Partida Rol por web

Es exactamente como tu lo dices Aki, ni más ni menos que eso. - respondo asintiendo con la cabeza.

Sólo espero que esto no se nos vaya de las manos.

- ¿Que tal si nos preocupamos de ir avanzando con rumores falsos sin quejarnos de ellos? - digo en el mismo tono de voz que usaban Aki y Kenichi - Al fin y al cabo lo que quieren es poder votar cual es el rumor más embarazoso de todos, y cuando alguien llegue a la casilla final comenzar a demostrar rumores falsos para así llegar tantos como podamos al final juntos.

Me separo de mis colegas en dirección a la cabaña, entro en ella y al cabo del rato vuelvo a salir.

- Venga, no perdamos más tiempo - concluyo.

Al salir Kazuma de la cabaña de los rumores, Aki, habiendo reflexionado mientras que estaba adentro, le responde: “Creo que tienes razón que sería mejor así. Al comienzo querimos decir abiertamente cuáles rumores habíamos puesto para evitar que Manabu logre corromper nuestra amistad haciéndonos dudar los unos de los otros. Pero nuestro amistad es más fuerte incluso que nuestras precauciones. No las necesitamos. Sabemos que no pondremos aquí en entredicho a nadie de nosotros, y que si salen rumores que nos comprometen, serán Manabu y sus colaboradores que los habrán fabricado, por mucho que lo nieguen.” Se vuelve a Kenichi, luego a las chicas: “¿Estáis de acuerdo?"

La paciencia de Manabu había llegado a su fin, dando por terminado la sesión de rumores sin sentido que sus compañeros estaban poniendo, incluida ella.- ¿Qué pongo ahora? – Debían de jugar, poner rumores tal y como explicaban las reglas, pero el hecho de no saber qué decir o temer herir a alguien frenaba su imaginación.

Al escuchar que iban a dar pistas sobre la temida tercera prueba prestó especial atención, apretando sin darse cuenta la mano de Sayuri.

Y es que de hecho... ¡la siguiente prueba tiene que ver con la "naturaleza"! Y como dato adicional... ¡es TOTALMENTE IMPOSIBLE que una sola persona supere por sí sola la tercera prueba!

Palideció unos segundos, entendiendo perfectamente a qué se refería con “naturaleza” y el por qué iba a ser dura para ella, sobre todo el desconocer cómo sabían que iba a afectar más. Alzó el rostro para mirar su posición en el marcador, comprobando que estaba en el último lugar pero, aun así, todavía quedaba mucho juego por delante, el suficiente como para dar la vuelta y colocarse entre las primeras posiciones. Se mordió el labio inferior mirando a cada uno.- Dependo completamente de ellos. Estos son los verdaderos juegos de la amistad.

Sin embargo sonrió ante las palabras de Aki, arrepintiéndose por haber dudado de ellos y asintiéndole como respuesta. – Gracias.- Soltó la mano de Sayuri, dirigiéndose a la cabaña.

Al salir volvió a su posición al lado de la morena pero, en esta ocasión, decidió soltar lo que le rondaba por la cabeza.

- Manabu-sensei, aquellos que no participen en la prueba, ¿podrán verla o ayudar al resto?

Al menos hasta ahora Manabu no nos ha prohibido de poner rumores falsos sobre nosotros mismos, sólo esto: que no sean absurdos o imposibles, que los rechace el sentido común... Pero di, ¿he comprendido bien tu intención?

-Totalmente correcto, Aki-kun. - aplaude Manabu-sensei. - Los rumores que están prohibidos a partir de ahora son aquellos que por lógica deben ser falsos. Aquellos que son obviamente falsos, podríamos decir.

Manabu-sensei, aquellos que no participen en la prueba, ¿podrán verla o ayudar al resto?

-Ah... me temo que no. - responde Manabu-sensei con las palmas de las manos hacia arriba mientras se encoge de hombros. - Aquellos que no participen en la tercera prueba volverán a su vida normal hasta que sean requeridos para la cuarta.

