Partida Rol por web

BUSCANDO JUSTICIA

1 de Noviembre: Domingo por la noche; muelles fríos, plomo caliente

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15/10/2019, 01:00
Misery

El tipo con una “A” en la cabeza quiso confirmar si me refería a mi hija, algo ante lo que no esperó respuesta antes de volver a pronunciarse con una media sonrisa. ¿De qué iba aquello? ¿Acaso dudaba de que pudiera saber algo así? ¿O es que tenía la certeza de que no podía saberlo?

Iba a preguntarle qué quería decir con aquello cuando me preguntó por el encapuchado, insinuando tras ello que debía buscarlo.

Significa eso qué...

Entonces Allan, quien tenía que ser Allan, dio algunos pasos atrás tras comprobar que no venía nadie y se acercó a las baldas; comenzando entonces a hacer unos extraños ruidos. Frunciendo el ceño, aguardé, hasta que finalmente vi que algo se movía. Se me cortó la respiración al ver que era mi pequeña quien movía aquella caja, terminando esta por asomarse y buscar a mi protegido para que la cogiera. Se quejaba con los ojos enrojecidos, pero dándome la impresión de que estaba mucho más tranquila.

Mi pequeña es increíblemente fuerte, y está demostrándolo una vez más.

Con una gran sonrisa en mis labios, di en seguida unos firmes pasos hacia ambos, dispuesta a coger a mi pequeña y abrazarla contra mí; pero me detuve en seco. Una cosa era que Allan supiera quién era, pero mi hija... No, no podía dejar que ella se diera cuenta.

Protegiendo a mi pequeña, y tras compartir unos susurros con ella, el justiciero me puso al tanto de cómo estaban las cosas. Al parecer la salida que había abierto el arquero estaba llena de matones, estando también vigiladas las salidas de emergencia y de personal. Se me aceleraba el corazón hasta que añadió que había dado con otra alternativa, pidiéndome ayuda para poder tomar ese camino, a mi y al arquero.

- Cuenta con ella. - le dije estrechando su mano con firmeza, tratando de poner un acento británico que mantendría a partir de entonces, siendo aquello lo mejor que se me ocurrió para camuflar mi voz sin llamar excesivamente la atención. - Dame un segundo. - le pedí al soltarla, enfundando los bastones.

Dediqué una última mirada a mi niña y me acerqué a una de las estanterías. Con gran agilidad, trepé por esta hasta poder alzar mi mirada por encima de todo lo que se amontonaba en aquel lugar, tratando de buscar al encapuchado.

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18/10/2019, 12:04
. Twoface

El silencio es la única expresión que el delincuente muestra mientras el justiciero habla. Es uno de los inconvenientes de conversar con alguien que cubre su rostro con un casco, el no poder evaluar sus gestos y miradas, conocer la expresión que denotan sus rasgos. No, el líder de esa panda de matones aguarda en silencio a que el "irlandés" termine de hablar, antes de replicar.

Ya veo. Así que estamos negociando... -Indica, alzando su rostro como si observase desinteresadamente el techo del almacén- Me gustas, irlandés. -Afirma señalando a Montaraz con la punta de su espada- Tienes huevos, y sabes defenderte. Además, me diviertes. No se por qué tanto interés por la niña, pero eso es lo de menos. -La hoja de la espada traza un giro veloz, volviendo a apuntar al suelo- Al fin y al cabo, se que no me lo vas a contar, del mismo modo que yo no voy a hablarte de mi patrón. Somos profesionales, ¿verdad? -Expone con cierta sorna, dejando entrever que no le considera un igual en ese sentido- Bueno, yo diría que en esta hipotética negociación parto con cierta ventaja. Soy yo quien tiene  la niña, además de muchos más efectivos que vendrán hasta aquí corriendo con sólo dar un grito. Parece que has perdido tu arco, una lástima, así que tienes una espada para enfrentarte a demasiada gente armada. Aún así, quisiera valorar tu oferta. Hablas de un "punto neutral" donde dejar a la niña... ¿En qué estabas pensando?

