Partida Rol por web

Los Caprichos de las Nornas

Capítulo 2: Deuda de Sangre

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26/08/2015, 17:45
Uthred Svensson

   - No... - Negué rotundamente con la cabeza. - Tú no te sentarás al lado de los Dioses en el Valhalla. No tendré contigo la misericordia que no tuvisteis con Ívarr. Solo si delatas a Gunnar, entonces morirás con una espada en la mano. Es sencillo, delatas a Gunnar formalmente, y combate. Pero has decidido callarte. Dale recuerdos a Hela de mi parte...

   Me cercioré de que no tuviera ningún arma a mano, así que aparté su espada y la de su compañero. También le quité todo lo que pudiera llevar encima y usar como arma. Entonces así con fuerza mi espada, balanceandola antes de asestar el golpe final. Quizá al ver venir el filo y saber el futuro que le espera recapacite. Seguía pensando que era inutil matarlo, pero no me estaba dejando más opciones. Alcé mi espada y esperé solo unos segundos para darle una oportunidad más antes de abrirle en canal.

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27/08/2015, 23:30
Harald Erikssen

Empiezo a estar harto de tanta intriga y tanta confusión. Añoro estar en mi bosque, allí todo es claro y sin dobleces. O estar en el barco de expedición, allí se sabe perfectamente quien es el enemigo y quien el amigo. Sin embargo, no voy a abandonar, la memoria de Ivarr merece que siga adelante.

Una vez repuesto de mi pequeño bajón anímico, me pongo a pensar en el siguiente paso, puesto que no parece haber nadie a quien interrogar sobre lo sucedido aquí. En esas veo a nuestro compañero al que habíamos dejado atrás y me acerco a él, para ponerle al corriente y preguntarle a mi vez.

Erik, parece que hemos llegado tarde. Aquí hay señales claras de lucha, pero ningún rastro que podamos seguir ni nadie a quien podamos preguntar. Quizás debamos buscar a la guardia de la ciudad para enterarnos mejor o bien ir al punto de reunión acordado y esperar que acudan allí. ¿Que nos cuentas tú?

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28/08/2015, 01:04
Haakon Rasmussen

Ni un alma... me preguntaba si de algún modo podía haber ocurrido algo aún más llamativo que una lucha para apartar a la gente del lugar de aquél modo. Normalmente la ciudad hervía con los cuchicheos y los rumores.

- En mi opinión deberíamos ir al lugar de encuentro. Nosotros conocemos el motivo por el que podrían no acudir, pero ellos no saben de nosotros y sería terrible que nos esperasen sin saber porqué no nos encontramos ya allí. -

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28/08/2015, 15:36
Director

En la calle, con el charco de sangre enorme presidiendo todo y con las dudas de qué hacer a continuación, Erik, Haakon y Harald se reunen. Miran a su alrededor, sabedores de que deben tomar una decisión: volver al punto de reunión, intentar descubrir algún rumor o, quizás, buscar entre las pisadas algún rastro.

La noche está cercana. El sol ya no se ve en el firmamento y las aves nocturnas empiezan a ser audibles. Desde el interior, el aire sopla en dirección hacia las cercanas marismas y, desde estas, hacia el mar.

Los tres están a punto de marcharse cuando tres sombras aparecen. Los músculos se tensan. Las sombras avanzan. La luz es escasa, es difícil identificar al trío que se acerca. Poco a poco, las manos se van acercando a las armas. Pero, de repente, las fibras de brazos y piernas se destensan cuando por fin, los ojos se acostumbran a la penumbra e identifican a los que vienen: Bernt, Björn y Uhtred. Sus caras muestran cierta decepción. Björn está herido, aunque el sueco es un hombre resistente y no parece quejarse mucho.

Pronto descubrirán los tres que han venido desde el punto de encuentro que el interrogatorio ha sido fructífero hasta cierto punto. La marisma recogerá a dos cadáveres en su seno que servirán de alimento a peces y cangrejos. Uno de ellos llegará hasta Hel con la cabeza entre las manos.
 

