Partida Rol por web

Momentos después el Pentágono se llenaba de numerosos soldados tratando de controlar la situación. Los supuestos hackers rusos eran detenidos a falta de una investigación posterior que aseguraron no se iniciaría sin tratar el asunto antes con vuestro grupo.

El lugar tenía su propia zona de descontaminación. Fuísteis conducidos bajo tierra hasta las instalaciones oportunas en las que debían rociaros con una sustancia líquida para después someteros a varios exámenes.

El problema era que hubo de esperar un tiempo hasta que llegara personal adecuado. Parte de los funcionarios habían logrado escapar tras la primera alarma y no recibieron el ataque químico. Al final, todo el personal que había permanecido tenía que someterse a numerosos exámenes médicos.

Reunidos en la sala de descontaminación, aislados del resto, un grupo de expertos acudió finalmente. Protegidos por trajes herméticos se os acercaron para empezar el proceso.

Una de las personas se presentó con la intención de charlar.

- Vengadores, soy la comandante Franca Jones. - Iba perfectamente aislada, como el resto. - Hemos visto los indicios del ataque químico que se efectuó. Las cámaras de seguridad nos muestran perfectamente cómo varios de esos terroristas aparecían de la nada en lugares estratégicos, pero lo que nos sorprende es que lograran esparcir los agentes nocivos con tanta precisión.

La mujer tendría unos cincuenta y tantos años. Se dedicó a pasar de uno a otro evaluando vuestra situación, obviando a Visión.

- La sustancia usada para anular a los presentes es un gas somnífero bastante normal pero se expandió anormalmente rápido. La verdad es que tengo que escribir un informe y me parece aterrador lo que ha sucedido, entendiendo que un ataque tan rápido podría sobrepasar todas nuestras defensas de cualquier estación. Me encomiendan que diseñe contramedidas pero...

Se encogió de hombros como si aquello fuera pedir algo fuera de lugar.

En la sala contigua se podía ver al General Ross. Acababa de llegar y estaba enfurruñado mirando en vuestra dirección y hablando con los presentes o tomando notas.

- Dense prisa, esos hombres tienen que estar fuera pronto.

La comandante me ignora, tal vez por considerarme una herramienta, es una actitud injusta pero que puedo comprender dada la limitada comprensión general de mi naturaleza, de modo que la tolero sin hacer comentarios, mas interesado en el análisis del ataque

-La única defensa frente a esta clase de ataques se conseguiría identificando los medios de teleportación que usan. Debe emitir alguna radiación o emisión detectable, una vez identificada se podrían diseñar sensores adecuados para detectarla o incluso interferirla. Pero a no ser que los sensores del pentagono la hayan registrado va a ser dificil de identificar-

Desde luego mis propios sensores no parecen haber registrado nada mas inusual que la alta radioactividad emitida por la Presencia, por si acaso me pongo a revisar mis propias grabaciones del encuentro en el Quinjet y en el Pentágono

Lo de estar en descontaminación era como estar en una sauna, pero sin calor, lo cual, no es que fuera igual de bueno para las impurezas de la piel. Desde luego, yo prefería la sauna y luego, un baño en agua fría. Eso era lo mejor para activar la circulación del cuerpo después del calor.

Sí, mientras estábamos allí todos aburridos, yo estaba pensando en que me iría de vacaciones a Noruega, Finlandia, quizás incluso a Siberia, aunque lo de acercarme a Rusia ya me hacía menos gracia. Además, me serviría cualquier sitio con nieve.

- ¿En serio creéis que la hormiga se ha teleportado con el robot? - Dije de repente en alto.

Nadie sabía dónde se había metido y bueno, a mí verdaderamente me daba igual, pero me había parecido una reacción un tanto suicida.

- No sé si eso de las negociaciones es una buena idea...

Al menos eso ya no era cosa nuestra. Por ahí pasaba el general, aunque de pasar nada, parecía estar esperando a que saliéramos de allí.

- ¡No nos deja ni descansar!

Clint trataba de acabar cuanto antes con la descontaminación. Aunque el tiempo era algo fijo y no iba a poder hacer nada por acelerarlo, eso no implicaba que no se quejase. Por suerte para los demás, Nat sacó un tema interesante, bueno varios en realidad.

