Partida Rol por web

Me acerco al guardia mas cercano, muy tranquila, pues los ánimos todavía pueden estar tensos y no quiero problemas. Estoy cansada y con una preocupación mas basada en el agobio que en la lógica.

​-Buenas. Mi nombre es Anna Karlsonn- Enseño mi identificación, si es que la tuviera- Busco a mi familia, debería estar destinada aquí, son un grupo de zapateros. ¿Tiene idea ustedes si están aquí? ¿Algún registro? Lo que sea por favor...

Joshua se limito a fruncir el ceño mientra la coronel hablaba. Estaba contrariado: Por una parte, si ni siquiera los GoY habian logrado detectar al infiltrado, asique no sabia que podia esperar la coronel que hicieran los miembros de la Guardia, en especial los milicianos y los soldados rasos. Pero por otro lado, un entrenamiento exhaustivo no le vendrian nada mal a los regimientos, aunque el coronel los usara de excusa para saciar su sadismo.

-Señor se limito a saludar Joshua, saliendo de su despacho seguido de su amiga.

Salieron de la Guarnicion, Joshua aun ceñudo y un poco cansado. Repimio un bostezo mientras el fresco aire nocturno le sacudio un poco el sombrero.

-Ya es demasiado tarde para ir a husmear por el barrio de artesanos le dijo a Aleatha, encogiendose de hombros Pero no estoy tan cansado como para ir a dormir...

Observo impávida cómo la niña sigue despotricando un poco más, e instintivamente doy un pequeño paso atrás cuando sonríe de ésa manera tan...sádica. Dirijo una mirada dubitativa a Joshua, ya que no es un gesto que esté acostumbrada a ver en una persona tan joven. Cuando todo queda claro hago un pequeño gesto de saludo.

-Que pase usted una buena noche, Coronel.- Salgo del despacho en silencio, y sigo así hasta que salimos de la Guarnición, ya que en ése momento me permito un ligero suspiro de alivio y una sonrisa al ver cómo Joshua intenta reprimir un bostezo. Incluso se me escapa una risita alegre.

-Bueno, es cierto que es bastante tarde para ir a molestar a los artesanos, pero aún nos queda las posadas y...tu amigo el raro.- Sonrío y ladeo un poco la cabeza.- Yo no estoy en absoluto cansada, y de hecho si tú te replanteas que necesitas dormir...- No lo digo como una crítica, lo digo como alguien que sabe que mañana él se tiene que despertar temprano, al igual que yo, probablemente para recibir una sesión de tortura con el resto de la Guardia. Gracias Dioses a que yo estaba en hora libre...- yo podría ir sola a las posadas, pero no creo que sea decoroso que vaya yo sola a éstas horas a la casa de un completo desconocido, así que pensaba usarte de pantalla. De todos los profesores es el único que parecía saber algo, descontando a Ykki. Pero cada vez que veo a Ykki me dan ganas de estamparlo contra la pared, y él parece disfrutar llevándome al límite de mi paciencia, así que no voy a ir a preguntarle nada por ahora, porque si voy contigo me va a caer un vacile, y no quiero ni pensar lo que me va a decir si aparezco sola en su casa a éstas horas.- Sonrío alegremente, es bastante evidente que me estoy divirtiendo y que dormir no está ni siquiera en la lista de mis prioridades.- Pero tú eres el táctico aquí, Joshua, así que confío en tu criterio.

El guardia al que habias preguntado te mira algo preocupado. Tiene cara de haber recibido un sermon recientemente y no parece tener intencion de ganarse otro, asi que te pide un momento y vuelve casi corriendo con unas fichas

-Karlsonn, ¿con K de Kilopondio? ¿Y zapateros?-mira meticulosamente el registro-Tuvimos dos, un hombre y una mujer, aunque fue dada la orden de que era ya todo seguro, lo que significa que deberian estar camino a su hogar

La buena noticia tranquilizo a Anna. Pensó en despedirse y salir corriendo, pero el guardia parecía que lo estaba pasando mal, y le dio un poco de cosita.

​-Muchas gracias, de verdad. Voy a asegurarme de que están bien, pero si necesitan algo, puedo volver luego a echarles una mano. En estos momentos, tenemos que estar lo mas unidos posible- Intentando sonar cercana.

Joshua dejo escapar un "Ja!" cuando Aleatha arremetio contra Ykki.

-Shio es un buen tipo dijo, encogiendose de hombros Pero es verdad que a veces parece que le hace falta un buen par de saques. Se comporta como un adolescente, no como un profesor.

