Partida Rol por web

Os ponéis a mirar y Frank observa que el elfo doméstico está junto al estante de "la zona prohibida". Es el momento de actuar si queréis hacer algo al Elfo. Regulus está muy cabreado, pues es una persona muy irascible, así que no duda en encararse al elfo.

Jejejejeje se va enterar ese microbio de que meterse con un Slytherin es lo peor que puede hacer... salvo meterse con tres.

Me acerco sigilosamente al elfo con la varita desenfundada y la mochila preparada para meterlo dentro una vez se haya convertido en pisapapeles y cuando estoy a su lado le apunto con ella en la espalda y lanzo un conjuro en voz bajita. Petrificus Totalus cabroncete.

El petríficus totallum pasa de largo y da a un alumno que se encontraba leyendo. ¡Maldición! ¡Más problemas no!

- Mierda tío, ¿Qué haces?. ¡Petríficus Totallum!.- lanzo el hechizo al elfo, intentando concentrarme para que me salga bien.

Debido a la cercanía entre vosotros y el elfo el segundo intento logra dar de pleno en el cuerpo de éste, quedándose con una pose de terror. Ahora había dos petrificados, y teníais que ser rápidos antes de que otros alumnos os vieran con la mano en la masa.

Mierda, al menos nadie sabe que fuimos nosotros, ni siquiera ese idiota que se metio entre mi conjuro y el elfo. Abro la mochila y meto al elfo dentro. Vamonos, ahora tenemos que hacer la segunda parte del plan... mejor con un martillo ¿no?. Dejo el libro que cogí antes donde lo encontré y salgo con Frank de la bibioteca echando chispas.

Llegas a la biblioteca, parece que está todo en orden, hay algunas estudiantes de otras casas y diferente curso mirando libros, aunque la sección prohibida está vacía. De bibliotecario no está el elfo aún, así que supones que se sigue recuperando después de lo ocurrido. El lugar es tenue, hay poca luz para ser una biblioteca, y los muebles son antiguos y oscuros.

El bibliotecario aún no se había recuperado, era el momento propicio para poner sus manos en los tomos más poderosos y exclusivos de la escuela! o al menos eso se decía el chico, por lo que discretamente comienza a caminar hacia la sección prohibida para intentar alcanzar algún que otro interesante tomo de magia.