Mientras Sayuri estaba concentrada en sus pensamientos, la estridente voz de Manabu-sensei hizo que regresase a la realidad parpadeando seguido varias veces, este anunciaba el inicio de la siguiente ronda. Era hora de volver a entrar en la caseta y seguir con aquel retorcido juego.

Centró su atención en los comentarios de sus amigos, pero fue Kazuma quien se estaba empezando a convertir en la voz de la razón del grupo, y Kami-sama sabía que daba gracias por ello. - Así podríamos avanzar más deprisa, no es mala idea Kazuma-kun. - dijo con calma, asintiendo mientras miraba a su compañero -Está visto que llevarles la contraria no nos conduce a ninguna parte. - añadió en tono conciliador mirando hacia Aki y Kenichi. Si querían evitar darles espectáculo, tenían que mantener la calma y seguir unidos. 

Notando el apretón de la pelirrosa, meditó las palabras de Manabu, empezaba a sentir inquietud sobre la tercera prueba, pero no mostraría signos de debilidad. Se mantuvo firme, y acarició con el pulgar la mano de su amiga, antes de que se separasen para ir a escribir.  Ante la pregunta de Aki, de si estaban listas, asintió con decisión mientras aguardaba su turno. 

Después de que Miirei preguntase, y con la respuesta que dio el muñecajo, Sayuri soltó el aire por la nariz despacio. Pero espera, había dicho que podían volver a casa hasta que la cuarta prueba se iniciase..? Ya no sabía que pensar, pero una cosa estaba clara, debían seguir el consejo de Manabu y evitar que Miirei llegase a la meta de esta prueba. 

- Vale, quedo yo. No tardaré. - dijo mientras se separaba de la pelirrosa y entraba en la caseta, al cabo de un par de minutos salió, reuniéndose con todos. - Todo listo. Vamos allá. - dijo con confianza, mientras aguardaba los resultados.

-Y... ¡cinco! - declara Manabu-sensei con las manos en alto de pura felicidad. De inmediato entra en la cabaña de los rumores y extrae las tarjetas de la urna, saliendo de la cabaña mientras lo hace. - Hemos perdido bastante tiempo antes, así que veamos si podemos ir un poco más rápido esta vez... Oh, tenemos seis rumores esta vez. - dice, asintiendo para sí mientras lee los rumores de las tarjetas. Os mira a todos. - No está mal, niños y niñas. No son gran cosa, pero parece que habéis entendido lo que quería al prohibir los rumores absurdos. ¡Bien por vosotros!

Manabu-sensei os dirige un asentimiento de cabeza en señal de que está satisfecho con vosotros, pero desde el cielo los mal llamados "dioses" le apremian con sus mensajes a leer los rumores cuanto antes.

-Está bien, está bien... ¡Vamos a ver! - Manabu-sensei se aclara la garganta antes de comenzar a leer. - Parece ser que... "Aki ha obtenido muchas de sus buenas notas sólo copiando de los mejores de la clase, sobre todo de Sayuri." ¡Eso no se hace, Aki-kun! Y después... - dice, consultando el resto. - "Kenichi le robó la novia al capitán del club de judo"... Vaya, qué interesante. Además... "Sayuri come cantidades ingentes de chocolatinas a escondidas cada noche." ¿En serio? Tienes que contarme tu secreto para mantener la línea, Sayuri-chan... - asiente Manabu-sensei. - ¡Más cosas! "Kazuma usaba pañales hasta hace seis meses"... Kazuma-kun... qué decepción... - ríe. - Otro más: "Sayuri tiene los pies planos y con juanetes, con los dedos de los pies deformados como los de una señora mayor." Ugh. Y por último... ¡Miirei tiene alergia a los lácteos!

     :O                                                                                                               MEH            

Y a mí qué me importa?                         Poca cosa.

¿Alguien se cree lo del Kazuma ese?

lo de aki puede ser cierto, yo lo haría lol  

                           ¿La novia del capitán de judo es la misma a la que el yakuza forzó en el cine o qué?

                                                PERO BÉSALA, KAZUMA

-¡Es momento de votar, oh Dioses! - declara Manabu una vez más alzando sus manos hacia el cielo. - ¡Decidnos, ¿quién ha visto su reputación más dañada tras esta ronda de rumores?!