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18/10/2019, 12:18
# MUELLES DE METRO CITY

Las manos de los dos justicieros se estrechan con firmeza, una muestra de acuerdo y compañerismo del que es esperanzado testigo la pequeña Lis, quien aparta brevemente su rostro del pecho de Armour para contemplar ese importante gesto, antes de hundirse de nuevo en un abrazo con el soldado enmascarado.

Éste observa con atención cómo la justiciera enfunda sus bastones y trepa ágilmente por la torre de almacenaje, tardando pocos instantes en alcanzar su cota más alta. Se trata de una posición elevada desde la que poder buscar, y es lo que hace con celeridad y urgencia. Sus ojos ven movimiento por el almacén, pero afortunadamente en puntos lejanos, lo que les deja bastante margen de movimiento. Además, no tarda en localizar a quien está buscando, aunque eso le devuelve los nervios.

Montaraz se encuentra a dos pasillos de distancia, y no está sólo. A sus pies yacen dos matones, muertos o inconscientes. Pero varias decenas de pasos por delante de él se encuentra el líder de la banda, con una espada en la mano. Parecen estar hablando, aunque Misery está lejos como para oír la conversación.

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22/10/2019, 23:57
Misery

Me hubiera gustado que fuera en mí en quien se refugiara Liss, pero aquello no podía ser, y saberla a salvo tuvo que ser suficiente para mí. Era lo mejor para ella, y además, sabía que estaba en buenas manos.

Tras estrechar la mano del justiciero, me dispuse a trepar para localizar al encapuchado. No me costó hacerlo, detectando pronto movimiento desde la elevada posición que tomé. Pude mantenerme tranquila al ver que la actividad se encontraba en puntos lejanos a nosotros, pero al continuar con la inspección de la nave en busca del encapuchado, le vi a apenas dos pasillos, pareciendo hablar con el líder de aquel grupo de malnacidos. Se encontraban a varios metros de distancia, pero aquello no impediría por mucho tiempo que la espada de aquel despreciable tipo alcanzara al encapuchado si así se lo proponía, después de todo, contaba con un ejército de matones a sus órdenes.

Inquieta, bajé con celeridad, dejándome caer el último tramo. Al dar con mis pies en el suelo me erguí en seguida y me dirigí a Allan.

- El arquero no está lejos de aquí, hablando con el jefe de todos estos, dudo que continúen mucho más hablando. - señalé con preocupación. - Si no podemos sacar nosotros solos a la niña, será mejor que solucionemos eso antes. - dije con firmeza. - Iré yo. Seguramente no pueda hacer demasiado contra alguien armado hasta los dientes, pero al menos serviré de distracción. Tú quédate protegiéndola, ¿de acuerdo? - le pedí, acariciando el cabello de mi pequeña un instante. - Eso es lo más importante, protegerla.

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26/10/2019, 17:15
Montaraz

Parece que no ve mal del todo la opción de negociar. Debo ser rápido y no meter la gamba, si hay suerte la pelirroja me echará un cable.

- Estaba pensando en un sitio donde no conozcan a la niña y donde pueda permanecer unos días sin peligro...hasta que logréis vuestro objetivo. Por ejemplo fuera de la ciudad... - hago una pausa y añado - ...fijo que controláis las comunicaciones de la pasma, y puede que hasta las tengáis intervenidas. Así que si intentan hablar con la pasma de la ciudad vosotros podréis contestar...Ella está a salvo, vosotros no perdéis vuestra ventaja y yo me puedo volver a casa a beberme una pinta de Guinness.

Miro a mi arco y comento:

- La cuerda está rota, tardo poco en cambiarla y poder seguir disparando. Mi espada está afilada y aún me guardo unos cuantos trucos bajo la manga y alguno de ellos explota. Es probable que pierda antes tus hombres al final, pero me llevaría a unos cuantos por delante. Saldría caro a la larga...

Intento fijarme en sus ojos, aunque a la distancia a la que estoy no me permitirá ver demasiado. Pero es lo único que puede decirme acerca de qué piensa. Es un profesional y yo no lo soy, él tiene más hombres y yo a una pelirroja que no sé si está viva o muerta. Ellos están más frescos y yo cansado. A la larga esto no pinta bien y los faroles es mejor dejarlos para el póquer pero ahora tuve que lanzar un buen órdago y esto no tiene pinta de mus.

