Partida Rol por web

Acaba de amanecer (se podría decir que son las 8 de la mañana), os sentís frescos, llenos de energía y con la moral muy alta. Miráis el variopinto grupo que formáis y os creéis invencibles. Un gigante brutal, un noble guerrero muy hábil con la espada y su lanza, una guerrera excepcional, un Gnomon capaz de improvisar cualquier solución, un explorador capaz de seguir cualquier rastro y un siervo de Thyr que es capaz de curar en la misma proporción que defenderos con su martillo y sus oraciones.

Las puertas sur de la Secuoya se cierran tras vosotros, nadie más va a entrar ni salir. Miráis con asombro el profundo desfiladero que cierra la población. Altas paredes de roca, totalmente verticales, se abren a ambos lados del camino, al ver su majestuosidad comprendéis que la única manera de acceder a la población fuera mediante la bruja. Este desfiladero es fácil de defender con pocos efectivos y hace de muralla natural que protege a la población de la que estáis saliendo.

Al fondo se abre el camino principal que llaman de Thykar, pues siguiéndolo hacia el norte, después de atravesar la Secuoya, termina en la gran ciudad Thyriana. Las estribaciones de las montañas Irkianas, se ven a la izquierda del paisaje y al fondo a modo de frontera con la tierra infernal y prohibida que llaman IRKANIA, quizás de donde provengan esos seres malignos.

Kram va tranquilo lo mas cercano posible a Thyra sin ninguna preocupación, duda que halla algo que le pueda hacer daño.

Por fin nos ponemos en camino. Kram estaba muy impaciente por salir y ahora se le ve emocionado por esta nueva aventura que nos espera juntos. 

Nos adentramos en las mediaciones de la Secuoya y veo ante mis ojos la amplitud de nuestras tierras y lo hermoso del paisaje. Observo con detenimiento (Oteo y escucho) cada punto para ver si existe peligro inminente y me acerco al grupo de mis compañeros.  

Me dirijo a Jotum con una actitud firme y le pregunto:

- Jotum, ¿tienes algún plan previsto?

Thur sacó un mapa del bolsillo y se lo mostró a Thyra

- Tal vez este mapa sea de ayuda - comentó mientras señalaba.

Quedo atento a que decidan la ruta a seguir, en cuanto lo hallan definido me adelanto aproximadamente 5 pasos al grupo y trato de mantener esta distancia mientras voy buscando rastros o huellas sospechosas y escuchar posibles ruidos amenazantes.

Muchas nuevas revelaciones para un solo día. La shakti Herja había explicado que el origen de las sarpa y Davas eran formaciones militares de una civilización llamada Dasaus. Además explicaron más a cerca de las puertas Nirdidu.

La ceremonia al igual que cada vez que asistía a ellas le llenaba de una fuerza y un vigor especial, incluso en un primer momento se sentía casi inmortal, sería la sangre de Eiwa que recorria su cuerpo la que se estremecía dentro de el?

Se dirigió a casa, se puso la armadura y cargó su petate y sus as armas, tomó su caballo y se dirigió a las puertas de la ciudad. Mucho mas rápido de lo que se hubiese imaginado, se encontraban todos dispuestos a salir. El paisaje le parecía espectacular desde esa posición y se entretuvo un rato disfrutando de las vistas y de esa sensación de paz y fuerza que le invadía mientras pensaba en todo lo que iban a encontrar por los caminos y se imaginaba venciendo a las Davas y matando al gran Sarpa salvando, de este modo, a Thyrkur de la invasión.

Ensimismado estaba cuando escuchó las secas, pero a la vez dulces palabras de Thyra, que le hicieron volver en si.

- Plan? Que plan? hay que matarlos a todos.

Se acercó el Gnomon Thur y les mostró unos mapas de la zona. Después de revisarlos un momento les habló a todos.

- Quizás no sea una buen idea, pero al ser el único que tengo caballo, creo que debo adelantarme para rastrear el terreno y buscar alguna pista del cabrero y el grupo o de la presencia de las davas. Vosotros podréis avanzar a buen ritmo y si dentro de aproximadamente hora y media o dos horas no he vuelto, ir con cautela, seguro que me ha ocurrido algo.

Y dicho esto no esperó a que nadie replicase y picó a su caballo para salir cabalgando a traves del desfiladero.

El caballo se aleja a toda velocidad, dejando con la palabra en la boca a mas de uno y sobre todo una. Cabalgando a través del desfiladero iba pensando en Thyra y en que diría cuando regresase, ya fuese con o sin noticias. Seguro que le echaría una buena bronca por haber dejado el grupo y le diría que qué clase de compañero haría eso, que la misión se la encomendaron a todos y bla, bla, bla...

Además solo pensar en ella y en que tenían que hacer un largo camino juntos que le daba la oportunidad de estar cerca de ella aunque ella no quisiese, era suficiente y que debía aprovechar esa oportunidad, quien sabe, quizás si hacía las cosas bien pudiese ella mudar de opinión, algún buen recuerdo le tenía que haber quedado en sus adentros de nuestra polanización. - pensó.

