Has visto por un segundo mientras tocabas los teclados algo pero has intentado volver hacia atras y no has podido volver a ver aquello.
unas mazmorras de ultratumba llena de cientos de Insectos Qitinoides despellejando como ganado a seres parecidos ahumanos.
Estos estan boca abajo y los destripan vivos con sus patas con forma de sierra, Apofis esta con ellos discutiendo con alguien pero no se ve en la pantalla.
todo es sangre y los tratan como ganado.
Pero no has podido volver a poner la imagen.
Algo horrible y espantoso.
Un
Al poco rato Marcos volvió quitando la sala de vigilancia. Informó de su descubrimiento: “Mientras que he tocado los teclados he visto por unos instantes unas mazmorras de ultratumba llenas de cientos de insectos qitinoides despellejando como ganado a seres a-humanos, yaciendo boca abajo. He visto a Apofís discutiendo con alguien, pero no he visto con quien en la pantalla. Todo sangre y brutalidad. Parece que ya sabemos lo que pasa en los pisos inferiores...”
Se volvió a todos lados. “Temo que el tiempo se escurra entre nuestros dedos…” Como ya vio a Dante buscar por el combustible – escarabajos verdes -, o algo, entre los holocubos y gárgolas en los estantes a izquierda abajo, él mismo se puso a la misma búsqueda en el centro de la biblioteca holográfica.
Todos debaten. Hago caso a Dante y me pongo el colgante de nuevo. Luego vuelvo a coger la mano de Dani.
-Creo que eso es lo que nos espera si no cooperamos con ella-les digo.
Luego miro el tubo que ha estado investigando Marcos. Pero no parece funcionar.
-Tal vez necesita el colgante para la correcta utilización de ese tubo-añado cada vez con menos fuerzas para seguir luchando.
Mis ojos enfocan a Dani, jamás pensé que pudiera ocurrir algo así... jamás. Y lamento que haya sido así como me haya dado cuenta que no soy una buena madre, pero, si conseguimos salir de ésta, intentaré mejorar.
Mis ideas se acaban así que me mantengo en silencio, pues para ser sinceros, no tengo ni idea de como avanzar correctamente en esto.
Desayuno algo de lo que me queda en la mochila y, después de recuperar el control del animal, me pongo en marcha en dirección a la pirámide. El descanso en esta ocasión ha sido más reparador y, aunque me siga pareciedo inquietante la visión de la construcción funeraria, siento algo parecido al optimismo mientras me dirijo hacia ella. Tengo el presentimiento de que al fin me encontraré con los europeos y podremos salir de allí... o por lo menos intentarlo.
Mientras examino las extrañas gárgolas, tras ignorar los cubos por completo ya que no son nada interesantes, me percato de la extraña forma que tiene su boca. Tras estudiarlas un rato digo en voz alta:
- Es curioso, es como si la forma de su boca estuviera hecha para encajar estos cubos... - Digo sosteniendo en las manos una de las gárgolas y uno de los cubos. - Supongo que será algún tipo de juguete o de figura ceremonial.
Mientras lo digo inserto el cubo en la boca de la gárgola, más por confirmar mi teoría que por otra cosa, aunque siga sin saber para que pueden servir estas extrañas figuras. Mientras lo hago miro hacia donde está Eva.
Desde el punto de vista de Samuel, los cubos son sólo cubos, y las gárgolas son figurillas ceremoniales...
Dado que ningún otro personaje me ha explicado como es la situación en la que estamos, ¿me podrías dar una descripción de lo que ocurre con Dani? Tengo la impresión de que es algo malo pero no se el que...
Es que sigo un poco perdido y parece que ninguno va a explicármelo de motu propio... :-/
Marcos parece que ha visto algo horrible y teme que el tiempo se termine.
Creo que esto es lo que nos espera si no colaboramos, comenta eva.
Samuel inserta uno de los cubos al azar y sale una película holografíca de un mundo con seres parecidos a los de la extraña ser que os atendió este es arrasado por criaturas Quinoides (los insectos de 2m antes vistos).
Tratan a todos como ganados los destripas y cortan las partes del cuerpo mas tiernas y los órganos.
La película se termina.
En esto parece que se activa el ascensor del tubo de cristal, cae suavemente una figura, esta sale del circulo y se pone en movimiento, (parece un simple sirviente con la cara de un gato como los de la aldea ) se os queda mirando y parece tener algo de repulsa al estar vosotros en esa sala, (como el que tiene una oveja en el salón del comedor), va hacia la mesa de la comida y parece colocar unas ruedas en las patas para así empujarla y llevarse la pitanza que queda sobre la mesa toda a la vez, fuera de la biblioteca.
