Partida Rol por web

Welcome to Demon School!

Capítulo 1 - ¡Bienvenidos a Babyls!

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31/07/2020, 19:46
Director

¡Bienvenidos a Babyls!

Es hoy... ¡por fin ha llegado el día!

A cualquier otra persona le podría parecer que hoy es un día normal, uno como otro cualquiera en el Mundo Demoníaco. Los murciélagos peludos emiten sus chirridos característicos desde las almenas de las murallas y castillos cuando ven que el sol se alza en el cielo, tiñéndolo de su color verde amarillento característico, y todos vosotros os despertáis en vuestros respectivos hogares, sabiendo que por fin ha llegado vuestro momento.

Hoy os vais a convertir en estudiantes de una Escuela Demoníaca, ni más ni menos que Babyls. Sí, es cierto que esta escuela no es la más prestigiosa, ni la escuela que garantiza mejor educación, mejor servicio, ni siquiera mejor entrada al mercado laboral una vez os graduéis... pero esta escuela tiene algo que otras no tienen. Y es que la Escuela Demoníaca Babyls es el lugar donde estudió el mismísimo Rey Demonio en persona. Bueno, el último que hubo. Se dice que el Rey Demonio era un ser con un enorme poder, que conocía una cantidad de hechizos totalmente desproporcionada y que tenía un poder demoníaco gigantesco... pero que ni siquiera tenía que hacer uso de él, ya que con su sola presencia imponía tanto que sus oponentes se rendían antes de siquiera enfrentarse a él. ¡Y ahora vais a estudiar en la misma escuela que él!

Vale, está bien. Eso del Rey Demonio a vosotros os pilla un poco lejos. Ya hace unos cuantos cientos de años que el último Rey Demonio murió, y desde entonces ha sido un Consejo formado por las familias nobles más importantes y poderosas el que se ha ocupado de gobernar este mundo. En teoría deberían escoger un sucesor para gobernar como Rey, pero parece que les cuesta decidirse.

Pero dejando aparte todo eso... ¡es vuestro primer día de curso en esta Escuela, eso anima a cualquiera! Babyls se encuentra situada encima de una enorme isla de tierra flotante en mitad del Valle de la Muerte, una gran extensión de terreno llena de enormes rocas puntiagudas en las que habitan todo tipo de criaturas mágicas y no mágicas, pero todas salvajes. Y la única forma de llegar a Babyls a pie es recorrer un largo sendero de tierra también flotante que lleva a las puertas de la Escuela... aunque muchos alumnos prefieren simplemente extender sus alas y volar hasta allí, claro. Lo lógico.

Vosotros llegáis con tiempo todavía por delante. Cuando llegáis a la puerta de Babyls os encontráis envueltos en una enorme cantidad de alumnos vestidos con el uniforme de la escuela. Hay tanto alumnos de primer año como sois vosotros, que van un poco perdidos y tienen que preguntar a las personas al cargo por indicaciones, y también los hay de segundo y tercer año, algunos de ellos observando con diversión a "los novatos" llegar a la escuela.

Y es que al ser alumnos de primer año todavía no tenéis una clase asignada, y son los miembros del Consejo Estudiantil, los únicos demonios vestidos con un uniforme distinto al reglamentario, los que reciben a la gente en la puerta y os indican que a las 6:06 AM tendrá lugar una ceremonia de bienvenida al curso en el salón de actos de la escuela.

Lo cierto es que aún tenéis un poco de tiempo antes de que la ceremonia empiece... ¿qué vais a hacer?

Notas de juego

¡Empezamos!

Dos indicaciones: si sois de una familia conocida, tanto si es por odiada o por querida, indicadlo para que los demás puedan saberlo.

Y otra cosa: todavía no tenéis a vuestro familiar de invocación. Lo aprenderéis a invocar en la escuela.

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01/08/2020, 03:55
Phinx Elizabeth Rooting Lacus

       Yawmmmmm... - dejaba escapar un leve bostezo en el interior del carruaje mientras iba viendo por la ventana como lentamente avanzábamos ... esto de levantarse temprano sigue siendo un hastío ... pero... reglamento son reglamento... , viendo como aquellos sendero pedregosos y sinuosos iban dando pie a la imagen de la susodicha academia, que aunque no estaba entre mis primeras opciones como le había comentado a madre... también tenia bien claro la importancia que la misma simbolizaba para todos los demonios... ademas... igual puede ser un aliciente este cambio de aires...

... Vamos Beth... hay que dejar una buena impresión...

  Mientras aun luchaba con mi aletargado cuerpo miraba el como en los cielos de apoco se iban viendo las silueta del alumnado llegar ... tantos colores... formas y tamaños... pero... todos... TODOS y cada uno con algo que les asemejaba.... eran gentuza ante mis ojos ....

Y lo digo por ti... ¡¡ estudiante genérico que vuela mas lento que el resto !!

Mientras peleaba con alguien quien ni debería poderme escuchar, pero ante mis ojos estaba cometiendo un pecado capital... arruinar una bonita postal

   ¡¡ Si...!!  por tu poca velocidad descompensas el patrón que el resto esta siguiendo... - dibujando en la ventana puntos con la punta de mi dedo anular - deben ser tres... luego dos... luego tres... luego uno... y repetir el patrón... p..pero... hay estoy viendo tres... luego luego uno... luego cuatro y luego uno.... eso.. eso... ¡¡ Ighhhhhhhhhhhhhhhh !! - chillando sin demasiado tapujo, total ademas del cochero que iba por fuera, nadie mas estaba en el carruaje. 

