nada de todo esto, incluido el bar. Aunque probablemente no lo supiera, no veo a nadie de la familia de mi padre siendo parte de esto, la verdad. Me enciendo un cigarrillo mientras entramos. Apenas me ha hecho efecto lo que me he fumado antes pero no quiero desperdiciar mi maria en la mano de algún que otro profesor tarado.

-Dudo que tengan ohaw y rur- es mi comida favorita, la abuela me lo prepara siempre cuando voy a verla, esa y la pukusa ohaw, nunca he probado nada parecido en ningún sitio de Hokkaido. Simplemente es distinto. Reconozco que es algo que sí aprecio de mis largas estancias en casa de la familia de mi madre -Aunque me conformaré con los dorayakis- esbozo una leve sonrisa, mis hermanos y yo hacíamos campeonatos de a ver cuántos nos podíamos comer de una sola sentada cada uno, el que ganaba se libraba de las tareas domésticas del día. Uhm... quizás me pida un par, por los viejos tiempos. Me acomodo enfrente de Alexey y al lado de Yuki y me sirvo algo de sake caliente. Le doy un primer sorbo para catarlo, uhmmm podría ser peor, es malillo pero se puede beber. No es como el de casa, está claro, pero hará su función y me recuerda a casa. Entonces aparece Zach, le dejamos un sitio para que se siente.

-Ne ne, dejadme al asshole a mí, yo me ocupo de que cierre esa bocaza suya, no os preocupéis- respondo respecto a lo de nuestro compañero de cuarto, el Señor Gilipollas. Me encojo de hombros y me bebo una generosa cantidad de sake de golpe. Le pido a la camarera 4 dorayakis para poder comer todos. Doy un par de caladas al cigarrillo cuando se ponen en plan acaramelado. Automáticamente le tapo los ojos a Yuki con mi mano derecha.

-Tú no mires- le digo al niño, plantándole la mano en la cara con firmeza para impedir que vea absolutamente nada. Fumo con calma y en silencio de esa guisa, mirando de reojo a los dos pajarracos empalagosos. Algo se remueve en mi estómago.

"Me habrá sentado mal el porro o el maldito pescado ese horrible, nah, el porro seguro que no, necesito por lo menos fumarme un par como mínimo para sentir algún efecto. Es la comida, tenía razón Santiago-san, no tenía que habérmelo comido", sentencio mentalmente.

Suena mi móvil en el bolsillo. Lo cojo con la mano izquierda. Haciendo equilibrios con el cigarrillo consigo contestar.

-Moshi Moshi- respondo sin más- AAHH Miki-chan!!- digo alegremente, joder que alivio oír su voz familiar. Inicio una conversación rápida en japonés para ponerle al día de todo lo pasado desde que me echaron de casa. Ahí es donde se nota todo mi auténtico acento cerrado y profundo de Hokkaido, además del modo particular y slang de Nemuro, casi incomprensible para cualquiera de Tokyo o en todo Honshu, puestos a ello.

-"Un segundo"- le digo a Miki. Activo la función cámara y hago una foto de Alexey y Zach mordisqueándose alegremente, como dos putos enamorados sacados de un dorama. La guardo satisfecho y continuo la conversación con mi mejor amigo mientras ellos continuan lanzándose palabras de amor eterno.

Entro el primero en el bar después de que Alexey-senpai abra la puerta y nos ceda el paso, mirando el local y la gente que hay en su interior de camino a una de las mesas. 
- Hmmm, dorayaki -Me relamo los labios y espero pacientemente mientras se nos sirve la bebida. Cojo mi batido y sonrío. - ¡Kampaai! -Exclamo, alzando mi batido para brindar. Cojo una cañita y la pongo en el batido, sorbiendo un buen trago del sabroso y dulce chocolate líquido. ¡Hmmmmmm! Cuando saboreo el batido, hago una mueca y sacudo la cabeza de lado a lado al notar un regusto raro. Miro el batido, extrañado, pero no veo nada a parte del chocolate, así que supongo que debe ser imaginaciones mías. Al dar otro trago, vuelvo a notar el regusto rarillo. Voy a preguntarles a ambos para que lo prueben y me digan si ellos también lo notan, cuando llega Zack-senpai.

