Partida Rol por web

Tesalia - Tierras de Leyenda

Prólogo - Hollan

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13/02/2013, 15:55
Director

Con el Compendio bajo el brazo y a varias millas de distancia de Barataria tus pasos te han llevado hasta una pequeña población fronteriza entre la nación de los magos y el reino de Fígaro, situada muy cerca del río que separan ambos reinos. 
El núcleo urbano, por llamarlo así, está compuesto por un puñado de casas, una herrería, un pequeña capilla y una posada. Aunque conforme te acercabas a la villa has podido ver multitud de cabañas, granjas y huertos salpicando ambos lados del camino. El viaje hasta ahora ha sido monótono, sin ningún sobresalto durante el camino, pero bastante agotador. 

La noche se va abriendo paso con más fuerza a cada minuto que pasa y unos feos nubarrones que amenazan con tormenta terminan de oscurecer el cielo, dejando una estampa de la pequeña villa bastante tétrica. El frío y la humedad del ambiente comienzan a ser muy molestos. En ese momento divisas un cartel pegado a un edificio de madera, "Taberna El Pichel Rebosante"

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13/02/2013, 19:34
Hollan Tejedor

Camino manteniendo el paso, esforzándome por seguir avanzando sin detenerme, hasta que llego al centro del pueblo. No llevo más de un día caminando, y ya tengo los pies destrozados de tanto andar. En mala hora se me ocurrió salir así, sin encontrar un caballo o al menos un pony para llevarme... aunque no sería lo mismo si el esfuerzo no fuese mío. Para eso he salido, ¿no? Para esforzarme por demostrar que sus ideas son equivocadas y que se puede ayudar al mundo de más maneras. Pero un caballo estaría bien, si no costasen tanto de mantener...

Niego con la cabeza, perdido en mis pensamientos, y me vuelvo a recolocar la mochila a la espalda. El Compendio pesa, pero es un peso agradable, no como el bulto que llevo a la espalda que es más útil que otra cosa. La noche está cayendo, y llevo más tiempo del que ahora mismo quisiera sin pasar una noche fuera como para desear quedarme mucho más tiempo aquí. Y por mucho que el pueblo tenga mal aspecto, ¿qué van a hacer, tirarme unos muertos vivientes para asustarme? -Tendría su gracia, y todo. -Digo con un murmullo para mí mismo, antes de echar un buen vistazo alrededor y encontrar lo que quiero. -Seguro que en una taberna así tienen sitio para un mago viajero. Aunque tan cerca de Baratia, un par de trucos no los sorprenderán demasiado... pero tampoco tratarán de quemarme, o algo así. -Continúo hablando, como si tuviese a alguien al lado, antes de empezar a avanzar hacia la puerta, y entrar en el local buscando con la cabeza un posadero o alguien con quien hablar de verdad, y del que conseguir una habitación.

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15/02/2013, 10:42
Director

Al entrar descubres un ambiente bastante festivo. Un hombre canta y baila al son de la música que tocan otros tres hombres con sendos instrumentos.

La planta baja de la posada se compone por la barra, donde hay al menos cuatro parroquianos bebiendo y charlando alegremente y un total de cinco mesas, tres de ellas ocupadas por sendos grupos de hombres, mujeres y algún que otro niño también.

Entre la música, las risas y el parloteo general de los congregados, casi no alcanzas a oir al hombre de detrás de la barra.
- Pasa y ponte cómodo, viajero. ¡Bienvenido al Pichel Rebosante! Me llamo Tulio y soy el regente de esta casa de locos. ¿Puedo ofrecerle algo?

- Tulio, ¡dos pintas más por aquí! - grita un hombre al fondo de la sala, en una de las mesas ocupadas

 

 

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22/02/2013, 18:18
Hollan Tejedor

Observo el entorno interno de la taberna alzando una ceja y deteniéndome un instante en cada persona que hay dentro, buscando... ¿buscando qué? ¿Un mago guardián que quiera llevarme de vuelta? Por todos los dioses, pero si acabo de salir, y deberían creer mi excusa sin problemas, porque en buena parte era verdad, excepto lo que no quise decir por obviedad de que no creerían en ello. No hasta que tengan pruebas.

