Partida Rol por web

El tiempo era clave si quería salvar la vida de Archie. Robert sacó apresuradamente otra botella de suero fisiológico, rápidamente se limpió algo las manos, y escarbó en el botiquín hasta obtener una jerinja con calmante ya preparado y se la inyectó al soldado en el brazo. Esperaba que ésto le relajara lo suficiente para no entorpecer la tarea que tenía que realizar. Localizó unas pinzas en el botiquín, y después introdujo las manos bajo la piel desgarrada de archie, y más con el tacto que con la vista localizó los vasos que más sangraban y los fue cerrando. Eso le daría algo más de tiempo. Entonces se tomó un momento para observar la herida de entrada de la bala y se dispuso a intentar extraerla y cerrar la herida.

Richard aún muy drogado por los sedantes se fijó en como la figura del sargento SInght caia al suelo desplomada, como sin vida, pero Wayne no se percató de esto ultimo, asi que todo lo que salio de su boca con voz muy apagada y ronca fue

Singht, ¿estás bien?

Robert se afanaba en sanar a Archie, pero su herida era muy grave y requería tiempo. Un tiempo que en aquella situación era escaso, el peligro no había pasado, y ahora había caido el sargento. Los alemanes habían dejado de disparar y eso podía indicar que estaban tomando posiciones para asaltarlos, pero Robert estaba demasiado concentrado en su tarea como para darse cuenta.

De pronto dos disparos sonaron muy cerca. Robert se alarmó y se volvió rápidamente a su espalda, de donde provenía el ruido, y allí vió a Ted de pie que acababa de disparar su fusil sujetándolo con un solo brazo, ya que tenía el otro malherido. Robert se giró hacía donde apuntaba el arma, que era frente a él, y allí vio caer a un soldado alemán que cuchillo en mano se dirigía hacía el médico.

En el rostro de Ted aparecía reflejado el horror que sentía de haber matado a una persona. Cosa que nunca había hecho. Pero rapidamente su gesto cambió y se volvió serio e intimidante.

Robert, encargate de ellos, voy a ver si queda algún alemán más. Dijo decidido, y tras buscar covertura en un árbol comprobó que no hubiera ningún alemán más acechando.

Gracias tío, me has salvado la vida. Luego te miro el hombro, pero ahora estoy muy ocupado - dijo robert y volvió a concentrarse en lo que estaba haciendo. Siguió intentando cortar hemorragias aquí y allá y en su cabeza dudó si serviría para algo. El peligro de infecciones siempre era muy alto cuando se trataba de heridas que afectaban al sistema digestivo y allí en medio del campo... Aún así siguió trabajando y puso todo el cuidado en hacerlo lo mejor posible.

Unos minutos después, Robert terminaba su trabajo con las herida de Archie y vendaba la zona para evitar que la herida se abriera de nuevo. Archie había perdido mucha sangre y estaba muy debilitado, no era seguro que sobreviviera a aquella herida. Wayne por su parte no sentía ningún dolor gracias al calmante pero tampoco podía hacer mucho más que permanecer tumbado. Su herida también era fea aunque tenía más posibilidades de sobrevivir que Archie.

Ted apareció de nuevo, salpicado de sangre en la cara y el cuerpo.

He rematado a un par de alemanes que habían sobrevivido a los disparos del sargento. Lo miró apenado.Parece que no hay nadie más por aquí. ¿Qué tal vas con Archie?

Ted se acercó hasta el lugar donde se encontraba tendido el sargento, al pasar junto a Wayne se detuvo para mirarle a los ojos.

Tranquilo amigo. Le dijo. Saldrás de esta. Te quedará una fea herida en la cara, pero saldras de esta.

Después fue hasta el cuerpo inerte del sargento. Lo examinó con calma, y descubrió que por su frente manaba sangre de alguna herida en su cabeza.

¡Robert! Exclamó agachado junto al sargento. ¡Aún respira!

La leve linea entre la vida y la muerte se hacía más delgada aún mientras pasaban los segundos. La inconsciencia quería ganar terreno, Archie luchaba, pero poco a poco iba perdiendo. En un ultimo supremo esfuerzo largó una carcajada.

Una cicatriz fea? Solo fea? Entonces tal vez quedes mas guapo Wayne!

Su risa fue cortada por un vómito de sangre que llegó a su boca. La última cosa que recordó ver eran unas gotas de sangre nublando su visión. Las nubes se tiñeron de escarlata. De repente un silencio armónico inundó todo. Los párparon se volvieron pesados, casi insoportables, hasta que llegó una paz extraña. Era aquello el fin?

Ya está, lo que puedo hacer por Archie está hecho, espero que tenga fuerzas para resistir y recuperarse - dijo Robert a la pregunta inicial de Ted. Después Robert se había vuelto a medias y comenzaba a avanzar hacia el sargento herido cuando las palabras de Archie y sobre todo la manera en que terminaron le hicieron volverse estremecido. Echó la rodilla al suelo y sus manos rápidamente buscaron el cuello de Archie intentando detectar su pulso, esperando contra toda esperanza que aún viviera.