   ....

   Cofff... i..imagino que por ser primer dia... puede que deba quedarme mas tiempo del convencional... - le respondía a mi cochero una vez me bajaba con cierta vergüenza por lo que pudiera haber oído - d..de todas maneras... avisare si se llega a dar el caso - y sin intercambiar mas palabras que un simple gesto de despedida, comienzo a andar hacia la entrada, evitando mirar demasiado a la cara al resto de los que pudieran llegar a ser mis compañeros o similares ... por lo que me han contado igual hay mas de una clasificación de los nuevos... mejor esperar hasta ese momento para irme aprendiendo el nombre de con los que tendré que tratar... 

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02/08/2020, 00:48

Azryel pegó un profundo bostezo desanimado mientras veía el exterior a través de la ventanilla del carruaje. Estaba aburrido y cansado por el tedio del viaje, cosa que sumada a las horas y a esa maldita costumbre de cerrar todo con el número seis... Le llevaron a maldecir por lo bajo el habersele ocurrido la maravillosa idea de asistir a una escuela la cual podría haber sido perfectamente innecesaria para su vida... Pero bueno, ya era algo tarde para arrepentimientos, y el cansancio hizo que durante un pequeño parpadeo no volviese a abrir los ojos hasta que la brusca voz de su chófer le indicase que finalmente llegaron a su destino y que por fin era hora de que se largara del carro.

-Tranquilo Ralph, sé que en el fondo pensarás en mi todos los días cuando ya no esté.

Sonrió confiado, divertido en parte al referirse a su chofer quien... Definitivamente no se llamaba Ralph, mas poco le importaba al chico llegados a este punto de la vida. Luego de eso y de haberse desperezado, el peliblanco realizó un último chequeo rápido tanto a su traje como a sus vestimentas para revisar que todo estuviese en orden antes de abrir por su propia cuenta la puertezuela hacia su nueva vida. Y es que no era para menos, el cuidado de su aspecto era lo mínimo que podía hacer para complacer a los ojos expectantes de su audiencia una vez bajase del vehículo, porque claro... El poderoso símbolo de su familia se encontraba a lo largo de todo el carro, grabado mediante delicadas incrustaciones de oro puro. Era un vehículo hecho para llamar la atención, hecho para anunciar la presencia del poco querido Lord Abyssus, aunque -por primera vez en la vida del chico- esta vez era solamente Azryel quien bajaba de él y, claro, resultaba obvio que no se trataba del Lord mismo... Mas muy probablemente se trataba de su hijo, el retoño de una de las familias menos queridas del Consejo, quien con las manos tras la espalda y una sonrisa en el rostro se mostraba radiante, curioso y expectante.

-Babyls, Babyls, Babyls... Será un honor comenzar este año juntos.

Y prosiguió a caminar, aprovechando de saludar con una sonrisilla un tanto zorruna y un gesto cortés con la mano a quienes captase dirigiéndole la mirada. 

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02/08/2020, 20:24
Loirath

El primer día de clases en aquel Instituto para demonios donde estuvo alguien importante que ahora no recuerdo, es un asunto de memoria o que me pierdo la mitad de las cosas en el camino. No importa, hoy es un día super especial y lo estoy viviendo como si fuera una reina en su palacio. Por esa razón al abrir mis ojos un refrescante aroma inunda mis sentidos cuando la tina se encuentra preparada para mi baño de sales y rosas. No soy como Cleopatra que se baña en leche, pero sí que prefiero las rosas bien rojas para darle cierta suavidad a mi piel. 

Tras aquel delicioso baño de espuma y diversos olores, ninguno nauseabundo ya que los demonios no somos asquerosos y mucho menos feos. Es todo un mito, uno que he roto hace mucho tiempo aunque mi corta capacidad mental me diga que soy la única, algún día alguien me dirá lo contrario y sufriré pero no será hoy. Una vez estoy ataviada decentemente sigo mi rutina hasta el desayuno donde unos ricos caracoles aguardan por mi. Y menos mal que a la Señora Marie no se le ocurrió hacer su sopa fabulosa de testículos del Monstruo de la Laguna verde, sino esto sería un éxito rotundo y hay que... Simular.

Humildad ante todo es mi lema, mi institutriz le ha llevado años para que entienda la palabra así que no imagen lo que me ha costado el aplicarlo. No tengo muchas luces, pero eso lo dije. ¿No? Más allá de esto llega el momento tan ansiado, viajar en mi carruaje en tonos bordó y negro, donde en su puerta está dibujado aquella rosa que simboliza mi procedencia y le da a entender a cualquier otro demonio mi linaje de noble. Desconocido, pero noble.  

Viajo sola como es de esperar mientras los negros corceles vislumbran con su belleza y ese pelaje tan brilloso que habla de mucho cuidado, amor y respeto sobre estos animales. Al descender descubro que estoy muy lejos de la entrada de aquel Instituto y me exaspera, no sé si desplegar mis alas con la intención de volar o ir hacia allí en el carruaje. Por suerte decide el chófer y vuelvo a subir tras la expresión en mi rostro de incertidumbre. 

—Gracias Señor Michels—digo. 

