Partida Rol por web

La Brigada de San Jorge

Un baile de salón

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09/07/2015, 00:12
Director

Entre emociones que tenían poco que ver con los sucesos de la escena social, el día del baile organizado por Lord Charles Clearwater llegó al fin. O quizás demasiado pronto, dependiendo del punto de vista.

Nemain había conseguido que su nuevo vestido estuviera listo para la ocasión, aunque había necesitado pagar a la costurera un extra para que ésta pusiera su encargo al principio de la lista. Había merecido la pena. Nemain, en aquella creación de seda color vino con bordados de hilo de plata, que ella había coordinado con unas joyas funerarias, no podía más que ser el centro de todas las miradas. Era una visión de indudable belleza, aunque de un tipo que probablemente no todos aprobaran. Un color demasiado estridente, un escote en los límites de lo apropiado, unas joyas poco apropiadas para lucir con tal vestimenta...quizás demasiado vulgar, sino fuese por quién y cómo lo llevaba. El vestido era una exhibición y un desafío.

Viktor, por su parte, acudió a su casa con el traje más elegante que había llevado jamás. Un traje de una calidad que no podía permitirse, tanto por los materiales, como por la maestría de su manufactura. Por supuesto, él no se lo había tenido que permitir. Nemain se había cuidado de proporcionárselo. El acompañante de una dama era parte de sus complementos, no iba a permitir que la hiciera desmerecer.

Nemain tenía ciertos planes y esperanzas sobre como iba a ir la noche. Y sin embargo, todos ellos empezaron a deshacerse incluso antes de salir por la puerta.

Mientras von Callahan esperaba a que la feerica terminara de prepararse, algún inoportuno decidió que aquel era el momento de llamar a la puerta. Pocos momentos después, Silent acudía junto a Nemain a comunicarle que el Señor la esperaba fuera. Junto a un coche engalanado con flores, y portando una rosa roja de tallo largo en su mano, Lord Nightshadow esperaba para acompañar a su esposa, y al acompañante humano al que había invitado, al baile de su exmarido.

Notas de juego

Petit está semi-out, pero la pongo de todas formas, y luego si tal cada una vais por vuestro lado. Como os parezca.

Pensé que mejor abrir una escena y dejar las escenas privadas para otras cosas que poneros a las dos en la escena de una de vosotras.

El vestido de Nemain:

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09/07/2015, 07:58
Lady Nemain FireStar

Al mirarse al espejo, asegurándose de que cada rizo estaba en su sitio, Nemain sonrió felizmente. Iba a ser una noche espectacular. Incluso tenía que reconocer que Viktor, aún un tanto alelado, estaba realmente elegante... si tan sólo tuviera un poco más de chispa. Bueno, ya se encargaría ella de proporcionársela: un par de copas de vino blanco y se soltaría.

La metáfora de la pompa de jabón estallando para representar el ánimo de Nemain al ver a Andrei no se acercaría ni de lejos a la realidad. No por lo que en principio podría parecer - el juego se le había acabado- sino porque la única cosa que le hacía levantarse  calmada por las mañanas era la certeza -certeza necia, puesto que ya se ha dicho que habiendo barcos, ningún país era terreno seguro- de que Andrei estaba a salvo.

- ¿Qué haces aquí? - la primera frase que le dedicó no fue ni educada ni romántica, sino una manifestación de la absoluta sorpresa que la llenaba.

Era inevitable que los rasgos de carácter de Andrei se manifestaran para bien... y para mal. Era inevitable que el encantador romántico, altivo e ingobernable, fuera a un tiempo el glorioso generador tantos momentos extáticos como sorpresas incómodas. Como ésta. Sí, existía la posibilidad de que Andrei no supiera lo de la fiesta, que hubiera sido una mera casualidad... pero también existía la posibilidad de que Silent se lo hubiera contado y él hubiera decidido ser un tanto travieso. 

Dándose cuenta de la situación y de lo que acababa de decir,  Nemain dejó escapar una sitia nerviosa. 

