Partida Rol por web

Finalmente, entre los dos, conseguís abrir la puerta de la sala de hipersueño. Las luces tintinean, pero entre luz y sombra, dejan ver un "paisaje" aterrador. Algunas de las cápsulas están abiertas pero una de ellas se encuentra cerrada y en su interior, no se ve más que sangre. Un orificio parece indicar que algo o alguien atravesó a quien quiera que estuviese allí.

Hay sangre por el suelo, paredes y techo. Los terminales también están manchados, algunos, rotos, y algunos paneles de ventilación caídos o desaparecidos, dejando ver los oscuros conductos.

Es una visión dantesca.

No pude evitarlo y comencé a reir con la charla que les estaba soltando la capitana a la pareja de calenturientos, desde luego era todo un personaje, era deslenguada a más no poder y no se cortaba un pelo, pero por eso me caía bien, no era una militar estirada y la verdad lo prefería. Pero cuando se metió con mi nombre la miré con el ceño fruncido-Eh capitana, un respeto a mi madre, fué culpa de mi padre al registrar mi nombre, tan listo que era pero con los nervios no puso aquel acento, menudo genio..-contesté poniendo los ojos en blanco durante un instante, para luego asentir y caminar hacia el puente con ella y Amanda

-Barret, ten cuidado-dije guiñandole un ojo mientras miraba fugazmente al yupi a modo de advertencia divertida-Vayamos al puente jefa, veamos que coño ha pasado aquí-

El comedor no parecía tener nada raro, de hecho parecía casi un calco de nuestro mismo comendor, así que me encogí de hombros y caminé hacia el puente junto con las otras dos mujeres, pero entonces nos topamos con aquellas mancha de sangre en el pasillo.

-Joder...y ahora es cuando ésto comienza a ponerse raro...toda esa sangre no es por haberse cortado afeitándose precisamente jefa..-comenté mirándola de reojo ahora con un gesto más tenso-creo que ya no sería demasiado pronto para sacar el arma ¿no crees?-seguí hablando mientras daba pasos cortos y silenciosos atento a cualquier ruido extraño, que cojones, estaba ligeramente asustado, a mi me habían pagado por descubrir qué ocurría, estaba preparado para reparar una nave, no para ver sangre repartida por las paredes..

No esperaba aquello, desde luego que no. A punto estuvo de empezar a chillar. Hubiera sido una reacción del todo normal y sin duda, algunos años atrás hubiera sido lo que habría hecho, pero el entrenamiento que había recibido no sólo era para pilotar una nave, sino para sobreponerse a situaciones de estrés como aquella.

- No sé que coño ha pasado aquí. - Dijo la piloto. - Es una jodida sangría. Esto es... No tengo palabras. No toques nada compañero. Ni se te ocurra. Voy a avisar a la jefa.

Barret apretó el botón del intercomunicador que tenían todos acoplado al casco. Se suponía que tenía que funcionar. La nave hacia de antena y no estaban tan lejos de ésta.

- Capitana. - Esperó una respuesta. - Vengan cuanto antes a la sala de hipersueño. Es muy urgente, cambio.

Tu nuevo perfil...

Como dice, estás aterrorizada.

De pronto todo el valor que había demostrado hasta el momento desapareció tan rápido como había llegado. Quizás no había asimilado lo que venían sus ojos hasta ese momento, quizás tras analizar la escena se percató de que estaban en peligro o puede que simplemente viera algo nuevo que le aterrara.

Fuera como fuera, Gabriella se dio media vuelta y comenzó a correr tratando de llegar de nuevo al transbordador. Tenía que salir de allí, algo malo, muy malo estaba sucediendo en aquella nave. Que o quién fuera que había hecho eso podía seguir allí sediento de sangre.

- ¡Aaaaahh! - Comenzó a gritar. - ¡Vamos a morir! - Premonizaba mientras huía de la sala de hipersueño.

Amanda escuchó el comentario de Jack y sonrió divertida, pensando que probablemente el yupi se había quedado con ganas de satisfacer sus necesidades. Aunque la idea de quedar a solas con él no le desagradaba, intuía que la situación en la Anesidora era extraña y que no era momento para jueguecitos. Iba a responderle que era mejor que permaneciese junto a la capitana, cuando se le adelantaron.

La capitana Amber fue muy clara y concisa, aunque parecía completamente ida de la cabeza, pero los grupos estaba firmados y no los cuestionaría. Por su parte, Jericó les dió un fuerte corte a Barret y Branston, que aunque tenía toda la razón y la responsabilidad de organizar los grupos quedaba en la capitana, quizá las formas podrían haber sido más suaves. Se respiraba tensión en el ambiente, probablemente al estar enfrentándose por primera vez a una situación de la que estaban desprovistos de información y que resultaba bastante extraña. ¿Por qué aún no habían recibido ninguna notificación de la tripulación de la Anesidora? ¿Tampoco era problema de las comunicaciones? Amanda sintió temor por primera vez desde que llegasen a aquel lugar...

