Partida Rol por web

En la chimenea chisporrotea la leña, Midian yace enroscada sobre sí misma, dormida en el sofá mientras sobre la mesilla hay cerca de una tonelada de apuntes... Tienes los exámenes dentro de muy poco, lo cual es un auténtico agobio...
De pronto ocurre lo inesperado en una cabaña apartada en el bosque, una mañana de tormenta como aquella (aunque dijeron que haría un día soleado)...
El techo es golpeado por aerolitos de hielo que puedes ver, del tamaño de un puño, desde la ventana...

Que fuerte, ¿quien sera? Con la que esta cayendo y en plena mañana, a ver quien ha sido el guapo que ha madrugao expresamente pa venir a mi casa...
Me levanto y abro despues de rascarle la cabecica a Midian.
- Buenos dias. - a quien este en mi puerta.

Una mujer alta, de aspecto elegante, serio y solemne, vestida con un traje negro y un abrigo largo de lana negra, con el cabello recogido en una tirante coleta y el gesto sereno hace acto de presencia...

- Don Alejandro Cebrián, supongo - dice desde la puerta, a cubierto bajo el porche de la entrada - Me llamo Lior... ¿Le importaría que pasara? Tengo algo urgente que decirle...

- Claro pasa, tienes que estar temblando - espero que pase y cierro - ¿Quieres algo de beber o de comer caliente? - pregunto timidamente. ¿Que coño hara esta tia aqui? ¿Que me tendra que decir?
- ¿Que me tienes que decir?
Mi gata se sienta cuando ve a alguien nuevo y se baja del sofa para que ella se siente.

- Gracias - dice entrando. Cuando está en la casa, se quita el abrigo y se lo cuelga del antebrazo, observando su alrededor - Preciosa casita... Tomaré un té, si no es molestia...

Lior sonríe a la gata cuando ésta le "hace sitio"...

- Tu mascota está muy bien enseñada... - comenta, sentándose correctamente, estirando el brazo para acariciar a Midian tras las orejillas - Es preciosa... - comenta, casi para sí. Carraspea entonces, girándose hacia tí mientras preparas la infusión - Sé que eres mutante, Balaguer... - dice, de forma firme y tajante...

Me quedo quieto y la miro.
- ¿Como que sabes que soy mutante? ¿Quien eres y que quieres? ¿Vienes a chantajearme? No he hecho nada malo en mi vida.

- Eso debe ser alguna forma de hablar, ¿no? Porque has quitado más de una vida con tu poder... - coge a Midian en brazos y la acaricia - Sólo te diré dos cosas: El ejército y una enfermedad te encontrarán en algún momento, y ese día seguramente tendrás que dejar huérfana a ésta preciosidad... - le rasca la cabecita a la gata. Gira la vista de nuevo hacia tí - Pero yo tengo una solución para las dos cosas... Aunque, naturalmente, no es gratis...

Me cago en la puta....
Aprieto la boca con odio.
- Vale... ¿Que quieres que haga? Pero... Suelta a la gata. Midian, salta aqui
Abro los brazos. Mi gata pasa de mi. Doy una palmada y vuelvo a abrir los brazos. Nada no hay huevos!!!

Lior esboza una sonrisa divertida.

- Parece que está comoda donde está... - te pone a la gata en brazos con cuidado - Verás, Alejandro... Lo que te pido es muy sencillo: Tienes que cobijar una noche a todas las personas que lleguen dentro de, aproximadamente, tres horas. Igual que tú, son mutantes, y buscan una cura para su enfermedad, que sin duda te transmitirán a tí... Si no lo hicieran ellos, acabarías contrayéndola tarde o temprano, es terriblemente contagiosa... - vuelve a ponerse el abrigo - Y casualmente, yo tengo un remedio para frenarla. Os lo entregaré si pasáis veinticuatro horas juntos... Vendré al medio día de mañana y os llevaré a donde se frena esa enfermedad...

Abrazo a mi gata. Mientras escucho lo que me dice Lior, vaya putada, algo escuche de la enfermedad mutante esa pero me pensaba que era una coña de internet... PERO RECIBIR A DESCONOCIDOS EN MI CASA ES CASI PEOR!!!
- Vale. Yo los recibo. A cuanta gente voy a tener que aguantar?

Satisfecha por tu velocidad de reacción y estoicismo, Lior asiente con la cabeza de forma aprobadora...

- Veinte. Doce chicos y ocho chicas. Dos de las chicas tienen dieciséis años, otro de los chicos también... Y entre ellos hay una niña de un año.

VEINTE?
- No me jodas....
Dejo a mi gata en el sofá y me siento de golpe como si me hubiese mareado
- Y me puedes decir sus nombres? No kiero que entre ningun aprovechao.