Mi cabeza está hirviendo de pensamientos cuando me doy cuenta de que un hombre tras la barra -aspecto burdo, ropa sencilla y manchada, manos sucias, probablemente el posadero, confirmado cuando alguien se refiere a él- me habla. Le muestro una pequeña sonrisa, titubeando, y luego decido que quedarme quieto es mucho peor que no hacer nada, así que me acerco a la barra.

-Uh... una copa de vino y, esto... -entonces me viene a la cabeza un retazo de algún libro leido tiempo atrás- sí, algo de la cena del día, si todavía teneis. Por ahora. Estaré en esa mesa. -Y señalo con el dedo, dedicándome todo el rato a mirar por encima de su hombro, tratando de no demostrar lo problemático de sacar a alguien como yo de mis paredes y compañías habituales. Y cumpliendo lo que le he dicho, camino a la mesa vacía más alejada de la troupe de gente que parecen ser habituales del lugar, para sentarme con suavidad en el asiento, agradeciendo no tener que seguir andando.

Notas de juego

Perdón, perdón, perdón >_< me acabo de dar cuenta de que, sí, creía que había posteado, pero nunca lo hice xD

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22/02/2013, 20:10
Ralph "El Sonrisas"

Tomas asiento en una mesa, apartada del barullo de los parroquianos. Al momento el tabernero te lleva a la mesa la copa de vino y un plato de patatas y carne asada.

Uno de los niños que andaban correteando por la taberna se acerca a tu mesa y se sienta junto a ti. Enseguida caes en la cuenta de que no se trata de un niño, sino de un mediano de pelo castaño y una perenne sonrisa.
- ¡Muy buenas noches viajero! ¿Cómo te llamas? ¿Y qué te trae hasta estas tierras? Yo me llamo Ralph, el sonriente Ralph dicen algunos. Ralph el de las muchas sonrisas dicen otros. O simplemente El Sonrisas jajaja - el mediano habla con un tono de voz agudo y bastante rápido. Se rie de forma estridente y el olor a alcohol que emana de su boca y el brillo en sus ojos te dejan bastante claro que ha bebido, pero no da la sensación de estar ebrio... todavía. Tal vez solo un poco achispado - ¡Y hoy estamos de celebración! Es mi cumpleaños ¡38 años ya! Ya casi se me podría considerar un adulto - comenta mientras te da una palmada en el hombro - Déjame invitarte, al menos a esa copa de vino, y ¡únete a nosotros en esta fiesta! ¡El Pichel Rebosante es la mejor taberna del mundoooo!

Al grito que da Ralph, varios de los allí congregados levantan sus jarras y hacen un brindis por el mediano.

 

Notas de juego

Tranquilo. Anda que no me ha pasado veces eso a mi xD
Mientras vayáis los jugadores por separado, seré más considerado con el ritmo. Ya habrá tiempo de sacar el látigo para azotaros más adelante :P

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23/02/2013, 20:39
Hollan Tejedor

La comida viene rápida, y aunque no suelo beber mucho, el primer trago al vaso de vino no está mal, aunque el alcohol me queme la garganta por la falta de costumbre. Comiendo en silencio y tranquilidad, relajando los pies mientras tanto, uno de los niños que jugueteaban acaba acercándose por pura curiosidad, pero trato de no prestarle atención hasta que habla... y resulta ser un mediano, y no un niño como pensaba. Desde luego, parece haber bebido mucho más que yo, aunque la situación no lo desmerece, si es cierto que me duplica la edad siendo tan pequeño. Y desde luego, siendo tan pequeño beber mucho tiene que tenerlo agitado, así que trato de pensar una manera de sacármelo de encima sin parecer descortés, y sin tener que hacer que me vaya a otra posada por un conflicto que preferiría evitar.

