Tranquilo Namarth, no pasa nada. Dysh me estaba explicando cómo hacen magia los druidas.
Oye para que veas cumplo voy a bañarme mientras se hace la comida. No os lo comais todo. Es mi primera comida decente en un mes.
Nita se levnata de la mesa, pregunta el tabernero si ya ha colocado el barreño con agua en el cuarto del gnomo y ante el asentamiento de éste se dirije a asearse.
Me baño y lavo la ropa. Aprovecho para adecentar un poco la armadura y colocarmela.
Nita vuelve al cabo de media hora. Tras la limpieza concienzuda se pude ver una piel tostada tirando a rojiza, un pelo negro y corto, y unos profundos ojos oscuros. Viene vestida con una armadura de cuero muy ceñida y que ha conocido mejores tiempos, aunque se ve que acaba de ser tratada con grasa de animal pues reluce bajo las luces del comedor.
Al pasar al lado de la barra el camarero le devuelve el dinero y le dice que todo está pagado.
Namarth, seguro que esto es idea tuya - dice un poco molesta mirando a la mesa en busca del gnomo - agradezco tu intención pero es la primera vez que puedo invitar a un grupo de personas a comer conmigo y eso es algo que, pese a tus buenas intenciones, no puedo permitir que me quites. Se vuelve hacia el tabernero y le contesta: insisto en pagar yo, arréglate luego con Namarth.
Dejando las monedas encima de la barra se acerca y se vuelve a sentar entre Dysh y Namarth. ¡Comida de colores! Gracias, gnomo. No sé que haría sin ti.
Y una pequeña lágrima se desliza por su mejilla.
Sentandome de nuevo en la mesa
Siento mucho mi ausencia. Por lo visto, tengo que agradecer a alguien esta suculenta comida
Mirando alternativamente a Dyshire, Namarth, Nita, Redgar y Erthank
Esquivando la comida de colores de Namarth me siento en un lado y, entre bocado y bocado comento:
Podríamos ir a ver al cartógrafo. Por si tiene algo que nos pueda aportar alguna información
Ya he visto el mapita de la zona, pero bueno, por si tiene algo más o para justificar que tenemos este.
A mi me hace mucha gracia la comida de colores, le da un toque distinto. Hace como si estuviera en países lejanos comiendo frutas exóticas.
De cerca y con la piel limpia se vislumbra sobre su piel el amarillo de golpes prácticamente curados.
Supongo que esperaremos a Redgard y Erthank. Pues nada seguiremos interpretando.
- Hola Akka. Nita pidió algo para que fueramos llenando el estómago antes de partir. Estábamos haciendo tiempo mientras todos volvíamos. Puede que ese Erthank se pase algo más tarde. Supongo que le picará el orgullo enano. aun así, en zona de minas, debo de reconocer que nos puede ser muy beneficiosa la presencia de un enano. - Nita deja un poco de hueco al lado contrario de Nita, para que Akka se siente a su lado. - Hay algo sobre lo que me gustaría compartir vuestras impresiones y conocimienots más adelante, para poder valorar posibles peligros de este paseo. Tal vez hayáis oído algo sobre ese particular... esperemos a que venga ese hijo de Moradin (si es que se digna a aparecer), y vayamos a ese escondrijo que Nita nos ha proporcionado. - termina Dyshire con un pequeño golpecito a Nita con el codo.
Erthank aún no está en la posada. Ha ido a vete tú a saber qué: puede que a ver al cartografo.
Haciendo un gesto con la cabeza hacia las zonas amarillentas
Siento parecer un intrometido, pero ¿que pasó?
Supongo que por eso eres un poco escéptica con al gente que te quiere ayudar. Bueno, si no te apetece hablar del tema, lo entiendo
y tú, Redgar, estás muy callado
Deduzco que ha sido maltratada por el comentario que me hizo anteriormente Dyshire
Bueno son cosas distintas. La vida no ha sido fácil pero de eso sólo tiene culpa la gente que me mantiene como esclava. Mi resentimiento es contra un paladín que pasó por aquí hace años, es lo que me ha hecho odiar de antemano a todos los de tu clase. Quizá otro día, no quiero volver a ponerme furiosa. Estoy contenta de encontrar gente distinta y brindo por ello.
Nita se pone en pie encima del taburete y alza su jarra de cerveza brindando por sus nuevos compañeros.
Tras pasar por la alianza, vuelvo a la taberna. De mis posesiones únicamente he cogido mi gran hacha (tan grande como yo), la cual llevo al hombro. El resto está en mi habitación.
Buff, ¿es que no me espráis para comer? ¡Pero posadero, qué mierda de comida es ésta! ¿Desde cuando las patatas son azules y la cerveza rosa? - Erthank pone cara de asco. - ¡Ponme un estofado como Moradin manda, y una cerveza digna de un rey!
Me siento a comer, con el hacha cerca mío.
Ya siento la tardanza chicos. A mi también me gustaría participar en estas conversaciones, pero me es imposible contestar antes de esta hora debido al curro. Pero vosotros divertíos, a ver si ahora vosotros no váis a poder tener vuestras conversaciones porque yo tarde en responder, faltaría más ;P
Por cierto, no hago más copmentarios porque se supone que yo no estaba en la conversación, a pesar de que sé todo lo que habéis hablado.
Desde luego, los únicos que tenemos sentido del humor somos los gnomos y los medianos
Con lo bonita que es mi comida de colores...
Por cierto, Erthank, no se si te lo han dicho, Nita conoce un lugar donde podremos hablar tranquilos, cuando lleguen los demás iremos allí a planificar el curso de acción