Partida Rol por web

Al escuchar los comentarios de Finwë siento como el color sube hasta mis orejas... Pero será desgraciado? Me contengo para no partirle la cara, dándome cuenta que es lo que espera, y todavía le haría gracia. Le miro con una mirada fría, glacial, mientras me levanto del suelo. Olvídate de que te chupe nada mas, simio con patas... Me alejo de su lado, respirando profundamente, intentando no pensar más en sus comentarios e intenciones. Vuelvo mi mirada hacia el interior de la habitación, donde esos tres cofres continúan allí...

Ummhh... La verdad es que los cofres son muy tentadores, aunque también se que pueden costarnos la vida. Miro fijamente a Finwë, esta vez mi mirada ha perdido ese frío glacial que hubiera deseado su muerte instantánea. De verdad crees que son tan importantes como para jugarnosla? Bueno, te puedo proponer una cosa, si te parece intento encontrar y desactivar las trampas que contengan, así nos llevamos parte de su interior. Eso sí, os advierto, si no encuentro ni una sola trampa yo paso de abrirlos. Me siento algo mareada, y puede que se me escapen, por eso no quiero jugarmela...

Cita:

Le responde Jazzmine, aunque no le entrega la cachetada que el esperaba...

Hey, Jazz, donde esta tu sentido del humor??, vamos... no te enojes por una tontería... las palabras de Finwë parecen penetrar en Jazzmine, considerando que las siguientes palabras que salieron de su boca fueron mucho mas... "tranquilas"...

Cita:

Oh, Jazzmine... los ojos del elfo habian vuelto a tomar vida... la sangre le manaba pura y sana por todo su cuerpo una vez más... te agradecería tal hecho eternamente.

A pesar de que los pasos de la elfa eran vacilantes y que agacharse fue un suplicio Jazzminne empezó a inspeccionar el arco de la puerta y las primeras baldosas del suelo sin arriesgarse a entrar en la habitación, comprobó que su última proeza abriendo la cerradura de la puerta secreta la había minado más de lo que esperaba, no encontró ninfún indicio de que hubiese trampa alguna.

Solo que las baldosas de la sala de los cofres eran extrañamente porosas.

Despacio, mirando poco a poco, reviso bien la puerta. No veo ninguna trampa, pero puedo observar que las baldosas de la habitación tienen como un aspecto poroso, cosa que no me gusta nada... Me incorporo llevando una mano al estómago al sentir un fuerte pinchazo que hace que la vista se me nuble. No... No veo ninguna trampa. Pero no me gusta el aspecto de esas baldosas, mejor vayamonos.. Cof cof... Llevo mi mano a la boca al empezar a toser, cada golpe de tos es una tortura. Al retirarla puedo observar asustada como pequeñas manchas de sangre la cubren. Disimuladamente me llevo la mano al pantalón y la limpio intentando que mis compañeros no se den cuenta. Salgamos de aquí, no tardarán en llegar. Empiezo a caminar hacia la salida, mas que caminar parece que vaya arrastrandome, tengo que ir apoyándome a la pared para no caer al suelo mientras intento enfocar mejor mi vista...

Jazz tiene razón, será mejor que nos vayamos de aqui. Estaría gustoso de meterle mano a ese tesoro, pero tenemos a todo el gremio detrás, si queremos poder doder contar esto y reirnos dentro de unos años, será mejor que nos marchemso ahora mismo. Volveremos a verle la cara a esa tipa, y econtraremos a Vanthus, y cuando lo hagamos estaremos preparados

Yo, personalmente, no tengo ninguna esperanza de salir de aqui dentro... dice Finwë con un rostro muy triste... creo que aquí a llegado mi final... y al menos quisiera morir con algunas monedas en mi bolsillo... tal vez alguna gema... hace una pausa y mira al capitán... Capitán, que tipo de piratas seriamos si hacemos todo menos reclamar el tesoro? luego mira a Jazzmine, agradeciendole todo el esfuerzo que ha hecho hasta el momento con una noble mirada... No debes tomar tu el riesgo... déjame a mi...