-Mi nombre es Hollan. -Contesto, con tono educado, hablando lento y claro. -Estoy de viaje, soy un aprendiz de mago. -Continúo. -Y aunque estoy cansado porque llevo todo el día caminando, no voy a desmerecer la situación, así que felicidades, Ralph, por tu treinta y ocho cumpleaños. -Inclino levemente la cabeza hacia él, de manera deferente. -Y será un placer acompañar las celebraciones, si hay algo que pueda hacer. -Oh, cielos qué he dicho, qué se me ha ocurrido decir... condenados nervios, ni que buscase ser el centro de atención... espero que lo de ser un mago les cale, y se les ocurra que igual estoy yendo en la dirección contraria a la que voy, por lo que no sería bueno molestarme... trato de enseñar una sonrisa convincente, aunque no con demasiado éxito.

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25/02/2013, 12:51
Ralph "El Sonrisas"

- ¡Un aprendiz de mago! - grita el mediano totalmente emocionado - ¡Que me aspen! ¿Podrías hacer algún truco de mago para mi? Venga, por favor... considéralo como un regalo de cumpleaños, ¿vale? - dice Ralph con una sonrisa que muestra todos sus dientes. Seguidamente, y sin darte tiempo a penas a reaccionar, el mediano se sube a la mesa (poniendo sus peludos y descalzos pies cerca de tu plato de comida) y comienza a gritar - ¡Amigos, aquí tenemos al señor Collan! Es un aprendiz de mago y ha decidido deleitarnos a todos con un truquillo arcano. ¡Démosle un fuerte aplauso!

El mediano comienza a aplaudir y los demás parroquianos le siguen, aplaudiendo y coreando tu nombre, o más bien el erróneo nombre de Collan.

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26/02/2013, 20:32
Hollan Tejedor

Me lo había esperado. Tratándose de alguien así, en una situación así, lo que era de esperar es que un mago les llamase la atención, y lo único que no había contado es con la borrachera que lo ha maximizado todo... y ha hecho que se equivoque con mi nombre. Si no fuese molesto tener que pararlo para enseñarle la manera correcta, y no llevase todo el día andando, quizá lo habría hecho. Lo que me recuerda que sí, un caballo hubiese estado bien. Quizá si consigo algo más de oro. Cuando todo empiece a funcionar. Sacudo los pensamientos ligeramente de mi cabeza con una sacudida de la misma, mientras trato de poner una sonrisa en un rostro muy poco convencido por ello. Que Sonrisas casi pise mi comida no lo mejora demasiado, y aprovecho un momento en que aplaude en otra dirección para coger el plato y apartarlo un poco, poniéndolo más a salvo.

Pero el espectáculo es el espectáculo. Y aunque he visto a muchos magos hacer cosas así, ya sea para sorprender a novatos o demostrar capacidades, la idea de hacerlo yo nunca me ha llamado demasiado la atención. Y por suerte, conozco un hechizo sencillo que no debería causar ningún problema. Me aclaro la garganta, pero las palabras que iba a decir mueren antes de intentarlo. Demasiadas palmadas, demasiada gente. Le doy un trago rápido al vino, que me raspa la garganta, y me imagino la situación con un profesor vigilándome y forzándome a trabajar bien. Y entonces sí que hablo.

-Gra-gracias. -Mirada gacha un instante, vuelvo a forzarme a alzar los ojos. -Pero estamos aquí para celebrar el cumpleaños de Ralph, ¡felicidades! -Y entonces me concentro un instante y formulo las vías mágicas sencillas y memorizadas, causando que el mediano se ilumine mágicamente, y deseo con todas mis fuerzas que funcione.

Notas de juego

Vamos, que le lanzo Luz a Ralph. Sabía que el hechizo iba a serme útil en algún momento, pero no esperaba que así xD

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04/03/2013, 18:21
Ralph "El Sonrisas"

- ¡Guaaaauuuuu! - exclama Ralph y el resto de los parroquianos cuando El Sonrisas se ilumina gracias a tu hechizo - ¿No soy el mediano más brillante que habéis conocido nunca?