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28/10/2019, 12:47
Armour

La mujer descendió tan rápidamente como había ascendido a aquella posición elevada. Demostraba agilidad, seguramente el motivo por el que había logrado llegar tan lejos. Mientras la observaba, sentía el modo en que la pequeña Lis se abrazaba a mi cuello, necesitada de sentirse segura. En aquellos momentos, después de haberla tomado entre mis brazos aprovechando la distracción que aquella explosión había supuesto, la niña se aferraba a mí como a la única oportunidad de regresar a casa. Era fuerte, era valiente, pero tan sólo era una niña. ¿Qué clase de monstruo hacía pasar por algo así a una niña inocente? ¿Qué diablos le pasaba a la ciudad?

Una vez en tierra, la pelirroja ofreció un informe de situación. Su amigo no estaba lejos, viéndose las caras con el líder de aquella banda, por el momento sin pasar de las palabras. Aquello no duraría mucho, así que ella acudiría a ayudarle. Yo me ocuparía de mantener a salvo a Lis hasta que ellos pudieran unirse a mí. En algo estábamos de acuerdo: lo importante era ella.

Sí, señora. -Indiqué llevándome una mano al casco, trazando un saludo militar mientras mostraba una sonrisa llena de seguridad- ¿Ve aquel foco de allí? -Pregunté señalando el lugar, un gran foco industrial a mitad del almacén- Aguardaré por allí, la zona estaba más despejada cuando vine hacia aquí. Sin embargo, tenga en cuenta una cosa: en algo estamos de acuerdo. La seguridad de esta señorita es lo único importante. Si veo una oportunidad, no esperaré. -Le advertí, perdiendo la sonrisa- Hay una madre aguardando a tenerla en sus brazos.

Tras aquellas palabras, me giré y comencé a correr con Lis entre mis brazos, procurando resguardarme y mantenernos lo más ocultos posible.

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28/10/2019, 13:03
. Twoface

Mientras Montaraz trata de ganar tiempo, si no convencer completamente al líder de los delincuentes, su mirada oculta bajo la capucha de su uniforme logra vislumbrar algo importante a espaldas de su rival. A lo lejos, desde detrás e unas cajas de madera amontonadas, puede ver asomar a la justiciera con la que ha entrado en el almacén. La pelirroja permanece escondida, en silencio, ajena a los sentidos del desconocido del casco bicolor.

Un lugar fuera de la ciudad, donde la niña esté a salvo lejos de nuestras manos pero su liberación no alertase a sus familiares... Debo suponer que se te ha ocurrido un lugar que reúna tan peregrinas características, ¿no? Porque, sinceramente, a mí no se me ocurre absolutamente nada similar. -Argumenta el hombre con su voz distorsionada por hablar desde el interior del casco- Además, seguiríamos teniendo un problema. Tú sabrías que está allí, y ¿cómo sabría que no informas a nadie de ello? Después de todo, ni siquiera se quién eres... ¿O acaso piensas desvelarme tu identidad si sellamos ese trato?

El tipo se mueve un par de pasos hacia un costado, meciendo la hoja de su espada adelante y atrás, con suavidad.

Nah, no lo creo. ¿Sabes lo que creo, irlandés? Que sólo quieres ganar tiempo. -El hombre se detiene y alza la otra mano, señalando a Montaraz con un dedo oscilante- Sí, eso debe ser... Tu arco está jodido, y no tienes tiempo de repararlo por mucha cuerda que tengas. Cuentas con una espada, como yo, pero mis hombres y yo tenemos suficiente munición para librar una pequeña guerra. ¿Explosivos? Otro farol, probablemente, y aunque no fuera así nosotros también tenemos granadas. No puedes ganar, pero tampoco huyes, así que... No estás sólo, ¿verdad? -Casi parece oírse la risita del enmascarado bajo el casco- Tratas de hacerme perder el tiempo para que otros terminen el trabajo, ¿no es así? No importa, en realidad. Mi gente se encargará de tus amigos, y yo de ti... -Afirma de forma amenazante, adoptando una postura marcial con la espada apuntando en dirección al arquero.

