Partida Rol por web

Sobresaltada la doctora salió de su ensimismamiento. Girando la silla miró al soldado que se hallaba en la entrada y tras unos instantes de detenido estudio por fin enfocó la mirada.

Ehhh..sí claro comenzó una vez que hubo registrado sus palabras. Sonrió tranquilizadora No se preocupe soldado, la espera es larga y, a menudo uno se distrae. Se levantó y se acercó a él. Por favor, siéntese en la camilla dijo guiándole.
Dígame señor Stuntman dijo mientras alargaba una mano hacia la jeringuilla y la goma elástica ¿ha sido criogenizado alguna vez? con suavidad le remangó la manga y le extendió el brazo.

- Sí, doctora. Ya me criogenizaron antes. Me tiré doscientos diez años como una barrita congelada. Entonces no hubo ningún problema. Espero que ahora tampoco - declaro con cierto nerviosismo.

Jack esta sentado junto a las taquillas de los Neomarines... ha echo acopio de bollitos de la conquest y se esta "despidiendo" de su cantimplora.

BROUAAAP maldita sea otra vez a la nevera AUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUU AUAUAUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUU seguira la tecnico Barrows por aqui cuando salga? CUAK CUCUAAAK eso espero patito eso espero... un momento... que le ha pasado a la banda sonora?? CUAKCUAK ¿Que? como que ya han congelado la gramola? MIERRRRDA!

¡Doscientos años! exclamó mientras colocaba el vial con sangre en la máquina y la encendía no me puedo imaginar cómo será estar criogenizado tanto tiempo...Agarró el estetoscopio que le pendía del cuello y, tras desabrocharle la camisa con gestos profesionales le auscultó. El soldado notó la superficie metálica fría contra la piel. Respire profundamente...silencio. Expire...bien le sonrió mientras le palpaba el cuello.¿De dónde a dónde viajó? preguntó curiosa.

- Supongo que tiene razón Mayor. - asiente con una sonrisa - El caso es que esas cosas se hablan como en este momento, con cautela y cara a cara; No por medio de las comunicaciones de una nave a las que tiene acceso toda la tripulación... - continua sonriendo - Bien; Vuelvo a la sala crio. - sentecia saludando marcialmente a ambos - Señores. - termina marchandose.

Entra en la sala de criogenia y observa desde un segundo plano como la doctora examina a Stuntman al tiempo que el tecnico prepara los aparatos pertinentes.

Siento cómo se me pone la carne de gallina al contacto con el estetoscopio. Y el frío repentino que siento no es solo por el metal.

- Bueno, doctora. Para serle sincero yo tampoco sé lo que es realmente estar crio durante dos siglos. Un día te duermes y otro te despiertas. Y te alegras por haberte despertado, sobretodo cuando ves que algunos no lo hacen. Gajes del oficio, supongo. Ya sabíamos dónde nos metíamos así que si algo falla no hay hoja de reclamaciones - digo con una sonrisa cansada -. Lo más duro, sin embargo, es ver cómo las cosas han cambiado a tu alrededor, ser consciente, de repente, que cuanto dejaste atrás, amigos, familia, amor, ya no existen. Han muerto todos.

Callo durante unos segundos y la miro sorprendido.

- Doctora, ¿es usted bruja? Porque hace tiempo que no hablaba tanto y aún menos de este modo. Bueno, da igual - digo y con un gesto de la mano le quito importancia al asunto -. Su otra pregunta... - por unos instantes mis recuerdos vuelan y la mirada se me ensombrece -. Soy de Terra y respecto a mi destino... es algo que prefiero no recordar.

La doctora tiene un aspecto dulce y su voz es agradable. Al hablar hasta parece interesada, no haciéndote sentir uno más.

- Pero ya está bien de hablar de mí. No soy tan interesante. Dígame doctora, y usted ¿de dónde es?

