Partida Rol por web

Me deja un poco descolocado la reacción de Dracrio frente al tótem. Aunque ya poco llegaba a sorprenderme del todo con esta compañía. Sin mediar palabra me limito a seguirlos con especial atención al entorno. 

El orco y el mago siguen al vampiro alterado, salen corriendo detrás de el, aunque el ya estaba un poco adelantado, los dos que se quedaron atrás logran seguíerle el paso.

Después de correr por un tiempo llegan a una gran sala de la caverna que parece ser la madriguera de los goblins. Parecía una pequeña ruina enana, seguro era un puesto de trabajo de los excavadores de antaño, pero lo uníco que quedaba de todo aquello eran un par de escultaras que estaban casi destruidas por el tiempo.

El lugar estaba oscuro, todas las antorchas parecían recién apagadas. Por lo general las madrigueras de los goblins eran bastante iluminadas, pero por alguna razón esta estaba muy oscura. La luz que habían visto antes estaba mas adelante, era una sola antorcha encendida atras de unas chozas.

Los aventureros se empezaron a mover hasta que Dracrio se tropeso con algo, cuando el vampiro se fijo con que se habia tropezado, descúbrio que había un cadáver de goblin en el suelo. Los otros dos se fijaron y resulto que todo el lugar estaba lleno de cadeveres de goblins, lo extraño de todo eso era parecía como si fuesen los mismos goblins los que se estuvieron matandose entre ellos, muchos tenían heridas de garrotes y otras armas de goblins, mientras que otros estaban empalados por lanzas cortas.

Mientras todavía estabn fijándose en los cuerpos, los aventureros escuchan un horrendo grito que viene del otro lado de la madriguera, -¡NOOO! ¡NO DEJARÉ QUE TE LA LLEVES! ¡NO DE NUEVO! ¡NOO!-. el grito resonó por toda la cueva, pero no alcanzaron a reconocer de quien o que era esa voz.

Al tropezarme me calmo un poco y veo el lugar con algo de intriga pero mi respiración y instinto salvaje siguen allí... me pongo a gritar como una bestia descontrolada mientras reviso los cadáveres de los goblins... veo una antorcha con su llama casi extinta y la tomó para revivir su llama. Al lograr esto veo una sombra corriendo era una rara figura pero decido perseguirlo hasta que lo consigo... decido tomarlo del cuello y tirarlo contra una de las paredes de la cueva y eventualmente lo tomo del cuello para preguntarle

-¿QUIEN ERES?...

Miro a esta persona con una mirada sanguinaria y le digo

-Si aprecias tu miserable vida me dirás quien eres , que es este lugar y que haces aquí.

El histerico vampiro quedo en ridiculo otra vez. Persiguió una sombra que a primera vista parecía un hombre, pero en lo que ya lo tenia agarrado del cuello en la pared, se dio cuanta de que no era mas que un miserable goblin que estaba tratando de huir de ese lugar. Aparentemente el goblin no sabia hablar ya que no le respondió ni una sola palabra en la lengua común.

Algo pasa en ese lugar. Los aventureros pueden sentir una presencia maligna en ese lugar, sobre todo Garrett. Lo que sea que estaba en ese lugar no estaba lejos, y tampoco era muy amigable, perecía una presencia inestable que les helaba la piel a los vivos, y ponía alerta al vampiro. Lo único que era seguro es estaba al otro lado de la madriguera.

camino hacia adelante con valor y claras inteciones de entrar primero "yo voy delante" mientras me adentro en la madriguera  

Harhrish se adentro en la madriguera Garrett lo siguió y después de romper el cuello del goblin Dracrio se les unio, por un tiempo lo unico que pudieron ver fueron cadaveres de goblins, y uno que otro ocasional grito de una voz que se les hacia familiar, pero que no podían reconocer.

Derrepente se escucho una explosión y de la nada una criatura con forma de araña aperecío colgada del techo de ta caverna, era exageradamente grande, al principìo se veia un tanto borrosa, pero luego de que se escuchara un grito horrendo, la araña se vio tan clara como el cielo, y para colmo, se movía hacia ellos.

Para confundir mas a los aventureros Harhirish alcanzo a ver la figura de Carghan, al parecer el mago y el vampiro también habián llegado a la madriguera. Pero añadida a la confusión aparecio un peligro tremendo. En la distancia (por donde los aventureros entraron a la madriguera) se empezó a escuchar tambores de batalla goblin, y todos sabian que solo los grupos de mas de 50 goblins traían tambores, pero lo peor era que se podían escuchar mas de cuatro. Eran muchos mas goblins de los que todo el grupo podían manejar, y eso sin contar el echo de que Roddrack no estaba.

- Esto se esta poniendo feo. No podremos contra tantos a la vez. Dije bastante serio mientras por otra parte me alegraba del "reencuentro".