Partida Rol por web

Mientras cae la noche, Adel recorre los pasillos hasta llegar a la forja donde escuchó que Demian suele estar... Sin embargo se encuentra con que no hay nadie allí, está cerrada con llave. De todos modos tuvo la suerte de que Alma pasaba por allí, quien le señaló que estaban la mayoría en la Sala de Profesores... A subir se ha dicho.

En el quinto piso hay lo que parece una sala de reuniones: Una mesa grande en el medio con cómodas sillas suficientes para que cada profesor tenga un espacio e incluso sobren algunas.

Hay algunas estanterías con carpetas y hay sillones cerca de ventanales, dando una hermosa vista a todo el campus e incluso parte del Circulo Superior de la ciudad, más atrás las montañas y valles típicos que rodean Issaera. Definitivamente están bastante altos...

Parecen haber algunos profesores allí, algunos hablando y otros simplemente sentados en los sillones y revisando papeles, posiblemente repasando para sus siguientes clases. Ninguno parece muy ocupado.

Por donde empezaba ¿Por Aminé o por Demian? Decide acabar primero lo que es solo una sencilla pregunta de sí o no y se encamina hacia el profesor de Combate con Armas. Se acerca al profesor y espera a que este esté libre antes de acercaerse a preguntarle.

-Disculpe que le moleste, profesor Demian, pero tengo una pregunta sobre su asignatura. En la descripción solo pone “armas tradicionales” y me queda la duda de si los bastones son considerados un arma tradicional. No me separo nunca del mío, tiene mucho valor sentimental, así que sería bueno saber blandirlo si, los dragones no lo quieran, me veo en apuros.

Adel llega a la sala de profesores buscando al profesor Demian... Cuando se encuentra a Alesio hablando con él suspira un poco por tener que esperarse. Qué remedio... Tendrá que empezar por el viejales que da yuyu. Se encamina hacia Roberto, no sin antes romperse el cuello mirándole el trasero al profesor de Combate con Armas... 

-Madre mía, ¿tendrá novia este pedazo de hombre...? Parece muy joven... ¿Se fijaría en una chica como yo...? ¡Por supuesto! Si me lo propongo... Nadie se resiste a mi. Ya verá como en sus clases no podrá dejar de mirarme...

Suelto una sonrisa pícara, inmersa en mis pensamientos mientras avanzo sin siquiera mirar por dónde piso en la sala de profes... 

-¿Hm?-, el chico de cabellos violetas estaba sentado en un sillón. Alza la mirada, observando a Alesio. Tras fijarse unos instantes en él y pensar un poco, ladea un poco la cabeza. -No realmente: Trabajamos más con lanzas y espadas, como mucho con hachas o mazas. Tao en el primer curso trabaja un poco con bastones, pero no para combate sino para técnicas de relajación... Y Caesar se enfoca más en el cuerpo a cuerpo, aunque en sus clases suele enseñar a usar porras o similares.-

Demian tuerce un poco el gesto, pensativo.

-Tao no enseña nada de combate con bastones hasta el segundo Curso. Creo que la asignatura de Artes Marciales que suele dar no tiene dependencias con ninguna otra de primer Curso.-

Demian se acomoda un poco en su asiento: -Quizás ella esté dispuesta a darte algunas clases extra-curriculares por las tardes o durante los fines de semana.-

Robert está allí mismo, siguiendo con la mirada a Adel mientras esta observa de forma tan descarada a Demian, quien no se entera porque está hablando con Alesio.

Él carraspea antes de soltar un simple -¿Sí?- , buscando llamarle la atención, después de todo ella estaba yendo en su dirección.

Vaya… muchas gracias. -Le decepciona un poco que los bastones no sean un arma valida hasta segundo, pero la parte buena es que ahora tiene una escusa para volver a hablar con Tao y agradecerle el paseo por la ciudad. Aunque no le parecía muy correcto hacer perder el tiempo a Tao y Tzar con mera conversación social, seguro que eran personas muy ocupadas. Aunque podía preguntarle sus dudas sobre los dragones a Tzar y sobre los bastones a Tao y así tendría un motivo para hablarles a ambos.  A lo mejor se cogía Meditación y Control Elemental, seguro que aprendería algo que al año siguiente le valdría para Artes marciales.