A pesar de afirmar que no estaba cansado, el pistolero se desplomo en un banco, a unas cuadras de la Guarnicion. Se apoyo contra el respaldo y tiro la cabeza hacia atras con un suspiro. Era en momentos asi, en sus pocos episodios de vulnerabilidad que Aleatha podia recordar que, a pesar de todo lo que era, hacia o decia Joshua, seguia siendo relativamente joven y fragil.

-No se si el tren anda a esta hora le recordo a su amiga Y caminando vamos a llegar al amanecer a la zona este, donde estan casi todas las posadas y bares...

Hizo un silencio, como quien no quiere la cosa.

-Quizas tengamos que recurrir a nuestros contactos del Gremio...

Lo dijo con el ceño fruncido, casi ofendido consigo mismo por haberse atrevido a sugerirlo. Siempre que se referia al "gremio" a secas, se referia a la cabala de asesinos, infiltradores y otros bajos fondos de la Academia. A lo que Joshua y su amiga se habian dedicado antes de entrar en la Guardia, y que a pesar de querer dejar atras, siempre terminaban cerca de ellos.

Sonrío con tranquilidad.- No digo que sea mal tipo, pero su exceso de energía a veces me produce migrañas.-Suelto una risita mientras enarco una ceja y empiezo a rebuscar con tranquilidad en la multitud de bolsillos de mi abrigo cuando veo al chico dejarse caer en el banco.- Para no estar cansado finges muy bien.- Comento como quien no quiere la cosa mientras saco una chocolatina del bolsillo, la parto “a la mitad” y le doy el fragmento más grande. Me siento a su lado disfrutando en silencio durante unos segundos de mi pequeño trozo de paraíso.

La primera vez que nos vimos y hablamos también estábamos así, con un par de diferencias: estábamos sentados contra una pared embarrada, él acababa de reventarle la cabeza a un tío que yo le había localizado y lo que estábamos compartiendo era un pitillo. El sencillo momento de “calma después de la tempestad” se repitió muchísimas veces a lo largo de nuestra amistad. Desde entonces han pasado años, han cambiado cosas y he dejado de fumar, pero sigo disfrutando estos instantes de extraña serenidad.

Algo que dice el chico me hace mirarlo de reojo mientras esbozo una sonrisa culpable.- Esto...sé que me dijiste que lo hiciera, y espero que no te cabrees mucho...- hago un ligero puchero mientras me saco el resto de chocolate que me queda en los dedos.- pero se me ha olvidado totalmente pasarme por el Gremio. La verdad es que me daba algo de cosa volver a lo de antes...y ya sabes, desde que llegué ha sido una sorpresa tras otra y un montón de cosas nuevas, sólo conocer la Guardia me llevará meses...- Le dirijo una sonrisa a medias radiante y a medias como una niña que prefiere que no le hagan bulla. Sé que lo que va a hacer va a ser bufar, fingir que me echa la bronca por despistada y procurar no sonreír aunque le haga gracia. En realidad lo que procuro es que le haga gracia para sacarle un poco de tensión nerviosa de encima, sé que no le gusta ir al Gremio- Pero eh, es una oportunidad genial, así voy contigo y me enseñas cómo va la cosa...

-Union, Fuerza, Victoria. Ese es el lema de la Guardia*-recita el hombre mientras se pone firme, pero en seguida muestra una mueca de cansancio-Aunque estar unidos no nos dara la victoria contra el miembro mas fuerte de la Guardia... -el hombre suspira-Hace poco nos notificaron un "entrenamiento infernal" por haber "permitido" una infiltracion, asi que mañana la Coronel...-se queda callado mientras su rostro va perdiendo rapidamente el color.-Bueno, disculpame, no deberia estar hablando de esto

Y con esas palabras, se da la vuelta y vuelve a su trabajo

-Bueno si necesita cualquier cosa recuerde, Anna Karlsonn! Del barrio municipal! - Dice la chica mientras el guardia la ignora.

-No deberían entrenar después de tanta guardia, no creo que sea muy justo ni muy sano. Bueno, a ver si han llegado ya a casa.

Con esto marcho el camino de vuelta. -Por favor, que este dia se acabe de una vez. 

Joshua acepto el chocolate, bastante agredecido. Masticaba lenta y pensativamente, con la mirada un poco perdida en el horizonte mientras escuchaba a su amiga.

-No te preocupes dijo despues de tragar Se que es algo que intentas dejar atras...

