Partida Rol por web

Los que estáis arriba escucháis el estruendo de golpes que comienzan a producirse en la planta baja.

Kenshiro golpea con fuerza al Cyborg, el cual recibe varios golpes mientras que el mismo, contrataca con sus puños en el cuerpo a cuerpo, pero la dura piel del oriental absorbe todo el golpe sin que en ella aparezca ningún rasguño. Sin embargo, el golpe ha sido duro y por lo que parece, esa es el arma más débil que tienen los robots.

El director parece esperar que los demás se lancen al ataque, bajando su arma hacia el suelo y tirando las manos con ellas hacia atrás, agachando un poco la cabeza.

Me quedé unos instantes dudando si atacar o no atacar, pero Peter seguía estando demasiado cerca para usar la siónica y tenía la telequinesis ocupada en formar una protección invisible alrededor mío, así que tampoco era que pudiese hacer demasiado en aquellos momentos, pero de todas formas hablé.

- Aunque lo parezca, no hemos venido a pelear con usted, pero como ve, sí con ellos.. ¿ de qué lado tengo que pensar que esta?

Me quedé observándole, esperando una respuesta a mis palabras, queriendo conocer si esas katanas atacabarían intentando trocearme o podrían partir el metal de droides de ahí abajo.

Siempre cabía la posibilidad de que por algún motivo fueran de él o tuviera alguna clase de relación extraña con ellos así que una nunca sabía de lo que debía fiarse.

La lucha sigue debajo, y otro de los Cyborg parece atacar a Kenshiro con sus puños. Lo golpea tan fuerte que el golpe hace vibrar las paredes, sin embargo, no parece hacer mella en la piel del artista marcial la cual resiste todo el daño.

Los dos Cyborg parecen titubear por un momento, y ambos extraen unos rifles de sus espaldas, en los cuales un líquido verde parece flotar en uno de los cargadores o lo que es más parecido a una cámara de resonancia.

Mientras tanto, Megan intenta razonar con el director...

- ¿Todavía queréis hablar conmigo? ¿Es que no os dáis cuenta en la que os habéis metido? - Dice el director mientras sonrie maliciosamente a los que están allí en su despacho. - Esto no es un juego, niña, esto excede mucho más allá de tu comprensión y ahora, por entrometerse en mis planes, tendréis que morir. -

El hombre llevá sus armas hacia atrás y se lanza al ataque.

Da un tremendo salto hacia arriba, cayendo con todo el peso de su cuerpo y con sus armas sobre las alas de Peter.

Pero su salto estaba mal calculado y cuando cae, sus espadas golpean el suelo abriendo un tremendo agujero de unos cuarenta centímetros producto del légamo negro que cae de sus espadas.

Por lo menos, ahora sabéis que no tiene buenas intenciones.

 Escucho todo lo que pasa en la casa, me cabrea por segundos, demasiado para no saber, asi que no es de los buenos y que es el que esta provocado esto o puede que solo este jugando a ser el hombre malo.

Elisabeth hace que toda el agua que podía contener una casa, más el agua que proviene de las tuberias y la expulsa junto con ella toda fuera. Las tuberias de las paredes revientan, la cisterna del baño, así como el vater y el lavabo vuelan por los aires y en la cocina, la secadora, el lavavajillas y el fregadero estallan por los aires dejando que el agua salga fuera.

El agua viaja como una tromba, sin embargo, en la planta baja, los Cyborg hacen que sus pies metálicos queden grapados al suelo. Unos ganchos enormes salen de ellos y se entierran en el agua, evitando así que se muevan.

En cambio, el profesor no tiene la misma suerte.

La tromba de agua lo lanza contra una de las paredes, golpeándose la espalda contra ella. Igualmente, esto no parece amedrentarlo.

Veo como el director esta apunto de alcancarme con sus katanas que parecen bastante peligrosas.

Uunos ciborg salidos de vete a saber donde vienen a tu casa y atacas a los únicos que podrían haberte ayudado... La mala suerte persigue a quien la busca Digo manteniendome entre él y Megan y provocandole mala suerte.

El Cyborg que atacaba a Kenshiro dispara una bola de plasma verde de uno de sus disrruptores que impacta sobre el cuerpo del oriental.

La bola verde lo envuelve completamente durante unos segundos hasta que al final desaparece en el aire.

El cuerpo de Kenshiro no ha sufrido daño alguno, sin embargo, un humillo verdoso le sale de cada parte de su anatomía ya que ahora, su ropa ha desaparecido junto con el rayo verdoso.

Tras esa acción, Kenshiro y Megan se preparan para responder a los ataques...

- Peter vete sino.. - Dije en alto, esperando que comprendiera que debía intentarlo de la forma que había pensado en un principio, pues ese hombre me parecía bastante más peligroso que los cyborg con los que ya nos habíamos topado.

Tenía que intentar de alguna manera que no siguiera intentando dañar a mi compañero, pero seguía teniendo el escudo a mi alrededor, así que hice lo único que podía hacer en aquella situación, arriesgarme a quedarme sin él. Fue algo que no pensé, quizás algo que jamás hubiera tenido que hacer, pero aún así, centré mi telequinesis en una de sus katanas, intentando que fuera él quien acabase rebanado por ellas y no mi compañero.