-  Santo Cielo, querido - avanzó hacia él y le ofreció la mano-. ¿No pretenderás -miró el carruaje- acudir a una fiesta en la que no has sido invitado? - frunció la nariz - Y quiero decir a la que has sido específicamente no-invitado.

Incapaz de mantener por más tiempo la sorpresa y la irritación como emociones principales, la sonrisa afloró finalmente en su rostro y abrazó con una efusividad excesiva a Andrei. Estás vivo. Estás bien.

- Hombre odioso... - susurró. Le dió un beso en la mejilla, aspirando su familiar olor, y sonrió de nuevo con amplitud-. ¿A qué refinada maldad debo tu súbita presencia? -y como se sentía culpable por no haber reaccionado como una amantísima esposa debía, sonrió aún más y añadió- Tienes un aspecto muy deseable, Andrei.

Otro hombre hubiera apreciado más un "te quiero", pero con Nightshadow las reglas no eran las típicas.

¿Qué ocurriría ahora? No podía permitir que Andrei fuera al baile de Charles; le irritaría demasiado y de manera demasiado innecesaria. En todo caso carecía de invitación, así que no sería problema... ¡Mentira! Andrei encontraría, como siempre, una manera socialmente no inaceptable de hacer su santa voluntad. Como un inspector que aguarda el siguiente quiebro del criminal, Nemain aguardó a que Andrei declarara sus intenciones... o parte de ellas.

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19/07/2015, 21:59
Lord Andrei Nightshadow

Nightshadow rió ligeramente, complacido por el efecto que su presencia había tenido sobre Nemain, como un niño travieso cuya broma ha tenido éxito. Había planeado sorprenderla, y desde luego, la había sorprendido Aceptó su beso y su abrazo, reteniéndola entre sus brazos-Claramente subestimas el gusto de mis amistades por los cotilleos, si crees que no sería debidamente informado de algo así en cuanto saliera en los periódicos. No es que fuese precisamente un secreto, y los telegramas son una maravillosa tecnología. Algo que no se puede decir de mucho otros inventos humanos- Las amistades de Andrei, por supuesto, hacían algo más que "cotillear" con él, y Nightshadow tenía una extensa red de contactos que le mantenía constantemente informado de lo que ocurría en Inglaterra. Incluidas a veces, cosas que alguna gente preferiría mantener en secreto.-Me dije que no podía dejar que mi esposa se viese desamparada y sola en una ocasión social como esta. Aunque veo que ya habías hecho tus propios arreglos. Quizás debería sentirme preocupado por ser tan fácilmente reemplazable-Dijo, echando un vistazo de reojo a von Callahan y fingiendo sentirse un tanto herido. -Y en cuanto a esa invitación, estoy seguro de que lo habrás entendido mal, mi querida esposa. Clearwater no puede ser tan audazmente descarado como para pretender atraer a una mujer casada a su casa y a la vez prohibirle la entrada a su marido. Sé que irá mucha gente respetable y por supuesto confío en tu prudencia, pero creeme que incluso en estas situaciones pueden darse toda clase de equívocos, y ciertos caballeros son capaces de cualquier descuido para intentar aprovecharse de la inocencia de una dama virtuosa. Y ahora déjame verte- La apartó de su lado para poder observar mejor su atuendo, sonriendo admirado, divertido y un tanto orgulloso del atuendo que su esposa pretendía llevar a la fiesta, y entendiendo perfectamente las intenciones de Nemain al escogerlo.-Te diría lo hermosa que estás, pero no sería más que afirmar tu condición natural. Y sin embargo, hoy estás especialmente esplendorosa.-La atrajo de nuevo hacia sí, y sin importarle quien les viese, la besó de nuevo, esta vez, en los labios.