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01/11/2019, 01:18
Misery

Por fortuna, el justiciero se mostró en seguida de acuerdo con lo que le proponía, demostrándolo de aquella forma tan particular; tan militar. No había tiempo que perder, y ambos parecíamos tener claro aquello. Compartió conmigo hacia dónde se dirigiría, pero también quiso hacerme una advertencia, tras dejar claro que la seguridad de Liss era lo más importante. Su determinación por sacar a mi hija de allí a la mínima oportunidad no sólo me agradó, sino que me procuró algo de alivio. Sin embargo, su mención a la madre que esperaba a la pequeña supuso un golpe para mí.

Mostré una pequeña sonrisa con un asentimiento de cabeza, un gesto que desapareció de mi rostro en cuanto Allan dio media vuelta y comenzó a alejarse. Aquella pequeña, mi pequeña, no tenía a su madre simplemente aguardando. Estaba allí, y era muy consciente de que como las cosas continuaran complicándose, mi hija podría no encontrar a su madre al regresar a casa.

Pero aquel tan sólo era el peor de los escenarios, no el único, así que agité mi cabeza; tratando de no pensar en eso. Aquella ciudad ya había arrebatado a Liss uno de sus padres, y sabía Dios que combatiría hasta mi último aliento porque no perdiera al otro.

Comencé a avanzar hacia el lugar en el que el arquero y el líder de los matones se encontraban, escuchando cada vez con mayor claridad a este último. El encapuchado parecía haber ofrecido alguna especie de trato al tipo del casco, pero este no estaba dispuesto a aceptar. Sospechaba, de manera acertada, que el arquero no estaba solo y que tan sólo trataba de ganar tiempo. Ese tipo parecía alguien inteligente, lo cual no era de extrañar, y es que aunque su plan fuera más que maquiavélico; había logrado llevarlo demasiado lejos.

Pero eso se ha acabado.

Había pasado de largo al encontrarme ya cerca del encapuchado, avanzando por los pasillos tratando de no ser vista, con la intención de rebasar al líder de los matones; y poder así aparecer a su otro lado. Lograba terminar de posicionarme cuando le escuché decir que se encargaría del arquero. Me asomé, viendo cómo el terrorista adoptaba una pose ofensiva, y salí de mi escondrijo para situarme a pocos metros de su espalda; empuñando mis bastones.

- Tiradas (1)
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01/11/2019, 20:58
Montaraz

Miro hacia el encapuchado y sonrío. Parece que mi táctica de ganar tiempo ha llegado a su fin.

- Tenía pensado en un hospital la verdad o un psiquiátrico...y yo no diría nada. No valdré mucho pero mi palabra tiene peso...pero creo que tú has decidido por una tercera opción. La opción del samurái, más honorable si cabe...pero también más sangrienta. 

Blando mi espada y realizo un par de filigranas con ella. 

- Seguramente eres muy bueno con ese arma, tendré que dar lo mejor de mí...y de estilo. He crecido viendo a los mejores espadachines del mundo, espero que algo se me haya pegado de sus trucos...

En mi cabeza empiezo a recordar los trucos clásicos: cegar con un reflejo de la espada, lanzarle algo a la cara mientras le pego una patada en los huevos y un largo etcétera que tendré que utilizar. Aunque siempre puedo tirarme un último farol y tratar de evitar la pelea.

- Y yo que pensaba que querías ficharme para tu superequipo de villanos...no me habría ido nada mal el dinero la verdad. Lo de cazar por las noches no da mucho dinero...

Si con esto no lo logro tocará pelear, por si acaso adopto una posición defensiva para evitar su embestida. Su primer ataque será seguramente brutal y fuerte, tendré que tener cuidado y esperar mi oportunidad. Posee más armadura que yo, más fuerza pero también maneja más peso. Su movimientos no son fluidos y los giros cerrados seguramente fuercen mucho sus rodillas, no creo que tenga la velocidad ni agilidad para hacer que se rompa los ligamentos pero sí para que me dé alguna oportunidad de ataque.

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05/11/2019, 10:39
. Twoface

El secuestrador adopta una postura extraña, para alguien que maneja una espada. Firme en su sitio, con los pies demasiado juntos, se ladea ligeramente y muestra su espada extendida hacia su objetivo, el antes arquero Montaraz. Más concretamente, hacia sus pies, con el arma demasiado bajo para la mayoría de estándares esgrimistas. De hecho, desperdicia una mano dejándola demasiado atrás, de un modo similar a la esgrima clásica pero carente de la búsqueda de equilibrio que con ella se busca.

