Partida Rol por web

Ryan fue el primero en llegar a las habitaciones, entrecerró la puerta tras de sí y asegurandose de que nadie le veía, se tragó la pastilla.

Hecho eso se tumbó sobre la cama, de espaldas. Cerró los ojos e intentó dormir.

Una vez en la cama respiré hondo... Nunca había sido amiga de los fármacos, así que guardé la pastilla en mi bolsillo, pero no me la tomé al menos por el momento. Al entrar en la habitación, busqué una silla para atascar la puerta por dentro, y ya en la cama pensé en Stark, y busqué alguna televisión para ver si podía encontrarle en los medios aunque fuera unos minutos antes de dormir. Estaba nerviosa, pero aún así, me dormí... estaba agotada.

Desde el viaje en helicóptero Brown se mostró si cabía aún mas esquivo y reacio, cogió una de las malditas pastillas y cerró en torno a ella la mano formando un puño. Sin decir nada más se encerró en el agujero que le habían dado por habitación.

Una vez dentro atrancó la puerta con la taquilla y la cama para que nadie pudiera entrar de buenas a primeras. Pensó en comprobar que no hubiesen micros o cámaras pero seguro serían tan avanzadas que no reconocería una de ellas aunque estuviese sentado encima así que se sentó directamente en el suelo mirando a pastilla durante varios minutos.

No así... No iba a hacerlo como ellos querían y no iba a jugar según sus reglas. Se guardó la pastilla en un bolsillo, estaba seguro -o practicamente seguro al menos de poser sobrevivir a cualquier veneno que fuese aquello pero temía su reacción si era otra cosa. Con cuidado apartó la improvisada barricada y se dirigió a abandonar el lugar él solo. Bueno a veces iba girando la cabe4za para ver a la hermosa diablo que andaba a su lado.

- No hay peligro por aqui, soldado.- dijo la mujer, con mejor percepcion que tu.- Toma el ascensor, bajaremos al aparcamiento ¿Te acuerdas de como se conduce? Bueno, no importa... es mas facil salir por ahi.- te explico.

- Aunque me decepciona que no quisieras aprovechar el cuarto para jugar un rato conmigo y me empieza a fastidiar que hagas como que no me escuchar.

Caisteis en un sueño dulce y profundo, renovador...

Recordasteis de pronto vuestros poderes, eso fue lo primero, fragmentos de vuestra vida usandolos o descubriendolos, fue como si hubierais olvidado el resultado de 2+2 y de pronto hubieras caido en que eran 4. Todo encajaba de golpe.

Os visteis luchando contra los alemanes, escapando de ellos y siendo traicionados por Taylor.

Todos los fragmentos en blanco de tu memoria se llenaron. Eran momentos duros con recuerdos de dolor y torturas.

La cara de un hombre que trabajaba para los nazis, ayudandoles en sus esperimentos y que decia ser inmortal aparecio clara en tu mente.

Tambien quien estaba al mando de toda la operacion, un desalmado cabron que dirigia el proyecto.

Conectaste la television. Stark era la estrella sin duda. Decian que su inestimable ayuda habia salvado al mundo de un peligroso mutante que habia movido a la tierra de sus ejes naturales. Decian que habia resultado herido pero estaba fuera de peligro.

Sin mas datos nuevos que aportar comenzaron a hacer una retrospectiva de su vida. Hacian incapie en su fascinacion por las mujeres y pusieron una foto de su padre mostrando un paralelismo claro. Dijeron que Stark padre habia cambiado al conocer a Maria, su esposa... tu supiste que el cambio habias sido tu. Supiste que Stark habia hecho pasar a esa mujer por la madre de Tony para protegerlo de la verdad.

Viste una foto donde el padre de Tony hacia un gesto a camara muy peculiar y supiste que era un saludo para ti. Era un gesto que invento para ti, un guiño peculiar... Stark sabia que en algun momento volverias y descubriste que habia estado el resto de su vida filmadose con ese gesto solo por si algun dia pudieras verlo.

Aún en sueños me removí intranquilo al revivir toda nuestra huída de los alemanes y sobretodo la traición de Taylor. Apreté los dientes y cerré los puños.

Al menos ahora podía recordar parte de mi pasado. No era consciente de si todo era real o un sueño, ni siquiera estaba seguro de poder controlarlo, pero intenté relajarme y dejarme llevar... necesitaba seguir durmiendo, seguir soñando... hasta recordarlo todo.