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20/07/2015, 13:53
Lady Nemain FireStar

Mujer, feérica y coqueta, Nemain no se cansaba nunca de escuchar halagaos, y menos aún los de Andrei. Sonrió felizmente, el ego satisfecho al menos por el momento, antes de ceder al beso. Vencida en el asalto sorpresa, Nemáin trató de recuperarse y ofrecer resistencia. Con deleite se entretuvo en el afecto impropio de Andrei, sólo para componer su expresión más dulce y dócil e interrumpirlo comentando:

- Qué alivio oír tus razones, querido... si no, habría pensado que tu presencia aquí la justificaban los celos. Y, ¿porqué habrías de tener celos? - esbozó una sonrisa indeciblemente  malévola. Alguien más sensato y menos propenso al drama trataría de calmar los ánimos. Ella no.

Abanicándose con coquetería, observó también al paupérrimo Apolo, casi con el orgullo de una artista al contemplar su obra. Después se volvió hacia su marido, dispuesta a no ceder ni un ápice. 

- Lo siento, Andrei. La invitación era para mí, y dice claramente Lady Nemain y acompañante. Tristemente - nada en su rostro sugería tristeza- ese no eres tú, al menos no hoy.  Y a ese respecto, nada más hay que decir... y desde luego, nada que le puedas reprochar a Charles, y mucho menos en el campo del descaro, terreno que tan bien conoces y en el que tanto tiempo pasas afincado -se echó a reír.

Con humildad y modestia, Nemain bajó los ojos, cruzando las manos sobre la falda como una bien educada y correctísima muchacha.

- Mi querido esposo, mi dueño y señor,  te aseguro que no debes preocuparte porque nadie se aproveche de mi inocencia. Para prevenirlo, la he dejado en casa. Así que tu alma puede quedar serena con la tranquilidad de que nadie en esa fiesta tendrá acceso a mi modestia, mi castidad o mi comedimiento. Las virtud y pureza moral que tanto aprecias en mí permanecen a salvo en el hogar del que eres señor absoluto, y de este modo puedo despreocuparme de qué hago y con quién en lugares en los que no eres más que un visitante ocasional sin resposabilidad moral. 

Que Andrei encontraría la manera de entrar en la fiesta, lo tenía clarísimo. Que ella se lo iba a poner lo más difícil posible, también. Es más, lo sabía ella y lo sabía él, y ambos sabían que el otro lo sabía igualmente. Eran un matrimonio que evitaba la placidez, enfocándose en la competición cómplice y porqué no decirlo, no excesivamente sana. Cualquier tormenta era mejor que la calma.

 

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22/07/2015, 20:32
Lord Andrei Nightshadow

Andrei suspiró, resignado aunque no satisfecho ante tal negativa.

-Nada me queda sino inclinarme ante tus deseos, y puesto que no necesitas mi protección ni deseas mi compañía, tendré que aceptar que sea otro quien te entretenga esta noche. -Se llevó la mano de su mujer a los labios, besando ligeramente sus dedos. Girándose hacia von Callahan, le dedicó una inclinación-Entonces, deberé dejarla en sus manos y confiar en que su escolta resulte esta noche más agradable que la mía. Aunque, mi querida esposa,-dijo, volviéndose de nuevo hacia su mujer-debo protestar por esa insinuación de que me mueven los celos. Primero, porque eso significaría que puedo considerar que puedas encontrar a alguien que atraiga más tu atención que tu propio esposo. Lo cual es absolutamente imposible. Y segundo, porque mis intenciones no podían ser más caritativas, pretendiendo evitar sólo la crueldad de los sentimientos heridos a todos aquellos que puedan hacerse falsas ilusiones con que alguna vez vayas a corresponderles como ellos desearían.

-Puesto que mi persencia no es requerida, creo entonces que disfrutaré del aire fresco de la noche londinense Dijo, inclinándose a modo de despedida y poniéndose el sombrero-Señor von Callahan, esposa mía, les deseo entonces que pasen una buena noche.-Besó en la mejilla, de forma tan inocente como si fuese su propia hermana y dejó en sus manos la rosa que le había traido antes de volver al carruaje. Tras unas rápidas instrucciones al cochero en voz demasiado baja para que Nemain pudiera escucharlas, el carruaje partió dejando a Nemain y von Callahan solos de nuevo.