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29/08/2015, 23:19
Harald Erikssen

¡Al fin os vemos! - exclamo alborozado, yendo al encuentro de nuestros compañeros. Ha costado reconocerlos, pero tras el primer momento de tensión, siento un gran alivio al ver que siguen bien, aunque un poco herido Bjorn. - Oimos rumores de una pelea con hombres de Gunnar y vinimos corriendo, pero está visto que llegamos tarde. Esto último lo digo con un poco de malestar, me hubiera gustado estar junto a mis compañeros.

Supongo que tendréis mucho que contarnos ... - dejo que muera ahí la frase, con un tono que les debería invitar a hablar.

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30/08/2015, 00:07
Uthred Svensson

  Asentí, con una sonrisa en los labios. Miré al mercenario, implorante. Y recordé la muerte que tuvo Ívarr.

   - No... no te veré en el Valhalla... - Y lentamente hundí mi espada en sus entrañas, sintiendo como la vida del mercenario se escapaba de su cuerpo entre sorprendidos gorgoteos de protesta. Ahora no parecía tan predispuesto a morir, quizá lo hubiera pensado mejor. Pero ya era tarde. Lentamente el filo de mi espada abría su tripa y sus entrañas y se movía de un lado a otro para hacer la herida más grande y el destrozo mayor. En todo momento le miré a los ojos, hasta en el instante en que quedan vacíos y la vida se escapa de ellos. Ese perro no se sentaría en la Mesa de los Heroes. - Vamonos de aqui... - Dije mientras limpiaba mi espada y la envainaba, empujando el cuerpo para que las marismas se lo tragaran.

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30/08/2015, 00:12
Uthred Svensson

Avanzaba con pasos pesados, frustrado por no haber conseguido algo contundente. Al final... al final les mostraría a todos mi plan. Un plan descabellado y cruel pero que mataría al perro antes de que extendiera la rabia. La noche se cernía sobre nosotros y volviendo de las marismas, al pasar junto a la taberna, vimos tres sombras. "Hombres de Gunnar", fue mi primer pensamiento. Eché mano de la espada, que estaba desenvainada cuando reconocí la voz de Harald. Negué con la cabeza.

   - Vamonos de aqui. Desgraciadamente no hay mucho que contar. Los perros solo saben ladrar. Pero tenían collar. Un collar reconocible... El collar de Gunnar. Vamonos. - Les hice a todos un gesto con la cabeza, porque no era bueno volver por aquí. Cualquiera podria reconocernos de la pelea, o el chivato podía seguir suelto. Con suerte, vendrían hombres de Gunnar, sin suerte serían hombres del Jarl y tendríamos que vernoslas con la justicia. Me encaminé hacia casa de Ishild, donde habiamos quedado para ponernos al corriente de nuestras pesquisas. Entonces me fijé en Erik, quien habia de ir a ver al Jarl con quien estaba emparentado. - ¿Como ha ido, Erik?

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31/08/2015, 01:53
Haakon Rasmussen

Mientras caía la oscuridad pensé alterado en el sueño, quien sabe si profético o delirante, sobre los lobos y el bosque. Ya era muy tarde para hoy, habíamos empleado el día entero en pesquisas e indagaciones y lo habíamos olvidado por completo. Solo podía confiar en que si de verdad se había tratado de un mensaje de los dioses, no hayamos subestimado su importancia.

- Amigos... - susurré sorprendido, pero aliviado de que hubieran vuelto justo en el momento en que dudabamos de si acudir al otro lugar de reunión. Harald se adelantó y expresó casi todo lo que los tres pensabamos al enterarnos de la lucha que habían librado, y le dejé hacer. No necesitaban que les agobiasemos con nuestra preocupación.

Sin embargo, en cuanto me fijé en una mancha de sangre en la ropa de Bjorn, no pude contener una exclamación. - ¡Estás herido! - dije más alto de lo que pretendía. Me acerqué con intención de examinarle, pero me detuve con la mano extendida, antes de llegar a tocarle - ¿como ocurrió? ¿es grave?  -

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31/08/2015, 15:46
Björn Eriksson

Björn se apreta la herida, pero parece más aparatosa de lo que en realidad es. No es ni de lejos la peor herida que ha sufrido el sueco, ni probablemente sea la última. Niega con la cabeza ante la pregunta de Haakon. Tal vez Ishild pueda hacer algo más, dado que ella está especializada en curación.