Las votaciones no se hacen esperar.

RESULTADOS DE LA VOTACIÓN

Aki Goro - 6%

Kazuma Murakami - 21%

Kenichi Nobunaga - 57%

Niimura Miirei - 0%

Sayuri Kurosawa - 16%

-¡Los Dioses han hablado, niños y niñas! - os dice Manabu-sensei, girándose hacia vosotros. - Miirei-chan, ¡nadie ha votado por ti, así que avanzas una sola casilla! Aki-kun, tú estás en cuarto lugar... ¡así que avanzas dos! Sayuri-chan, te toca moverte tres casillas hacia adelante. ¡Pañales-kun, tú te mueves cuatro casillas! Y finalmente... - señala a Kenichi. - ¡Yakuza-kun, avanza cinco casillas! ¡Enhorabuena, sigues en cabeza!

Manabu-sensei os observa satisfecho mientras avanzáis las casillas correspondientes y descubrís lo que hay escrito en cada una de ellas...

Aki Goro - "LOS JUGADORES QUE CAEN EN ESTA CASILLA VISITAN UN MUSEO DE ANTIGÜEDADES Y ROMPEN UNA SIN QUERER... ¡SU DEUDA AUMENTA 400.000 YENES!"

Kazuma Murakami - "LOS JUGADORES QUE CAEN EN ESTA CASILLA SE ENCUENTRAN UN BILLETE EN EL BOLSILLO DE UN PANTALÓN VIEJO. ¡SU DEUDA SE REDUCE EN 100.000 YENES!"

Kenichi Nobunaga - "LOS JUGADORES QUE CAEN EN ESTA CASILLA SE ECHAN UNA SIESTA Y, CUANDO DESPIERTAN, YA ES LA MAÑANA DEL DÍA SIGUIENTE. ¡SU DEUDA SE QUEDA IGUAL, PERO NO PODRÁN ENTRAR EN LA CABAÑA DE LOS RUMORES DURANTE EL SIGUIENTE TURNO!"

Niimura Miirei - "LOS JUGADORES QUE CAEN EN ESTA CASILLA TIENEN QUE PAGAR LOS IMPUESTOS DE UN PRODUCTO MUY CARO... ¡SU DEUDA AUMENTA 300.000 YENES!"

Sayuri Kurosawa - "LOS JUGADORES QUE CAEN EN ESTA CASILLA COMPRAN LA ÚLTIMA VERSIÓN DE UN CONOCIDO TELÉFONO MÓVIL CON UNA MANZANA EN EL REVERSO. ¡SU DEUDA AUMENTA 200.000 YENES!"

-¡Perfecto, niños y niñas! - dice Manabu-sensei dando una palmada. - ¿Continuamos, o alguien tiene algo que decir?

Guardo silencio ante el comentario de Manabu y me giro hacia mis compañeros y me reuno con ellos para hablar en voz baja.

Por favor chicos, quién sea, escriba que yo vandalice el auto del director Saruyama el año pasado. - digo en voz muy baja y con tono suplicante.

Por lo que más quieran no me dején salir del primer lugar, yo estoy dispuesto a enfrentar la tercera prueba sólo de ser necesario, no quiero que ninguno de ustedes tenga que pasar por esa prueba si puedo evitarlo. - agrego con ojos suplicantes.

- ¿Te has vuelto loco? - le pregunto a Kenichi - ¿Te piensas que te dejaríamos a ti padecer en una tercera prueba? Al menos no es mi parecer, este es un juego de equipo, si no vamos todos a una no podremos superarlo. Está bien que haya alguien en cabeza, lo que tenemos que hacer es pensar una buena mentira que podamos probar que lo es para la última ronda e intentar acabar todos o casi todos la prueba juntos, yo al menos no dejaré a un compañero tirado enfrentándose a vete tu a saber que.

Kenichi estaba deseando enfrentarse a la prueba el solo, pero ¿porque? ¿Nos está protegiendo a todos? Quizá ha sido él el que nos ha metido en todo este lío, pero eso no importa, estamos jugando en equipo y es como vamos a acabar jugando.