- Jack, centrate y obedece sin cuestionar las órdenes de la capitana Jackman. Algo está ocurriendo aquí que no me gusta nada de nada. ¿Por qué no viene a recibirnos la tripulación de la Anesidora? ¿A caso no es ningün problema de las comunicaciones? Andaos con ojo vosotros dos. - finalizó la oficial médico mirando a Barret y Branston.

Amanda avanzó tras la capitana y el ingeniero, tratando de entender la situación, que lejos de ser normal, incluso carecía de sentido. No tardaron en llegar a la sala comedor, que estaba hecha un completo desastre, con comida a medio acabar sobre las bandejas, tazas de café que ni si quiera habían terminado de degustar... Básicamente como quedaría la USCSS TORRENS si llegase una señal de alarma y saliesen rápidamente a valorar que ocurría. Eso, al menos le hacía entender algunos puntos... Primero, nontuvieron ningún problema en términos de criogenización, dado que era evidente que habían hecho vida común en el comedor, por las cantidades de residuos y demás, toda la tripulación. Y dos, si había dejado todo así sin apenas recoger nada, significaba que algo les había alertado, y prueba de ello es que alguno había logrado pulsar los sistemas de emergencia que les habían llamado la atención. La pregunta ahora era...¿Dónde estaba todos? ¿Qué había ocurrido allí dentro?

Entonces los tres repararon en la sangre de las paredes, lo cuál era muy mala señal. Amanda no se lo pensó dos veces y empuñó su queridos escalpelos, los cuales le servian tanto para salvar vidas como para defenderse cuerpo a cuerpo. Si bien tenía un arma reglamentaria en el cinto, prefería no hacer uso de ella salvo imperiosa necesidad, pero sus herramientas de trabajo formaban parte de sí, y a ninguno de los dos compañeros a su lado les sorprendería que la joven los sostuviese. Sabían que Amanda se sentía mucho mejor así, más calmada, y resultaba mucho más eficiente. Lejos quedaban los tonteos con Jack.

- Hay sangre en las paredes, como si alguien estuviese herido y tratase de acercarse al puente, y hubiese terminado cayendo al suelo. No obstante, no se ve ningún cuerpo. - mencionó lo evidente, sabiendo que sus camaradas habrían llegado a la misma conclusión de inmediato. Voy a escanear la sangre para saber si es reciente o no, y tomaré una muestra para ver si soy capaz de determinar después a quién pertenece, según  la información y registros que vienen en la base de datos. ¿Conocíais a algún miembro de esta lanzadera? 

Las compuertas se abrieron y la sala estaba completamente desierta, no solo eso sino que algunas de las capsulas estaban abiertas y las que estaban cerradas.. bueno mejor no comentar nada sobre ello; la cuestion es que no estaba preparado para ver aquello, todo estaba recubierto de sangre y seguro que en algun lado habia algun miembro mutilado pues en las capsulas que estaban cerradas se veian un agujero y mejor no mirar dentro.

La Piloto se puso histerica y comenzo a correr y a gritar como una loca que ibamos a morir, mi primera reaccion agarrarla y besarla para que se le pasara toda la tonteria pero aquello tambien era demasiado para mi y ... simplemente no pude reaccionar, note como todo bajaba hacia abajo y en cuanto esta pasaba por mi lado para correr hacia afuera de aquel horror yo solo me desvaneci en el suelo del suelo.

Era un hombre por dios!! No iba a salir corriendo!!

Ahí estaban, parecían tres de los sietes enanitos de Blancanieves. Sólo les faltaban un pico y cantar esa cancioncilla... ¿Cómo era?

Joder...y ahora es cuando ésto comienza a ponerse raro...toda esa sangre no es por haberse cortado afeitándose precisamente jefa..-

Aquel hombre tuvo la osadía de interrumpir sus fantasías.

-Es de mi regla, que me he restregado por las paredes. -se encogió de hombros.- Cállase o le estampo la cara contra la sangre... ¡Oye, no sería una mala idea! -comentó intentando sujetar a Jerico por el rostro y llevándole hacia la mancha de sangre-. Ya jugaremos, nuestra leona en celo va a informarnos sobre la mancha... Pues... creo que no.  

Cuando escuché la pregunta de Amanda negué con la cabeza-Yo no conozco a nadie de la tripulación así que comparar esa muestra con los registros arrojará luz sobre lo que le haya pasado aquí..-dije mirando de nuevo las manchas de sangre pero entonces se acercó la capitana e intentó cogerme de la cara, para acercarla hacia la sangre, pero la cogí d su muñeca y aparté la cara con facilidad.