- ¡¡Mike el fontanero-senpai!! -Saludo a voz de grito, levantándome de mi asiento y moviendo la mano para saludarle. - Seguro que Forbes-san no es TAN maaalo -Digo, dando otro sorbo a mi batido. Qué raro sabe. 

Cuando Zack-senpai y Alexey-senpai empiezan a hacerse mimos "disimuladamente", finjo no darme cuenta y sigo con mi batido de sabor chocolate-raro, hasta que ya dejan de disimular y se besan en la boca. Los miro a ambos sin perder detalle hasta que Ogura-senpai me tapa los ojos. Protesto y trato de retirarle la mano para ver sin mucho éxito. Incluso cuando le llaman, sigue manteniendo su mano sobre mis ojos para mi frustración.

Bufo y dejo de luchar contra su mano, dedicándome a escuchar la conversación telefónica de Ogura-senpai, a quien no llego a comprender totalmente por su dialecto cerrado de pueblo. Doy otro trago a mi batido a ciegas, notándome la cara ardiendo. Tan ardiendo, que me da hasta un poco de vueltas la cabeza. Doy otro trago a mi batido. Ya no sabe tan mal.
- Ogura-senpai... quiero ver -Protesto.

Me giro hacia Yuki cuando se pone a protestar por mi mano en su cara.

-No, no puedes, algún día te dejaremos ver estas cosas, te lo prometo, pero hoy no- le digo, cortando mi conversación con Miki momentaneamente -Oe Miki-chan, Wareware wa ato ni hanasu!- me despido de mi amigo y cuelgo, finalizando la llamada. Entonces miro a Yuki, se le ve muy rojo y acalorado.

 -Yuki-chan te encuentras bien?- Doy una calada al cigarrillo y suelto el humo con calma. Miro de nuevo a la parejita, joder, en serio, que fácil ha sido, definitivamente este curso me voy a divertir mucho.

-Oe! Dejad algo para la noche de bodas!- les digo a Zach y Alexey, en tono de protesta.

Bufo y trato de lamer la mano de Ogura-senpai por despecho, acabándome el batido con dos largos tragos. Me siento muy extraño, ya que estoy cansado pero a la vez me siento muy despierto, aunque no puedo evitar dar alguna cabezada. Sonrío a Ogura-senpai cuando me pregunta, para no preocuparle.
- ¡Estoy bien, mii~~! -Exclamo, frotándome los ojos una y otra vez. Aparto el humo de mi cara y sonrío tontamente, sin dejar de mirar a Ogura-senpai. - Shirosama-niiiiiisan -Digo melosamente. -, ¿me acompañas a hacer pis?

Pongo cara de perro y entrecierro los ojos al mirar a Yuki. No puede decirlo en serio. Continuo mirándole. Lo dice en serio. Mierda, LO ESTÁ DICIENDO EN SERIO.

-Que tengo cara de tía o qué?- respondo bruscamente. Entorno los ojos y me levanto, total creo que yo también tengo que ir al baño a mear. Con el cigarrillo en la boca me levanto, me aseguro de que la guitarra está bien apoyada y a salvo y me quedo en pie esperando al niño de las piruletas.

-Eh Alexey-san, deja de ponerle ojillos a Nueva York y vigila mi guitarra, si le pasa algo os responsabilizo a los dos! Que no la toque nadie!- les digo en tono amenazador. Nadie debe tocar mi guitarra, es sagrada.

-Anda vamos, si es que ya te dije que no comieras tantas guarradas joder...

Alexey es directo, desvistiendole en el baño o echándole mano al paquete, Zack es demasiado cortado para hacer ese tipo de cosas y creía que para dejárselas hacer también, pero lo cierto es que no opone ninguna resistencia a la mano del bielorruso que le pone a mil.

Estar unos segundos mirándose a los ojos con su mano allí encima es muy fuerte, aquellos ojos entre dorados y verdes... Aunque esta varias veces a punto de desviar la mirada, la mantiene fija en ellos, recorrido por descargas eléctricas. 