Dani lo encontraron en la misma sala tendido y enfermo ya que no tenía el colgante de protección pues se le olvido en la esfera como niño que es un tanto despistado.
( una larga carencia sin el colgante y siendo la atmósfera tan hostil haces que enfermes.
Ahora esta en coma.
Cuando te hacercas sobre la piramide ves en el cielo un obelisco flotando los relampagos le impactan alrededor es algo tecnologico y fantastico para unos ojos de los años de los 70.
aún es de noche-día y te faltaran algunas horas por llegar, pues poco a poco va la luz aumentando y la temperatura subiendo.
“Esta es la respuesta a tu interrogante, Eva. Parece que no necesitan el colgante para activar este tubo...” Mira al sirviente y dice a Samuel: “¿Puedes interpelarlo y preguntarlo dónde podemos escondernos?”
Muy inquieto, retoma su búsqueda y dice entre dientes, pero suficientemente audible para todos: “La cosa no pinta bien. La película comprueba lo que he visto. Estos insectos quinoides están atacando ahora mismo a la pirámide de Bastet, y sabemos que desgraciadamente nuestros anfitriones no ocupan el lugar más alto en la cadena alimentaria de este plantea… habría preferido que fura así, al menos ellos no nos han despedazado sin pestañear...”
¿doy con algo en mi búsqueda en el "centro biblioteca holográfica"?
Mientras busca por la sala el combustible se le ocurre una idea:
-Quizás al igual que los collares sirven para las cápsulas, esas pulseras que comentabas * haber visto sirvan para el tubo, observó Dante.
Como si hubiera sido invocado al nombrarlo el tubo se puso en funcionamiento y arrojó una figura al piso inferior donde estaban. Otro felino humanoide con aspecto de sirviente que de hecho confirmó su apariencia retirando la mesa de las viandas. Pero Dante estaba más interesado en cómo hacía funcionar el cilindro hueco, por lo que lo examinó buscando una pulsera u objeto que le llamara la atención y que quizás fuese la llave para hacer funcionar el ascensor.
Meditando si se veía capaz de entablar una conversación con el peculiar camarero se interpuso entre este y el ascensor.
* No recuerdo quién
Aquella tirada aparentemente exitosa que hizo Dante de comprender el lenguaje ¿cómo se resolvió?
Me sobrecoge el mundo en el que me encuentro, pero no puedo desfallecer. Llegado a este punto, debo continuar en mi búsqueda y seguir albergando la esperanza de encontrar al resto de expedición y poder volver a casa en algún momento. De pronto, la añoranza me sorprende y, como si formara parte de un recuerdo muy lejano, acuden a mi mente los largos entrenos en el pabellón deportivo de mi barrio. Me sorprende comprobar como, debido a la extrema contrariedad de las circunstancias, algo tan vital para mi como es el atletismo haya sido relegado a casi el olvido.
Sigo avanzando por la senda a lomos de la bestia y poco a poco la pirámide se ve más y más clara. Y su vez, más y más inquietante.
Cuando aquella "cosa", no se como llamarlo pero desde luego estatuilla y cubo no eran correctos, comenzó a emitir imágenes al aire, y nos mostró un extraño documental en el que los seres insectoides cazaban y devoraban a los seres humanoides, me llevé tal susto que se me cayó de la mano, lo que yo pensaba que era una simple estatuilla ceremonial resulta ser una especie de cine portátil que emite sus imágenes directamente al aire, sin pantalla, y en tres dimensiones, no en dos como en el cine.
Al terminar saco la libreta y el lápiz del macuto, que vuelvo a asegurar en mi espalda y tomo unas notas rápidas, mientras mi mirada se pierde en la gran cantidad de cubos idénticos y anónimos que tengo al alcance de la mano. Saco el cubo y lo pongo separado de los demás. Dudo unos instantes y cojo otro de los cubos sin pensar mucho en cual. Estoy a punto de introducir un segundo cubo en la boca de la figura cuando la voz del Dr Mocztezuma me saca de la abstracción, no he visto de donde ha salido el hombre-gato que se está llevando la comida. Lo miro antes de decir una frase en su idioma mientras introduzco el cubo en la boca de la figurilla.
- Perdón, señor. No comer nada aún, ¿comida dejar? Además, ¿ocurre abajo que sabe?, ¿esconder nos piensa tú mejor?