Ariadne escuchó atentamente la contestación de Stutman. Un pitido salió de la máquina y echó un vistazo a la pantalla. El análisis de sangre estaba listo. Observó los recuentos detenidamente Perfecto Tomó notas en la ficha del soldado.
Bien...vamos a hacerle un electro comentó mientras con un gesto suave sobre el hombro le indicaba que se tendiese.

Pues la verdad es que soy de Auriga Prima contestó amable a la pregunta mientras aplicaba el gel conductor, húmedo y frío sobre su pecho. Cogió los electrodos y los comenzó a colocar. De hecho soy de la misma capital...y, nunca había viajado al espacio le informó con una sonrisa. Es toda una aventura añadió mientras conectaba la máquina. La sala se llenó con el bum bum del corazón del soldado. La doctora observó atentamente las ondas ST en la pantalla durante unos instantes y anotó algo en la ficha. Aunque su tono de voz era amable y cercano, se la notaba concentrada en lo que estaba haciendo. Un poco más allá Vairy terminaba de poner a punto la cámara y en la puerta el Capitán Belluti lo observaba todo en silencio. Abtraída en el proceso y la conversación, la doctora no se había dado cuenta de su llegada.

Capitan... Japetus asiente con la cabeza para despedirse. Despues, cuando Bellutti se ha ido, se gira hacia su colega

Hay que darle un toque a Waters. Se lo doy yo o se lo das tu???

Vairy chequeaba la neverita del conductor Stuntman, con aire despistado, como si no se diera cuenta de lo que ocurre alrededor. Oye como Ari comienza a hablar con uno de los que van a ser criogenizados

Cita:

Vairy no puede evitar una pequeña risa, que amortigua con su mano. Por suerte, debido a que se encuentran a cierta distancia, ninguno de los otros dos se ha dado cuenta de este pequeño detalle. Vairy sonrie

Vaya, que buena. Esa me la apunto. Este tio me va a caer bien. Bueno, cuando se despierte, claro...

Vairy sigue mirando la nevera, pero de repente nota como alguien entra en la sala. Como ya ha terminado con su trabajito, se levanta y espera a que Ari le pida ayuda para comenzar con la criogenizacion. Mientras, se acerca al oficial del ejercito y le saluda con un "ey" desenfadado

Que tal??? Nervioso??? Dice Vairy, mientras se situa al lado del oficial, dispuesto a hablar con alguien, hasta que le necesiten. Por su forma de hablar, parece haberse olvidado de que esta frente a un oficial. O quizas es que Vairy trata asi a todo el mundo: Como si le acabara de encontrar en un bar, y le hubiera invitado a una copa

- No hay razon para estarlo. - sonrió poniendose en posicion de descanso con las manos a la espalda sujetando su carpeta - La criogenia es una tecnologia mas, que sirve a nuestros propositos; - comentó echando un ojo a la carpeta - Tras un proceso de criogenia; Uno se acostumbra a las pruebas. - sonrió nuevamente - Pero que le voy a contar a usted; Que es técnico. - asintió asegurandose de que la gorra estaba en perfecta colocación - Sobre el miedo a no despertar; Si es mi destino, que así sea. No voy a perder el sueño por ello, no se puede vivir con miedo... - terminó con un suspiro al tiempo que su rostro se tornaba serio nuevamente.

Al llegar el momento de ser criogenizado, pese a las bromas y los intentos por relajarse y quitarle hierro al asunto, uno siente una sensación similar a la que debe sentir un condenado al caminar hacia el patíbulo.

Es bien conocido que la criogenia comporta graves riesgos y que es una especie de "ruleta rusa".

Los que nunca han sido criogenizados puede que pertenezcan a ese 3% que padece la Morbis Criogénica, no es el caso de los militares, pero es un riesgo que de entrada ya se corre incluso aunque todo el proceso salga impecable.

Luego está el trabajo de la Doctora Snow, cualquier chapuza, descuido, o trabajo apresurado en la criogenia o en la reanimación puede producir un fallo fatal que dé como resultado un cadáver, o una persona con graves secuelas en el mejor de los casos.