Los recuerdos se fueron sucediendo tras tomas aquella pastilla y caer en un profundo sueño, poco a poco las imágenes se sucedían y al final eran fragmentos enteros. Nuestra lucha contra los nacis, nuestros poderes, la camarería que existía entre nosotros… pero el sueño se fue oscureciendo con nuestra captura, las torturas a Hanna para hacerme hablar y apunto estuve en varias ocasiones pero sabía que Hanna jamás me lo perdonaría y de todas forma harían con nosotros lo que les viniera en gana.
Un rostro conocido se me clavo en la memoria como si un telón cayera al suelo dejando a la vista un escenario y los actores. El Capitán Eduard… ese hijo de puta trabajaba con los nazis, les ayudaba… ese cabron nos había elegido a propósito.
Otra cara más salió de la oscuridad nítida como el día, se trataba del General nazi Adler Freedon una mala bestia que dirigía toda aquella investigación.
A pesar de estar durmiendo podía notar como estaba empapado en sudor y me agitaba de un lado al otro de la cama, hasta que me di cuenta que podía controlar mi sueño y que aquellas imagines que tanto me atormentaban ya habían ocurrido hace más de 60 años.
Empecé a respirar más pausadamente intentando serenar todo aquel volcán en erupción que era ahora mis sentimientos y recuerdos.
Finalmente tras unas horas me desperté aun estaba empapado en sudor, aunque estaba algo más relajado. Aproveche aquel descanso que me proporcionaba mi cerebro para ordenar todo aquel embrollo, me senté en la cama y allí permanecí un buen rato terminando de dar sentido a todo aquello.
Mientras miraba dormir a Berlín plácidamente algo que envidiaba tras mis sueños.

Brown se dejó guiar por ella, parecía saberlo todo pero si le engañaba y le llevaba a una trampa... bueno tampoco era que realmente le importara demasiado. Estaba dejando atrás a su único vínculo con el pasado, aquello y la maldita pastilla que llevaba en el bolsillo era todo lo que le quedaba.

Estaba furioso, quizá era la cosa que Él había metido dentro de él o quizá siempre había sido mala persona, no se acordaba lo que si sabía era que la vocecita de Marion regañándole le estaba excitando y volviendo loco de rabia a la vez. Dentro del ascensor pulsó el botón para bajar y se revolvió hacia ella agarrándola por el cuello y con una mano furioso.

-!Mira jodida puta del infierno! ¡Por lo que a mi respecta nadie va a saber que me acompañas, y menos aquellos que no te ven me van a ver hablando contigo! Y de lo otro... te joderé cuando me venga en gana... Tú no eres mi dueña... -Le dijo cuando se sorprendió al ver que tenía la otra mano entre las piernas de Marion.- No lo eres...

- No puedes ahogarme cariño, no respiro.- te susurro con una cinica sonrisa pero notaste humedad entre sus piernas y su rostro te incitaba a que continuaras dejandote llevar.- Se que no soy tu dueña, ¡Claro que se que no me perteneces!... eres es mi padre.- dijo divertida y despues comenzo a hablarte como si fuera tu amiga.- Estas muy tenso Jeremiah.. sometido a demasiado presion, yo solo estoy aqui para ayudarte...en todo lo que necesites.- Notaste su mano en tu entrepierna.

Las puertas del ascensor se abrieron. Estabas en el garaje. Con su mano libre Marion señalo al fondo y viste una motocicleta increible.

Black sintió la mano de Marion, entrecerró los ojos. Aquella mujer sabía dominarle como si fuera un pelele, la erección en su pantalón era la prueba. Tuvo incluso que hacer esfuerzos para no follarla ahí mismo contra las paredes de metal del ascensor... De repente la imagen de Hanna le pasó por la mente, ella era tan diferente... incluso con lo que le habían hecho era pura... Hanna. La había perdido para siempre, no valía la pena pensar más en ella. Al menos estaba a salvo se dijo, pero seguía doliendo. Soltó a Marion como si se estuviera quemando.

No se disculpó, estaba demasiado sorpendido en la moto que había aparcada al fondo. En su juventud le encantaron aquel tipo de motos pero un negro de Harlem no podía permitirse aquello. Sus líneas... tenía que ser hecha a mano, parecían la de una mujer, le dio la sensación de que se trataba de una escultura de la propia Marion.