Mismo técnica de antes :)
Spoiler (marca el texto para leerlo):
Marcos no encuentra nada más interesante en la sala, la película le confirma sus dudas sobre esos seres insectos.
Dante comenta sobre las pulseras y cuando el ascensor se pone en marcha y aparece una sirvienta se puede comprobar en su muñeca un collar idéntico a los que hay en la mesa de la sala de vigilancia (Dante gracias a las explicaciones de Colbert es capaz de decir frases cortas y sencillas con los verbos o tiempos cambiados.
Samuel introduce otro cubo, mientras habla con el servicio.
El cubo refleja sistemas y planetas que van cayendo y van siendo tratados como ganados y sus adelantos científicos y recursos usados.
El sirviente te mira y asiente con los hombros, dejando la mesa de comida.
Sisea algo ya que sus vocablos no están preparados para el idioma común (parece morse en el idioma egipcio)
y parece que tiene prisa por marchar o de estar cerca vuestra.
Desde la pantalla de vigilancia se ve a Hakim que esta apunto de acercarse a la piramide va montado en una especie de animal de campo medio buey y medio elefante.
Por la otra pantalla se ve una sombra de espaldas es Apofis que le están informando de la llegada de Hakim montado sobre un animal robado de la aldea, este ordena a un grupo de Quinoides que vayan a su encuentro, parece que le quiere atacar, se le ve muy enfadado.
Lo peor de todo es que lo comanda vuestra "anfitriona" que se alza del suelo ante Apofis y con respeto sin darle la espalda se aleja.
Ahora sí, se ve que sale majestuosamente de la piramide con cinco Quinoides de esos.
y otros tantos escondidos entre la maleza del artificioso jardin
Hakim corre peligro
Ves unas figuras que salen de la piramide parecen humanas pero estan muy lejos.
Tu montura parece muy nerviosa.
“Parece lo que se ha pasado aquí ha sido una demostración de poder, Apofis dejando claro a Bastet quien es el más fuerte, y por supuesto es él con los insectos quinoides a su mando”, interpreta Marcos lo visto a su manera. “Y hay que ayudar a Hakim, no podemos dejarlo sólo… Ayudarle de alguna forma… Ahora Bastet no va a desafiar a Apofis, entonces del sirviente este no podemos esperar nada valiéndonos del hecho que queremos defender a nuestro compañero contra Apofis… ¿qué opináis? ¿Tratamos de derrumbar al sirviente para tener una pulsera más y así poder utilizar el tubo?” Ya se acerca aparentemente sin ningún propósito al sirviente mirando en otra parte, por si acaso su idea encuentra resonancia entre sus compañeros.
Seguimos avanzando hacia la pirámide hasta que el nerviosismo del animal es tal que, tras intentar calmarlo con caricias, me bajo de su lomo. Eso hace que me ponga alerta y que considere acercarme al lugar procurando no ser visto, ya que no sé qué tipo de criaturas voy a encontrarme allí.
Cojo las riendas de la bestia y la dirijo a uno de los campos cultivados para que se tome un bien merecido segundo desayuno. Me despido de él con una palmada en su grupa a lo que el animal me responde con un ronco mugido que alcanzo a interpretar como un “Déjame en paz de una vez, pesado.”
Después de ocultar nuevamente mi rostro con el pañuelo, reemprendo el camino, y procuro evitar caminos demasiado descubiertos, siempre que la senda por el desierto lo permite.
Motivo: Avanzar sin llamar la atención hacia la pirámide
Habilidad: Normal (+1) (1)
Dificultad: Normal (+1) (1)
Tirada: [-1] [0] [0] [1] = 0
Resultado final: Normal (+1) (1), Éxito
Avanzo hacia la pirámide con estilo Furtivo (+1) y dificultad 1 para evitar ser visto por los que allí aguardan. Lanzo los dados y...
Éxito normal.
Parece que somos unos pequeños insectos perdidos dentro de una habitación enorme en la que solo encontramos peligros que nos atemorizan y por más que buscamos no encontramos la salida.
Cuando veo a Hakim no puedo menos que pensar que, de algún modo ella nos habría visto llegar igual que a él y, posiblemente, también hubiera alguna especie de guardia escondida que no logramos ver. Hemos sigo marionetas dentro de una obra de teatro que ha dirigido ese ser.
Tengo la boca tan seca que cuando voy a abrirla para decir que tal ella le trate como nos trató a nosotros cuando llegamos no sale ningún sonido, nada. Casi ni siquiera puedo separar los labios, y tengo la mano que coge a la de Dani tan entumecida, que no siento ni que tenemos ese contacto.