“Kenichi trata de protegernos a todos, como lo hace siempre”, dice Aki en voz baja. “No conozco a nadie más valiente. Se sacrificaría por todos nosotros sin pensárselo dos veces.” Pone la mano sobre el hombro de Kenichi. “Pero esta vez no te dejaremos hacer, mi amigo. Queremos estar juntos contigo en esto, enfrentarnos juntos contigo. Claro, si te ayuda, puedo poner este rumor, aunque no comprendo por qué no lo haces tú mismo.”

Simplemente no podían ceder ante la petición de Nobunaga, ¡era una locura intentar dejarle enfrentarse solo a la siguiente prueba! Manabu había dicho lo dura que iba a ser, aunque no quisiera entrar en más detalles. Tan sólo tenían que aguantar un poco y luego desmentir sus rumores para avanzar casillas extra. 

Después de que Aki y Kazuma respondiesen, Sayuri negó con la cabeza suavemente mirando entonces a Kenichi.  - No podemos permitir que hagas eso tú solo Nobunaga-kun. Tranquilo, llegaremos a esa meta. - agregó con calma, dando un pequeño suspiro alzó la vista hacia el cielo leyendo los comentarios de la gente. No parecía haber destacado en esta ronda, pero daba igual, con desmentirlo bastaría para avanzar en el tablero. Tenemos que avanzar mucho más. 

- ¿Estáis proponiendo subir todos a la vez?

Susurró a sus compañeros, dejando por un momento a un lado a Manabu. Se rascó el cuello, nerviosa al pensar en lo que querían hacer y lo que significaba, ¿de verdad iban a hacerla subir de puestos tras las continuas advertencias de Manabu? Prefirió no decir nada al respecto, puede que pensando que no serviría de nada o preocupada por lo que pasaría si se quejaba ante la protección de Kenichi.

“Es lo que pretende hacer Kazuma, Miirei. Y aunque me gusta la idea, no creo que se pueda realizar. Hay sesenta casillas, y nosotros no podemos decir por adelantado cuántos avanzamos cada turno. Es decir, para salir todos nosotros ganadores, será preciso que alguien de nosotros sea sobre la casilla 69, o 70 (no sé cuando se gana exactamente). De él quien se pilla la mentira adelantará al más avanzado por una casilla. Entonces, será preciso que alguien de nosotros sea exactamente sobre la última casilla para que todos nosotros, si fabricamos una mentira todos juntos y la ponemos cada uno en la urna, alcancemos la meta – y me callo ahora sobre la complicación que tendrá que ser une mentira de la que podemos probar la falsedad de forma que Manabu lo acepte. Bueno, aparte de eso, ¿cómo hacer posible que alguien de nosotros queda exactamente sobre la última casilla? No sabemos cómo votarán los espectadores.” Suspiró. “Desde luego, por mucho que me guste la idea de Kazuma, es imposible ponerla en práctica.”

Hay una forma. Tarjetas en blanco. - digo con resignación.

Adelantarnos casi al final e ir dejando tarjetas en blanco durante las últimas 10 casillas, de ese modo los adelantados se rezagaran permitiendo a los rezagados alcanzarlo y luego seguir con tarjetas en blanco hasta el final. - comento rebatiendo lo dicho por Aki.

En verdad quiero protegerlos a todos, pero si están tan dispuestoa a enfrentar el infierno conmigo, entonces no puedo detenerlos. Ay chicos ¿Por qué me lo ponen tan difícil? - pienso al tiempo que dejo escapar un suspiro.

Chicos, si de verdad quieren llegar todos a la tercera prueba, entonces nos toca inventar todo tipo de historias oscuras y morbosas sobre nosotros.

La verdad es que yo no quiero hacerlo, sólo quiero protegerlos y con gusto asumiría la tercera prueba solo, con tal de protegerlos de lo que sea que estos sociópatas miserables tienen entre manos.