Por suerte, tanto la Doctora Snow como el Ingeniero Johansen son profesionales que saben lo que hacen. Aun así, aunque sea por pura estadística, siempre existe la posibilidad de un error fatal.

Sobre la conciencia de la Doctora ya pesa la criogenización de uno de los Consejeros Coloniales, recuerda demasiado bien ese tanque criogénico lleno de luces rojas y con una sola luz verde solitaria...

La doctora retiró los electrodos y desconectó el aparato antes de que éste comenzase a pitar escandalizado.
Bien...por favor, vístase con este traje dijo tendiéndole un mono azul acolchado le protegerá durante el proceso. Luego se volvió registrando por primera vez la entrada del oficial y se acercó a los dos hombres que estaban junto a la puerta.

Capitán saludó con una inclinación de cabeza Vairy...ya vamos a comenzar le informó el ceño fruncido por la concentración. Aunque no lo dijese y, a pesar de los años de práctica, siempre que llegaba ese momento se ponía nerviosa. Le recorría un escalofrío, por unos segundos el mundo se paraba y sentía que todo pendía de un hilo. Era la misma sensación que sentía cuando su mano, firme y certera, se detenía sobre la piel sujetando el bisturí, un latido, dos latidos, el aire contenido, respirar hondo y luego bajar la mano y la sangre brotando roja de la herida infligida. Daba vértigo sentir que todo dependía de tí. Gracias a dios, años de largo estudio y entrenamiento le habían hecho superar ese instante de pánico y sobreponiéndose continuar adelante. Suspiró.

Bueno señor Stuntman, acompáñeme...le convidó indicándole la dirección a la cámara de criogenización. Al igual que siempre le ayudó a introducirse sonriendo amable y con manos expertas le inyectó el tranquilizante. Miró a Vairy, que junto a ella se afanaba en prepararlo todo. Éste asintió conforme. Que tenga un feliz descanso soldado se despidió al tiempo que daba al botón de cierre. El hombre intentó esbozar una sonrisa nerviosa pero sus ojos poco a poco se fueron cerrando a medida que la droga se extendía por el organismo. Mientras el proceso clave comenzaba vigiló sus constantes vitales en la pantalla. Vamos allá...

Ansiosa Ariadne observó la pantalla. Un pitido y las luces verdes tan esperadas se encendieron. Suspiró audiblemente. Recogió la jeringa y después se dirigió al ordenador. Como siempre anotó una serie de impresiones en la ficha del soldado y la gravó. Se volvió al capitán Belluti que había observado toda la escena desde la puerta con actitud seria y marcial.

Capitán...ahora haremos un descanso de aproximadamente una hora le informó sonriendo Realmente empiezo a necesitar un descanso Luego tenemos que ir a la zona colonial a criogenizar al director colonial. Así que si le parece vaya avisando a los próximos cuatro soldados para digamos un gesto elegante de muñeca dejó ver su reloj hum...¿a las once?[

Vairy, antes de ponerse a trabajar, se despide del capitan con una frase de animo

Ser congelado tiene que ser una experiencia fascinante... Yo siempre digo: Todos los momentos de la vida son instantes que aprovechar, asi que vive como si cada segundo fuera el ultimo. Puede que sea porque me paso todo el dia junto a estos frigorificos, o porque no me da mucho miedo la muerte (que, aun asi, es muy poco probable en estos casos...), pero... Estoy deseando ver que se siente

Despues guiña un ojo al oficial, que, aunque un poco estirado, le ha caido bien. Y, ya a unos metros de el, le dice

Por cierto, me llamo Vairy. Vairy Johansen. Encantado. Supongo que nos veremos dentro de poco Y le sonrie, antes de ponerse manos a la obra

Cuando termina, escucha las palabras de Ari, y no puede evitar alzar una ceja

Si en el fondo, ella tambien es una vaga...