Grumete, será mejor que alejes estos pensamientos, y echale bien el ojo  a ese tesoro, por que será nuetsro y Vanthus pagara por ello. Ahora salgamos de aqui antes de que vengan.  ¿ Alguno de vosotros necesita que le ayude ? -Dice un momento antes de dirigirse a la salida

Al menos, uno, llevemos uno... o lo abrimos y le sacamos lo que nos sirva... uno solo, no pido más... sollozaba casi el elfo... debilitado tanto fisica como mentalmente... no quería dejar tremendo tesoro atrás sin las esperanzas o la seguridad de que volverian para reclamarlo... por favor... agrega mientras se arrastraba hacia uno de los cofres, el del medio.

Finwë arrastró los pies agotado dentro de la habitación de los cofres, se sorprendió al ver que nada sucedía. Con un par de pasos más briosos llegó hasta el cofre de enmedio, comprobó que estaba collado al suelo, mala cosa para tener que transportarlo, además tras empujar la tapa vió que estaba solidamente cerrada. En uno de los lados había una gruesa cerradura de metal.

Mientras el elfo suspiraba. Al ver que necesitaría de las suaves manos de la elfa para abrir alguno de aquellos cobres un dolor terriblemente agudo en los pies, decenas de agujas de metal afiladas habían salido de los poros de las losas atravesando el cuero de las botas y la carne de los pies del elfo. Con un ruido de reloj de cuerda al cabo de unos segundos fueron entrando lentamente las aguajs debajo de las losas. Finwë notó como sus pies se humedecían dentro de las botas empapados por su propia sangre.

Arrrrrrrr!!! demonios!!! gritó Finwë al sentir el dolor en sus pies... el destino me impide irme con algo de aquí dentro!!! Que te he hecho!!!? pregunta al techo de la sala, intentando alcanzar el "cielo" para conversar con las deidades... no merezco esto, maldición!!!...

Se abalanzó en el pasillo, saliendo de la sala y se quitó las botas... tenía todos los pies agujereados y sangrando... Voy a necesitar algún vendaje... demonios!!!

Finwë se arrastraba como podía con los pies dejando un reguero de sangre tras de sí, un par de latidos después de salir de la sala los pinchos volvieron a salir con toda su vehemencia, luego de nuevo el sonido de mecanismos y se retrajeron silenciosamente de nuevo.

Me siento tan exhausta que sin fuerzas para retener a Finwë veo como entra dentro de la sala... Me mantengo espectante, cogida a la pared, mientras respiro dolorosamente. Por fin salta la trampa que no había conseguido detectar... Sabía que había algo... Por qué ese elfo es tan tozudo? Murmuro en voz baja mientras me voy acercando como puedo cuando sale de la sala. Mi rostro se ve completamente blanco y demacrado por la falta de sangre... Observo como se saca las botas y muestra sus pies dañados... Te dije que no entraramos... Contento ya? Le digo mientras mas que ponerme de rodillas me dejo caer para poder ver sus pies más de cerca... Ummmhhh tienen un aspecto muy feo, pero así no puedes ir, irás delatando nuestra posición... Espera, a ver que puedo hacer. Empiezo a revolver en mi bolsa, buscando algo con lo que poder improvisar un vendaje... Decepcionada por no encontrar nada miro directamente a Finwë... Rápido, pásame esos trapos que robaste de la habitación de la dama de Lotto, eso me servirá... Una vez los tengo en mi posesión le mojo un poco los pies con agua de mi odre y se los envuelvo, con el enfado que llevo empiezo a apretar fuertemente sin darme cuenta....

Jazzminne pese a todo trató de socorrer al elfo, a pesar de que con todos sus esfuerzos logró contener la mayor parte de la sangre cada  paso que daba era un suplicio para Finwë. apoyar el pie se había vuelto una tortura.

El capitán intento cabrearse con el elfo, no en vano por su culpa había perdido una de las dos prendas que llevaba para Misha, y no una prenda cualquiera, si no el camisón, esa prenda de lencería que ya se había imaginado sobre el esbelto cuerpo de ella, pero solo pudo lanzar una maldición.- ! por los mil demonios del infierno! ¿es que no puedes evitar en meterte y meternos en lios?. - Pero el elfo le daba pena, asi que poniendo el vestido un poco alejado de la elfa antes que también quisiera usarlo para alguna otra cosa se acerco a ellos dos.

¿Como esta finwe, es muy grave esa herida ?.-Le pregunto a la elfa