Algunos de los allí presentes se rien del chiste de Ralph y otros lo abuchean, pero igualmente todos te aplauden. El mediano se baja por fin de tu mesa y sale corriendo hasta la barra para pedirse una pinta de cerveza. Al cabo de un momento, Ralph se sienta en otra mesa y se pone a hablar con otro grupo de gente, dejándote por fin cenar en paz...

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05/03/2013, 11:27
Hollan Tejedor

Con una sonrisa en el rostro, no solo porque el hechizo me haya salido bien sino que Ralph se ha distraido lo suficiente como para irse a otra mesa, y que le he dejado el chiste en bandeja de plata, me relajo y me dejo caer en la silla lanzando una mirada a mi alrededor. Y si alguien pregunta, lo único que habrá ocurrido aquí es la presencia de un tal Collan el aprendiz de mago, y nada de Hollan Tejedor mago con todas las de la ley. Aprovechando la oportunidad, retomo el plato apartado y continúo comiendo tranquilamente. Después de tanto caminar, lo que más me apetece ahora es terminar de cenar, dormir y, quién sabe, quizá un buen baño por la mañana antes de seguir con el camino. Todavía no es lo suficientemente lejos... Y entonces lanzo una mirada a mi alrededor, a todos los parroquianos. ¿Habrá alguien de Baratia aquí? Pienso para mí.

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06/03/2013, 16:33
Director

La velada sigue avanzando y el alcohol y sus efectos son cada vez más evidentes en los parroquianos. Echas un vistazo para fijarte bien en cada uno de ellos pero no ves a nadie que te resulte familiar.

La mayoría se marchan cuando llega la media noche más o menos. Ralph, que ahora empieza a notarsele la borrachera tras haber ingerido varias pintas de cerveza, se queja gritando a pleno pulmón de la descortesía que muestran sus amigos al irse "tan pronto" a sus casas.

- Este mediano es incorregible, no sabe cuando parar de beber. Al menos es generoso y ha pagado tu cena - te comenta Tulio, el posadero, que se acerca para recoger el plato y pasar un trapo húmedo por la mesa - Si deseas pasar aquí la noche, todavía me quedan un par de habitaciones individuales libres. Si puedo ofrecerte algo más, solo dilo.

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10/03/2013, 19:19
Hollan Tejedor

Disfruto tranquilamente de la comida, centrándome en ella para acallar los dolores de los pies, y no es hasta que el tabernero se me acerca un rato después me doy cuenta de que he pedido la cena y nada más. -No tendría que haberse molestado... -digo más para mí que otra cosa, aunque suena en alto lo suficiente como para que Tulio lo escuche. -Y sí, una habitación sería agradecida. También querría algo de comida de viaje, si pueden tenerme algo por la mañana. -Dicho eso, apuro lo poco que me he dejado de vino para el final, dispuesto para ir a mi habitación a dormir un rato. Le dirijo una mirada más a Ralph, pero la verdad es que no quiero ser de los que se quedan últimos en su compañía, por mucho que haya sido amable, o parezca una persona muy entretenida y "luminosa". O al menos esto último por un pequeño rato.

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11/03/2013, 20:31
Director

- Por supuesto, ahora mismo le traigo la llave - dice Tulio que va detrás de la barra a dejar el plato y los cubiertos y vuelve en cuestión de segundos a tu mesa - Aquí tiene. Está en el piso de arriba, es la segunda habitación a mano izquierda. Tenemos una cecina de ternera bien rica. Mañana la tendrá preparada cuando decida irse, señor Collan. En total serán diez monedas de oro. Espero que disfrute de su estancia.