Zack tengo ... de todos modos.

No le da tiempo a responder, vuelve a besarle. El abrazo alrededor de su cuello le gusta muchísimo y sus labios con cálidos y secos, firmes contra los suyos y el roce de sus lenguas le acelera el pulso. Ojala aquella sensación no parara nunca. Zack tiembla un poco, incapaz de procesar tantas emociones y sensaciones.

Cuando el beso termina, Alexey recorre sus labios con su pulgar. Nunca nadie le había tocado los labios, y menos de aquella manera. Posiblemente de todo lo que acaba de pasar, este sea el gesto más intimo, más privado. Se sonroja muchísimo y cuando termina el roce le dedica una sonrisa, para que no dude que le ha gustado, incluso se atreve a besarle la yema del pulgar.  

-Me ha gustado muchisimo, de verdad. . ¿Nos has hecho una foto Ogura? Quiero una copia...

Créeme, me ha gustado aún más a mi. Beso la mano de Zack y doy un trago a mi vodka terminandolo de un solo trago, creo que necesito otro, lo que estoy haciendo hoy no es normal en mi. Yo mismo estoy sorprendido con lo decidido que parezco al hacer esto. Je, es fácil, solo tengo que hacer lo que hice un millón de veces en mis eroges. Debí haberlo hecho antes.

Cuando Yuki dice lo de ir al baño a Ogura doy un pequeño codazo y dirijo una mirada cómplice a Zack. Eh Ogura, creo que quiere que se la sujetes.

Zack... esta noche, en fin dios que vergüenza preguntar esto ¿que vas a hacer?

Cada pisada que doy, es a conciencia y vigilando mucho. Parezco un buzo, pisando con pies de plomo. Pero es que sino, me caigo. Noto mis piernas muy flojas y mi equilibrio parece haberse quedado olvidado en el árbol gigante.
- A Alexey-senpai le gusta Zack-senpai -Canturreo, revoloteando hasta que me agarro del brazo de Shirosama. - Shirosama-niisan -Exclamo, con voz aguda. - A Yuki-chan le gusta Shirosama-niisan, pero no cómo a Alexey-senpai le gusta Zack-senpai. Aunque Shirosama-niisan es muy guapo.

Le hago a Alexey con la mano el símbolo universal de Fuck You y le saco la lengua en protesta.

-Que te den.

Cuando veo como camina empiezo a sospechar que no es un subidón de azúcar ni un empacho, casi juraría que está... borracho?! Pero sólo ha bebido el batido de chocolate que le trajo Alexey, no ha bebido nada raro, lo habría detectado, vamos.

-Usagichan, para un momento, quedate quieto aquí un momento, en seguida te llevo al baño. Gracias por lo de guapo pero no lo digas muy alto no vaya a ser que alguien se de cuenta- bromeo mientras le dejo apoyado contra una columna de camino a los váteres. Doy media vuelta, me acerco a la mesa y cojo el vaso del batido de chocolate, lo olfateo y luego le doy una cata. Joder, esto de fondo es whisky?! De vodka no entenderé pero de whisky sí, en casa sólo se puede conseguir sake y whisky, no hay nada más, aparte de vinos de arroz y licores de lagarto, pero esos no cuentan. Y esto es puto whisky. Lanzo una mirada asesina al Rubio.

-Tío, esta te la cargas.

Dejo el vaso en la mesa y sin mediar palabra vuelvo con Yuki, le cojo como un saco de patatas y me lo llevo a los baños a que descargue la pota que se le está haciendo en el estómago.
 

Me quedo con la espalda apoyada en la columna, tal y como me deja Shirosama-niisan.
- ¡No tardeees, nii-nii! -Exclamo, de nuevo con la voz aguda, moviendo el brazo derecho con frenesí hasta que noto que me mareo, momento en el que paro y trato de no caerme. Me abrazo a la columna.

Entonces, alguien me levanta a pulso y casi acabo por morir definitivamente, al ver el suelo más cerca de mi cara que de mis pies. Veo que quien me lleva es Shirosama-niisan.
- Oniichan -Saludo, sonriendo tontamente.