Partida Rol por web

 Sonrio para mi mientras me sorprende de lo que puedo llegar a hacer con mi forma. 

El por qué se habían parado delante de la puerta sin llamar era todo un misterio para mí, pero por si acaso y en vista de que podía crear campos de fuerza que no se vieran, comencé a intentar hacerlo antes de que incluso llamaran a la puerta. Kenshiro podría defenderse bien de los golpes, seguro, pero Peter y yo necesitaríamos algo más de protección si la cosa se ponía fea.

- Espero que me esté convirtiendo en una paranóica y no pase nada malo.. 

En cuanto cree la barrera hice un gesto a Peter, para que supiera lo que acababa de hacer. No podría usar la telequinesis para nada más pero podría seguir moviéndome con naturalidad, que era lo importante.

A que estan esperando esos dos fuera de la puerta... puede que tan solo se hayan equivocado de puerta pienso sin bajar la guardia, que yo sepa las chicas son las únicas sin poderes defensivos, yo puedo defenderme detras de mis alas y Kenshiro tiene fuerza de sobra pero los suyos tienen otra clase de utilidad así que me mantengo cerca de Megan para envolverla con mis alas de ser necesario protegerla.

Todo transcurre bastante rápido.

La puerta del baño se abre de par en par y de allí dentro sale una tromba de agua con forma de mujer que serpentea por toda la habitación, al mismo tiempo, Megan levanta una barrera invisible que sólo ella puede sentir que está alzada.

Los dos hombres que estaban en la puerta parecen que caen en ese momento al suelo, ya que desde dentro, escucháis dos golpes secos y las sombras de las piernas que antes estaban en la rendija de la puerta, ahora han cambiado a una sombra que la cubre por completo.

Giré la cabeza para ver a Elisabeth y a pesar de lo tensa de la habitación sonreir por su cambio, aunque en seguida la hice un gesto para que se ocultara, señalando después mis ojos y la puerta, queriéndola decir que había alguien ahí y que no sabíamos quién era, aunque que Peter y yo no estuviéramos a la vista de la puerta debía de haberla servido de aviso..

Peter se quedó cerca mío, con lo que suponía que no había entendido lo de que había creado una barrera para cubrirnos a ambos, pero no quería hablar, así que no dije nada.

Mi vista se volvió de nuevo hasta la puerta, hacia donde tenía que asomar apenas la cara para poder verla, ya que mi cuerpo estaba tras la esquina de la pared, pero ahora todo me daba peor espina aún..

- ¿ Se estaban deshaciendo de las personas de delante de la puerta y ahora había una sombra que ocupaba toda la puerta? No podía creerme aquello.

Parece que hay como una discusión fuera y posiblemente una pelea estoy calibrando nuestras opciones cuando las aparición de Elisabeth me coge por sorpresa, ¿que narices es esa forma que a adoptado?

Miro a Kenshiro de manera interrogativa no se si se decidira a abrir él la puerta para saber lo que esta pasando.

 Sonrio mientras recogo el agua con cada paso, para que no quede ningun rastro. Me pongo a un lado, transparente, como si fuera la pared mientras espero. 

Vamos, entra lo que seas, estoy preparada para lo que venga. Yo y mis compañeros

Todo pasa bastante rápido, y mis nervios que estaban casi como un resorte reaccinan con años de entrenamiento de artes marciales ante la tromba que sale del baño , por fortuna tambien gane un gran autocontrol que me permitió detener mi golpe poco antes de golpear a la mujer de agua ,cunado por fin mi cerebro registró que no podia ser otra que Elisabeth.

Justo en ese instante se ollen dos pequeños golpes sordos como de dos cuerpo al caer y las sombras ocupan toda la puerta. Miro a los demas para pedirles que esten preparado y me adelanto dos pasos abriendo la puerta para ver que es lo que nos espera detrás.

Cuando Kenshiro abre la puerta, para vuestra sorpresa, podéis ver a dos hombres vestidos con túnicas oscuras y cuyas capuchas cubren sus rostros.

Las túnicas son negras, con ribetes dorados en los bordes y también en las mangas, justo al final. El hilo de oro recorre casi toda su extensión y hasta podéis ver un simple garabato bordado en uno de los hombros, el derecho, de cada una de las túnicas.

El bordado se parece a una especie de cruz con unas alas, algunos lo podéis reconocer de algún libro o pelicula que habréis visto en vuestro tiempo.

La piel de los hombres, por lo menos la que podéis ver ( sus manos sobre todo ) parece la de un anciano de 80 años. Dos armas semiautomáticas están caidas a su lado mientras estos, parecen estar sin vida tumbados de manera antinatural en el suelo. Aunque uno, parece querer respirar con dificultad...

 Arqueo una ceja tras ver el dibujo, vale yo no he podido hacer eso o tal vez si.

La acción de Elisabeth hace que el hombre se recupere un poco.