Un poco nerviosa doy con el fantástico lugar y al descender noto que hay bastante afluencia de demonios, algunos bien vestidos, otros muy pequeños. Decidida a iniciar este gran comienzo de mi vida escolar, doy un paso al frente mientras intento ubicarme en tiempo y espacio. No tengo idea de lo que hay que hacer y por nervios muerdo mi labio inferior algo avergonzada. Quizás debería preguntar a los que están allí organizando, o seguir al resto. Tengo la duda.

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02/08/2020, 20:43
Adriel

Dormir, lo que era dormir, había dormido más bien poco. Desde el mismo instante en el que se había tirado como una plancha sobre la cama se había dedicado a rumiar incesantemente sobre cómo sería Babyls, y no hay mejor forma de rumiar que dando vueltas y vueltas sobre el colchón, así que de ese modo volaron las horas. Y por si eso fuera poco, cada vez por algún milagro se quedaba traspuesto tardaba bien poco en volver a espabilarse, saliéndo disparado de la cama para asomarse a la ventana y asegurarse de que el sol no se había asomado traicioneramente sin que él se empapara. ¡Eso sí, al menos gracias a eso había tenido el gusto de ver un precioso amanecer!

Pero lo cierto es que cualquiera de los que lo vio esa mañana seguramente tuvo muy, muy difícil juzgar que hubiera tenido una noche tan larga. Para empezar, porque pese a todo no llegó especialmente pronto, pero sobre todo, porque Adriel no tenía en absoluto aspecto de estar cansado.

No, de hecho, era exactamente todo lo contrario. Estaba radiante, con unos ojos abiertos como platos que brillaban como si ese fuera el mejor día de su vida, ¡Y es que seguramente lo era! ¡Por fin iba a convertirse en un estudiante! Claro, que eso también implicaba muchas cosas no tan divertidas... ¡Hora de ponerse las pilas, Adriel! ¡Vas a tener que esforzarte más que nunca, y nada de distraerte con...! ¡Hala! ¿¡Y ese pedazo de carromato!? ¿¡Y esos animales!? ¿¡Y esa gente!? ¡Vaya, qué seria parece!

 

 

Él había llegado solo y a pie, y aunque lo más normal, racional, lógico y práctico habría sido volar hasta la escuela, no lo hizo. En su lugar se pateó el sendero con zancadas tan largas que lo aproximaban más a correr que a caminar hasta que se plantó en la puerta con una amplia sonrisa y con una cola que se agitaba más que la de un cachorro excitado. ¡Qué de gente! ¿Quienes van a ser mis compañeros?

No tardó en escuchar, un poco de refilón, que todavía tenía un rato hasta que empezara la ceremonia... ¡Y tampoco iba a estarse quieto! El tiempo está para aprovecharse y exprimirse hasta el último segundo, así que empezó a buscar con la mirada, mientras cambiaba continuamente el peso de una pierna a otra.

La casualidad (O la causalidad) decidió que su mirada se detuviera sobre Phinx. ¡Hala, qué aspecto más extraño! ¡Y... Qué pequeña es! Parece que está un poco sola... ¡Seguro que es también de primero y necesita un empujón!

¡Oi! ¡Hola! —De un momento a otro, se había planteado frente a ella con su amistosa sonrisa— ¿¡Tú también eres de primero!? —No esperó a que contestara antes de continuar, así que quedó claro que de haberse equivocado habría estado dispuesto a meter la pata hasta el fondo, sobre todo porque hablaba muy rápido— ¡Igual nos toca juntos en clase! Yo me llamo Adriel. ¿Y tú?

- Tiradas (1)
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02/08/2020, 23:59
Magoa Ridere

Pues nada... había llegado... ese día tan raro que me habían dicho: el día de empezar la escuela. No se como debería sentirme... ¿Nerviosa de iniciar una nueva etapa de mi vida como estudiante de Babyls? ¿Alegre por tener que ir obligatoriamente a clases que me quitarán tiempo para hacer cosas que quiera hacer? ¿Furiosa por encontrarme con alumnos que no me importan nada a los que poder espiar sin su consentimiento por mi simple entretenimiento de enterarme de sus nada interesantes vidas? No se me dan bien los sentimientos... ni me importa demasiado la verdad. Solo se que tengo ir a clase... es todo lo que debo de saber.

Así que los mayordomos de la casa me despertaron y me dijeron que me aseara y me vistiera, así que lo hice. No había demasiadas complicaciones en la mansión Ridere... quizás alguna pintada con sangre llamándonos palabrotas que creo que se prohibieron hace milenios por ser increíblemente malsonantes, o nos ponían un buen zurullo de bestia en la puerta de casa... pero tampoco nada del otro mundo, ni nada que luego no sea fría y dolorosamente castigado. Por algo los Ridere somos miembros del Consejo, por mucho que nos odien por todos los secretos que conocemos de todo el mundo y con los que hemos alcanzado nuestro estatus, deben respetarnos quieran o no... y no quieren.

En fin... esta vez, no ocurrió nada de eso, así que todo transcurrió con neutralidad absoluta. Me vestí, cogí las cosas... y me fui volando hacia el lugar, extendiendo mis alas blanca y negra para marchar hacia la que sería mi nueva escuela. Podría haber esperado a que hicieran un carruaje o algo... pero... meh. Aunque me cansé bastante rápido de volar... no cansancio físico, sino aburrimiento de ver la tierra moverse bajo de mi, que me diera el viento en la cara... esas cosas. Así que... para viajar sin tener que moverme, me acerqué de forma silenciosa a uno de los carruajes... y en completo silencio y sin que me escucharan o vieran, terminé posándome en uno... donde al parecer, había una chica chillando como una rata ahogándose...Gritaba números, así que... ¿quizás se le olvidó como contar o algo? Tonta... en fin, después de posarme, simplemente dejé que el carruaje de esa estridente chica me llevara.