-Jefa, tenga cuidado, se mira, pero no se toca..- dije con una tensa sonrisa-seguiré sus órdenes pero no abuse- respondí guiñándole un ojo para luego mirar a Amanda-¿Y bien, de quién será la sangre? Averigüemoslo..- comenté mientras seguíamos camino hacia el puente.

A punto de dirigiros hacia el puente, vuestro comunicador dentro del casco os llevó los gritos de uno de vosotros.

 ¡Aaaaahh! ¡Vamos a morir!

Eran los gritos de Gabriella.

Al volveros, visteis, puesto que las puertas de los pasillos estaban abiertas, a Gaby corriendo desesperada hacia la esclusa, quizás con intención de abrirla y regresar a la Torrens.

Pero, ¿qué había ocurrido? ¿Y dónde estaba Jack?

-Nenas, preparaos para lo peor. Alguno de nosotros servirá de manjar.- Comentó viendo como Gaby corría en dirección por donde hubieron venido como si de una Barbie se trataba
-Debo decir -iba caminando abrochando bien su traje y tirando la peluca al suelo. ¡Oh!, su amada peluca..., que nunca se ha de temer a la muerte. Si así hacéis , es que no valen para estar aquí. Y, ahora, quedaos aquí o seguidme.

La capitana echó a correr en dirección a Gaby gritando su nombre para que fuera con ella.

Amanda no tardó en ponerse manos a la obra y tratar de analizar la sangre de la pared, realizando primero una fotografías antes de manipular la escena. Intentaría más tarde observar con detalle la coloración, la fluidez y tamaño de las gotas, el sentido en que había sido dispersada la sangre y otros parámetros importantes en caso de que se tratase de un crímen y debiesen aportar pruebas. Se colocó los guantes, extrajo unos viales estériles con hisopos de algodón en su interior, que no tardó en ir sacando cuidadosamente y embadurnando la superfíe con la sangre de la pared para tomar correctamente las muestras, y tras volver a depositar en el interior de los viales, agitó y rompió las ampollas del interior para que el reactivo se mezclase bien y empezar a determinar resultados una vez colocó una gota diluída en la ranura adaptada de la tablet. El proceso tardaría solo unos segundos, pero el proceso de búsqueda para encontrar similitudes en la base de datos quizá un poco más.

No obstante, antes de advertir ningún resultado, un gritó y pasos a la carrera se escucharon desde la zona donde habían venido. ¿Era Barret? ¿Qué estaba ocurriendo? La capitana fue la primera en acercarse hacia allí, pero en su carrera, movió la tablet, haciendo deslizar la hora de su ranura y que la búsqueda que interrumpiese.

- Joder! ¿No podéis estar parados un puto minuto? ¿Qué coño ha hecho Jack ahora? Voy a tener que volver a repetir la prueba, que mierda. - espetó bastante cabreada Amanda, pasando de ir a ver qué ocurría. Iba a volver a repetir el proceso de inmediato, no le gustaba dejar las cosas a medias, salvo dejar a Brandon con un buen calentón. Yo me quedo, avisad si es algo serio.

Gabriella había llegado al pasillo y estaba muy cerca de la esclusa. Lo único que parecía querer era salir de allí, regresar a la seguridad de su nave, la Torrens. Todo lo demás... no le importaba demasiado en aquellos instantes. De hecho, no había nada más en lo que pensar.

Pero eso era un peligro. Solo la capitana parecía haberse dado cuenta de lo que implicaba. Si Gabriella se marchaba en el transbordador, ellos se quedarían allí, aislados.

Así que la capitana corrió como si aquello fuera una maratón y no una corrida en su cama con algún hombre ( o mujer, según le apeteciese) para alcanzar a Gaby. Cuando lo hizo, le agarró con brutalidad del hombro y la bajó de la escotilla.

-¡TÚ!, ¿¡QUÉ COÑO HACES!?, ¿ES QUE NO NOS ESCUCHAS GRITAR? ¿SABES LO QUE PASA CUANDO TE CIEGA EL EGOÍSMO CÍNICO Y DEJAS A UN LADO A UNOS COMPAÑEROS? -La zarandeó con tanta fuerza que por poco protagonizaba una escena de Ana Bolena allí mismo. Se había enfadado y cada vez que hablaba su saliva acababa en el rostro de la dulce Gaby. ¡CÁLMATE, POR MI SANTO COÑO! Y no pienses en ti misma. ¡AQUÍ HAY UN EQUIPO! De ser así, muestras que no sirve para estar en esta misión. ¿Temes a la muerte? La muerte no hay que temerla. Hay que agarrarla del culo y decir: ''Joder, no te temo''. -se contuvo de pegarle un buen nudo en la cara, suspiró sin dejar de apretarle los brazos, pues era por donde la tenía agarrada-. ¿Crees qué esto es duro? Yo me presenté al casting de "Los vigilantes de la playa" y me dijeron que no era lo que buscaban, ¡eso si es duro!