Partida Rol por web

El ambiente en la biblioteca es calmado, y casi siempre hay un pequeño elfo doméstico vigilando que no haya robos de libros y velando que se cumplan las normas. Actualmente parece que no hay mucha gente, los pasillos son oscuros y las mesas amplias y escondidas. Un lugar ideal para relajarse y estudiar sin mucho ruido. 

Entré a la biblioteca junto mis compañeros de casa preguntándome si era buena idea jugar en un sitio tan peligroso, a la que hagamos algo de ruido seguramente nos pillarán y a pesar de que tenia ganas también era cierto que no quería ser descubierta.
Deje que mis compañeros guías en donde podríamos ir mientras caminaba con la cabeza agachada y sosteniendo el bolso con la mano temblando.

- ¿Chicos seguro que este es un buen lugar?

Susurre acercándome a ellos claramente nerviosa mirando a los lados moviendo los ojos y levemente la cabeza con una pose avergonzada.

- Es el lugar ideal para "estudiar", cada uno está a su tema, solo nos tenemos que preocupar por el asqueroso elfo doméstico, pero bueno, da un punto de reto al "estudio".- acto seguido le guiñó un ojo a Esther.- vaya, parece que Jackie vendrá más tarde... podemos ir haciendo el calentamiento.- Acto seguido me aclaro la garganta y me siento en una silla.- Cada turno tendremos que hacer un reto sin que el elfo doméstico nos pille. Si nos pilla puede que nos quiten puntos y demás. Los retos tienen que ser arriesgados, ¿qué os parece?

Claro Esther, es un buen lugar, además hacer travesuras en silencio será más estimulante jejejeje.

Avanzo a un lado para que Esther pueda ir en medio de los dos observando a todos los presentes en la biblioteca mientras busco un lugar apartado donde sentarnos pero parece que Frank localizó el sitio perfecto antes que yo. Cojo una silla y dejo un sitio en un lado dejando un hueco para Esther. Me parece bien. ¿Quien propondrá el primer reto?

- Esther está en desventaja, así que puede empezar ella.- dije asintiendo con la cabeza y con cara de malicia.- A ver qué se te ocurre.

Me senté en una de las sillas y deje la túnica y el bolso en la parte del respaldar. Mire a los chicos y escuche de que iba el juego. Tras eso mire hacia abajo.

- chicos según que cosas no digáis nada, si se esparce el rumor y llega a oídos de mis padres son capaces de sacarme de hogwarat y se me caerá el pelo....

Tras decir eso suave y con miedo cuando alce el rostro sonriendo suave. Es entonces que me acaricie la barbilla pensando.

...

Tras pensar durante unos segundos los mire con una sonrisa pícara.

- Ahora mismo estoy en blanco... Id diciendo vosotros para hacerme una idea y luego voy yo. Así que os cedo el turno

Tenia algo en mente pero quería ver que clase de retos mandan ellos antes de decir el mio.

Jum... algo interesante y arriesgado sin llegar a ser algo suicida...

Dame tus bragas, eso si quitatelas aquí sin que te vea nadie aparte de nosotros. Las quiero de recuerdo.

Me sonroje muchísimo y pense como podía quitármelas sin que nadie lo notase, así que, me puse en pie y agarre la túnica, me la puse y me dirigí a una de las estanterías como buscando un libro. Camine entre los pasillos buscando "el libro", volví con el libro (uno cualquiera de historia de la magia) me percate que ya el elfo domestico no esta por ahi cerca. Cuando me vi "sola", en presencia de ellos dos. fue que me quite la túnica para mirar a los presentes compañeros de casa. 

Me sonroje muchísimo y subiendo un poco la falda lleve las manos a las caderas y baje mi ropa interior. Me quite las bragas como dice el reto, de manera tímida y lenta. y con ellas en las manos las olfatee suavemente y me acerque de a Regulus y le di disimuladamente mis braguitas.

- Ten... 

Dije suave susurrando. 

Cuando Regulus las vea puede comprobar que son negras, de tela fina, de alta costura, con algo de encaje. Están muy cálidas y por la parte de la zona intima aun mas estando algo húmedas. Olían exquisitamente bien, a su aroma natural intimo.

Sonrojada me volví a mi silla sentándome y la puse la túnica colgando del respaldar, cruce las piernas aun muy sonrojada.

- Te toca Frank.

Al ver la ropa interior sonrio como un niño el dia de Reyes ante los regalos. Gracias Esther, las conservaré toda mi vida.