Y ahí encima me quedé, como si fuera una gárgola sobre la cornisa de una catedral, en completo silencio... simplemente escuchando y mirando todo lo que ocurría a mi alrededor. Cuanta gente a la que mirar... debería haberme traído colirio. Mucha información que procesar: alumnos, carruajes, corceles, emblemas... Parecía ser un lugar interesante. Al final el carruaje paró, y yo permanecí aún quieta, casi sin parpadear... en lo que parecía ser un duelo de miradas entre los que parecían ser un grupo de tercero y conmigo... la cual no detendría hasta que dejasen de mirarme si es que lo hacían. Entonces observé que la chica gritona parecía un tentáculo... la cual fue abordada por lo que parecía otro gritón. En fin... ya tocaba bajar, así que me desplacé por un lado y de un salto bajé del carro al suelo. Así empezaría a entrar en silencio... dirigiéndole y manteniendo la mirada con cualquiera que me mirase a mi.

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03/08/2020, 22:08
Loki R'lyeh

Hacía semanas que vivía por si solo en aquella sombría casa barata, la única que se había quedado a su lado había sido Nyara, la sirvienta que le había criado desde que llegó a la maldita mansión. Le cabreaba su presencia, pero debía admitir que le era útil y por ello no la echaba a patadas a pesar de las tremendas ganas. -Nyara, haz el favor de buscarte un trabajo de medio tiempo. Con lo cabrón que es Azatoth es capaz de cortarnos la mensualidad y a mi me ocupa todo el día el instituto... Hacía semanas que no lo llamaba padre, incluso se daba los aires como para hablar de el sin respeto alguno. 

Todos conocían ese nombre, Azatoth R'lyeh uno de los miembros del consejo, conocido últimamente por haber sufrido un incendio en su hogar. Recordar eso último le hizo soonreír con maldad mientras se terminaba de poner el uniforme, mirándose en el espejo maltrecho de la habitación y haciendo una mueca de desagrado. - Que poco gusto... Tomó su cartera y por fin salió de la casucha en dirección al colegio, pero no lo quería hacer con lentitud así que se transformó en un gran lobo blanco con marcas verde esmeralda por todo su cuerpo para tomar el asa de la cartera con la boca e ir corriendo a su destino.
                        
Pasó por delante a muchos estudiantes, sin fijarse en ellos realmente hasta que ya en la puerta y viendo que había miembros del consejo revisando que no hubiera problemas, volvió a su forma humana a unos pocos pasos de estos y entró sin decir nada, yendo ya hacia el interior en donde darían la charla de inicio de curso.

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04/08/2020, 21:24
Phinx Elizabeth Rooting Lacus

      Aunque mi intención era el de ignorar a medio alumnado hasta que no estuviera segura de cuales seria mi grupo, aquel muchacho llego de la nada y específicamente a intentar dialogar hacia mi persona, obligándome por cosa de etiqueta tener que mínimo prestarle atención ... espero que sea importante...

   Ighhhhhhhhhhh.... 

Haciendo una rápida mirada de arriba a bajo con cierto desdén, para luego seguir mi camino aunque algo mas lento para que pudiera seguirme escuchando.

Te lo dejare muy~muy claro Adriel el desalineado... mis Amigos pueden llamarme Beth, perooo para ti...

Soy Lady Phinx Elizabeth Rooting Lacus... de los Rooting Lacus, los mismos los del consejo... - dibujando sin querer una sonrisa luego de escuchar mi propia voz ... me encanta el sonido que deja...

Así que avanzando Mozuelo... - dejando de mirar hacia atrás y continuar hacia el interior de la academia - Primer día... y no quisiera que se manchase por minucias como retraso... 

 

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05/08/2020, 19:01
Adriel

La respuesta desdeñosa de Phinx habría sido suficiente como para desalentar a casi cualquiera... Pero Adriel no era casi cualquiera. Él era de esas personas que tenían una habilidad única para no tirar la toalla y, sobre todo, no desanimarse por nada, así que se tomó a buenas el comentario de Phinx. De hecho, aunque el saber que su familia formaba parte del consejo le resultaba algo intimidante, eso no cambió ni un poco su actitud animada.

¡Bueno! ¡Seguro que entonces pronto podré llamarte Beth! Y tú, si quieres, puedes llamarme El Desalineado... Aunque yo creo que es más fácil Adriel —bromeó divertido mientras levantaba un pulgar, sin un ápice de maldad, observando cómo la espalda de Phinx se alejaba pasito a pasito. Quiso decirla que estaba seguro de que todavía tenían tiempo, pero en ese momento su atención voló una vez más.

 

 

Boring Lago... ¡Quién me iba a decir que podría tener a gente tan importante como compañeros!... Hrm... Y pensando en eso...

Miró alrededor, y se dio cuenta de que la mayoría estaban caminando hacia el interior del edificio, ¿Quizá en realidad no tenían tanto tiempo como pensaba? Quizá. Quizá no. No llegó a razonar la respuesta, porque entonces se fijó en una chica que parecía un poco perdida, y se acercó de una carrera hasta ella. Y así termino justó frente a Loirath.