 

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23/07/2015, 22:24
Lord Charles Clearwater

La llegada de Nemain y Viktor al baile atrajo un gran número de miradas. El atuendo que Nemain había escogido garantizaba eso, así como la inesperada y misteriosa presencia de Viktor a su brazo. Por supuesto, no todas las miradas eran tan apreciativas como había sido la de Andrei. Algunas eran francamente reprobatorias...aunque también un buen número de ellas mostraban sobre todo curiosidad e intriga, y en el caso de algún caballero, una lujuria mal disimulada. E incluso envidia, en algún caso. Después de todo, la respetabilidad y el saber mantener una conducta apropiada en toda ocasión eran virtudes valoradas, pero dificilmente podían convertir a alguien en el centro de la escena social.

Pensasen lo que pensasen de la presencia de Nemain y su acompañanet, ningún comentario fue hecho, al menos no en voz tan alta para ser oído por ellos.

Como buen anfitrión, Lord Carles Clearwater acudió a recibirlos en cuanto fueron anunciados. Vestido con un impecable frac negro, un chaleco de seda verde oscura podía verse asomar ligeramente por debajo de la ropa, y complementando su traje, una corbata estampada en tonos grises. Llevaba en el dedo el anillo con la esmeralda que Nemain le había dado, claramente demasiado pequeño para él, claramente femenino.

-Lady FireStar, señor von Callahan. Me alegro de verlos aquí-La recepción había sido cálida en el tono, aunque formal en las maneras. También había venido acompañada de una sutil expresión que Nemain, aunque ahora divorciada, supo leer con la peculiar habilidad que algunos esposos tienen para comunicarse sin palabras. Charles no parecía considerar que había tomado la elección más adecuada en cuanto a su vestuario, aunque había una cierta aceptación resignada más que censura en su mirada.-Espero que disfruten de la velada, aunque debo reconocer que preparar este tipo de eventos no es exactamente parte de mis habilidades. -Aún así, la fiesta aunque sin nada demasiado destacable que pudiera convertirla en un evento excepcional, había sido competentemente preparada. En un extremo del salón de baile podía verse una mesa con comida y bebida ligera, para aquellos invitados que desearan tomar un ligero refrigerio antes de la cena, y varios sirvientes se afanaban con bandejas alrededor de los invitados, asegurándose de que estuvieran servidos de lo que deseasen. La mayor parte del salón había sido despejado para permitir la danza a los sones de un cuarteto de cuerda que estaba en aquel momento tocando un vals.

La sala había sido decorada con motivos primaverales, con una abundancia de flores de temporada adornando jarrones y dispuestas en ramilletes y guirnaldas en las mesas y decorando las sillas colocadas para aquellos que desearan sentarse. Varios cuadros y tapices con escenas pastoriles o alegorías mitológicas adecuadas colgaban de las paredes, y bustos y estatuas decoraban varios rincones

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25/07/2015, 19:29
Lady Nemain FireStar

-Puesto que mi persencia no es requerida, creo entonces que disfrutaré del aire fresco de la noche londinense Dijo, inclinándose a modo de despedida y poniéndose el sombrero-Señor von Callahan, esposa mía, les deseo entonces que pasen una buena noche.-Besó en la mejilla, de forma tan inocente como si fuese su propia hermana y dejó en sus manos la rosa que le había traido antes de volver al carruaje. Tras unas rápidas instrucciones al cochero en voz demasiado baja para que Nemain pudiera escucharlas, el carruaje partió dejando a Nemain y von Callahan solos de nuevo.

- ¡Ten cuidado! - suplicó Nemain justo cuando el carruaje se puso en marcha, apretando la rosa entre los dedos y sintiendo una leve aprensión. No era un buen momento para que un feérico anduviese sólo por Londres de noche... la presión del corpiño se le hizo intolerable durante un instante -¡Si sales, ve con Silent! - continuó, aunque probablemente el sonido del traqueteo del carruaje hizo que sus palabras no llegaran a oídos de Andrei. Cabeceó, diciéndose a sí misma que Andrei sabía cuidarse solo... trató de acallar la vocecita irritante que sugería que un señor dragón también sabía.