Bonita. 

Fue lo único que dijo mientras se acercaba a ella. -¿Que se supone que es? No creo que esté aquí solo por casualidad.- Se detuvo a pocos metros de la máquina. ¿Cuando me vas a contar lo que quiere tu padre de mi?

Recibí un torrente de emociones al ver esas imágenes. Estaba nerviosa y asustada... debía hablar con mi hijo cuánto antes. Pero ahora no podía hacer nada... así que respiré hondo y mantuve encendida la televisión... me dormí con ella encendida y pensando y soñando en cómo estaría Stark. A la mañana siguiente, debía conseguir un trabajo en su empresa, y hablar con él de inmediato.

- ¿No lo sabes?.. pregunto jugando contigo un poco mas.- Esto es mi moto, te la presto hasta que tengas un vehiculo que te guste. Me la regalo mi padre a los doce años, cuando descubri que no era hija del contable con el que se habia casado mi madre. ¿Te sorprende que viviera como humana en tu mundo?.- te pregunto y se acerco a su moto, esperando que tu te subieras delante para conducirla.

- Fue hace muchos años, antes de descubrir que necesitaba alimentarme de la energia que los hombres desprendeis cuando haceis el amor. Al principio fue duro, mi madre pensaba que tenia alguna enfermedad porque cada dia estaba mas debil y delgada... pero me parece que no es mi historia lo que quieres oir ahora ¿Verdad?.- te pregunto sabiendo que dando vueltas solo lograba desesperarte.

- El mundo a sufrido una serie de cataclismos horribles, han muerto millones de personas. Personas buenas que han ido al cielo y personas malas que viendo que podian morir se han arrepentido, incluso personas horribles que en el ultimo momento hicieron algo bueno por salvar a un ser querido... todos ellos han ido directos al cielo. En cambio las malas personas o mataron a otros por sobrevivir o se salvaron. Asi que el de arriba tiene ahora millones de almas y mi padre un par de cientos. Esto descompensa mucho la balanza y te necesita a ti para cazar algunas almas especialmente malvadas que compensen el equilibrio... pero ahora estas de vacaciones y tienes que tomar algunas decisiones ¿Donde quieres vivir?¿Que tipo de casa quieres?¿Prefieres un coche o una moto? Mi padre va a patrocinarte la vida mientras trabajes para el y yo voy a ser algo asi como tu asistente personal.

Aunque no tomaste la pastilla, en cuanto el sueño te alcanzo comenzas a soñar con tu bebe en los brazos...Tambien soñaste con tu poder aunque no sabias si era un sueño o realmente podias hacerlo, recordaste como dominarlo y controlarlo. De pronto te parecio tan evidente que fue como caer en que 2+2 siempre habian sido 4

Dormiste durante horas, tranquila... hasta que alguien toco la puerta con los nudillos.- señorita, el capitan West desea reunirse con ustedes.- dijo una voz al otro lado, sin intentar entrar.

Pasaron horas donde si no pudisteis dormir si al menos descansar.

Alguien toco la puerta de vuestras habitaciones y os informo que los informes que esperabais estaban ya listos. El capitan West en persona iba a daroslos si volviais a la sala de reuniones.

El resto de la noche se sucedió entre fragmentos de torturas, interrogatorios interminables e insomnio por tales recuerdos, en especial las torturas a Hanna…
Seguía tendido en la cama intentando al menos descansar un poco sin demasiada suerte, hasta que llamaron a mi puerta informándome que los informes sobre nuestras familias estaban listos.
Me senté unos segundos en el filo de la cama me frote la cabeza y la cara, intentando despejarme de todo aquella endemoniada pesadilla y al fin me puse en pie.
Me vestí y tras asearme un poco salí en dirección a la sala de reuniones. Sentía curiosidad por saber que había sido de mi familia y si aun tenía algún familiar vivo.

Murphy se preparó a toda velocidad. Estaba mas que acostumbrado. No tenía muchas pertenencias... de hecho quitando su ropa, y su arma... poco mas.

En cuanto estuvo listo esperó a que Peterson lo estuviera también y así poder acudir juntos a la sala de reuniones a ver al Capitan West.