¡Oi! ¿Cómo estás? ¡Te veo más perdida que una pulga en un sabueso infernal de peluche! Sonrió ampliamente, apoyando las manos en las caderas—. ¿Tú también eres de primero, verdad? ¡Eso nos hace a tres! ¡Como poco! Yo me llamo Adriel, y aquella que va por allí se llama... Eeeh... Pin... Elsa... Beth. ¡Se llama Beth! ¿Y tú? ¿Tú cómo te llamas?

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05/08/2020, 20:06
Legion Zarkel

- Tú. - una voz femenina y autoritaria detiene en el sitio a Adriel mientras éste va corriendo desde Beth a donde se encuentra Loirath. Se trata de una demonio joven, que tiene pinta de ser mayor que vosotros y no estar ni mucho menos tan perdida, así que es improbable que también sea de primer año. Ah, y resulta que no es el sonido firme de su voz el que ha detenido a Adriel, sino que lo ha agarrado del cuello de la camisa mientras pasaba corriendo por delante de ella. - ¿Te das cuenta de que estás arrollando a otros alumnos mientras corres?

Con una sola mano, esta chica sujeta a Adriel en el aire por la camisa, moviéndolo para mostrarle que efectivamente ha hecho tropezar a un par de demonios de menor tamaño mientras corría hiperactivamente por el lugar.

- No tengas tanta prisa, vais a pasar mucho tiempo aquí. Y además, la ceremonia está a punto de comenzar. - dice la chica, posando a Adriel en el suelo de nuevo, delante de Loirath. - Llévatelo para adentro, anda. - le dice a esta. Tal vez piense que, como él le estaba hablando, los dos se conocen.

Dicho esto, la chica se da la vuelta tras echar unas miradas a su alrededor, y algunos miembros del Consejo Estudiantil la siguen.

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05/08/2020, 20:18
Dolgath Enma-o

Tal y como la chica ha mencionado, los miembros del Consejo Estudiantil comienzan a anunciar que la ceremonia está a punto de empezar, así que todos los alumnos os dirigís al salón de actos de la escuela. Se trata de una sala enorme con una cantidad ingente de asientos para demonios de todos los tamaños y distribuidos de forma escalonada, con las filas más cercanas al escenario siendo las más bajas y las más alejadas y cercanas a la entrada las más altas.

Todos tomáis asiento, y la ceremonia da comienzo poco después, a las 6:06. En el escenario se encuentran varios profesores y representantes de la escuela, pero entre ellos hay uno cuya presencia destaca entre todos los demás. Algunos puede que hayáis oído hablar de él, se trata sin duda del director de Babyls, un hombre que en su día se rumoreó que podía ser escogido como el próximo Rey Demonio, pero al parecer declinó la oferta ante el Consejo.

El profesor que tiene la palabra comenta lo mucho que espera el personal docente y la sociedad demoníaca de los alumnos de Babyls, tanto de los que sois nuevos como de los alumnos de cursos superiores, y os increpa a esforzaros todo lo posible en aprender y fortaleceros en cuerpo y mente durante vuestra estancia en la Escuela. Nada que no hayáis oído antes de otros adultos.

El momento interesante llega cuando el profesor anuncia al director de la escuela y éste se levanta y toma el escenario, con las manos cruzadas a la espalda.

Durante varios segundos, probablemente un múltiplo de 6, el director de la escuela simplemente observa en silencio al numeroso grupo de alumnos de todos los cursos que tiene ante él. Y finalmente, cuando parece que el profesor que lo ha anunciado no sabe muy bien qué hacer con ese silencio va a decir algo, comienza a hablar.

- Alumnos de Babyls. - dice, y su voz resuena por toda la estancia gracias a un hechizo de sonido. - Mi nombre es Dolgath Enma-o. - se presenta. - Tengo el honor de ser el orgulloso director de esta Escuela Demoníaca. Vosotros, algunos a partir de hoy y otros desde hace tiempo, sois alumnos de Babyls. Eso os convierte en mi familia. - dice, y aunque no mira a nadie en particular, todos sentís algo de orgullo en sus palabras. - Tal y como el profesor ha dicho antes, esperamos de vosotros esfuerzo y dedicación. A cambio, el personal docente y yo mismo como director, nos comprometemos a... - su voz se va apagando poco a poco... y de hecho no termina la frase.

Habiendo estado a punto de interrumpir al director antes, el profesor duda si decirle algo, y los segundos comienzan a pasar. De nuevo, el profesor está a punto de intervenir, preocupado por el director, cuando de repente...

Un sonoro ronquido llena la sala.

Os cuesta solo unos segundos más, el tiempo justo de escuchar otro ronquido y ver la cabeza de Dolgath Enma-o ladearse lentamente, entender que vuestro director se ha quedado dormido, de pie y con los ojos abiertos. Durante su discurso. Los profesores deben estar más acostumbrados a este tipo de cosas, porque dos de ellos se levantan y se lo llevan...

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05/08/2020, 20:34
Director

Tras la salida por causas mayores del director de la escuela, la ceremonia de apertura continúa solo un poco más, y pronto llega el momento de terminarla. Cuando esto pasa, los miembros del Consejo Estudiantil reparten folletos con la letra del Himno de Babyls, porque os toca cantarlo. Un profesor acompaña las voces de los alumnos tocando el piano.