Megan intenta que el Director se clave una de sus katanas, sin embargo, la mente del Director comienza a luchar con la suya, y su voluntad parece ser más fuerte que la de la chica.

Por un momento parecía que Megan iba a vencer, pero el Director sacude su brazo, dejándolo libre por completo.

Mientras tanto, Kenshiro se bate contra los dos Cyborgs en la planta baja.

Me observo de arriba abajo , un poco molesto por los pocos jirones que quedan de mi ropa que apenas me tapan decentemente, por fortuna , las chicas están arriba y no pueden verme si no seria algo embarazoso.
-Oye hojalata. que no tengo mas ropa, ahora tendré que ir desnudo por la calle , te parecerá bonito. digo con cara de mosqueo justo antes de lanzarme hacia el para agarrarle e intentar arrancarle los brazos.

Kenshiro salta sobre el Cyborg que le había disparado, atrapándolo por la espalda y haciéndole una llave, cogiéndole los brazos hacia atrás. Los engranajes chirrían y los circuitos parecen soltar chispas, pero la fuerza del robot parece ser mayor que la de Kenshiro y gracias a sus amortiguadores neumáticos, logra soltarse de la presa.

Al mismo tiempo, el otro Cyborg aprovecha la confusión para dispararle por la espalda a Kenshiro... pero el impacto lo único que hace es quitarle la poca ropa que el metálico cuerpo de Kenshiro tenía encima, sin hacerle ni siquiera un rasguño.

Por otra parte, el director vuelve a atacar las alas que cubren a Megan, impactando con fuerza sobre ellas y haciéndoles dos graves cortes, los cuales quedan cubiertos por la masa legamosa negra que gotea hacia el suelo...

 Sigue habiendo agua, siguo teniendo ventaja, asi que vamos a hacer algo, primero que lo ciborg tengan un pequeño cortocirtuito y luego que el profesor se quede sin aire.

 Una pequeña ola se forma a mis pies mientras se aleja poco a poco de mi golpeando a los ciborgs y despues envolviendo una parte al director del museo para asfixiales.

Baje esas armas o le juro que lo siguiente  que vera sera a sus antepasados recibiendole en le valhala

El director se encuentra rodeado de agua, de manera natural, quiere escaparse de allí pero no puede hacerlo, de alguna manera, no tiene fuerza para realizar una simple acción. El agua lo presiona, no lo deja mover. Está completamente paralizado.

Por otra parte, el Cyborg número uno, el que antes había herido Kenshiro, sufre un cortocircuito el cual parece le hace mucho daño a sus circuitos.

Ahora mismo, parece que está reiniciando su sistema.

El otro, al contrario, resiste el agua tranquilamente, y se presta para atacar.

El director hace una brecha en mi ala, pero mejor en mi ala que alcance a Megan, Elisabeth hace su magia y deja al director y a uno de los ciborg fuera de combate yo aleteo mi ala para quitarme la sustancia pringosa y corrosiva de encima. Me giro hacia el ciborg que queda y trato de darle su dosis de mala suerte para ayudar a Kenshiro sin tener que dejar sola a Megan por mucho que diga puede ser peligroso..

Lo siento pero no pienso marcharme, pero prefiero asegurarme que tu sigas bien... Le digo a Megan

Antes casi había sonseguido que soltara una de sus malditas katanas y ahora, tenía que volver a intentarlo, sino no quería imaginarme lo que podría acabar haciéndole a las " magulladas " alas de Peter.

- Siempre no vas a tener tanta fuerza ¿ no?

Volví a concentrarme de nuevo, sin volver a activar el escudo porque sino no podría pelear de ninguna de las maneras y si había algo peor que poder resultar herida en cualquier momento, era que me mataran por no haberme puesto a pelear.

- Si cortan así el metal mejor cortarán tu carne.. - Pensé instantes antes de simplemente pensar en lo que quería hacer.

De repente, gracias a la acción de Megan, una de las manos del director se levanta con la katana en su mano. El hombre sabe lo que está pasando, y suelta su otra arma para coger la muñeca de la otra mano y empezar un duelo de fuerza bruta. Mentalmente, ha sido superado por Megan, la cual envía su impulso telekinético sobre el enemigo...

La mano que sostiene la espada parece tener mucha más fuerza que la que puede tener el director y lentamente, se va acercando a su pecho. La punta de la katana ya está casi apoyada sobre el corazón y lentamente, se va hundiendo en el haciendo que la mano que intentaba detenerla pase a la hoja en un último intento desesperado para evitar su muerte...

Pero la espada se entierra en su cuerpo hasta la empuñadura mientras los ojos del director se abren como dos platos y su boca cae flácida hacia abajo...

Cuando la acción termina, una de sus espadas está en el suelo y la otra clavada en su pecho, del cual rezuma ese líquido negro. Aún así, el hombre parece hacer lo posible para seguir vivo...