Solo pensar en eso ya le había despertado la sed.

- Mierda!! Lo que daría por una cerveza ahora. 

Las prisas con la marcha le habían nublado el cerebro y se había olvidado coger cerveza para el camino.

Quizás alguien en el grupo fuera mas listo que él y haya cogido cerveza para el camino.

Frenó a su caballo y dio media vuelta, casi ni había salido del desfiladero y ya había dado vuelta. Tan pronto llegó a la altura del grupo se dirigió al Gnomon y por lo bajo para que no se enterase Thyra le preguntó.

- Has traído algo de cerveza?

- Solo esto - dijo Thur enseñando la cantimplora - poco más de un par de litros. Pero la llevaré yo, si no es molestia. - añadió para evitar que Jotum se lanzar a por ella.

- Mejor guardarla para más adelante, aún es poco el camino y luego se agradecerá más.

Thur conocía a Jotum como para saber que si le daba la cantimplora acabaría con ella en un santiamén. Así que evitó ofrecérsela y sonrió con socarronería.

- También es cierto que si en vez de cansarte, corriendo para arriba y abajo como el mulo que eres, mejor te quedas con el grupo, podrás vigilar que no nos la bebamos sin ti.

Fenrir Ivaldi se encontraba al final del grupo, ataviado con su armadura y su equipo. Saliendo del pueblo había hecho algún que otro gesto re caracter religioso.

Tras el comentario del Gnomon sobre la cerbeza, Fenrir se puso a su altura y acompañado de una palmada en la espalda de Thur Thurgan dijo:

-Continuemos pues, aun queda camino por delante y esa bebida seguramente sabrá mejor tras un largo trayecto recorrido

Tras ver como un caballo salió al galope para después verlo regresar, dirijo mi mirada a Thyra esperando a ver que reacción muestra mientras le hago señas con la cabeza de que empecemos a avanzar

Jotum observó la cantimplora de Thur y... tan solo con saber que alguien llevaba cerveza, su inquietud ya se había ido y se sentía relajado. Alargó la mano y observó como Thur no le ofrecía cerveza y le comentaba que mejor para mas adelante mientras la guardaba. Ciertamente podía tener razón, unos tragos de cerveza despues de acabar con una Dava devería de sentar muy pero que muy bien.

Le pidió de nuevo el mapa, le echó otra ojeada y cometó al grupo.

- No se que opinaréis vosotros pero... tal y como veo el mapa, debemos ir hasta la casa del final, que es a donde van a llevar supuestamente al cabrero para dejarlo a las puerta de Ilumaiya, para ello deberemos seguir la senda hacia el molino de Bitru y tomar el camino  de la izquierda que atraviesa el bosque alegre y brumoso. Se observa que camino al molino antes de llegar hay alguna población, quizas nuestro primer objetivo sea llegar hasta allí, eso sí, sabemos que puede haber algun enemigo entre nosotros y esa población, por lo que deberemos ir atentos.

Miró a sus compañeros y esperó sus respuestas. 

El ratito que habéis estado andando ha sido agradable, por un lado tenéis las escarpadas faldas de las montañas Irkianas a vuestra izquierda y colinas que se abren de vez en cuando al que llaman el bosque alegre, por allí se sitúan casas aisladas, mezclándose el olor del bosque con el de la leña recién encendida en los distintos hogares. La temperatura es fresca pero agradable. Habéis podido observar que a medida os alejáis de la Secuoya, el camino empedrado cada vez está en peor estado, hasta tal punto que están levantadas todas las losas. El abandono denota la falta de tránsito, ya que la naturaleza está volviendo a recuperar el espacio perdido. También el paisaje ha cambiado, poco a poco habéis pasado de un camino abierto a meteros en una especie de hondonada encajada entre montañas, a pesar de que el lado derecho es menos abrupto…

Casi cuando habéis recorrido 2,5 km el olor a quemado reciente os llama la atención. Un árbol recién quemado está al pie del camino. A vuestra derecha sale un escarpado camino de piedras que posiblemente lleve a alguna de las casas aisladas que se encuentran por la zona. De frente el camino del sur se hace más angosto.

Poco tiempo había transcurrido y el grupo se enfrentaba a su primer dilema. Ante ellos un arbol recientemente ardido y el fuego no se extendió hacia el resto de la frondosa vegetación y además del camino principal una senda abrupta se abría hacia la derecha justo al pie del arbol quemado.

Jotun se baja de su caballo, lo ata a un arbol algo fuera del camino a ser posible tratando de ocultarlo de miradas de caminantes saca la espada y el escudo y se dirige a sus compañeros.

- Alguien me acompaña por el camino de la derecha? Este arbol quemado me da mala espina y probablemente al final de este camino podamos entender algo mas de lo que ha podido pasar y quien sabe si nos encontraremos con nuestros primeros Dashaus.

Al pié del camino esperó a que alguien mas se animase.

-O al menos podremos otear un poco mejor la zona.¡Voy contigo!

Me mantengo esperando de la misma manera que Jotum, con martillo en mano

me acerco al árbol quemado y trato de averiguar cuál fue la causa.