Miró la rosa y sonrió, conmovida. A pesar de todo, amaba a su marido. Partió el tallo largo y, sacando del pequeño bolso de fiesta un espejo, engarzó la flor en su peinado para que la acompañara toda la noche. Ese gesto, algo infantil, le hizo sentir mucho mejor; le hizo sentir que una pequeña parte de Andrei quedaba con ella, y por tanto, indefectiblemente a salvo. Más tranquila, se giró hacia su acompañante y le ofreció conversación durante el trayecto, mostrándose cálida y cortés. Estaba de muy buen humor.

Entró en la casa de Charles -hacía no tanto, su propia casa- con una sonrisa genuina, más perversa que feliz. Las miradas que atraía su Adonis y ella misma eran un trofeo por sí mismas. Con descaro, devolvió a cambio de los gestos reprobatorios, inclinaciones corteses; de las atenciones curiosas, sonrisas de complicidad; y de los mohínes lujuriosos, tentadoras promesas implícitas en su mirada. El juego había empezado, y ella llevaba colgado del brazo a quien pensaba convertir en un caballero al servicio del Adversario.

Finalmente, al encontrarse con Charles, los demás dejaron de tener importancia.

- Está espléndido, milord - respondió con cortesía y la permanente sonrisilla satisfecha y algo condescendiente de una gata observando un corro de ratones-. El verde es su color, sin duda alguna -añadió mirando el anillo con la esmeralda, sin poder evitar que su sonrisa se ensanchara aún más. 

-Espero que disfruten de la velada, aunque debo reconocer que preparar este tipo de eventos no es exactamente parte de mis habilidades.

- Oh, conociendo su buen gusto, milord, sin duda será una fiesta exquisita.  Veo que ha remodelado el salón -hizo un gesto hacia la sala, cuyo aspecto había cambiado desde el divorcio-. ¿Ha remodelado algo más? Odiaría -fingió un mohín de disgusto- que algo hubiera cambiado en los dormitorios. Me encantaba la cama -pausa. Sonrisa. Pausa. Mirada. Pausa- Era de madera de naranjo con incrustaciones de madreperla... una auténtica obra de arte-No hacía falta ser un genio para darse cuenta de que Nemain estaba disfrutando de la situación, o de que tenía intención de jugar una y mil veces más a los malentendidos. Observó con intensidad a Charles; dispuesta a conseguir sonrojarle tarde o temprano.

Teniendo en cuenta que ahora no debía preocuparse por la reputación de su marido, se había soltado la melena. Y pensaba enseñar a Viktor lo divertido que era hacerlo... el muchacho era un lienzo en blanco, un diamante en bruto, arcilla por moldear. Un material excelente que Nemain pensaba, suavemente, tallar hasta convertir en una obra de arte consumada de la malevolencia, al servicio de la Corte Oscura aún cuando él mismo no lo supiera. Un elemento de caos, de perfidia, de escándalo social. Con la misma mirada de gata a punto de provocar un incidente de esos que terminan con la loza hecha trizas y la nanny agarrada a la lámpara, se giró hacia su Adonis.

- Si eres tan amable de acercarte a la mesa y traer algo de beber...- Nemain esperaba que con una o dos copas encima el Adonis se sentiría más suelto-. Vino dulce para mí, y para ti una copa de aquello - señaló con el abanico la zona donde ordenados, aguardaban los licores que beberían los hombres, con más graduación. Camuflado bajo la apariencia de cortés ayuda para encajar en sociedad, Nemain empujaba metafóricamente a Viktor, como una oruga siendo obligada a transformarse en mariposa.

