Paseas por el parque, es un sábado por la mañana y el día está increible.
Mientras paseas, notas algo extraño, algun sentimiento fuera de tu alcance te fuerza a girar tu cabeza hacia un banco.
En el banco hay un chico sentado, leyendo y divagando.
Con toda naturalidad notas que tus piernas se acercan hasta su lugar.
Estás frente a él.
¿Qué haces?
MISIóN: Conseguir su nombre y conseguir cualquier dato que te mantenga en contacto para volver a verle.
Ya estás dentro, disfrútala!
El joven parece ligeramente extrañado de tal compañía, pero con tan solo un ligero rubor en sus mejillas se decide a sonreir mientras te comenta:
Sí, está realmente bien, me lo leo por segunda vez, pero Kafka es un gran escritor... "La metamorfosis", te suena? pregunta sin poder mantener demasiado tu mirada, aunque resiguiendo con verguenza las curvas de tu cuerpo. En cuanto al día...espléndido, como muchas otras cosas en este mundo.
Te mira detenidamente, observa esa lengua, como repasa tus labios, y finalmente se ve obligado a apartar la mirada.
Pues mi nombre es Dani, y ha sido un gran placer topar con alguien como tú... su voz se afloja por la verguenza A que viniste, Vivian?
De nuevo te vuelve a clavar esa mirada mágica y posesiva, que te hiela la columna y te arrebata el corazón.
A Dani parece gustarle la idea y te sonríe, complacido.
Se levanta, guardando su libro en una riñonera que le cuelga del lago izquierdo de su cintura.
Vayamos, pues, pero no permitiré que pagues tú mi batido... dice algo entrecortado O en todo caso, prométeme que habrá un batido otro día, y ese podré pagarlo yo.
Dicho esto mira, con cierto recelo, ese cuerpo voluminoso y parecer querer apartar sus ojos de tal vicio.
Tras aquel contacto, parece estar ligeramente nervioso, aunque no disgustado. Te mira, con esa mirada profunda que ya empiezas a conocer mientras sigue caminando, quitando importancia al asunto.
¿Tocarme? Dudo que rehuya a unas manos suaves y cálidas como las que me ofreces... nada más consigue decirte mientras decide bajar un poco la cabeza escondiendo su rubor. Así que mi número... está fácil, chica bonita.
Dicho esto, notas que oprime con mas firmeza tu brazo, entrelazandolos y notando ahora el calor y la textura de ambas pieles.
Dani parece sorprendido, su cintura está bien acomodada tocando la tuya y su cuerpo parece agradecerlo.
Te mira y sonríe.
No...me molestará consigue decir antes de que tus labios se junten a los suyos.
Primeramente deja que tus labios jueguen, pero en breves segundos empieza a participar de forma activa. Notas que sus besos son dulces, que sabe besar de forma inigualable y su calor es atractivo como todo él.
FELIZ NAVIDAD
Al notar tu ferviente mano se estremece, se encoje pasionalmente y suspira nuevamente.
Te mira, buscando tu mirada, y sin palabras consigue decirte que está cortado.
Con dificultad, después de soltar tu boca tras un beso largo y acaramelado, consigue decirte a la oreja:
Llévame donde quieras... dice mientras mueve sus piernas, frotando las tuyas.
De nada, jugadorcilla!
Ante tal situación, los nervios del joven son visibles. No le disgusta y en su cuerpo ves sus indicios pero no se atreve a participar en el juego de forma activa.
Te mira constantemente, a los ojos y a tus manos, en busca de una caricia tan cálida como la anterior.
Te sonríe mientras vas desabrochando el pantalón, su rubor es claramente reconocible en sus mejillas pero la presión de su pantalón te hace continuar.
El muchacho sonríe, de forma pícara y sutil, sin apartar su mirada de tu deslumbrante y escultural cuerpo.
Suspira y finalmente dice:
Por mucho que pensara jamás sabría decirte a quien le disgustaría tal situación... su voz es casi un susurro, mientras pasa su mano por tu espalda, recorriendo tu columna, con su dedo índice hasta llegar a tu nalga y tomarla con suma delicadeza.
En acabar aquel susurro pega su cuerpo al tuyo moviendo levemente la cintura, para frotarla sobre la tuya mientras un gemido se escapa de su boca.
Quiero que sigas hasta que nadie pueda más... añade.
En tal postura, y aquella acalorada situación, Dani te coje por lado y lado de tu cintura, no sin haber recorrido repetidamente tus pezones con los dedos. Una vez cogido a ella, se mueve rítmicamente, chocando contra tu cuerpo mientras mira tus ojos, con esa mirada que solo sabe prenderte y acalorarte más aún.