Muchas cosas han pasado, incluso el tiempo haciendo que la noche haya caído sobre vosotros. Mucho más queda por contar.

Notas de juego

Continuad, chicos.

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31/08/2015, 22:51
Harald Erikssen

Al final, el cansancio de un día muy intenso empieza a hacerme mella y lo que me apetece es irme a descansar. - Acompañemos a Björn a casa de Ishild para que le eche un vistazo a esa herida y allí nos ponéis al día, con más tranquilidad. Después deberíamos descansar; quizás no deberíamos imponerle nuestra presencia más a Ishild, pero si que alguien debería quedarse por si acaso de guardia en su casa y el resto reunirse para el desayuno.

 

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02/09/2015, 11:21
Bernt Karlssen

Aprieto los dientes cuando Uthred deja caer la espada sobre el mercenario. Es su promesa, no la mía, pero esa traición de mi compañero no me parece legítima. No digo nada, pero cuando nuestros ojos se cruzan, se puede leer una sombra de reprobación en ellos.

Pese a todo, la escoria se lo merecía, claro.

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02/09/2015, 11:33
Bernt Karlssen

Por un momento, estoy a punto de abalanzarme contra las sombras que se acercan, convencido de que son hombres de Gunnar de nuevo. Pero me contengo, a tiempo para reconocer a mis compañeros.

Estoy de acuerdo, vayamos a casa de Ishild. Allí podremos hablar con más calma, y cuanto antes nos alejemos de la ciénaga menos peligro habrá de que alguien nos descubra. Al menos hay dos perros menos en la perrera de Gunnar.

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02/09/2015, 17:23
Director

El camino hasta la casa de Ishild lo hacéis en silencio, cada uno pensando en sus cosas, concentrados. Estáis atentos para evitar cualquier encuentro con la guardia o con los serenos que van iluminando las calles principales con antorchas, pues la noche ya ha caído sobre la ciudad. Las sombras son vuestras mejores aliadas.

El paso de Björn es lento, pero seguro. La sangre sigue saliendo de sus heridas, pero a un ritmo bajo, gracias a la presión que se ha aplicado desde el primer momento como lo haría cualquier guerrero experimentado. Con unos trozos de ropa ha improvisado una especie de venda que ha cortado parcialmente la hemorragia. Pero todos sabéis que cuanto antes sea tratado, mejor. Siempre se puede infectar la herida.

Las callejuelas están silenciosas, apenas alteradas por los ruídos de algún borracho o de animales buscando su sustento entre los desperdicios que la gente ha tirado. El olor de la porquería se mezcla con el regusto metálico de la sangre.

Por fin, tras unos minutos de tensión, llegáis a casa de Ishild. Desde que volvisteis no habéis tenido lo que se dice una vida tranquila. Delante de la puerta os encontráis a la viuda de Ívarr reunida con las viudas de los hermanos Thurgilssen. Os ven llegar.

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02/09/2015, 18:04
Erik Kodranssen

-Ishild. Unas palabras en privado, por favor. Hay algo que llevo tiempo rumiando para mi y creo que podria ayudar a encontrar la solucion a algunos de nuestros problemas. Debes ser la primera con quien lo hable, despues se lo explicare a los demás, si estas de acuerdo, claro.

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02/09/2015, 22:21
Harald Erikssen

Iba a saludar a Ishild y a sus compañeras - seguramente será aquellas con las que nos dijo que iba a preparar la cena - pero dado que Erik se ha adelantado a hablar, cierro la boca y espero pacientemente a la respuesta de Ishild.

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03/09/2015, 19:56
Uthred Svensson

  Mi camino hacia casa de Ishild es lento y sombrío. Le habia arrebatado la vida a un hombre, y además le había privado de la gloria eterna. La mirada de Bernt, reprobadora, todavía se clavaba en mi interior y en el fondo sabía que no era de recibo arrebatarle a un guerrero su legítimo derecho de compartir la mesa con Odín. No en vano, tanto amigos como enemigos se daban cita en el Valhalla y al final, en el Fin de los Tiempos, todos lucharían codo con codo contra las fuerzas de la oscuridad. Pero, por otro lado, ¿acaso no le habían arrebatado ese derecho a Ívarr?