Yo le vi saltar junto al robot antes que desapareciera, y luego ya no estaba. Así que se marchó con él. Otra cosa es si lo han detectado o no. O cuan sensible son esos aparatos. ¿Os acordais de aquella peli antigua de "La mosca"? En serio, a mi no me vais a meter en algún cacharro de esos nunca. Si hasta los de Star Trek fallaban.

Lo de las negociaciones va a ser un desastre.Ya os lo garantizo. El tipo ese es un aprovechado. Dice saber mucho pero no me parece de fiar. Lo peor de todo es que son capaces de hacerle caso y unirse a él.

Luego apareció la mujer que parecia estar al cargo de la descontaminación. Y empezó a hablar de temas de seguridad y protocolos.

Está claro que tienen tecnología fuera de serie. Los malos siempre tienen mejor tecnología que nosotros. ¿Cómo es eso?

Después de ver cómo Scott se empequeñecía delante de sus narices y volver a quedarse desconcertada por segunda vez en muy poco tiempo, se fue a realizar la descontaminación con Vision todavía de muleta, dando gracias a Steve por haber tomado la decisión de retirarse.

Por lo visto no era suficiente con no saber qué había sido de Scott, sino que detenían a unos inocentes, como si fueran los mismísimos terroristas, “hasta que se demuestre lo contrario”.

No le gustó nada la actitud del General Ross, No se da cuenta este hombrre que no podemos casi ni moverrnos, necesitamos descansarr ¡En serrio, no lo ve! ¡Y encima detienen a los rrusos! No entiendo nada.

Esperando a que se iniciara la descontaminación escuchó los comentarios de sus compañeros y estaba completamente de acuerdo con lo que decían, no había mucho más que añadir. Era verdad que las negociaciones no parecían una buena idea, también que estábamos preocupados por Ant-Man, que estábamos agotados y que los malos siempre tenían mejor tecnología. A ver cómo se las apañaban los científicos del pentágono para resolver el asunto. Vision les da una idea de por dónde empezar.

Se estaba dando cuenta que estar con Los Vengadores era vivir desconcertada, tendría que acostumbrarse. Y también a vivir bajo presión y a eso no creía que fuera a poder amoldarse tan fácilmente. Cada vez se sentía más unida a Los Vengadores pero más enfadada con el resto del mundo, cuánta injusticia.

- No podemos hacer mucho ahora mismo por Scott. Confiaremos en que se ponga en contacto con nosotros para poder actuar y ayudarle en caso de que sea necesario.

El Capitán América cooperó con los funcionarios que estaban allí encargados de descontaminarle. Accedió a sus demandas y dejó que le liberaran de aquella infección. Steve, que ya no llevaba la máscara puesta, estaba más preocupado por la desaparición del hombre hormiga que por su propia situación.

- Capitán América. -dijo mientras se presentaba a la Comandante Jones, sabía que ella le conocía, pero era una simple cortesía.

- Su tecnología es superior a la nuestra. Al parecer tienen un sistema de teletransportación realmente rápido y preciso. Tenemos suerte de que únicamente lo hayan empleado de una forma tan inocente, con facilidad podrían haber colado un equipo de asalto en el Despacho Oval y haber acabado con el Presidente. Lo que fuera que ellos buscaban estaba en el Pentágono y no estoy completamente seguro de que los detuviéramos totalmente. No tenemos muchas respuestas que darla Comandante Jones. Únicamente combatimos contra ellos y no tuvimos mucho tiempo para estudiar sus aparatos.

Dudó en decir lo que iba a decir, pero creía que aquello obedecía a un bien mayor y que por tanto era necesario confiarle esa información a la Comandante Jones.

- El emisario del grupo, que además parecía coordinar el ataque, podría saber como hacerlo y al final se ofreció a colaborar, pero no me fiaría de él. Ocultan algo, eso es seguro.

El proceso de limpieza continuó con un baño de químicos sobre vuestro cuerpo. La comandante había escuchado hablar a visión acerca de los sensores de radiación. - Es una idea. No soy la persona adecuada para esos temas pero lo hablaré con quien deba. Tendrémos en cuenta lo de detectar esos rastros para empezar un desarrollo específico.