Los humanos existen solo para ser nuestra comida
Chúpalos secos; alma, sangre, carne y todo lo demás
Temblad ante el sonido de nuestras negras alas mientras alzamos el vuelo
Ya que nosotros somos demonios
Mientras esta canción brota de nuestros labios rojos
Grita por nosotros, ya que nosotros somos demonios

Tras el himno, la ceremonia termina y los alumnos de segundo y tercer año se marchan a empezar con sus clases, lo cual hace que haya mucho menos alboroto que antes. A los nuevos, en cambio, se os pide que permanezcáis en el salón de actos a la espera de que un profesor os recoja. ¡Parece que hoy mismo aprenderéis a invocar a vuestro primer familiar demoníaco!

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05/08/2020, 20:47
Loirath

Sigo muy perdida y creo que un pulpo en el garage está más orientado que yo. Pero bueno es que hay mucha gente, de todos los tamaños y color. Algunos medio peludos, será que son ositos achuchables para dormir en las noches de frío. Uh, sería genial contar con ese tipo de beneficio y a su vez podría considerarse como trabajo solidario. ¿No? Y mientras me debato sobre este dilema existencial que me aqueja, desvío la mirada hacia lo alto un poco impresionada al descubrir que una chica ha adoptado la pose de gárgola desde el techo. 

Oh my demon... ¿Eso respira? Uh uh... 

Sin intención de preguntar sobre aquello (Magoa) que está en las alturas, intento centrarme en algo más interesante y lo veo a ÉL. Si, un chico que está corriendo tras haber tenido un encuentro desafortunado con una cosita pequeña y no sé como reaccionar porque lo primero que veo es algo muy muy importante. Waaaaa es guapo. ¡Oh!

Y mis gestos comienzan a dejar atrás esa expresión confusa con la intención de reflejar algunos corazones a medida que las distancias se acortan entre los dos. Sólo que es interrumpido por una pelirroja que le habla de aquella forma, parece que ha tirado a varios a su paso y no me di cuenta, sólo sé que es atractivo y lo que suceda a su alrededor es... ¿Producto de su belleza? Yo creo sí. 

Wooo un lobo. ¡Lindo! —digo cuando lo veo y me centro en lo otro.

Uy uy que me le está dando una reprimenda, piensa piensa Loirath, piensa...

Y no sucede nada, no surge la idea brillante que puede salvar a ese chico tan lindo en apuros. Aunque el destino es así de agradable en el mundo de los demonios ya que de repente la chica lo deja justo delante mío y me pone a cargo de él. Inundada de felicidad y por tener esa responsabilidad super importante de cuidarlo, enseguida me pongo en papel y actitud para que todo salga bien. 

Oh, así será—digo. —Ya no estoy más perdida desde que apareciste y tengo una tarea muy importante contigo ahora mismo—respondo y ante la pregunta, doy saltitos de felicidad.—¡Si! ¡De primero también! Así que iremos juntos, oish, que lindo. Mi nombre es Loirath. 

Sin poder evitarlo lo rodeo con mis brazos un poco achuchando y tras soltarlo, cojo su mano para ingresar finalmente al lugar donde nos reciben y no sé qué cosas más. Una vez me siento junto a Adriel en el lugar que prefiera, comienzan las explicaciones que me pierdo la mitad de ellas porque estoy más atenta de él y de quienes están a mi alrededor. Sólo mi atención se centra en el Director cuando queda dormido. 

Jooooo. ¡Se durmió! —digo y miro a Adrien.—¿Viste? Eso fue terrible terrible... Pero divertido. ¿A que sí?

De repente comienza a sonar un piano y capto que se debe cantar el himno de los Demonios o algo, así que me pongo con ello rápido. Aún así, la felicidad no se me va con nada. 

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06/08/2020, 23:25

A paso lento y tranquilo continuó su camino hacia la academia tomándose el tiempo de observar al resto de jóvenes, tratando de reconocer y de quedarse con los rasgos de aquellos que le resultasen más llamativos, por lo que eventualmente fue incapaz de pasar por alto la curiosa interacción entre la chica de cabellos rojizos y aquel chico tan hiperactivo, sonriendo ligeramente para si mismo al ver que ya había quien lograba meterse en problemas aún antes de siquiera comenzar el año escolar. Desgraciadamente no hubo mucho tiempo para presentarse, pues con las prisas que estaban comenzando a meter no le quedó más remedio que entrar al edificio y disponerse a aguantar un discurso de presentación que acabó sacandole un bostezo más que sonoro incluso antes de que la misma persona que lo recitaba se durmiese. Si acaso, el hecho de que el anciano se callase le hizo hasta animarse un poco y todo.

-Una verdadera tragedia, ¿Verdad?- Comentó de pronto, colocándose en medio de Loirath y Adriel sin siquiera pedir permiso. Estuvo cerca de ambos desde antes, buscando un momento adecuado para introducirse... Aunque lo que acabó llevándolo a dar el primer paso fue algo totalmente distinto. Se frotó un ojo, bostezó y... -¡Señorita mía y querido compañero! Hay una cuestión importante que debo resolver... ¿Puedo daros un mordisco?- Y les miró fijamente, manteniendo un gesto somnoliento pero una sonrisa increíblemente ancha. Aguardó una respuesta con tranquilidad, aunque volvió a mirar hacia el frente cuando comenzó la música mas ni siquiera se dignó a cantar o a tratar de seguir la letra. Cuando acabó, no pudo evitar soltar otro bostezo.