Las olfateo y lamo y después las paso por la cara de Frank para a continuación ponerme de pie frente a Esther y guardarlas bajo mi ropa interior permitiendo que se percate de que ya la tengo morcillona. Bufff no sabes como me pones pelirroja.

-Quita eso de mi cara- hago dando una colleja a Regulus pero indolora.- Parecéis unos animales olfateando y lamiendo.- acto seguido asiento con la cabeza.-muy bien, Esther, has pasado tu prueba, ahora puedes pedir que alguno de nosotros dos hagamos otra y puedes elegir qué prueba debemos hacer.- sus ojos inquisidores se posaban sobre la figura de la gryffindor.

-Si no haces una prueba te quitas prenda.- y eso era lo que parecía que iba a tener que hacer, pues besar a un tío me bajaba la líbido que daba gusto. Así que me quité la camiseta, dejando mis abdominales al aire. Esperaba que el elfo no lo viera en esas condiciones. No, no parecía estar atento a lo que acontecía en aquel oscuro rincón.-Me toca. Esther tienes que enseñarnos las tetas a nosotros y a aquellos alumnos de allí durante diez segundos.- ya que apostaba fuerte le iba a dar un poco de su medicina.

En ese momento el elfo doméstico mira y sale corriendo hacia fuera. Al poco tiempo el profesor Snape aparece junto al elfo y mira a los presentes con una mirada inquisidora.

- Vaya, señorito Stylson, ¿podría hacer el favor de ponerse la camiseta? ya conocemos su fuerza lo suficiente como para que la tenga que mostrar... 20 puntos menos para Slytherin... y lo que usted ha hecho no tiene nombre, señorita Von Aur... 20 puntos menos para Gryffindor. Espero que usted no estuviera haciendo nada, Regulus... no es precisamente un ejemplo a seguir.- Acto seguido me doy la vuelta ceremoniosamente.- Quiero tener una tutoría personal con vosotros dos, señorita Esther, usted primero, venga a mi despacho.- Acto seguido comienza a andar hacia la puerta.- Y vosotros dejad de mirar y estudiad, que luego suspendéis los EXTASIS.- dice mirando al asombrado aunque escaso público que lo ha presenciado todo.

Me levanto rápidamente y me interpongo entre el Profesor Snape y mis compañeros. Profesor creo que está malinterpretando la situación. Esther se dió cuenta de que llevaba la camiseta al reves y solo se la estaba poniendo bien.

Coloco mi corbata y carraspeo para aclarar la voz antes de continuar mi discurso. Como comprenderá ninguno de nosotros iba a hacer algo malo en la biblioteca y distraer a los demás estudiantes. Lo que pasa... digo señalando a los idiotas de los silbidos. Es que esos son unos pervertidos que solo ven a las damas como Esther como simples objetos sexuales.

Justo cuando acabo de hablar me giro sonriente hacia mis amigos y veo que se me había olvidado que Frank está tambien sin camiseta. Niego con la cabeza, hago un facepalm y me vuelvo a girar hacia Snape. No, yo no tengo nada que ver con todo esto. ¿Pero... no cree que podemos solucionarlo de otra manera más civilizada?.

Al ver a Snape sonreí un poco pero luego me continué abrochando la camisa algo sonrojada evitando el contacto visual con el profesor de pociones. 

- Profesor... 

Mencioné con un tono de autentico respeto pero con un hilo de confianzas con aquel profesor, cuando dirigí la mirada a Snape y le sonreí suavemente pero pálida. 

Mire a los compañeros y suspire. 

- Prometo esforzarme mas que duramente para conseguir los puntos que nos han quitado... Lo juro. Asi que dejamelo a mi Regulus. 

Les dije seria cuando agarre mis cosas y me fui al despacho del profesor Snape. 

El profesor Snape no parece hacer caso, así que se va junto a Esther.

Ya viene este a cortarnos el rollo.- Profesor... no es lo que parece...- pero no tenía una excusa para poder soltarle, así que me senté y miré a Regulus. Cuando se fueron di un puñetazo en la mesa.- Si no fuera por ese JODIDO elfo doméstico.- dije en voz alta para que se asustara el chivato.- ¿se te ocurre algo para callar a ese imbécil?.- digo, esta vez más contento.

Supongo que a nadie le importaría si un elfo sufriera un accidente. Busco con la mirada al elfo pero al no encontrarlo me señalo al grupo de los silbidos. Tal vez deberíamos empezar por esos idiotas, si no hubieran silbado no habría pasado nada. En fin... agarro el libro más gordote de la biblioteca y me voy en busca del elfo. ¿Que te parece un petrificus totalis seguido de un librus en la jetus? al final solo querán piedrecitas y ninguna prueba.