¿Has terminado de hablar, irlandés? Porque tengo una ciudad que hacer caer...

- Tiradas (1)

Notas de juego

Iniciativa, y el que saque mejor tirada que él puede actuar directamente.

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05/11/2019, 21:10
Misery

Asistí a los últimos momentos de la conversación entre aquellos dos tras el tipo de la rígida máscara. Este no pareció darse cuenta de mi avance, ni de haberme posicionado tras él, lo cuál podía llegar a suponer una ventaja; pero aquello no haría que me confiara.

Éramos dos, aquello era cierto, pero el líder terrorista contaba con equipo más que de sobra para hacernos frente sin acercarse; además de un grupo de esbirros que podían acudir a la zona en cualquier momento.

El encapuchado tomó una pose defensiva tras su intervención, momento en el que el tipo del casco dejó claro que estaba cansado de hablar, tenía prisa.

Prisa por hacer caer la ciudad.

Mis manos, armadas con los bastones, apretaron estos con mayor fuerza. Metro City llevaba tiempo siendo afectada por un virus que no dejaba de multiplicarse y propagarse por toda la ciudad, lo último que le faltaba es que un gusano como aquel irrumpiera en la metrópoli para terminar de destruirla.

No tenía claro qué hacer, pero tenía claro que debía hacer algo. Por la ciudad, y sobre todo, por mi hija.

- Tiradas (1)
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08/11/2019, 19:50
Montaraz

Suspiro ya que va a empezar el combate. Adopto una posición defensiva y me preparo para el ataque, su posición no es estándar así que antes de empezar el combate le comento:

- Veo que no soy el único que aprendió de una manera diferente la esgrima...y cuando quieras, espero no defraudarte en la batalla.

He intentado evitar la confrontación pero ya no hay vuelta atrás, mi idea será esquivar sus golpes y lanzar una estocada certera. No necesito más que un buen golpe para poder derrotarlo, pero también no necesita más que uno bueno para mandarme al otro barrio así que toca ser un poco más conservador que lo normal.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Lo que se dice rápido no estoy.

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09/11/2019, 18:23
. Twoface

Un sutil cambio de posición del casco del hombre hace sospechar a ambos Justicieros. ¿Ha oído a Misery, a su espalda? Si lo ha hecho, no hace mención a ello, ni se gira para enfrentar a quien se mueve a su espalda.

El delincuente no tarda en reaccionar, pero sin dejar de prestar toda su atención a "el irlandés", como él lo ha bautizado. Apenas tiene que flexionar ligeramente sus rodillas, y antes de que el arquero pueda darse cuenta, el terrorista se abalanza en su dirección a una vertiginosa velocidad, con la espada ante él a la altura que la ha mantenido en su postura de guardia. Montaraz no tiene apenas tiempo para reaccionar, más allá de tratar de evitar que aquella hoja siegue su vida. Cuenta con el chaleco antibalas que se ha colocado bajo su uniforme, pero no es su intención confiar en ese tipo de protecciones. Demasiado bien sabe que un arma como la que el enmascarado porta bien es capaz de superar algo así.

Blande su propia espada en un intento de detener o, como mínimo, desviar la espada enemiga. Ésta traza media circunferencia con la punta pegada al suelo, antes de hendir el aire en dirección a un costado del otro espadachín. Ambas espadas chocan con un sonido metálico, antes de separarse, girando el terrorista sobre sí mismo para mantener la guardia frente a Montaraz, desde la posición en que tan sólo hace un instante estaba su espalda. Vuelve a situar la espada ante él, y su casco se tuerce en dirección a Misery, a quien observa sobre el hombro de Montaraz.

Veo que una amiga tuya ha decidido unirse a la fiesta... Bien, os daré unos segundos de ventaja, antes de dar aviso a mis hombres para que vengan a por ella. Pelirroja... estarán encantados de conocerla.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Twoface (3 AxA):
1- Acción de movimiento para alcanzar a Montaraz
2- Ataque con espada: fallo
3- En reserva (Esquivar)

INICIATIVA
Twoface (-21)
Montaraz (-34)
Misery (-37)

*El +25 es la Parada de Montaraz, que aunque en el manual habla de aplicarlo en combate cuerpo a cuerpo, entiendo que es aplicable en el uso de armas blancas siempre que ambos contendientes cuenten con armas de ese tipo que emplear para bloquear y obstaculizar el ataque contrario. El terrorista tiene una Parada de 43, por si queréis aplicarlo directamente a vuestras tiradas.