Guardo silencio mientras comia. Estaba bastante meditabundo, como si pensara en otras cosas. Bastante raro en el, siendo el siempre tan enfocado en la tarea que estaba llevando a cabo en el momento.

-Recuerdas lo que te conte, acerca de como llegue a la Academia? pregunto a su compañera, volviendo a mirarla Despues de que esos duk'zarist me inmolaran y arrojaran por el risco, dandome por muerto? Bueno, la que me encontro y me trajo era una Ebudan que trabaja para el Gremio. Una asesina extremadamente habilidosa, tengo entendido. Es mi principal contacto con ellos, pero suelo evitarla siempre que me es posible... Es una buena chica, pero su caravana no siempre viaja en fila, no se si me entiendes.

Dejo de hablar unos instantes y comenzo a tronarse los dedos de la mano. Estaba como abochornado, nervioso. Aleatha jamas lo habia visto asi: No parecia tener miedo (Joshua jamas habia demostrado semejante emocion, ni siquiera en los peores casos). De hecho, a la luz de las lamparas casi casi parecia sonrojado...

-Esta encaprichada conmigo, muy obsesionada dijo finalmente como quien no quiere la cosa, completamente mortificado. Era una situacion casi surreal: El duro forajido cuyo nombres los esclavistas solo se atrevian a decir en susurros, intentando explicar como lo ponia incomodo el cariño no correspondido de una joven era algo que ver Suerte que suele estar fuera de la Academia durante periodos largos de tiempo por su trabajo, porque siempre que esta aqui suele acecharme. Tengo entendido que amenazo a la hija del posadero del Dragon Tuerto porque me sirvio una cerveza la ultima vez que tuvo licencia.

Es raro que se ponga a pensar en las musarañas, y aún más raro que no haya soltado un bufido, así que espero a que me diga algo sabiendo que hay algo dentro de su cabeza. Al empezar a hablar no entiendo muy bien a qué viene que me recuerde una historia que ya me ha contado, pero frunzo levemente el ceño cuando dice lo de la caravana y todo eso. Estoy empezando a preocuparme.

Mi preocupación se incrementa cuando lo noto tan alterado, y estoy a punto de decir algo cuando me sigue contando. Por un momento tengo el impulso de soltar la carcajada al ver que se está empezando a sonrojar, pero logro mantener la cara de póker aun a pesar de que mis ojos están brillando de puro buen humor. La verdad es que me hace cierta gracia verlo así, perdido y avergonzado como un colegial pillado en falta.

Al final no puedo evitar sonreir de medio lado.

-Joshua, espero que el posadero del Dragón Tuerto tenga otra hija, porque si es la que yo le conozco es una cría.- Ahora soy yo la que dejo caer la cabeza contra el respaldo del banco, mi sonrisa se hace más ancha.- Resumiendo, has conseguido, de alguna manera extraña, que una asesina muy eficiente esté loca por ti, hasta el punto de que te acosa. Y amenaza gente que te sirve cerveza, cosa que creo que es el trabajo de la chiquilla en cuestión.- Giro la cabeza para mirarlo, fingiendo estar seria.- Me da miedo preguntarte si sabe que estamos viviendo juntos.- Comento tranquilamente mientras me pongo de pie y le hago un gesto con la mano para que él también lo haga.- Bueno, vamos a conocer a tu amable amiga y ver si nos puede decir algo.- Una sonrisa que se reserva a los hermanos y amigos más íntimos se dibuja en mi cara.- Pero que sepas dos cosas: el asunto es gracioso desde éste lado de la grada, y si tu admiradora intenta matarme voy a usarte de escudo.

Joshua hizo una mueca cuando Aleatha pregunto si era la hija adolescente del posadero del Dragon Tuerto. Asintio, encogiendose de hombros.

-Pues la verdad... Aun no se lo he dicho, no respondio a la pregunta de su amiga, volviendo a hacer una mueca de dolor No es un asunto nada gracioso, Al. No esta bien de la cabeza en serio, y no hay mucho que pueda hacer para controlarla... No dudo que pueda manejarla en una pelea, pero no quiero lastimarla... Me salvo, y es buena chica. Le tengo mucho aprecio, solo que... Que no de ese modo, entiendes?

Se levanto y sacudio las manos, limpiandose el resto de las chocolatinas de estas.

-En marcha, mas vale que nos encarguemos de esto ahora mismo...