Deja libre al profesor de espadas y lanzas y se encamina hacia Tao, esperando su turno.

-...Oh. -se vuelve hacia Roberto, tras poner los pies en la tierra-. Hola, Señor Profesor... -se rasca la sien, con un brazo bajo los pechos, pensativa. ¿Qué quería preguntarle a este profesor...? Se le había olvidado por completo. Bah, ya que está le pregunta cualquier cosa-. ¡Me apunté a su clase! ¿Hay algo que deba saber al respecto? ¿Tengo que llevar algún material especial, libros o lo que sea? -y tras la pregunta se vuelve hacia Demian, al ver que Alesio ya había acabado de hablar con él espera una respuesta rápida del profesor Roberto-.

La profesora Tao está mirando por la ventana, un aire feliz le rodea. Sentada en el ventanal y observando el horizonte está Min, la Híbrida de cabellos azules que no parecía tener demasiadas luces.

Tao sigue pareciendo más alumna que profesora, en lo que respecta a la edad. Parece percatarse de la presencia de Alesio antes de que este diga nada, girándose para verle y ofreciéndole una alegre sonrisa.

-Hola de nuevo. ¿Como estaban los higos?- 

-Papel y algún tipo de lápiz, por ejemplo.- dice el profesor, encogiéndose de hombros. -Te recomendaría buscar en la biblioteca el libro "Bestiario de Criaturas Oscuras" y darle una ojeada, te servirá para algunas tareas. También uso el tomo "Introducción a las Artes Oscuras" y "Técnicas Básicas de Defensa contra la Magia Maligna", pero no hace falta que los leas enteros, solo mira un poco de que va la mano.

-Si se te ocurre leerte los tres, no te costará nada sacarte la máxima nota en mi asignatura. Pero tampoco es que hagan tanta falta para aprobar.

-... ¿Son muy gordos esos libros...? A ver... -se pone a contar con los dedos y mira el techo, en plan "memorizar"-. Bestiario de Criaturas Oscuras... Técnicas básicas de Defensa contra la magia maligna y... ¿Introducción a las artes oscuras? ¿Eso significa que aprenderemos maleficios y cosas así? -alza un poco la ceja, le resulta interesante la idea-. Bueno, bueno. Como sea! Iré a ojearlos... A ver cómo son... -se lleva la mano a la boca y bosteza, saliéndole una lagrimilla de un ojo-. Gracias, profesor. Voy a hablar con este guapetón.

Y se va a por Demian, corriendo por la sala para que no se le cuele ningún alumno más, y frena justo antes de estrellarse contra él. Inmediatamente adopta una pose sugerente, aunque intenta hacer el papel de alumna inocente y buenita... Junta sus manos y aprieta pecho para que se vea más su pronunciado escote... Y le dedica una mirada tan reluciente y encantadora que salen hasta destellos de colores-.

-Profesor! Por... Por fin puedo hablar con usted! Si es que es normal que esté tan solicitado, es usted tan apuesto y tan galante, y tan fornido... -...carraspea, se le olvidó el papel de chica buenita e inocente cuando empezó a soltarle piropos-. ... Es decir... ¿Podríamos hablar de las clases en un lugar más privado...? -mira alrededor, haciéndose la incómoda-. ... Este lugar... Está lleno de gente y... -lo abraza de un brazo e intenta arrastrarlo fuera, como quien no quiere la cosa-. ... Vamos, vamos, acompáñeme aunque sea al pasillo, o a un aula a solas...

Demian flípa. No hay forma más adecuada de expresarlo: Se queda mirando a la alumna con la expresión de alguien que no tiene ni idea de qué está sucediendo, le resulta absolutamente irreal la situación. -¿Qué?- atina a decir cuando ella concluye su parlerío.

Se percata entonces de que le han tomado del brazo y se lo están llevando, para pronto terminar fuera de la sala.

