Partida Rol por web

Los dos de adelante han pasado sin inconvenientes. Al aproximarteles, notas porque tanta facilidad... Los tejidos, de malla doble y electrificados, estan arrancados hacia un lado. Tampoco se ven rastros de la perrada que suele rondar...

El grandote espera que pases, y luego acomoda el tejido de nuevo. Parece que la electricidad fue desconectada, pero de todas formas como dobla los alambres reforzados de nuevo a su posicion... Se necesitaria una examen cercano para notar que estan sueltos del poste.

Una vez fuera del predio, ves que tienen una camionetita Wolswagen, con ventanitas pintadas de colores fuertes, estacionada en la calle. La pendeja se pone del lado que acompaña, riendo divertida.

-Ay Dios, que faciles que son estas carceles argentinas... Niño, sube. +dice con displicencia, mirandote+ Tendras que hacer de chofer, para ganarte el viaje. 

"Creo que no es un buen momento para decir que la unica vez que maneje fue para incendiar un jardin de infantes con un colectivo...Mierda"

Saco todo de mi cabeza y me subo al asiento del conductor, rezando para que no se note mi nerviosismo.

El grandote se acomoda atras. Por lo que ves, es un espacio acolchonado y con mantas, como para dormir. Hay un par de cajas, y del techo cuelga una luz, poco mas.

-Bueno boludo, arranca. Dale derecho y despues al sur... Nada de boludeces.

Ois el clic de una pistola amartillandose.

-El asiento no es a prueba de balas, y un tiro en el culo no es tan agradable como la pija del Hector. 

El enigma de la palanca, el volante, los pedales... No te viene ninguna idea a la cabeza. Tras girar la llave al menos arranca. Pero no atinas con los pedales o algo, pues a pesar que aceleras no se mueve... La flaca alza una ceja.

-...  Estas apretando acelerador y freno a la vez, en vez de embargue...+apunta con voz calma y paciente, lo que quizas hace peor las cosas..+ No sabes manejar?

Atras, el grandote se golpea la nuca contra el costado de la camioneta, murmurando un "no podes"... El barrio que les rodea, al cual le falta poco para ser un rancherio, sigue en silencio. Al menos tu torpeza no tiene muchos testigos.

-No, no se - Contesto friamente, temiendo lo peor. La chica parece comprensiva, pero el otro podria destruir mi cuerpo y mi alma de una forma demasiado rapida como para darme el lujo de hablar de mas - Di-Disculpenme...

Mira por encima al muchacho atras. Algo intercambian en ese gesto... Te toca el hombro.

-Pasate aca +dice con suavidad, moviendose para dejarte espacio y ponerse ella en el asiento del conductor. Su colita queda a tu alcance, el primer culito de mujer que ves en un buen tiempo. Lastima el acompañante... y tambien que tus ultimas experiencias han hablado de otra clase de gratificacion. Pero aun asi...

La tentacion es fuerte, pero aun asi mi verdadero amor es la sangre...

"...De la victima..." Sonrio con lo ultimo, mientras me acomodo y busco a tientas, con mi mano izquierda, el cinturon de seguridad.

Con la flaquita al volante, arranca despacio y suavemente... De reojo podes ver que, aunque el de atras no ha variado su postura, la punta de la pistola sigue hacia vos...

Las calles de Santa Fe, oscuras y tranquilas, van pasando. Se meten en una avenida poco concurrida y le dan hacia la izquierda...  Durante el camino nadie charla, el silencio solo es roto por la suave radio, donde se cuelan melodias de Fito Paez que parecen gustarle a la minita... No conoces la ciudad como para hacerte buena idea de hacia donde estan yendo, pero no tardan mas de unos 20 minutos en detenerse frente a un lugar de muros altos, aunque no ves ningun edificio dentro. Hay una puerta doble enrejada abierta, donde una mina hace tiempo...

-Abajo todosss... +dice, apagando el motor con una sonrisa pacifica. Al salir afuera, sin embargo, corre hacia la otra chica, y ambas se estrechan en un fuerte abrazo.

Sentis la punta del fierro en tu nuca, apenas se baja la chica.

-Bienvenido. Baja despacito y saluda con educacion... Ahora vas a tener que pasar un pequeño examen que justifique nuestro tiempo. Si fallas, sos boleta. Si pasas, puede que no. ¿Entendido?

Por primera vez en mucho tiempo, mi instinto de supervivencia aviva mis sentidos al maximo. Tengo que hacer todo lo que me piden y mostrar lo mejor de mi (si es que hay algo):

-Si, entendido.

Me bajo despacio y de la forma mas suave que consigo lograr.

