Partida Rol por web

Esperaba una falta de noticias, pero siempre podía escapárseles algo, y de todos modos me apetecía saber algo del mundo aparte del tiempo en la frontera.

Como con tranquilidad y sin prisas según ojeo el periódico y cuando acabo dejo en la mesa el dinero mas una buena propina para el tabernero

-bueno, he de seguir mi viaje. Si llega mi primo preguntando dígale que Sven ya paso por aquí, por favor-

Tras esto saldré del pueblo sin prisas en dirección a la frontera con Dinamarca y cuando este a una distancia prudencial daré un rodeo para volver al campamento

Cuando llegó al campamento, no pudo encontrar a Miranda ni a Sven. Sus caballos habían desaparecido, así como las pistolas y buena parte de las provisiones y del material de acampada. Consideró qué podría haber pasado. No se habrían ido sin decirle nada sin un motivo grave, pero tampoco parecía que hubiese habido una lucha, ni se habrían llevado las provisiones si los hubiesen hecho prisioneros.

¿Era posible que Sven fuese un traidor? Rene recordó las advertencias de Wenning. Un espía se había infiltrado en el Halcón Etéreo, y ¿acaso el mismo no había tenido ciertas sospechas sobre Sven ya en Francia? Y más tarde, la misteriosa forma en la que los prusianos los habían descubierto en Schwerin cuando habían ido a rescatar a Miranda, o el hecho de que hubiese llegado sin Wilfred. Incluso su extraña torpeza en el tren, para ser un hombre de acción, y la facilidad con la que se había rendido, aunque era cierto que en aquel momento Rene había sido distraido un tanto por las preocupaciones amorosas de Jean Paul, por lo que tampoco podía culparse mucho de no haber tomado nota de esos detalles. Pero todo eso adquiría sentido ahora.

No era momento de lamentarse. Si Sven, o como fuera que se llamase, era un espía, pronto mandaría allí a alguien a apresarlo. Por suerte la frontera no estaba muy lejos. Recogió rápidamente lo indispensable para irse enseguida, rumbo a Dinamarca. Desde allí podría volver a Francia, e informar a Wenning de lo ocurrido y del fracaso de la misión.

Incapaz de seguir el rastro de Sven y Miranda me retire a Dinamarca con el amargo sabor del fracaso. Llegar tan lejos para ser engañado así... y todo por olvidar mis primeras sospechas e impresiones iniciales, la advertencia y la que era mi primera misión al entrar en este proyecto

El viaje de retorno hasta Francia se me hace eterno con mis amargas recriminaciones