- Por supuesto. Saca papel y bolígrafo - espera a que tengas ambas cosas en la mano para empezar a dictar, incluso por orden alfabético:

Connor, Art
Czigany, Alexa
Doyle, Alice
Dryden, Amber Daelyn
Dryden, Donovan*
Dryden, John Rewell
Dryden, Jolene
Falken, Adrien Caylan*
Fameite, Eva
Fauchon, Michael
Hawkins, Taylor*
Hayes, Arthur Jonathan
Holopainen, Esa*
Isawa, Renka
Lagoon, Mortymer Kamau
Lockhart, Sven Sebastian
Ortíz Ferrán, María
Reisel, Herkus
Seras, Hugo G.
Serlen, Marcos

Cuando acabas de apuntar, Lior ya tiene el abrigo puesto, no sabes en qué momento se lo colocó.

- Sal a la entrada del bosque, hay una señal en la que dice "No less no more" en un árbol... Quédate frente a él y espera a que lleguen. Asegúrate de que son ellos, o no habrá trato... Después traelos a tu casa y esperad a que os recojan.

- Pero como quieres que salga con la que esta cayendo! Que quieres, que me abra la cabeza con una bola de hielo?
Veinte personas y encima quiere ke haga de portero, me cago en su padre.

Lior esboza una sonrisa divertida.

- No te preocupes, Balaguer, la tormenta acabará en unos minutos, volviéndose el granizo lluvia... Cuando eso suceda, debes hacer lo que te he dicho. Camina hacia el sur desde la parte trasera de tu casa y encontrarás la señal en el árbol... Mi consejo es que vayas preparando una estera para que la gente deje sus zapatos... No querrás que te embarren la casa, ¿verdad...?

Ostia es verdad.
Pongo la esterilla en ese mismo momento. Me cago en todo interiormente de imaginar que mi casa va a oler a queso podrio dentro de nada.
- Pues na, ya cuando pare, voy a por ellos...
Joder...

Cuando levantas la vista de haber puesto la estera, Lior ya no estaba... Simplemente había desaparecido...

Tal como había predicho, la granizada pronto se convierte en una lluvia torrencial. Luego de abrigarte correspondientemente y armarte con el mejor de tus paraguas, dejas a la gata en casa mientras sigues las instrucciones de Lior...

Caminando entre tierra embarrada y raíces de los enormes árboles, ramas rotas por la salvaje granizada y trozos de hielo que llegan incluso al tamaño de una cabeza humana, alcanzas a ver un árbol con el letrero...

Recorridos los dos kilómetros, algunos* apenas pueden respirar, el flato parece una espada clavada, el aire falta... Entre ellos están Jolene, Alice, Taylor y sobre todo Alexa, a la que Herkus ha optado por llevar a coscaletas a mitad del camino luego de entregarle sus maletas a Antti, que por el sobrecargo también andaba cogiendo aire con dificultad... Herkus también parecía algo cansado por tener que llevarla a ella, pero no más de lo que se cansa cualquiera subiendo veinte pisos de escaleras, por ejemplo...

Falken en cambio, a pesar de llevar cogido en brazos a Arthur, parecía no haberse enterado del paseo. Respiraba con normalidad y su postura era firme... Incluso cuando se detuvo frente a un árbol en que había colgada una nueva señal...

La comitiva, encabezada por él, se detuvo alerta y desconfiada... Junto al árbol, bien preparado para el temporal y el camino, un joven se apoyaba con un paragüas... Era tan bello como misterioso, podría rivalizar en hermosura con el propio Michael o el doctor Sven, aunque nunca con Donovan...

El muchacho sostiene en sus manos un cuaderno negro, contra su pecho...

- ¿Quién eres...? - pregunta el siempre encapuchado Adrien Falken.

Aqui vienen. Veinte ná menos...
Le contesto y en ningun momento pierdo los buenos modales.
- Balaguer, y de momento no voy a decir mas.
Miro a Donovan.
Ostia este es famoso, sale en peliculas que lo he visto yo...
Pero me quedo aturdido cuando veo a Lex.
Demasiado guapa, joder... Parece un ángel aunque normalmente no me habria fijado en alguien como ella...
Me quedo callado un momento y al rato digo,
- Me vais a ir diciendo vuestros nombres y vuestro poder, tengo apuntada una lista con ellos y no quiero que ninguno pase de gratis en mi casa. Los que sois ricos guardaos el dinero porque no acepto sobornos, a mi no me compra nadie. Asi que empezad, uno a uno. ¿Tu como te llamas? Despues de ella me vais a ir diciendo vuestros nombres uno por uno. Me manda Lior, por si os queda duda.
Miro a Lex esperando que me conteste.