Sigue moviendo su cintura, empujando tu cadera cada vez más severamente, mientras su boca no deja de suspirar y sus manos se mueven por todo tu cuerpo, inquietas y pasionales.
Los minutos pasan y su ritmo sigue, aunque algo más acelerado, hasta que se acerca a tu oido para susurrarte entre gemidos :
Puestos a desear, que esto no es mas... ahhh... que un sueño... suspira nuevamente ...podíamos cambiar y hacer realidad cualquiera de tus fantasías....
Que velocidad :P
Al oir tus palabras, el muchcacho suspira, nervioso ante tal poder.
Notando tu contracción solo consigue gemir de nuevo mientras lentamente te tumba al lado para después levantarse.
Entonces tenemos muchísimo que hacer... dice algo nervioso frente a ti Jamás había estado ante tal situación...ni entre unas piernas.
Al decir eso baja un poco su cabeza pero rápidamente la levanta.
Imagina, pues, todo lo que tengo en mente.
Camina lentamente hasta tener tu cara a pocos centímetros para susurrarte:
¿Cualquier cosa, entonces?
Es que con tanta rapidez no había llegado a tanto :P
Sigamos, pues!
Parece que algo corta la sonrisa del joven.
Te mira, algo apenado, mientras repite:
"Hoy"... pero solo hoy... acaba diciendo mientras te besa la frente ¿Quien cuidará de mí mañana?
Al verla allí abajo, el muchacho tan solo sabe volver a suspirar, mirando su cara que en un vaivén juega por su sexo. Tras unos segundos, pasa tu mano por tu melena y la deja en tu nuca, acompañando tu movimiento y presionando sobre ella para que entre entera en tu boca.
Su respiración va en aumento y te mira, sonriente, al ver tu actitud tan activa y ferviente.
Como sigamos así voy a acabar por mojar tu boca... dice mientras no suelta tu cabeza. Pasan unos minutos, mientras está pensativo y finalmente añade: Tenemos un par de opciones, parar o...volver a empezar... No quiero que dejes de... Pero cuando acabe podemos seguir, Vivian.
Cuando dice tu nombre lo hace lentamente, como relamiendo cada una de las sílabas y disfrutando de tal felación.
Que vaya bien el curro :)
- Sigue Dani, quiero saborearte
le dice Vivian, dejando de lamer para introducirse todo el sexo del chico en la boca, y acompasar los movimientos. Mientras lo tiene en la boca, pasa suavemente la punta de su lengua por el prepucio del chico.
Tu lengua parecía satisfacerle en gran medida y sus suspiros eran casi continuos.
Su mano se aferra a tu cabeza, que acaricia a menudo, y sigue acompasando a un ritmo rápido, dejando a veces su sexo dentro de tu boca durante varios segundos.
Si sigues así...no creo que aguante mucho... dice entrecortado Me vas a saborear literalmente, pequeña...
Notas su falo realmente duro, entrando y saliendo de tu boca en incontables ocasiones, llegando hasta cerca de tu garganta.
Buf, no me dejaba cojer a Dani para escribir!
De Vivian sólo se escucha un ahogado "No pares Dani" mientras sigue chupando, succionando, y te sujeta fuertemente las nalgas, notando contra la garganta, mientras su lengua cada vez más ansiosa busca tu satisfacción total, el momento en que descargues dentro de su boca.
Entre un largo gemido notas como fluye por tu boca su flujo. Dani no deja de acariciarte la cabeza mientras algun que otro espasmo mueve su cuerpo y finalmente te acaricia la mejilla con una dulce sonrisa.
Vaya... consigue decir.
Vivian traga todo la eyaculación de Dani, lamiéndole después suavecito, agradecida por lo que él le ha dado. Cuando oye la exclamación de él, sonrie, y se gira para mirarle.
- ¿Te ha gustado Dani?- pregunta dulcemente, mientras acerca más su cabeza a la mano del chico para seguir siendo acariciada. - A mi me ha encantado, pero no me has contestado, ¿te quedarás conmigo? ¿Quieres que yo haga realidad tus sueños?- sonrie muy cariñosamente, mirandole a los ojos.
Dani responde con una sonrisa, sin dejar de acariciarla y bajando hasta su posición.
Una vez a su altura, le besa los labios con parsimonia y luego contesta:
Claro, estaré aquí hasta que tu quieras lo contrario... su voz suena dulce mientras te habla, tan cerca que notas su aliento Hay muchas cosas por hacer y más ganas de llevarlas a cabo...¿Qué quieres tú?
Vivian feliz, te mira con adoración antes de besarte con los ojos cerrados y una sonrisa de felicidad. Responde en un murmullo:
-Dani, mi vida, lo que tú quieras. Quiero hacerte disfrutar como nadie lo haya hecho nunca.