-Seis versos... Obvio. No aguantaré otro de estos si no muerdo algo ya.-

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07/08/2020, 04:59
Phinx Elizabeth Rooting Lacus

     Gyijijii... permiteme dudar de que llegue a pasar, El desalineado... - reía al escuchar sus palabras - pero por intentarlo, quien soy yo para negarte tal derecho... hasta otra oportunidad...- y sin decir nada mas comienzo a alejarme, mientras podía oír cierto barullo que se comenzaba a montar y demás situaciones que poco y nada tenían que ver con mi llegada a la sala de ceremonia. 

    Con cierto bochorno me quedaba mirando y escuchando el descanso que estaba teniendo el avejentado Director Enma-o en mitad de la presentación ... podrá ser toda una eminencia... pero boicotear un momento tan importante para mía persona... ya son palabras mayores...  por suerte para mi orgullo la situación era tranquilamente controlada por el cuerpo académico ... al menos el reclamo escrito... puedo evitarlo de momento... dejando entonces el ultimo cuarto y con ello uno de los detalles mas bonito que podía rescatar de esta academia.

     ¡¡ Esplendido !! - mientras recibía con ansias aquel folleto y agudizaba el oído para asimilar el compás de la tonada, esperando el momento oportuno ... o que alguna voz fuerte diera la señal... para unirme al alumnado en el coro que se iba formando.

 

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07/08/2020, 12:27
Adriel

Adriel parpadeó varias veces y pudo hacer poco más que agitar las piernas, sorprendido por la alumna responsable que debía sacarle algún curso.

Uh... Uy... Je, je, je... ¡Perdón, culpa mia! —exclamó, mirando a los pobres demonios con los que se había tropezado sin darse ni cuenta—. Tendré más cuidado. ¡Lo prometo!

Aunque desde luego agradeció volver a estar sobre sus pies, y lanzó una sonrisa de disculpa a Loirath. Se había acercado a ella porque le había parecido que estaba un poco perdida... ¡Y ahora resultaba que estaba ella a cargo de él! Qué vueltas dan las cosas.

¡Yo Adriel! —repitió, llevándose una mano al pecho, sin recordar que ya se había presentado antes—. ¡Encantado, Loirath!

Después fue achuchado, lo que consiguió que soltara una risilla y que se le ruborizaran un poco las mejillas, y se dejó guíar de la mano, aunque seguramente le costó horrores no acelerar el paso o directamente echar a correr. Y allí terminó, en el salón de actos, sentado junto a su inesperada supervisora, tan atento como era capaz de estar al discurso mientras alternaba entre agitar ritmicamente una pierna y la otra... Hasta que llegó el momentazo.

Los ojos de Adriel se abrieron como platos, y la mandíbula podría habérsele caído. Dolgath Enma-o se había quedado dormido en mitad del discurso. Y eso era... ¡Increíble! ¿¡Cómo de poderoso e importante tiene que ser uno para poder dormise cuando le apetezca y donde le apetezca!? ¡Está decidido! ¡Voy a ser director!

Ha sido terriblemente genial —dijo a Loirath con una enorme sonrisa justo un instante antes de que llegara Azryel. Adriel había dominado el arte de exclamar bajito—. ¡Hola, claro! ¡Espera, espera, no! ¿Un... Mordisco?

No tuvo tiempo de interrogar más, porque llegó el momento de cantar... Y cantó. ¡A viva voz, además! Incluso había que concederle que no se le daba del todo mal, excepto porque en alguna ocasión saltó líneas de más y tuvo que volver a encontrar el verso correcto.

No somos humanos, así que yo creo que no sabríamos muy bien... —sentenció con un asentimiento una vez hubieron terminado. Si [Humano = Delicioso], entonces [No humano = No delicioso]. ¡Tiene sentido! Claro, que muchas veces he comido cosas que estaban ricas y no eran humanos...— ¡Además, todavía no sabemos tu nombre! ¡Morderse así es saltarse un montón de peldaños en la escalera de la amistad! ¡Diez por lo menos! Yo me llamo Adriel, y esta de aquí es Loirath.

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07/08/2020, 18:26
Magoa Ridere

Desde luego... menuda jungla más extraña de alumnos era esta: demonios hasta arriba de azúcar que arrollaban contra todo lo que se ponía delante, una vigilante roja, canijas, chicas con corazones en los ojos... Vi como me miraba cuando bajé del carro, y sin recato le mantuve la mirada hasta que quisiera... que fue más o menos cuando el chico de pelo negro se le acercó. Desde luego, sería interesante ver desde la distancia como actuaban entre ellos...

Luego en el salón de acto de la escuela... fueron unos discursos muy aburridos. Supongo que cuando apareció el director mejoró un poco... Pero hasta a él le tendría que parecer tan aburrido este momento que se quedó dormido. Desde luego sería curioso de ver como dirigiría este centro... Si lo haría desde el escritorio de su despacho o desde la cama de su dormitorio.

Nos repartieron los folletos con el himno de nuestra nueva escuela... lo ojeé de arriba a abajo pero... Cuando todos empezaron a cantar, yo no lo hice... Prefiero ahorrarme la voz para cosas que valgan la pena como mi soledad y no con mentiras... No hay nada que pueda ser más delicioso que una hamburguesa de mi madre... espero me haya dejado una en mi almuerzo.