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14/03/2013, 19:18
Hollan Tejedor

Me desperezo someramente, vigilando con la mirada que Ralph no vuelva a saltarme encima de la mesa para que lo entretenga un rato más, y en cuanto me ofrece la llave me la guardo en un bolsillo, tomando el resto de mis cosas. -Muchas gracias. -Digo pasando por la barra y dejándole el dinero, notando cómo baja la cantidad que poseo en la bolsa. Pero es un precio aceptable, y encima me he ahorrado una primera cena, además de conseguir provisiones. Las escaleras no se me resisten demasiado pese al vaso de vino y subo a mi habitación, abriendo y cerrando después con la llave. -Una habitación individual... eso está bien. -Pienso en voz alta, mientras dejo mis pertenencias ligeramente repartidas y guardo el compendio y la bolsa de monedas en la cama... solo por si acaso, y si las historias típicas de taberna son reales.

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20/03/2013, 19:37
Director

Duermes pacíficamente en una cama que no es todo lo confortable que te gustaría. Pero en mitad de tu descanso, algo capta tu atención, algo que te hace despertar.

La luz de una vela está encendida dentro de tu habitación. Al abrir los ojos la luz te ciega un poco pero en seguida te acostumbras a ella. El portador de la vela no es otra persona que Ralph, el mediano borrachín del cumpleaños. Está distraído mirando un libro. Y no cualquier libro. ¡Se trata del Compendio!

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26/03/2013, 00:03
Hollan Tejedor

Una sensación de congoja, quizá un mal sueño que se me ha ido de la cabeza al despertarme y ahora no recuerdo o cualquiera de las múltiples cosas que pueden despertar a un estudiante de su sueño, consigue que salga de mi sopor y apriete suavemente las manos sobre mi cómoda col... no es mi colcha. Abro un ojo, mirando al techo gracias a una luz en la habitación, y descubro un techo desconocido. Y por fin me despierto más o menos de verdad y recuerdo que ya no estoy en la torre y ya no soy un estudiante. O al menos no de esos. Un leve vistazo me permite darme cuenta de que me he despertado a media noche, y no es hasta que escucho un ligero ruido que lanzo la mirada en otra dirección... y resulta que hay alguien en mi cuarto, el portador de la vela. Parpadeo una y dos veces para darme cuenta de su estatura, y su ropa me dice que es el Sonriente Ralph. En mi habitación, que estaba cerrada. Sobre mis cosas. Con un libro en una mano y una vela en el otro. ¿Es que no sabe que..? El pensamiento de la estupidez de juntar fuego y papel me golpea de frente cual carreta cuando me doy cuenta de qué libro está sosteniendo y por qué la sensación de congoja que he sentido al despertarme. Y me despierto del todo por fin, poniéndome en pie mientras apunto a ese traidor con la mano diestra y la siniestra coge mi vara, apoyada junto a la cama.

-Suelta ese libro y mis pertenencias ahora mismo, mísero mortal, y por deferencia a tu cumpleaños permitiré que salgas indemne de esta habitación. -La voz de ultratumba me sale sola, inspirado por el terror a que le ocurra algo a mi Compendio, y la amenaza de un mago debería ser suficiente para helarle la sangre a una asquerosa rata ladrona que se cuela donde no debe. Solo espero que no sea tan estúpido o esté tan borracho de preguntarse si haré magia o si puedo hacerla sin más foco que mi bastón.

Notas de juego

Duda que tengo yo también. ¿Necesito el compendio para lanzar hechizos, como foco, o puedo hacerlo sin él?

Además, la idea es intimidarlo aunque la tirada sea complicada, y... ¿el toque de fatiga ha de ser un toque, o se puede lanzar a distancia?