  Saludo a Ishild y a las viudas de los hermanos Thurgilssen con una respetuosa inclinación de cabeza.

  - Distraerme a los guardias, dadme unas antorchas y atrancar la puerta de la casa de Gunnar. Iba a terminar pronto con el problema... - Mascullaba para mis adentros aunque lo hice en voz alta.

  Entonces me acerqué a las viudas de los Thurgilssen, dado que Erik se habia llevado a Ishild a un lado para consultarle algo, yo me dispuse a ayudar a las mujeres. Queria, al menos, algo en lo que entretenerme.

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04/09/2015, 00:12
Bernt Karlssen

No me gusta el comentario de Erik. Parece que el guerrero se haya estado guardando algo para sí, y eso no ayuda en una situación como esta. Quizás sea la tensión de los últimos días, pero sus palabras me irritan y no puedo evitar interceder.

-Si hay algo que sepas y nosotros no, Erik, deberías decírnoslo a todos. Pienso que quieres proteger a Ishlid, pero no es momento para andar con remilgos, nuestras vidas están en peligro. Y, lo que es más importante, vengar la muerte de Ívarr también.

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04/09/2015, 00:30
Haakon Rasmussen

Caminé con lentitud mientras nos dirigíamos a la casa de Ishild. En mayor parte estaba aliviado por habernos encontrado todos de nuevo, pero aún conservaba alguna preocupación por la herida de Björn; además, aún no nos habían contado lo que había ocurrido exactamente, aunque no pregunté por ello; imaginaba que nos contarían todo cuando fuera el momento.

Me sentí un poco más alegre en cuanto llegamos a la casa, pero esa alegría quedó eclipsada casi enseguida por incredulidad. Podía entender que hubiera algo que Erik no quisiera decir delante de las viudas de los Thurgilssen, por ejemplo, pero el modo de hablar de Uthred, aunque fuera en susurros y la replica de Bernt me dejaron atónito. No creía que fuera el momento adecuado para aquellas salidas de tono, sobre todo cuando algunos de los presentes ni tan siquiera estaban al tanto de nuestras sospechas sobre Gunnar.

- Bernt, esto no ayuda. Tampoco tenemos tiempo para cuestionarnos entre nosotros. - intenté entablar un tono conciliador - solo déjalo estar -

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04/09/2015, 09:06
Erik Kodranssen

-Bernt. Tu suposicion es tan errada como llamar pato a un aguila. Si he pedido unas palabras en privado con Ishild es porque debo hablar en privado con Ishild de un asunto privado. Depues de hablar con ella, ella decidira si queda entre nosotros o no, no es de tu incumbencia en realidad. Es mas, me ofende que creeas que se algo que te estoy ocultando y nos afecte a todos.

Quiero pensar que tu intencion no era ofenderme con tus insinuaciones y que si lo has hecho ha sido por los nervios del momento. Primero hablare con Ishild, despues con los demas. Hemos de encontrar al responsable de que Ivar nos falte y hacerselo pagar, que lo pague por toda la eternidad.

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04/09/2015, 09:14
Harald Erikssen

¡Por los dioses, tranquilizaos todos! - no pude por menos exclamar - Bernt, creo que sé de que quiere hablar Erik con Ishild y te aseguro que no es nada que sepa él de más. Y Erik, quizás hubiera sido mejor que lo aplazases para otro momento, pero ya que está dicho...

Confiaba en que se serenase todo el mundo. Ya teníamos bastantes preocupaciones como para que encima hubiera rencillas entre nosotros por simples malentendidos. Sin duda, Loki se estaba divirtiendo a nuestra costa.

Ya es tarde, estamos todos cansados y sometidos a una gran tensión, pero no permitamos que esto nuble nuestro juicio. Acabemos de hablar y vayámonos a descansar. Ishild - me dirijo a la dueña de la casa - creo que no debemos imponerte más la presencia de todos, pero que quizás fuera buena idea que alguno se quedase aquí de guardia. Quizás alguno de los que no tenemos familia de la que preocuparnos fuesemos los más indicados, pero tu decides.