Tras comprobar que Archie aún vivía aunque su pulso era muy débil, Robert volvió a incorporarse y en un momento ya estaba junto al sargento al que empezó a examinar intentando saber cómo podía ayudarle mejor.

Robert pudo ver a simple vista la fea herida que el sargento llevaba en la cabeza. La bala debía haber atravesado su casco y había impactado en la cabeza del sargento. Para otro médico esto hubiera sido suficiente para declararlo muerto, pero los expertos ojos de Robert se percataron de más.

El sargento aún respiraba, aunque lo hacía de forma entrecortada y débil. En el lado derecho de su cabeza, la bala había impactado rompiendo el craneo, aunque Robert no estaba seguro de si la bala había salido o seguía dentro. Por aquel orificio pudo ver el cerebro de Singht, cosa poco agradable de ver. Pero gracias a eso pudo determinar que el cerebro se encontraba milagrosamente intacto. De hecho la primera de las meninges que lo protegían apenas había sufrido un leve arañazo y ni siquiera se había partido.

-Ted, ¿puedes ayudarme un momento? - preguntó Robert a su compañero- El sargento está bastante grave y quiero ponerle en una posición más adecuada para ver mejor la herida. Se trata de que tires de los pies del sargento cuando te diga, para colocarlo de lado. Entonces el médico puso el brazo del sargento debajo del lado sano de la cabeza del sargento, dejando la herida hacia arriba.luego se desplazó hacia los hombros del sargento y pidió a Ted que tirara de los pies. así dejó al sargento colocado de lado y usó la mano y rodilla para impedir que se moviera.
Entonces volvió a echar mano del botiquín. comenzó por tomar unas pinzas y una cuchilla para eliminar los trocitos de hueso partido que bordeaban la herida, y cortó los pelos y tiras de piel que podían entrar en contacto con la zona dañada y cuando tuvo todo limpio ´colocó unas gasas tapando el agujero y vendó la cabeza del sargento con un vendaje bastante aparatoso.
En fín, para estar en medio del campo no ha quedado mal. -
Tras todo ésto Robert se levantó, se limpió un poco y se acercó a Ted - bien, ya es hora de que le eche un vistazo a tu brazo. Déjame ver.

Ted hizo caso a Robert y aunque no sabía muy bien como actuar supo seguir sus indicaciones a la perfección para mover al sargento. Después dejó que el médico examinara su herida.

Bah, apenas es un rasguño. Dijo quitandole hierro al asunto.

Mientras Robert comprobaba que su herida era algo peor de lo que él decía y que seguramente tendría la bala incrustada en el humero, Ted mostró sus preocupaciones en voz alta.

Lo que de verdad me preocupa es qué debemos hacer ahora. ¿Volvemos a la base, seguimos con la misión...?Estamos tú y yo solos con tres heridos graves. Solo se me ocurre atrincherarnos aquí y esperar un milagro.

Tras decirle a Ted que no se moviera, y mientras examinaba la herida del hombro, Robert comentó Bajando un poco la voz - Estapa a punto de hablarte de lo mismo. Nuestra situación es muy peliaguda. Ellos tres no están para moverse demasiado que digamos, y sobre todo Archie y el sargento necesitarían ir a un hospital cuanto antes. Y respecto a nosotros, pues tú estás herido y estamos en territorio enemigo.

Espero que mi radio no se haya estropeado. Ted cogió su pesada y aparatosa mochila, algo más grande que las de los demás y más pesada por tener que llevar la radio. Estiró la antena, tomo el telefono y comenzó a pulsar el pulsador para ver si había señal. ¡Perfecto, está funcionando! Les avisaré de nuestra situación... ¿Dónde estabamos? Cerca de Osmin... Omos... como era? 

A ver... déjame pensar... - Robert estuvo unos segundos concentrado intentando hacer memoria. Carentan, es el único nombre que me viene a la cabeza. Ese era nuestro destino, no sé cuál sería el nombre del sitio donde nos dejaron con el jeep. Pero aparte de eso, ¿te acuerdas lo paranoico que se puso el sargento cuando nos reunió a todos a la salida del hospital de campaña y nos contó que era una misión secreta? Creo que cuando llames por la radio sería bueno decir que somos del grupo del sargento David Singth y que busquen al que encargó la misión. No me gustaría que si llegamos a ser rescatados luego nos juzguen por revelar datos confidenciales. Además el que nos encargó ir al pueblo ese seguro que sabe el itinerario que teníamos que seguir.

Dire que el sargento Singht ha sido herido y que no sabamos donde nos encontramos. Qué estamos en el camino a Carentan desde nuestra base. ¿Ok?