-No está mal de la cabeza, se siente atraída por ti.- Comento con suavidad mientras me encojo de hombros y empiezo a andar a su lado.- Realmente no hay nada que puedas hacer, salvo esperar a que se le pase. Yo también podría intentar defenderme si se pone nerviosa, pero antes me mato que hacerle daño a alguien debido a sus sentimientos hacia otra persona. Eso no se hace.- Claramente estoy hablando desde la experiencia, y mi mano va instintivamente al tatuaje que esconde mi camisa. Por un momento desenfoco la vista, hace años de todo eso y aún hay noches en que me despierto sintiendo su mano en mi pelo.- Créeme, entiendo el asunto mejor de lo que a mi me gustaría.- Agito la cabeza intentando recuperar el buen humor y centrarme.- Venga, llévame al Gremio.- Sonrío de medio lado.- Además, si tú le tienes aprecio y ella te trata bien ya cuenta con mi simpatía.

-Si, como dije, mal de la cabeza respondio secamente Joshua cuando su amiga señalo que Gorrion "solo" se sentia atraida hacia el.

Tras decir esto, se limito a asentir con un gruñido. "Explicale tu a Gorrion cuando este amenazandote con esa naginata que no se puede dañar a otros basados en los sentimientos", penso mordazmente, pero se mordio la lengua.

Caminaron un rato sin rumbo durante casi una hora, hasta que de improvisto, Joshua se dio vuelta a la velocidad del rayo, desenfundando ambos revolveres y apuntando, aparentemente, a un arbol que flanqueaba el camino. Tras unos tensos segundos, bajo las pistolas, aunque seguia con los ojos entrecerrados, con esa expresion fria y calculadora que Aleatha solo le habia visto adoptar en tiroteos.

-Eres tu, Gorrion? pregunto en un susurro, casi inaudible. Por alguna razon, esto parecia preocuparle, tanto como si fuera su "amiga" o algun otro acechador desconocido.

Al decir esas palabras, un crujido suena en el arbol y cae una rama... seguida de un chico bastante joven.

-Aaay-dice el joven mientras se levanta. Afortunadamente, no fue un golpe duro, pero el susto lo tendra durante un rato.Al girarse, os ve y levanta las manos al ver las pistolas-¡No soy nadie sospechoso!-se apresura a añadir-El viento se llevo a mi amigo y solo trataba de recuperarlo, no hay maldad detras de mis acciones!

En el arbol, en una de las ramas mas altas, se puede ver como una pequeña tablilla de madera tallada, enganchada todavia entre las ramas

Joshua se relajo bastante al ver al chico. Entorno un poco los ojos, y luego arqueo las cejas, sorprendido.

-Oye, yo te recuerdo dijo ladeando un poco la cabeza Eres el chico del otro lado del mar, el que rescatamos de aquella vieja bruja.

Se acerco a el, con una mano en alto, señalando que no le haria nada.

-Que has dicho? Que el viento se llevo a tu amigo?

Al ver a Joshua poniéndose en guardia retrocedo por instinto para cubrirle las espaldas y al mismo tiempo estar fuera de su rango de acción y no molestarle. Suelto un siseo cuando veo al chico caerse el árbol...no creo que se haya hecho mucho daño pero la caída ha sido un poco aparatosa. Joshua se relaja, así que yo me tranquilizo también y en silencio avanzo un par de pasos. Al darme cuenta de lo que hay colgado de una de las ramas del árbol sobrepaso a Joshua y me acerco al tronco, mirando con curiosidad el fragmento de madera.

Los dos chicos están hablando, así que me giro hacia mi amigo.

-Por lo visto os conocéis...¿vieja bruja? Vaya vocabulario...- Comento con voz suave y la cabeza ligeramente inclinada. Por primera vez desde que lo he visto mirar al suelo observo al muchacho y luego sonrío.- Espero que no te hayas hecho daño...-Si se conocen lo adecuado es que espere a que Joshua me presente, lo presente o haga algo, yo no lo conozco de nada y por mí podemos seguir con lo que tenemos que hacer y que él rescate a su amigo o a lo que sea a lo que ande.

El chico te mira, todavia desconfiando.

-Eeee... no te recuerdo, lo lamento-te dice despues de un rato-Y si, mi amigo-señala la tablilla-Tras el meteoro, se levanto un gran viento en esta zona y salio volando, no podia irme al refugio sin él, _{sobretodo despues de lo que costo volvernos a encontrar...}-se le nota muy preocupado.-De todas maneras, si puedes ayudarme a bajarlo, te estaria muy agradecido