Partida Rol por web

Y de repente me cae un sermón de la gárgola y una amenaza de Loki. ¡Que sensibles estamos! Más allá de que no dije nada, solo fue con el mejor rollo. Pero posiblemente no se entienda mi forma de ver las cosas, a veces me sucede. No obstante a las palabras de Magoa no digo nada, pero si que asiento con un gesto de cabeza a Pnhix pese a que no puedo responder porque tengo a este otro encima. 

Cuando me sujeta de aquella manera, no hay miedo en la mirada de mi parte y quizás estoy algo incómoda. Esto es invasión del espacio personal y encima está muy enojado. Si solo quería ayudar y me la he comido de regalada. Además me ha tocado un pecho. ¡Un pecho! 

—¿Que es infraser?—pregunto confundida. 

Es que si no entiendo esa palabra, ya el contexto se pierde y por más que este hablando en ese tono, mi mente que con sus pocas luces no entiende mucho, se queda en plan disco rayado buscando el significado de la misma. Esto logra que esté mirando a mi compañero demonio mover la boca como si nada mientras intento entender lo otro. 

Hasta que capto algo. 

—Hm... Somos demonios. ¡Vivimos en el infierno! 

Y no me lo tomo a mal. ¿Debería? Luego me siento un poco rara por la situación y con algo de extrañeza busco unos brazos conocidos. 

—¡Azgath! Fue fuerte eso, dame un abracito. 

Adriel empezaba a estar más contento una vez más. Era una lástima que Phinx no se apuntara, pero si Loirath y Magoa iban ya prometía ser de lo más divertido... incluso si estaba dejando su preocupación por Panko en la puerta. Aunque mejor estar en la cafetería, que dentro de lo posible no estaba muy lejos, que irse para casa y no saber de él hasta el día siguiente.

El único problema estuvo, claro, en que Loki no se tomó muy a bien las palabras de la demonesa de los corazones, provocando que abriera los ojos como platos.

—¡Oye, ahí te has pasado! —exclamó Adriel con disgusto, cruando los brazos sobre el pecho—. No deberías tomarte todo tan a la tremenda. Aquí somos todos compañeros. ¡No podemos llevarnos así!

Suspiró y dejó caer los hombros, negando con la cabeza, y después volvio a mirar a Loirath y Magoa, que parecían dispuestas a saquear por segunda vez la cafetería.

—Pues vamos, antes de que sólo queden restos. Si alguien más quiere venirse, está invitado —Su voz sonaba algo menos animada de lo habitual. Por una vez, ni exclamó, en su lugar dejando caer un poco los hombros—. ¿Creéis que los Yod pueden comer humanos cada vez que van a la cafetería?

Que estuviera menos animado no significaba que no pudiera divagar sobre tonterías, aunque lo más sorprendente era que fuera capaz de recordar el nombre del rango más alto. Con eso en la cabeza, y esperando a ver si alguien más quería acompañarlos, inició su ascenso lejos del cobertizo al que llamaban clase y en dirección a la cafetería.

Como me esperaba, a Loki no le hizo ninguna gracia el hecho de que lo menospreciaran de esa forma tan estúpida e "inocente" como lo hizo Loirath. Aunque también es cierto que una de las cosas que dijo no tenían sentido... Y la demonio lo dijo, ya estábamos en el infierno... Aunque más tonta me pareció ella por no entender la amenaza que Loki por decirla -Infraser es un insulto en el que te llama "alguien por debajo de lo normal", y lo del infierno te ha amenazado a que si vuelves a decirle algo así acabarás muy mal parada- le expliqué con completa apatía a la chica para que se enterara de que iba el asunto.

Parece que Adriel se llegó a molestar por lo que dijo e hizo Loki a la chica de los corazones -Loirath ha sido la primera en no tratar a Loki como a un compañero sino como a alguien a quien dar órdenes. El enfado de Loki me parece algo exagerado pero justificado- le informe al chico de llamas azules con seriedad y frialdad como de costumbre.

Entonces, al hablar Adriel sobre las sobras del restaurante y demás... Me di cuenta de una cosa que ni ansía alimentaria unida con mi jaqueca no me dejaron darme cuenta antes, por lo tanto me detuve -Oid, es el final de clase... La cafetería ahora debería de estar cerrada e irnos a casa a comer allí ¿no? A mí me vale comer en cualquier parte mientras haya comida.

El horario escolar llega a su fin por hoy, así que el Profesor Moloch os permite marcharos del aula y eso hacéis, aunque no sin antes compartir algunas impresiones, comentarios, incluso algunas amenazas más o menos veladas.

Phinx felicita a Nija por su actuación durante la prueba y su obtención de rango, y la demonio de las gafas hace lo mismo con ella. Parece que se han vuelto bastante cercanas durante este pequeño test de rango, y aunque Nija de vez en cuando ríe por lo bajo sin que nadie sepa por qué, el resto de sus acciones parecen indicar que también le ha tomado cariño a la chica calamar.

Loirath y Loki tienen un pequeño intercambio de palabras no demasiado agradables, tras las cuales el chico se marcha, no sin que Adriel y Azgath salgan los dos en defensa de Loirath, cada uno a su estilo.

Magoa dedica su atención al búho que reparte los rangos... su atención, sus caricias y sus abrazos. El búho no reacciona, pero es muy blandito y achuchable. Una lástima que después de que salgáis del aula desaparezca mágicamente, marchándose a quién sabe donde. Por otra parte, Yama-chan agradece las caricias moviendo la cola a lado y lado y maullando.

Y antes de marcharse, mientras otros también lo hacen, Magoa da una mala noticia a sus compañeros: a estas horas, la cafetería de la escuela ya está cerrada. Así que no tenéis otro remedio que marcharos a vuestras casas, esperando que a la hora del almuerzo de mañana tengáis un mejor menú disponible.

En cuando a Panko, al día siguiente os enteraríais de que había pasado la prueba en el último minuto y había obtenido el rango 1, "Aleph". Quién lo iba a decir.