La profesora Haibara se los queda mirando mientras salen confundida, llevándose una mano a la boca, consternada. El profesor Robert rueda los ojos.

-Espera, espera.- dice él cuando están en el pasillo, solitario pero cerca de la sala. Se detiene, intentando soltarse sin ser muy brusco.

-¿Que pasa, que pregunta tienes que necesita tanta privacidad...?-

Adel nota que se suelta de ella, pero lo toma de la muñeca como si se sintiese insegura, con esa expresión de niña asustada... Aún le brillan los ojos, mirando al pobre profesor.

-Es que... Me preguntaba si usted... Me veía capacitada para estar en sus clases... Y de no ser así me gustaría que hiciese lo posible para que lo sea... Dando clases particulares o no sé... Lo que usted me diga, parece ser un muy buen profesor...

Si consigue encantar al profesor y metérselo en en el bote tiene la asignatura aprobada! Por pésima que sea. Al menos eso cree.

-Hmm...- , piensa él, mirándole de arriba a abajo. ¿Está chequeando su cuerpo~? -Se te ve en una condición física aceptable. Tienes buena postura, aunque podría mejorar un poco... Sí, creo que podrías ir bien en mis clases. Son introductorias, de todos modos.

-Puedo dar clases extra-curriculares, sí. No te puedo asegurar que vayan a ser particulares, depende de cuantos alumnos las requieran y qué tiempos tenga. Podemos hablarlo tras la primera clase, seguramente serían algún día de semana por la tarde.

Alesio no puede evitar escuchar la charla de Robert. 

Si se te ocurre leerte los tres, no te costará nada sacarte la máxima nota en mi asignatura.

Por su puesto que se los leería, de portada a contraportada, los iba a memorizar. 

-Estaban deliciosos, gracias- ¿¡se está llevando su compañera al profesor del brazo!? Ver para creer.- Todo es genial desde que llegue a la ciudad. -Una punzada de culpa le inunda, debería echar de menos su pueblo y su familia más intensamente, pero todo era tan nuevo y emocionante.

-El profesor Demian dice que no enseña a luchar con bastones, que eso se da en tu asignatura de segundo. ¿Es verdad? De ser así este año me cogería Meditación y Control Elemental y el año que viene artes marciales. Si me aceptas como alumno, claro. 

-Sí, no enseño realmente ninguna arte marcial de combate a los alumnos de primero... Pienso que primero hay que aprender a desarrollar el arte de la paz antes de aprender a desarrollar el arte de la guerra.- , explica la calma pero sonriente chica. Min, detrás de los dos, se gira un poco para mirarles hablar.

-Es usted libre de escoger las materias que más te interesen. Mis asignaturas no tienen ningún requisito hasta el tercer curso, donde estos últimos años he estado dando especializaciones sobre las Artes Marciales, o sobre el manejo de mi Elemento, el Viento. Pero para eso falta mucho tiempo y el temario podría cambiar...

-Sea como sea, será un placer aceptarle como alumno, si eso es lo que desea.

-Nyaaaa.-, asiente solemnemente, haciendo gala de su extenso vocabulario de persona adulta.

Adel se pone toda roja en cuanto nota la mirada del profesor... Y se queda estática por unos segundos. Después reacciona, sonriendo como una tonta y se vuelve a abrazar al brazo del pobre Demian.

-...Para una alumna como yo sería un honor tomar sus clases, profesor... -dice, frotando la mejilla en su hombro, haciéndose la mimosa-. Haré mi mayor esfuerzo por aprender todo lo que me enseñe... Haré CUALQUIER cosa que me pida... 

El profesor le para un poco con la otra mano cuando ella va a abrazarse tanto, sosteniéndola del hombro para que no se le tire encima. -Tranquila, tranquila.- dice él, intentando mantener su tono bajo y tranquilo, aunque se nota un poco que está más que consternado.

-Es mi trabajo, a esto me dedico: Dar clases, enseñar... Solo intenta aprender y sacar algo de las clases, con eso me será suficiente.-

Demian asiente un poco. -Iré de vuelta a la Sala de Profesores. Tengo algunos historiales que leer.-