- Sé que no debo robarte mucho tiempo, Charles querido - una vez que Viktor se hubo separado, dejó el trato de usted y volvió al tuteo- mientras recibes a tus invitados... aunque espero que me reserves un baile. Se llevó los dedos al collar de azabache y piedra de luna y observó erráticamente a su alrededor- Imagino que habrás leído el periódico... ¿algo interesante que contar sobre ese ladrón que se supone va a venir aquí a desvalijarnos? -no parecía preocupada en lo más mínimo. Bajó la voz para obligarle a acercar el oído a sus labios-. Sería terrible que ocurriera algo así.  Si alguna de tus invitadas sufre un hurto, tendrás que consolarme personalmente -clavó los ojos de nuevo en él con el gesto goloso de felino que se estaba convirtiendo en su tónica esta noche-. Sabes que me estreso con facilidad, y cuando eso pasa, requiero mucha atención -justo cuando parecía que Nemain estaba dispuesta a pasar el rato coqueteando descaradamente con Charles, volvió a recorrer la sala con la mirada y señalando discretamente con el abanico a uno de los caballeros dueños de las miradas lujuriosas, sonrió con fingida inocencia a su exmarido y preguntó -¿Quién es ese encantador invitado?

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28/07/2015, 23:06
Lord Charles Clearwater

Charles le dedicó a Nemain una leve sonrisa de complicidad cuando ella aludió al anillo que llevaba en el dedo y cuando Viktor se hubo marchado, contestó a sus insinuaciones sobre los dormitorios con algunas de su propia cosecha.

-Los dormitorios están por el momento intactos, y me aseguraré de no cambiarlos. Puesto que tanto significaron para ti, no me gustaría que los perdieses. Cualquier lugar de esta casa estará abierto para tí, cuando desees visitar viejas memorias.-La intención de Nemain era sonrojarle y lo había conseguido, aunque indirectamente. Las mejillas de Charles aparecían coloreadas ligeramente, aunque parecía más azorado por su propia audacia que por los inapropiadas pullas de Nemain, allí, rodeado de sus invitados, incluso si nadie más que Nemain estaba tan cerca como para  oirlo.

Se aclaró la garganta y cambió a temas más seguros, sobre ladrones y hurtos.

-Probablemente nada más que una broma de mal gusto. Pero por si acaso, he ordenado al servicio que presten especial atención esta noche a cualquier circunstancia sospechosa y la policía está trabajando en ello. Precisamente el hombre que señalas es el inspector Ignace Brodeur, de la gendarmería francesa. Al parecer, le ha perseguido por media Europa.-El hombre había inclinado la cabeza en su dirección en gesto de saludo, cuando había notado las miradas de Charles y Nemain posadas sobre él, y Charles le devolvió el gesto.-Espero que no estés pensando en trabajo o aventuras esta noche, te aseguro que la situación no requiere de tu intervención.-Dijo, un asomo de severidad en la voz. Antes de que pudiera preguntar o indagar más sobre las intenciones de su ex-esposa para aquella noche, el caballero que Nemain había señalado se había acercado.

-Inspector Brodeaur, permítame que le presente a Lady Nemain FireStar, que precisamente se estaba interesando por el asunto de las amenazas de el Gato Negro.

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29/07/2015, 15:06
Ignace Brodeur

-Encantado, Lady FireStar.-El hombre hablaba en correcto inglés, aunque con un fácilmente percibible acento francés-Permítame asegurarle que en caso de que ese cobarde se atreviera a aparecer, ni la vida ni las posesiones de Madam correrían ningún peligro mientras yo esté en guardia. Aunque, preferiría que me presencia fuera objeto de cierta discreción-Esta última frase, dirigida a Charles.

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29/07/2015, 15:12
Lord Charles Clearwater

-Lady FireStar no sólo goza de mi absoluta confianza, sino que colabora con la policía inglesa de forma habitual. Estoy seguro de que si a alguien puede confiársele el motivo de su presencia aquí, es a ella.