Acto seguido se rie

Ariadne alzó la mirada inquisitiva cuando oyó reirse a Vairy. Éste meneó la cabeza quitándole importancia Cada día está peor...
Bien...desvió la vista de nuevo al capitán ignorándole si pudiera dejarme una lista de cuales son esos cuatro soldados le estaría muy agradecida. Luego vaciló observando el gesto de determinación y complacencia del militar si quiere puede irse a descansar. Realmente una vez estén los soldados avisados no creo que surja ninguna complicación y terminaremos muy tarde observó aunque dudaba de que el hombre aceptase su sugerencia.

Vairy asiente ante las palabras de su compañera

Si, puede irse a descansar esta noche. O a conocer la nave. O a conversar con las tripulantes. Algunas son realmente guapas, como demuestra nuestra querida amiga aqui presente. Dejenos el resto a nosotros. Aunque parezcamos un duo comico, sabemos como desenvolvernos solos

Bromea Vairy, mientras se rasca la nuca

A este paso, me van a despedir... Jeje...

Ariadne miró a Vairy enarcando una ceja cuando éste comenzó a hablar.

Cita:

Su expresión inicialmnte curiosa fue sustituida por un ligero rubor de rabia. Desvió la vista contrariada ¡Cómo se atreve! Cuando el técnico llegó a la parte del dúo cómico abrió la boca sin poder creérselo. Tierra trágame pensó escuchando incrédula. Raras veces Vairy la había hecho avergonzarse así. Miró al capitán que luchaba por parecer amable. Pobrecito.. Cuando Vairy terminó no pudo evitar bufar exasperada.
Bueno...nos vemos luego capitán. Si me disculpa...acertó a decir eduacadamente rechinando los dientes antes de quitarse la bata y salir de la sala sin mirar atrás. Lo que me faltaba...

- Aqui tiene doctora, - asintió aguantando el romper a reir - estos son los soldados con los que ha de continuar; - dijo señalando la carpeta - Les agradezco su invitación a que me vaya a descansar; Pero mis ordenes son supervisar el exito en la criogenización del personal militar. - sonrió asintiendo y rozando con su dedo indice derecho la visera de su gorra - Que tengan un buen descanso. - se despidió observando a los soldados criogenizados y apuntandolos en su carpeta. Tras unos minutos contemplando a los soldados y asegurandose que todo estaba en perfectas condiciones activó el microfono de las comunicaciones - Soldado Artillero Fitzy Olimpus, Cabo Policía Militar Jack Flebers, Sargento Rachel Philips y Sargento Mayor Wulf Heartworth; - suspiró unos instantes - Disponganse para personarse ante la Doctora Snow en criogenia a las once, cero, cero; Corto.

Vairy se despide con un gesto de la mano, y se aleja con Ari. De repente, se da cuenta de que Ari parece enfadada

Ey... Estas bien???

Ariadne no aminoró el paso ni le miró. Apretó los dientes
¿Tú qué crees? preguntó finalmente mientras giraba por el pasillo. Realmente avanzaba bastante rápido y Vairy tenía que esforzarse para mantener su paso. ¡Pues claro que estoy enfadada!soltó de repente frenando en seco y volviéndose hacia él. Debido a su brusca parada ahora estaban muy juntos. Sus ojos verdes brillaban y sus mejillas estaban enrojecidas. Su tono de voz era alto ¡Me has avergonzado! hizo un gesto vago con la mano. Yo me tomo muy en serio muy trabajo ¿sabes? Y ese capitán también le miró dándole a entender lo que pensaba de cómo se lo tomaba él. Estamos trabajando con la vida de la gente Vairy, una cosa es mantener un ambiente distendido y otra es tomárselo todo a broma..resopló meneando la cabeza. Sus ojos centellearon. Continuó inclinándose hacia él y mirándole fijamente ¿Un dúo dinámico? ¿es así como nos ves? ¿es así cómo quieres que nos llamen a partir de ahora? le increpó frunciendo el ceño. La gente ya me llama Dama de Hielo su voz se quebró pero no por la rabia, vaciló y desvió la mirada, a pesar de ello durante unos instantes pudo ver su expresión de dolor. ¡Qué bonito! Ahora también me llamarán eso finalizó entre dientes antes de girar y continuar andando a paso vivo.