Aki sacude lentamente la cabeza. “No, Kenichi, tampoco funcionará con las tarjetas en blanco. Que uno de nosotros llegue a la penúltima casilla, o todos nosotros juntos a una casilla cualquiera – la sesenta, como dices – es tan imposible a calcular lo uno como lo otro. Incluso lo segundo es mucho más difícil, porque debemos prever las votaciones de los ‘dioses’ de tal forma que paremos todos sobre la misma casilla. Porque únicamente si nadie de nosotros pone un rumor, si, desde luego, hay nada que leer, todos nosotros podemos avanzar al mismo ritmo, por una casilla. Y una casilla exactamente, y todos juntos. Si no hay ningún rumor sobre alguien de nosotros, él o ella no avanzará por una casilla. Se quedará donde está mientras hay al menos una tarjeta para leer, con un rumor sobre alguien de los demás.”

-Efectivamente. - Manabu-sensei se encoge de hombros. Obviamente ha estado escuchando lo que decíais. - Si todos dejáis vuestras tarjetas en blanco, todos avanzaréis una casilla por turno. ¡Eso no va contra las normas, así que es una opción perfectamente factible! - admite Manabu-sensei, señalándoos. - Eso sí, avanzaréis a un ritmo muy lento. Pero yo no tengo prisa, niños y niñas, así que jugad como mejor os parezca. ¡Y ahora vamos a la siguiente ronda! - añade con entusiasmo señalando a la cabaña.

Aki, ajeno a las palabras de Manabu, parece reflexionar un momento, luego añade: “Lo que acabo de decir no es de todo cierto. Ya hemos visto que si un rumor no interesa a los dioses postizos, desde luego, si recibe un cero por ciento en la votación, no obstante avanza una casilla. Lo mismo tendría que pasar si no hay ningún rumor sobre él o ella – tarjeta en blanco; avanzaría una casilla.” Pero luego se encoge de hombros. “Sin embargo, esto no cambia nada al hecho de que la táctica de las tarjetas en blanco no nos puede funcionar. La única táctica que habría para que quedemos todos en la misma posición y acabemos todos juntos es juego, sería que prevemos exactamente las votaciones de los dioses. En otras palabras: es imposible.”  

“Kenichi, eres mi mejor amigo. Tanto como quieres protegernos a nosotros, yo quiero protegerte a ti. Si puedo evitarlo, no permitiré que enfrentas la tercera prueba sola. Yo lo haré en tu lugar. Y soy tan testarudo como tú. Entonces, tendrás que ganarme, compañero”, le da una palmada en las espaldas. “Ahora sí que competimos.”

Aki entra en la caseta y sale tras un minuto, con un aire sereno, aunque, como antes, ligeramente compungido. Tiene otra mirada de extraña, profunda lástima para Manabu, tal como si viera a un condenado a muerte, pero luego sacude la cabeza, se encoge de hombros y se reúne con sus amigos.

Parecía que la táctica estaba ya decidida y era comprensible el empeño de Aki por buscar la solución más factible. Al fin y al cabo eran mejores amigos, inseparables, un sentimiento que hizo sentir una punzada de celos a Miirei, casi inexistente, ante tal muestra.

Cuando Aki entró en la caseta esperó a que terminara mirando el marcador y los comentarios de los dioses, suspirando en el proceso. Cuando salió, adelantándose al resto, entró para escribir su rumor.

Al salir seguía con el mismo rostro. Miraba a unos y a otros, terminando con una sonrisa conciliadora y cruzando los brazos en el pecho mientras volvía a su posición.

Parecía que iba a ser más difícil de lo que pensaban poder alcanzar posiciones cercanas para llegar juntos al final de la prueba, pero valía la pena intentarlo al menos. Después de que los chicos terminasen de hablar, aguardó a que la caseta quedase libre y cuando Miirei regresó al tablero, Sayuri se encaminó hacia la caseta de rumores.

Al poco tiempo salió de nuevo y se situó en su posición, no quiso prestar mucha atención a los mensajes que aparecían en el cielo, no le interesaba lo que aquellos autodenominados 'dioses' estuvieran comentando. Se mantuvo en silencio, con su habitual rostro sereno en lo que esperaba la resolución del turno.