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29/07/2015, 15:15
Ignace Brodeur

-Ah, excusez moi.-Brodeur había reaccionado con sorpresa ante las palabras de Charles, aunque se había recuperado rápidamente-De entre toda la gente en la gendarmería, jamás he colaborado con nadie tan encantador. Los agentes de policía ingleses son afortunados.

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29/07/2015, 23:04
Lady Nemain FireStar

Nemain sonrió ampliamente al comprobar que Charles, a pesar de todo, podía llegar a participar de un juego de palabras picante.

Cualquier lugar de esta casa estará abierto para tí, cuando desees visitar viejas memorias.

- Andrei está en la ciudad... así que por supuesto que aceptaré una breve visita cuando finalice la fiesta - concluyó maliciosa.

La presentación del francés atrajo su curiosidad, y le ofreció la mano al inspector mientras lo examinaba de arriba abajo con gesto interesado. Un inspector persiguiendo al Gato Negro...la noche prometía ser fantásticamente interesante. Durante un instante la paranoia que últimamente la inundaba le hizo sospechar de si el mismo inspector sería el tal Gato Negro, caracterizado en su más indetectable disfraz... descartó la idea por ser digna de una novela de Conan Doyle, y no de la vida real.

Los agentes de policía ingleses son afortunados.

- Lo sé - respondió con gesto travieso -, aunque agradezco que se me reconozca. No se canse de insistir, monsieur. De todos modos, para mí esta fiesta es solaz y placer, y no pienso enturbiar los gozos que de ella pueda obtener preocupándome por un ladrón de dedos ligeros, habiendo en esta sala tantos caballeros de dedos ligeros a los que dedicar mis pensamientos - y terminó la oración con una risa candorosa y delicada. Las mejor manera de deslizar comentarios impropios es envolverlos en una voz melódica, un tono de innegable pudor que desconcierte al oyente- Un placer conocerle entonces, inspector. Milord -se giró hacia Charles-, le libero de la carga de mi presencia. Sé que tiene una larga lista de invitados a los que recibir... me entretendré sonsacándole secretos de Estado al inspector -le dedicó al francés una sonrisa cómplice-, pero le recuerdo que me ha prometido un baile, Lord Clearwater. Espero que cuando termine de recibir a sus invitados me dedique algo más de su tiempo.

Con una reverencia se despidió de su exmarido, mirándole con algo de compasión por estar enfangado en los deberes de anfitrión. Buscó a Viktor con la mirada pero no lo halló. Bien, ya aparecería... ¿era posible perderse en una sala de baile?

- [francés]No he mentido al decir que no iba a preocuparme por el Gato Negro, pero sí pensaba muy despreocupadamente en inquirirle al respecto. ¿No le fascina el hecho de que hoy, en esta fiesta, se presente sin indicar qué va a robar? ¿Lo ha hecho alguna otra vez, monsieur?[/francés] -su expresión, ahora completamente natural, era la de una niña deslumbrada por el misterio y el anhelo de descubrir cada secreto, incapaz de ver el peligro obvio.

Notas de juego

 

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03/08/2015, 14:15
Ignace Brodeur

La mención de la presencia de Andrei en la ciudad meritaba preguntas adicionales, preguntas que no podían ser hechas debido a la inconveniente presencia de Brodeur, por lo que Charles, con unas excusas y una promesa de dedicarle un baile en cuanto tuviera ocasión, los dejó para cumplir con sus deberes de anfitrión. Las preguntas, probablemente habían sido tan sólo pospuestas a un momento más adecuado.

La pregunta de Nemain en el tono de conversación de salón, fue contestada en los mismos términos.

-[francés] Los ladrones reales tienen poco que ver con los de las novelas. En el mundo real, no se puede esperar de un criminal más que que se guíe por su propia conveniencia, y no siguiendo convenciones románticas[/francés]-Lo cual era una filosofía práctica para un policía, aunque no contestaba realmente lo que se le había preguntado. Aunque si Nemain deseaba seguir preguntando, se vio interrumpida por la llegada de Lady Evershine, que para la ocasión había elegido un vestido rosa adornado con peonías y encajes, y cuya falda, cubierta de tul, parecía cambiar ligeramente de tonalidad con su movimiento.