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14/11/2019, 08:26
Montaraz

El cabrito se lanza a por mí...con lo que pudimos haber formado junto. Su primer ataque es tosco pero efectivo por suerte no acierta a perforarme en su primer ataque. Se ha movido demasiado rápido para mi gusto, el combate tiene que ser corto si no ganará. Su condición física es superior a la mía al igual que su destreza, ya que parece estar mucho mejor entrenado que yo (lo cual es lógico si es un mercenario).

Lanzo dos estocadas intentado impactar aunque sea de refilón, pero en ambos casos mis ataques son nulos. Su defensa con la espada es muy efectiva. Demasiado para mi gusto, por si acaso decido alejarme un par de metros para medir mejor la distancia y tener tiempo de prevenir y evitar el ataque. 

- No eres manco la verdad... - le comento - Es una pena que un combate de estas características tengamos que librarlo aquí, preferiría que fuera a la luz de la luna. Tendría un toque más personal...y sin molestias de última hora. ¿Por qué no te olvidas de la pelirroja y subimos a la azotea? Un uno contra uno como los duelos de antes...los de verdad.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Primer ataque: fallo

Segundo ataque: fallo

Me guardo la tercera acción para esquivar.

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16/11/2019, 01:30
Misery

Tan sólo fue un leve movimiento, pero me dio la impresión de que el líder de aquellos indeseables se había percatado de mi presencia. Aquel tipo no sólo era peligroso por ir protegido y armado hasta los dientes, un mindundi cualquiera no había sido capaz de organizar todo aquello, pero además daba la impresión de estar más que acostumbrado a arreglárselas por su cuenta.

El duelo de espadas no tardó en dar comienzo. A pesar de su fallido ataque, nuestro adversario logró cambiar de posición durante la contienda, de manera que terminó teniéndonos a ambos frente a él; perdiendo así la ventaja que podría haber tenido. Tras parecer mirarme, empezó a hablar sobre mí, diciendo que nos daría ventaja antes de pedir a sus hombres que fueran en mi busca; dejando caer lo que podría sucederme si sus esbirros acudían.

Mentiría si dijera que no temía algo así, pero también sabía que no les sería tan fácil darme alcance. Por muchos que fueran, por muy armados que estuvieran, aquel lugar resultaba idóneo para poder huir y esconderse en el peor de los casos.

El encapuchado trató de hacer frente al tipo del casco, pero no tuvo suerte. Tras ello pretendió alejar a aquel desgraciado y sus secuaces de mí por medio de la palabra, pero ya era tarde para eso, el del casco había dejado claro que se había cansado de hablar.

Me apresuré en dirección al líder de aquella gentuza para darle alcance, dispuesta a hacer uso de aquel prototipo creado por mi padre. Intuía que poco podría hacer con aquellos bastones en un principio, pero si lograba emplearlos el tiempo suficiente...

- Tiradas (1)

Notas de juego

Misery (3 AxA):
1- Acción de movimiento para alcanzar a Twoface
2- Ataque con bastón: fallo
3- En reserva (Esquivar)

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18/11/2019, 11:54
# MUELLES DE METRO CITY

Las armas están en todo lo alto, prestas a competir en una danza por la vida y la muerte. El primero en actuar es el terrorista, quien ejecuta un rápido movimiento que Montaraz es apenas capaz de evitar en el último instante. Trata el esgrimista, pues no es únicamente el talento de arquero lo que destaca en el justiciero, de devolver el golpe con dos buenas estocadas, que sin embargo el delincuente logra evitar, como lo hace también con el ataque sorpresa que le lanza Misery con su bastón.

Y entonces, todo se detiene. Los tres contendientes, lejos de arrojarse a las salvajes aguas turbulentas de una lucha sin cuartel, se muestran conservadores y comedidos, preparándose antes para evitar los ataques de su rival que para embestirle. Y durante unos instantes, los tres parecen congelados, observándose entre ellos.