Las dos chicas se arriman y ves a la segunda. Camperita negra, remera negra, leggins negros marcados, cruz de plata, todo nuevo y con pinta de caro... Si no es trola pega cerca. Tambien te mira con seriedad un segundo al principio, evaluandote el vestuario, pero luego saluda muy suelta besandote en la mejilla.

-Hola! Soy Eugenia. +dice sonriendo+ Mucho gusto. ¿Sos de la banda?

-Creo que podrias decir que si... - Intento que mi voz suene energica pero, a su vez, elegante - Me llamo Lucas, Lucas Garin.

Luego de hablar sonrio leve y amanamente.

-Eugenia Salieri, ...decime... +sonrie, pero antes de seguir la otra chica, que le abraza con ternura, interrumpe.

-Bueno, vamos entrando... Despues charlan. +mientras indica a su amiga que se gire, la cual obedece. Desde luego, atras tuyo esta el grandote impasible, no parece que tengas muchas mas opciones que ir detras.

Apenas traspasada la puerta doble de los muros, entendes porque no veias un edificio. Los nichos no son demasiado altos, quizas 3 o 4 metros. Desde fuera no se notan, si estas cerca como la misma vereda...

El cementerio esta bien iluminado y decorado. Hay flores en casi todas als tumbas, los estupidos buenos deseos a cadaveres putrefactos de que esten pasandola bien en el otro mundo... Las chicas intercambian grititos adelante, riendose entretenidas por algo. El vago que camina a tu espalda no dice nada. Ha guardado el fierro, pero eso probablemente no signifique nada. Vos sabes que no es necesaria un arma para matar, y la impresion de este tipo da que el tambie

Los 4 caminan juntos, hasta que mas adelante, las hileras de nichos se abren a una especie de placita, donde ves una desentonante fogata, rodeada por varias personas, mayormente jovenes...

Planteo el saludar, pero por alguna razon prefiero quedarme callado y darles una breve pero calida sonrisa a los presentes. No sea cosa de dar un paso en falso...

Las chicas se separan finalmente. Eugenia se sienta, mientras que tu rescatadora va a otro lado, donde la esperan un tipo algo mayor, y otra mina... El grandote palmea tu hombro, indicandote un lugar vacio en el circulo. Luego tambien va con el resto. Ahora podes examinar mejor el lugar. Notas que tras el circulo de gente, hay dispuestos varios instrumentos. Reconoces guitarra, bajo, un organo electronico, una bateria y un par mas...Tras unos instantes, la chica rara se vuelve y habla en general.

 -Amigos e invitados especiales,...  Como ya saben, esta noche daremos nuestro primer concierto en esta ciudad. Una reunion privada, solo para gente selecta. Varios se preguntaran el porque de realizarlo en tan singular locacion, incluso el "como" conseguimos permiso. La verdad sea dicha no lo tenemos, ese es el porque. Podriamos estar en algun bar o boliche. Aqui todos nosotros estamos corriendo un riesgo de que esta amena reunion se vea interrumpida por las sirenas de la policia. ¿Pero que es de la vida sin emociones? Jajajajaj..

Rie burlonamente, risa que es coreada por varios, aunque en unos algo nerviosamente. Ella no parece notarlo. Mientras, varios salen del circulo y se ponen tras los instrumentos, media docena en total. El grandote le tiende el bajo, mientras el se apodera del microfono...

-Espero que lo disfruten. Un concierto inolvidable, para honrar la vida entre medio de la muerte...+sonrie. 

Se producen unos instantes de silencio. Uno de los chicos comienza a tocar su instrumento, tanteando con la flauta. Otro le sigue con la guitarra. Los demas arrancan, y finalmente su voz surge. Grave y profunda... Tanto la chica rara como una rubia que lleva una pandereta le corean suavemente, como sirenas, pero la potente voz lo domina todo...

A medida que canta, su fuerza va calando. Uno a uno, los oyentes van abriendo los ojos, encantados. Incluso a vos, que fuiste victima de su mirada, te entontras escuchando embelesado. Hay un vigor en el increible... Para completar la puesta en escena, de uno de los laterales surge una hermosa morocha semidesnuda, jugando con una serpiente... Mas sueño no podria parecer, en estos momentos, y de hecho el publico observa todo boquiabiertos, fascinados...

"Esto si que no me lo esperaba..." Sonrio ampliamente al ver los pechos de la muchacha, pero la serpiente me atrae inclusive mas. Algo en esos animales me ha gustado desde siempre... 

Una sonrisa de jubilo, de disfrute, se forma en mi rostro, y comienzo a aplaudir de manera leve y lenta, casi para mi mismo.