Justo en ese momento, cuando abre los ojos despacio sin saber que ha pasado, ve una masa de agua y tras ella, tres personas más.

Rápidamente intenta coger su arma, la cual la tenía a su lado, pero está demasiado debil como para actuar.

Su compañero, está muerto.

 Yo de ti no haria eso, por que igual que te he dado agua puedo quitartela. Asi que sera mejor que nos digas quien eres, quien te envia o hare algo de lo que te aseguro no tendre ninguna pesadilla en toda mi vida.

Le miro con frialdad mientras esbozo una sonrisa. Ademas ese arma dudo que pueda hacer algo al agua

El hombre no responde.

Simplemente se queda quieto en el lugar resoplando.

Todavía no tiene fuerza suficiente para hacer nada, su piel, aunque algo mejor, todavía tiene una textura de un hombre de 80 años.

Levanto una ceja por la actitud del hombre despues de que Elisabeth le haya salvado la vida asi que doy un par de pasos al frente desplegando mis alas para cubrirla con una de ellas mientras yo mismo me refugio tras la otra.

Quiza un poco de gratitud hacia quien le salvo su vida no le vendría mal digo mientras me acerco a el para arrebatarle el arma, mientras caigo en la cuenta que es posible que Elisabet tenga razón y en su nueva forma no tenga que temer de las armas pero como no estoy seguro prefiero asegurarme.

Esperaba ver a alguien apuntándonos directamente a la cabeza o simplemente alguien que hiciera alguna cosa rara, en plan como nosotros, lo que no esperaba era encontrarme a nadie tirado en el suelo y eso me rompió todos los esquemas.

Me quedé observando, sin demasiados ánimos de acercarme no fuera a ocurrir alguna desgracia, aunque cuando vi que echaba mano al arma después de que elisabeth le ayudaba deshice la barrera que había creado a nuestro alrededor para poder usar la telequinesis de nuevo y hacer que las armas flotaran hasta el interior de la habitación, lejos de donde él pudiera alcanzarlas.

- Sólo me faltaba que me cosieran a balazos ya..

Las armas vuelan hacia dentro de la habitación mientras que Peter se acercaba a los hombres que estaban allí tendidos en la puerta, dónde cualquiera los podría ver. No era difícil imaginar que esas armas no eran de esta época y que sus vestimentas también eran bastante extrañas, pero los que os llamó poderosamente la antención fueron un par de cosas que sucedían al mismo tiempo que vuestras acciónes.

Primero, una brisa fresca comenzó a recorrer la habitación moviendo papeles y demás objetos livianos que había por allí. La brisa fresca, rapidamente pasó a ser una brisa con un olor putrefacto que os daba algo de asco...

Y segundo, tres círculos oscuros comenzaron a formarse en el suelo justo detrás de vosotros junto a la puerta del servicio.

En ese momento, el hombre que estaba aún completamente débil, lanza una carcajada suave...

- Ya están aquí. - Dice sin más.

 Noto la corriente contra la superficie de mi nueva forma mientras poco a poco....

La situación era extraña nada parecia estar en su sitio o mejor dicho en su epoca. La risa con el olor me da mala espina y no creo que sea al único ya que Elisabeth parece estar buscando rutas de escape y lanza un ataque a ciegas lo que, aunque entiendo por el nerviosismo que yo mismo siento no puedo aprobar ya que no podemos estar seguros de que es lo que se acerca.

Yo prefiero irme por aire y me puedo llevar a Megan... tratar de ser discretos con vuestras salidas de aquí  Digo sin quitar ojo a lo que quiera que se este formando¿Kenshiro tu puedes buscarte tu propia salida o necesitas la ayuda de Elisabeth? Pregunto, ya que es el único que queda sin una salida.

Tiendo la mano a Megan para acercarla a mi cuerpo rodeandola por encima del hombro con mi brazo y emvolviendola con mi ala para protegerla a la vez que me protejo a mi mismo. Voy reculando paso a paso acercarndonos a la ventana para poder salir volando si se hace necesario.

La situación desues de abrir la puerta se vuelve completamnete surrealista.Dos hombres con la apariencia de querer atacarnos aparecen desecados como uvas puestas al sol, pero por fortuna uno de ellos logra sobrevivir , peroc unado estamo a punto de hacerle unas preguntas algo pasa.
El sujeto intenta coger su arma pero esta es puesta rapidamente fuera de su alcance por Megan, pero las cosas no finalizan ahi ya que de repente un olor nauseabundo y unas sombras ominosas surgen del suelo. Parece que ha llegado la hora de escurrir el bulto.
-No os preocupeis por mi , si pude sobrevivir a la caida de un 9 piso puedo saltar al patio , aunque no creo que sea necesario , bajare corriendo por las escaleras, nos vemos en una hora en esa hambuegueseria de hoy.digo mientras cojo al vuelo mi bolsa y me lanzo hacia el hueco de las escaleras para ir saltando de piso en piso al mas puro estilo acrobata