Luego atendiendo a las palabras del capitán pareció temer por la seguridad del presidente. - Seguro que ya habrán dado una alerta allí.

Algunos minutos después el tratamiento había avanzado tanto que el general Ross directamente accedió a la sala sin protección alguna. Su semblante mostraba claramente que su paciencia había llegado a su límite.

La comandante cerró la boca en cuanto Ross accedió, por respeto a su superior.

El hombre se aproximó al grupo y ya próximo se irguió un poco mostrándose confiado.

- Han hecho un buen trabajo solo que esta situación es harto peligrosa. El nivel de seguridad ha sido elevado al máximo y estamos intentando que el resto de países no sean conscientes de nuestros problemas. Ese robot emisario de ese Kang, quiere mantener contacto personal con el presidente y... hemos tenido que denegarlo.

El General se llevó la mano al mentón, pensando momentáneamente en el siguiente punto.

- Hemos pedido el retorno de Warmachine. Pero además de eso, me han encargado que prepare una reunión con ustedes urgentemente. La CIA, el presidente y yo mismo estaremos presentes. Quieren discutir acerca de la seguridad nacional con ustedes. 

El General Ross no era precísamente un ejemplo de amabilidad y prácticamente había asaltado al grupo con su propuesta de aquella reunión. Durante uno o dos segundos todo tu grupo parecía pensar en sus palabras, buscando alguna respuesta.

Un hermoso murmullo comenzó a escucharse en la sala donde os encontrábais, algo rítmico que seguía patrones los cuales iban mutando, como una canción que iba aumentando de ritmo o disminuyendo, incluso transformándose progresivamente en una nueva melodía.

La comandante Franca había tomado su teléfono móvil. Aquello venía a ser un recio smartphone cuya marca no se reconocía a simple vista.

- Malditos cacharros.

Comentaba mientras toqueteaba su superficie tratando de hacer algo, aunque por la expresión de su rostro su aparato no funcionaba muy bien.

Escuchando atentamente las palabras del general pienso en lo ineficaz de sus defensas y busco una forma de mejorarlas.

- Quizá yo podría mejorar sus sistemas. Usar mi propia identidad como base para una consciencia distribuida, una inteligencia artificial inasaltable, sincronizando las defensas con comprobaciones de integridad en intervalos de milisegundos. 

La idea llegó a mí como una forma ideal de proteger no sólo el pentágono sino todo el planeta.

Tras decir aquellas palabras inmediatamente advertiste que habías tenido un extraño desvarío delante de todos.

Estos militares eran un poco pesaditos, la verdad. No nos dejaban ni descontaminarnos a gusto y eso, que yo de preferir hubiera preferido un jacuzzi y un hombre atractivo que me diera un masajito después del baño.

En realidad cuando decía que querían discutir algo con nosotros, mi mirada pasaba de Steve a Tony, pues al final siempre acababan hablando con ellos y nosotros éramos como los que estábamos ahí y nos hacíamos una idea y tomábamos una decisión según decidieran ellos.

- Todavía no tenemos demasiado claro qué pensar sobre ese robot... - Le respondí a modo de "me parece una buena idea que el presidente no haya sido tan idiota como para acceder a ello".

La comandante parecía estar peleándose con el móvil y bueno, por el momento era de lo más divertido que había visto durante aquel día, así que no pude evitar quedarme mirando.

Menos mal. Habría que ser idiota para meter al presidente junto con un robot de un autoproclamado tio que dice ser del futuro y que gobierna allí.

Justo después de decir eso Clint se dio cuenta de que lo había hecho en voz alta.

¿Qué? Como si nadie más hubiese pensado eso. Es verdad.
En fin. A ver cuando nos sacan de aquí. Que yo apenas estuve expuesto.

Luego miró al general Ross.

Cuando dice que quieren hablar sobre la seguridad nacional es porque quieren pedirnos algo ¿verdad? Además el tono sugiere a algo que no nos va a gustar mucho.

Caso. Echo de menos los días de SHIELD. Casi.

Clint nunca había destacado por su tacto. Era obvio que no había perdido el toque.

Preocupado por mi desvario me desconecto de cualquier sistema ajeno y empiezo a ejecutar un autodiagnóstico