- Si eres la mitad de buena compañía que de alto, y puedes desprenderte de 1 moneda de plata diaria, aceptaré el trato. Cazaré para nosotros, pero la manutención extra que desees corre de tu cuenta. Si encontramos cualquier cosa que valga la pena que podamos repartir, quedas exento de ningún pago, y te reembolsaré lo que ya lleves pagado. - comenzó Dyshire, muy segura de sí misma. - pero se acabó lo de tratarme como una ladrona. Pido lo que es justo, y tan solo porque debo reponer unas herramientas que perdí durante el largo viaje a este lugar. - "este lugar" sonando casi con asco - Tampoco he venido aquí a ganarme la vida con esto; tengo una misión que cumplir y cuando la termine y no necesitéis de los servicios que me comprometo a prestaros, me iré. Si estáis de acuerdo, hemos hecho un trato. - tras esto Dyshire se levanta, mientras se desenguanta la mano derecha que, aunque femenina, parece curtida, tal vez en el campo. Se la tiende a Akka mirándolo directamente a los ojos.
Poco después Dyshire sale de la taberna. Puede que las cosas no estén saliendo tan mal como esperaba cuando vio el pueblo metido en su sucio y oscuro agujero, al bajar la cañada. Hizo un gesto de disgusto hacia un costado, al salir al frescor del atardecer bajo el manto de olor a hollin de Lago de Diamante, y camino un breve trecho a grandes zancadas, hasta alcanzar a la mediana.
- Te robo a tu novia un momento, Sir Simpatía - dijo hacia el enano, guiñándole un ojo a Nita, cuando Erthank no pudiera verlo.- Gracias por el cumplido de antes, encanto. Perdona si no te respondí en aquel momento. Atenta en el negocio que tenía entre manos me cogiste desprevenida. Pareces conocer bien este lugar; me gustaría pasear contigo un rato y charlar. Creo que a las dos nos vendrá bien ir conociendo nueva gente. Además puede que acabemos viajando juntas. Te cambio cualquier chismorreo por un truco sobre una flor que disimulará cualquier olor, sin que sientas nada extraño. - Dyshire rebusca en su capa de viaje y saca un par de florecillas con aspecto de tulipán pequeño, de color blanco rosado.
Tirada: 1d20
Motivo:
Resultado: 11
Esto ocurrirá supuestamente después de que:
1- Akka acepte mi trato y quede con él para después de una hora en esa misma posada
2- Akka no acepte, y decida que no me queda nada más interesante que hacer en esa posada.
Cuando sepa la respuesta haré un flashback recordando el momento.
La tirada del costado es la de Wix para esconderse en mis ropas ( esconderse = 21); no le gusta dejarse ver.
hemos hecho un trato
en una hora pues, estaré aqui listo para partir
cuando sale en busca de Nita, me acerco hacia la puerta, mientras pronuncio una pequeña oración que me permita desvelar a qué tipo de persona he contratado.
"Oh poderoso Heironeus, presta tu ayuda a este humilde sierve para poder discernir entre el bien y el mal que me rodea"
intento detectar el mal sobre Dyshire y Nita (si está cerca).
Como Nita es bastante curiosa y se fija en los demás tiro avistar por si ve a la serpiente de Dyshire, sacando un 21 (soy muy curiosa ;-P ).
Tirada: 1d20
Motivo:
Resultado: 20
Ya está el paladín haciendo de las suyas, ¡Míralo, eh!¡Miralo, eh! XDDDDD
Ignacio tú diras si veo o no a la serpiente.
A continuación, vuelvo a la mesa donde estaba Namarth
bueno Namarth, durante el viaje me podrás contar tus inquietudes respecto a Balabar, ahora tengo que ir preparar mis cosas para el viaje.
Y tú, Redgard, ¿Nos acompañaras para ver qué le ha sucedido a esa pobre chiquilla?. pronunciando estás palabras, me doy la vuelta y me dirijo hacia la salida de la posada.
Una vez que me hayan contestado (si lo hacen), me voy a la capilla para hablar con Valkus del viaje y coger mi mochila con mis cosas.
Contestando a Akka:
Balabar es el cancer que corroe esta tranquila villa. Sus maquinaciones son un secreto a voces, un problema constantemente ignorado por las autoridades, siempre temido por el ciudadano de a pie.
El motivo por el que mi odio hacia él se ha vuelto personal está relacionado con Nita, y no podría contártelo sin sentir que traiciono su amistad. Es una chica de buen corazón, si pruebas ser de fiar, y creo que lo harás, ella misma no tardará en sincerarse a ti.
Hemos hablado de quedarnos en la taberna cuando hayan cerrado, y el máster no me ha corregido. Por eso supongo que es de noche. Pero bueno lo que vosotros querais. Además he borrado ese post porque entre medio el máster ha posteado una cosa y espero que la resuelva.
Tras cuchichear durante unos instantes, Dyshire alza la cabeza hacia el enano, que se aleja en la distancia y dice a gritos:
- ¡Eh! - se vuelve hacia Nita - se llama ¿Erthank? - vuelve al enano - ¡Eh, Erthank! ¡ No te olvides de pasarte en una hora por la posada; todavía tienes mucho que demostrar ahí fuera. - Dyshire señala en dirección a los túmulos y luego pone los brazos en jarras. - Dudo que a un hijo de Moradin le apetezca perderse los secretos que pueda haber bajo tierra, en los túmulos. Pásate luego. En el peor de los casos te llevarás una cerveza, y en el mejor, viajarás con dos bellezas. - acto seguido vuelve a los cuchicheos con la mediana.
No puedo estar más de acuerdo contigo. Por lo que yo sé y lo que me ha contado mi Señor, es un tipo tan despreciable como peligroso.
Acercándome a Namarth y bajando la voz:
De todas formas, si la necesitas, cuenta con mi ayuda para desemascararle y llevarle ante la justicia
Primero contesto a Namarth (un pequeño flashback) y luego sigo con Valkus en otro post
Dyshire y Nita se pierden por un callejón, intercambiando impresiones y palabras durante un rato. Unas pequeñas luces, como si alguien encendiera una pipa, parecen brotar del callejón en un momento determinado. Luego todo vuelve a la normalidad. Tras un tiempo de charla, regresan del mismo callejón, volviendo hacia la posada contentas y sonriéndose.
Volvemos a reunirnos con los demás, para que podamos charlar de la excursión. Nita, entre tanto, mándame lo que quieras de la conversación que llevábamos, y así matamos dos pájaros de un tiro.
Escuchadme un momento, no sé si me arrepentiré de esto ni si quiera Namarth sabe de su existencia, hay una vieja mina abandonada donde me escondo a veces que nos puede servir para planear el viaje sin escuchas indiscretas. Podéis llamarme paranoica pero seguro que a estas alturas Balabar sospecha algo.