Notas de juego

Como todas las acciones reservadas eran para esquivar, y no se ha producido ningún ataque, se pierden

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18/11/2019, 12:00
. Twoface

Me complace encontrar rivales a mi medida, aunque esperaba un poco más de... honor. -Indica el terrorista desde debajo de su casco, sin perder su postura defensiva. Su casco se ladea ligeramente, pareciendo que clava su mirada en Misery durante unos instantes- Vamos a darle un poco de emoción a ésto...

Diciendo esas palabras, desenfunda su pistola con la mano libre y apunta a la justiciera pelirroja. Parece que vaya a dispararla, pero en el último instante alza la pistola hacia el techo del almacén y dispara al aire.

¡AQUÍ! -Grita con fuerza, bajando de nuevo su arma, pero sin enfundarla- Supongo que podéis quedaros a intentar terminar el trabajo... si es que os veis capaces de derrotarme antes de que lleguen mis hombres...

Notas de juego

Twoface (3 AxA):
1- Disparo al techo
2- En reserva (Esquivar)
3- En reserva (Esquivar)

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24/11/2019, 14:22
Montaraz

- Eso sí que no me esperaba... -  digo riéndome mientras lanzo un ataque contra él lanzando dos tajos fuertes contra su cuerpo mientras me preparo para hacer una salida digna de cualquier villano de película si las cosas se ponen feas - Coge a la cría y sal cagando leches...

Le lanzo dos ataques oblicuos cortantes intentando que su defensa no sea tan efectiva, luego intento interponerme entre él y ella para que no pueda atacarla si ella sale corriendo. Dicen que el héroe se sacrifica siempre por salvar a la chica. Bueno espero salir de esta sin morir, le tengo cierto aprecio a mi vida si soy del todo sincero.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Guardo mi última acción dependiendo de lo que haga Misery.

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25/11/2019, 11:37
Misery

Aquel enfrentamiento comenzó sin demasiado fuste, con embistes que no llegaban a nada y terminando los tres por quedarnos mirándonos, quizás en un exceso de precaución por nuestra parte que no podía continuar siendo tal; debíamos acabar con aquel malnacido.

En otras circunstancias, me habría echado a reír al oír al matón hablar de honor, pero había demasiado en juego. Supuse que aquello hacía referencia a que éramos dos contra uno, aunque no parecía que aquello supusiera demasiada dificultad para él.

Tras quedarse mirándome, habló de darle emoción al asunto y tomó un arma de fuego. Por un momento pensé que me dispararía, pero aquella no parecía ser su intención, disparando al techo y alertando a sus hombres. Con aquello, el muy malnacido parecía pretender que huyéramos, algo que el encapuchado también dejó claro que quería que yo hiciera tras volver al ataque. Pero él no lo entendía, no había podido explicarle la situación. Huir no era una opción.

Si parte de los matones vienen hacia aquí, quizás Allan encuentre la oportunidad de escapar con mi pequeña...

Aún confiaba en poder hacer caer al líder de esos indeseables y poder ir a ayudar al justiciero, así que lejos de limitarme a esperar, me lancé nuevamente a golpear al tipo del casco. Sin embargo, mis fluidos movimientos no lograron alcanzar al matón, perdiéndose mis golpes en el aire.

Estimé que mis bastones debían estar ya casi cargados, con lo que antes de que ese psicópata pudiera reaccionar me apresuré a buscar algo con lo que poder cubrirme: la esquina de una de esas estanterías, cajas apiladas, lo que fuera.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Misery (3 AxA):
1- Ataque con bastón: fallo
2- Ataque con bastón: fallo
3- Cubrirse

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25/11/2019, 12:09
Montaraz

Viendo que la justiciera decide atacar al villano no queda otra opción que apoyarla, había estado esperando el momento oportuno. Lanzo una patada a su pierna para intentar desequilibrarlo. Mi idea es sencilla pero viendo que con la espada es bueno y que esquiva bien toca hacer algo diferente. Mi patada es un intento de golpe seco a su pierna de apoyo a ver si con eso logro algo aunque tengo mis dudas.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Última acción: Patada