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26/03/2013, 13:06
Ralph "El Sonrisas"

- ¡Hola Collan! No me habías dicho que te había ido a dormir, estaba muy preocupado por ti, ¿sabes? - el mediano parece que aún está bajo los efectos del alcohol por cómo le brillan los ojos pero vocaliza bien y sigue hablando rápido - Venga tío, no te enfades conmigo. Además este libro es muy extraño, no entiendo ni una palabra de lo que pone y hay dibujos espeluznantes y macabros. ¿Cómo te puede gustar leer estas cosas? ¡Hay que ver que raritos sois los magos! - Ralph deja el libro en los pies de la cama y se acerca como un rayo hasta ponerse a escasos centímetros de ti - ¿Puedo dormir esta noche contigo? No me mal interpretes. ¡Yo soy muy macho! Pero tengo la sensación de que algo malo me va a pasar y me gustaría que no me pillara estando solo...

Notas de juego

El libro no se necesita como foco, sino para aprender hechizos nuevos. Por lo que podrías lanzar cualquiera de los hechizos que conoces sin tener el libro en las manos necesariamente

En cuanto al toque de fatiga, aunque su nombre sea "toque" se lanza a distancia.

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26/03/2013, 18:12
Hollan Tejedor

¿Que qué? Lo miro de hito en hito, sin tener muy claro qué demonios está pasando. Pero tengo muy claras dos cosas de hace unas horas, la primera es que cerré con llave y la segunda es que no dejé mi Compendio por ahí sino que lo oculté en la cama conmigo. Además, parece que está tan bebido que no entiende ni las amenazas, o se lo hace muy bien.

-Pero sí que lo hice. -Digo haciéndome el extrañado. -Estabas en otra mesa y te dije buenas noches antes de subir. -Al menos ha soltado el libro. Pero se me acerca demasiado rápido, y no puedo evitar dar un paso atrás y poner la vara en medio. -No. Si hubieses llamado a la puerta, quizá, pero te has colado en mi habitación y registrado mis cosas sin mi permiso. -Me siento en la cama, sin dejar de mirarlo, y uso la mano libre para ver si mis monedas siguen ahí y no se han "perdido en sus bolsillos", lo que sería el colmo. -Si quieres, dime en qué habitación duermes y si escucho algún ruido, iré corriendo a ver, pero mi habitación es privada, y tienes que irte ya.

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02/04/2013, 01:04
Ralph "El Sonrisas"

Palpas con la mano tus bolsillos y notas que todo está en su sitio - ¡Oh, señor! ¿Cómo te atreves a acusarme de algo tan ruin y despiadado? - grita Ralph de forma teatrera, mientras se lleva las manos a la cabeza y finge estar ofendido. Seguidamente se incorpora y comienza a darle vueltas a una llave - La puerta estaba abierta y ¡juro por lo más sagrado que no he tocado tus cosas! Solo ese libro y porque quería leer un rato... - el mediano agacha la cabeza y pone cara de pena cuando le dices que no puede quedarse en tu habitación - está bien, me iré. Se cuando no se me quiere en un sitio, no hace falta que seas tan cruel conmigo, sniff...  Ralph se baja de la cama y se marcha de tu habitación lentamente, entre sollozos. Cuando va a salir, se queda mirándote con cara de lástima, con los ojos medio llorosos, y finalmente cierra la puerta de la habitación.

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04/04/2013, 20:40
Hollan Tejedor

Vaya... no, si al final el canijo conseguirá que me sienta mal conmigo mismo porque se ha colado en mi cerrada habitación tras abrirla con una llave, fingir que está abierta, colarse hasta mi cama, registrar mis cosas, apoderarse de mi libro y ojearlo sin mi permiso -lo que, dicho sea de paso, viene a ser un problema- y luego tratar de dormir conmigo tras haber hecho todo eso. -Pues no, no voy a caer en algo así. -murmuro para mí, mientras busco la llave de la habitación para poder cerrarla bien. El resto del daño ya está hecho, y como ni siquiera me ha dicho en qué habitación está, no podré ayudarle en el hipotético caso de que ocurra algo esta noche. Así que vuelvo a cerrar la puerta, tras dejar la vela fuera, que debía de ser suya, y me vuelvo a la cama con mi compendio cotilleado. Mañana será otro día, espero.