Entonces, me quedé mirando la escena que se estaba desarrollando... Curioso, hablaban de mordiscos. Me quedé mirándoles en silencio desde un sitio atrás de ellos... fijamente, me daba igual si miraban hacia mi y me pillaban... Aunque vamos, ahora parecían más interesados en presentarse y esas cosas que hace la gente normal. El que pide mordiscos es curioso... parece tonto pidiendo cuellos que morder.

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07/08/2020, 19:58
Loki R'lyeh

Con paciencia esperó a que fueran las 6:06 ya en un sitio cualquiera del lugar, viendo como comenzaban a entrar a tropel todos los rezagados, unos con más calma que otros. Se quedó en silencio, escuchando con paciencia al director sin moverse un ápice de su sitio, ni siquiera cuando este se durmió y fue sustituido por otros para seguir con el discurso de bienvenida. Miró el folleto que le dieron y cantó el himno sin mayor problema pero el estoicismo en su voz indicaba que no era precisamente algo que le hiciera demasiada ilusión. Se peinó con la mano el cabello hacia atrás, después de que tras e himno hicieran marchar a los alumnos de segundo y tercero. 

Esperar se hacía tedioso pero lo hacía con el mejor porte, con paciencia mientras observaba los que quedaban a su alrededor, algunos hablando entre si, otros callados. Los estaba estudiando con la mirada sin decir una sola palabra, no necesitaba juntarse con nadie ni quería. 

Notas de juego

Siento que sea corto, no tiene nada que decir XD...

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07/08/2020, 20:59
Loirath

Oh, me siento super importante siendo la supervisora de Adriel. ¡Tan guapo!

Mis pensamientos fluyen igual que el agua de un cántaro y como es de esperar, los corazones también cumplen su función al manifestarse alrededor de mi cabeza y en mis ojitos. Es que no sólo es hacer algo esencial en el primer día, sino que no es cualquier demonio, es EL demonio y estoy tan emocionada que no sé cómo voy a contener todo lo que siento. Si hasta mi cola se mueve, algo que me hace ofuscar un poco y desvío la mirada hacia ella para que se quede quieta. 

Maleducada, cola muy maleducada. 

—Eh... ¡Ahhh! ¡Sí! Genialoso—respondo a Adriel tras entender tardíamente—. Uh... ¿Morder, morder? ¿Eso de poner colmillos en el cuello? No sé yo, no tenemos tanta confianza además creo que no sé como es mi sabor. Me da cosita, y si tu saliva me hace algo—digo confusa a Azryel. 

Y ante las palabras de Adriel siento que me ilumina, es justo lo que no había pensado pero sí que sería lo que yo puedo decir. ¡Somos tal para cual! Creo que podremos hacer una bonita pareja demoníaca donde entrelazamos las colas, miramos desde lo alto de un infierno plagado de llamas y ruinas mientras sólo sentimos amor. 

¡Eso! ¡Peldaños de la amistad! Sería hacer trampa, así que vamos paso a paso— explico tranquila—Adriel es muy sabio, hay que hacerle caso. 

Hay que caerle bien al demonio, que los corazones están cada vez más rojos. Lo único que me los explota es esa chica gárgola que me miraba y le miré. No sé, es rara. ¿Y si la muerde a ella? 

¿Y si le hincas el diente a ella?— señalo muy sutil a Magoa. 

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10/08/2020, 17:17

-¿Sangre? ¿Babas?- Preguntó con total perplejidad, parpadeando como si se tratase de la cosa más absurda e improbable del mundo a la par que mantenía un gesto de confusión que duró varios segundos y movía sutilmente su cola de lado a lado, hasta que por fin soltó una risa divertida. -No, noooo... Me han malinterpretado. Sólo quería un mordisquito, no tiene que ser en el cuello, aunque eso le agrega un poco más de atractivo.- 

Acto seguido guiñó el ojo hacia Loirath y, luego de una breve mirada a Adriel y de dedicarle una sonrisa sin hacer referencia alguna a los peldaños de la amistad, volteó su vista hacia Magoa a quien simplemente saludó con un gesto de su mano y su típica sonrisa, aunque no tardó en volver a girarse hacia los dos chicos con quienes había entablado conversación. -¡Sería un placer! Aunque... No, no sería igual.- Negó para si mismo como si aquello que viese en la chica no fuese suficiente para lo que sea que él buscase conseguir con ese mordisco.

Azryel suspiró con cierta resignación al final, pegando después un bostezo breve y frotándose el ojo izquierdo con la mano. Sí, definitivamente debía pegarle un mordisco a alguien, pero aún así se tomaba el lujo de ser selectivo en su búsqueda como si no fuese consciente de que... Bueno, era más difícil buscar a alguien que aceptase que a alguien "adecuado". Peeeese a ello, luego de una breve deliberación, partió con Magoa... Aunque su forma de presentarse varió visiblemente de la que había utilizado anteriormente con ambos chicos, pues hizo una reverencia a la par que se llevaba una mano al pecho... Y su cola realizaba un movimiento breve pero elegante.

-Buenos días, señorita. Mi nombre es Azryel, mis apellidos... Por ahora, irrelevantes. ¿Haría el favor de acompañarme? Hay dos personas interesadísimas en conocerla.- Le sonrió cortésmente sin enseñar su dentadura para después indicarle a Loirath y Adriel... No iban a quitárselo de encima tan fácil. Y quien sabe, tal vez le ayudaría a escalar aquellos peldaños que tanto mencionaban.