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03/08/2015, 14:55
Lady Evershine

Lady Evershine estaba en ese momento lamentablemente viuda. Su último marido había sido un humano cuya mayor cualidad había sido el sentido común de pasar el tiempo en el campo y dejar que su mujer feerica hiciese lo que desease en la capital sin molestarla demasiado y que había muerto hacía 10 años, dejándole suficientes propiedades y dinero, que se sumaban a las nada despreciables que ya poseía, para permitirse el estilo de vida que quería.

Miembro de la corte leal, más por conveniencia que por convicción, Lady Evershine no solía mezclarse en asuntos políticos excepto cuando era necesario, considerándolos temas absolutamente aburridos y prefiriendo entretenerse en asuntos más ligeros, tales como los eventos de la vida social londinense. Pero quien confundiese esa preferencia por falta de inteligencia probablemente se desengañaría rápidamente, tal y cómo habían descubierto los sobrinos de su marido cuando habían intentado reclamar su herencia.

Se acercó a Nemain, caminando con la gracia propia de una feerica, y con aquel aspecto etéreo y angelical que poco correspondía con su caracter, y que ella se esforzaba en cultivar.

-Nemain, querida, cómo me alegro de que hayas podido venir. -Dijo sonriendo, golpeándole el brazo juguetonamente con un abanico a juego con su vestido-Temía que no deseases acudir sin tu marido, pero me alegro de que hayas decidido hacerlo. La única queja que puedo tener contra ti es que parece que los caballeros más apuestos de la reunión hayan decidido intentar compensarte por su ausencia dedicándote sus atenciones. ¿Puedo preguntar el nombre de tu compañía?-preguntó, dándole a Brodeur la mano para que se la besara.

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17/08/2015, 19:14
Lady Nemain FireStar

Evershine.... Envernuisance, mas bien. Ramera incordiante.

- Qué placer verte, querida -obvió cualquier tipo de referencia a Andrei.

Sería interesante poder observar la conversación que tenía lugar bajo la superficie, bajo los "querida", los "qué adorable" y los "encantador". Una conversación que probablemente tendría más que ver con diferentes versiones de  Nemain espetando "aparta tus sucias garras de Charles" y de Evershine respondiendo "oblígame, puta".  Claro que siendo ambas dos damas,  la conversación sumergida tendría que quedarse ahí, con sus verdades como puños y su violencia compacta, acumulada, primal. A veces Nemain pensaba que era una suerte que ella fuera mujer de encaje y joyas, pues si de niña alguien la hubiera puesto una espada en la mano hoy los cementerios estarían bastante más saturados. Quizá llegara el día -sobre todo si Evershine finalmente conseguía lo que buscaba de Charles- en que tendría que llegar a las manos con esa ramera cursi. Sonrió internamente pensando en degollarla con hierro... pagaría gustosa  el dolor y las heridas en su propia mano con tal de verla sufrir.

Sonrió al francés, una sonrisa igualmente traviesa a las anteriores, sin cambiar su trato hacia él la revelación de la presencia de un esposo. El juego era incluso más divertido así.

-Dejaré que mi encantador interlocutor se presente por sí solo - puesto que estaba de incógnito, sería mejor permitir que el hombre se presentara a su conveniencia- pues no voy a privarte del placer de recibir un cumplido de un caballero francés. Mi querido señor- se giro hacia Broudoir- esta dama de deslumbrante aspecto es lady Evershine. Puedo garantizarle que ahora que la conoce, su vida será mucho mas entretenida - sonrió educadamente. Evershine la aburría, con su interés por acomodarse en la correctísima sociedad feérica de los luminosos-. Y dime, ¿no te parece una celebración deliciosa? -mientras llevaba la conversación a temas banales, buscó con la mirada por la sala otros feéricos conocidos. ¿COn quién habría venido Evershine?