Partida Rol por web

Mientras caminabamos al segundo nivel me hicieron llegar mi caballo con el que segui a mis compañeros sin dificultad, mire extrañado ante el ofrecimiento del brebaje, no creo que nadie me culpe por ser precabido despues de todo lo que hemos pasado.

- Preferiria ir primero a la herboristeria, nos vendrian bien algunos remedios ya que parece que nos enfrentamos a una enfermedad ademas de a los lobos de harad.

Cuando llego hasta ellos desmonto y guio al caballo por la ciudad a pie, quizas deberia llevarlo a los establos mientras estemos aqui...

Ante todo y sobre todo, una vez que maese elfo esta en buenas manos, compruebo de un vistazo que mis compañeros, se hallan en buenas condiciones.
Y nada mas mirar las caras de Soov y Felgor, me giro hacia la dama sanadora y digo.
Soy un viejo caballo de guerra mi señora. Otros aquí necesitan de sus cuidados antes que yo. Por tanto, no negare que agradeceré un vistazo de vuestra parte en el caso de que lo creáis necesario, pero de ser así, seré, sin duda, el ultimo de vuestra lista.
Tras estas palabras, vuelvo a girarme inclinando un poco la cabeza pues maese mediano me interpela.
Asiento tras escucharle y añado.
Naturalmente. De hecho, me ofrezco voluntario para cargar con todo lo que podamos hallar que pueda resultar útil a cualquiera de los presentes. Y mi consejo es, ante todo, empezar por la armería. Quisiera veros, lo antes posible, adecuadamente equipados para el combate.
Callo entonces volviendo a pasear mi mirada por los rostros de mis compañeros por si alguno, quisiera unírsenos a maese mediano y a mi.
Y aprovecho el breve silencio para un ultimo comentario.
Y en cuanto todos estemos listos para la acción de nuevo, recomiendo hacer una visita a nuestro particular posadero. Creo conveniente salir de dudas lo antes posible sobre su implicación, en nuestro arresto.
Y el fogonazo de furia que ilumina brevemente mi mirada, no presagia que ese hipotético interrogatorio, vaya a ser "suave" precisamente.

Bueno te acompañare a la armeria luego ire un momento al herborista si eso. "Una planta curativa podia ser util en algunas situaciones al igual que un veneno dado mi tamaño podia ayudar." Armas no es que fuera mi fuerte, aparte tras conseguir el escudo estaba contento, pero no pasa nada por hechar un vistazo. Mientras sigo a Eldecar, voy tras de el asi me evito choques molestos el abria mejor el camino que yo.

Te sigo Eldecar. Le comento. No me pises estoy tras de ti ja.

¿deja de midad ezaz cosas no toques lo qeu quieras me lo pidezzz y ya te lo daré yo.

me han dicho que lleve un regrizzto de todo lo que quieran pedidme

¿deja de midad ezaz cosas no toques lo qeu quieras me lo pidezzz y ya te lo daré yo.

me han dicho que lleve un regrizzto de todo lo que quieran pedidme

Soov, no te me escapes, te tomarás este tónico si o si. esa tos no me gusta nada.

Perdoneme maese Oldrich, teneis razon. Le pido disculpas al tipo de aspecto extraño. ¿Podriais darme ese escudo que teneis ahi? A cambio dejare el mio hasta devolverlo. Indicando el escudo que habia visto que parecia bastante bueno.

"La verdad que luce mejor que esta tartana que habia conseguido en el combate de antes." Me digo al ver el otro escudo.

Soov miró con desconfianza el brebaje que le tendía Bridia pero lo tomó en la mano. Se lo acercó para olerlo, y el aroma no le convenció en absoluto. De estar solo lo hubiese vertido en cualquier lugar, pero estaba frente a una mujer y tenía una reputación que mantener, de modo que haciendo un esfuerzo se lo bebió de un trago, tropezones y todo.

Soltó un Aaaaaaah Ser un poco suave, necesitar algo más fuerte. Vamos a taberna, rondas correr a costa de Ragalth. Mientras soltaba el vaso de madera aporreandolo contra una mesa. Apoyando su mano izquierda (la buena) sobre el hombro de la mujer le dijo Gracias por reconstituyente. Pero deber partir, compañeros necesitar. Puede que ver más adelante. Adiós. Y se encaminó junto con Felgor con porte guerrero hacia su siguiente objetivo: Las cuadras.

- Yo teniendo mis pertenencias y dinero para beber tranquilo una buena pinta me basta. - digo desechando la idea de coger armamento. Pero os ayudaré a cargar con el equipo que necesiteis. De lo contrario Eldacar y Erethor acabaran deslomados dado la naturaleza del resto del grupo. - comento divertido.

Luego miro a la dama que nos habla.

- No os preocupeis por mi. - le digo. He dormido en sitios peores y he salido indemne de ellos.

Una vez dentro de la armería, tras un corto trayecto, examino en silencio las panoplias de armas hasta que me dirigen la palabra y me giro para echar un vistazo a mi interlocutor.
Y digamos que lo primero que hago, nada mas verlo, es callarme.
Y sigo callado un segundo recurriendo a mi compostura hasta que por fin, digo.
Mi vieja espada, esta ya demasiado mellada por años de servicio. Ha sido necesario reforjarla mas de una vez. Solicito, pues he recibido el permiso adecuado, una hoja nueva. Realmente, quisiera que todos mis compañeros tuvieran acceso a lo mejor que puedas ofrecerles.
Y dicho esto, callo pues poco falta para que se me escape, cierto sonido cavernoso.

Para los que se acerquen a la armería para rebuscar una arma a dos manos una contundente una arma de asta arcos flechas hay de todo solo han de preguntar, y si lo hacen os contestará Oldrich

me han dicho que lleve un regrizzto de todo lo que quieran, pedidme, Si zolo quieren que les afile y remache ze laz tendez en unaz horaz.

- Por todos los dioses. - digo al ver esa cosa que hay en la armería. No me extraña que el tal Harad ese esté atacando constantemente la Ciudad. Con los especímenes que hay por aquí ...

Reedie fue a la Herrería en busca de una espada a dos manos. Oldrich (patán) dijo para sí mismo. ¿No tendréis una buena espada a dos manos o afilar esta?

Maese armero por curiosidad ¿Sabeis si alguien ha vendido un numero grande de armas recientemente, algo que no fuera habitual?. Pregunto a nuestro bien parecido amigo, la verdad que era el tipico que no me lo querria encontrar en la calle de dia, en Hobbiton se contaban historias sobre monstruos mas bellos que esa joya que tenia delante. "Quizas si no vendio las armas igual sabe de alguien que lo haya podido hacer". Si no conseguia nada el siguiente paso seria volver a la taberna de Ragalth, preguntarle por el tipo muerto que sabia y las pertenencias del mismo a lo mejor en ellas encontrabamos algo que pudiera servir.

En verdad que ese tío parecía tonto del todo y su coeficiente no creo que sea muy superior al de un perro así que decido no perder más el tiempo y me encamino en busca del prisionero. Seguro que soy capaz de hacerle cantar donde están sus compañeros.

Reedie primero deja el arma para que se la afilen (espada bastarda) y luego pregunta a la curandera si conoce algo acerca de los lobos