Partida Rol por web

Una magistral maniobra acrobatica impide que tu rival se desplome por tu embestida, no obstante el escudo no le protegio y cae en brazos de sus ayudantes al parar el caballo.

Motivo: Siguiente lanzada

Tirada: 1d20

Dificultad: 15-

Resultado: 8 (Exito)

Motivo: Daño

Tirada: 6d6

Resultado: 22

Motivo: Cabalgar

Tirada: 1d20

Dificultad: 15-

Resultado: 8 (Exito)

Uffff

el nuevo contendiente el más bravo hasta la fecha, no te ha acertado.A l parecer quedose perplejo tanto ante tu intrepida( alguien diria que patosa) maniobra.

otra ronda mas.

Una lanzada precisa y contundente aunque no mucho, fue suficiente para descabalgar y hacer sangrar al caballero sir Gwilherm. Las tropas mercenarias responden a la caida del caballero local con una atronadora ovación acompañada del golpeo de sus armas en los escudos.

La lanzada tocó carne: 19-10, 9 puntos de daño.

Llegas a tu zona y tu escudero te ayuda a descabalgar. Tienes  la mano en la zona donde recibiste la última herida. Una vez en el suelo te diriges hacia el sanador que te alcanza a mitad camino y te hace recostar.

No fue éste el mejro sanador que encontraste en Britania. No pudo hacer nada por ti en una de las heridas, y en la otra apenas te sano 1 punto.

daño 14-1= 13 puntos

Tu escudero se  esmera en quitar a tu caballo de batalla de los aperos propios para darselo limpio al mercenario que ya aguarda para llevarselo.

En el bando mercenario se celebra tu derrota con no poca algarabia. en verdad , el aburrimiento es muy malo para las tropas.

El asunto acabó como cabía de esperar, más no preocupóme en exceso aquello, pues aún de una pieza mi propio cuerpo, esperábame mi señora Godiva en casa. No queriendo demorar más la estancia en aquellas tierras ni mi “disfrute” de la compañía de Mcmiliar, me dispuse a partir.

Motivo: Gloria

Tirada: 3d100

Resultado: 46(+90)=136

136+40= 176 sumados a  2396= 2572

Tras la perdida de sangre y de cabalgadura principal, el caballero se retira sobre su caballo de paseo. Aun tiene que oir las burlas de las tropas mercenarias y padecer las reverencias burlonas de algunos de ellos. sir Mcmilliars contempló complacido las pendencia y pareció satisfecho. Por un lado un caballero celta, sin gran esfuerzo, habia descabalgado a 3 guerreros mercenarios, y por otro habia dejado satisfecho a esas mismas tropas mercenarias al proporcionarles, aun de manera indirecta, un magnifico ejemplar de caballo de batalla. No hubo más cruce de palabras, ni siquiera de miradas, entre antigio vasallo y señor.

Sir Marcels se retiró con nuestro caballero y  ofreciole a sir Gwilherm reposar y sanar en sus terrenos. No parecia prudente viajar con 13 puntos menos de vida.

Echas unas cuantas semanas en las tierras de sir Marcels. El trato es correcto, las heridas van sanado y la nostalgia se va reduciendo. Cuando estas sano, decides partir y agradecerle a sir Marcels la hospitalidad. Has pasado más de un mes recuperandote y en todo este tiempo no has tenido noticias de sir Mcmiliard, ni de sus tretas,cosa que agradeces enormemente.

Comienzas sano el viaje sin tu caballo de batalla, pero con tu escudero y a lomos del caballo de paseo. El viaje transcurre lento pero sin novedad. Has llegado.

tu madre y tus familiares de alli, primos lejanos de tu madre, pero realmente la unica familia que tiene excepto tu, te acogen con  alegria y sana hospitalidad.

Les encanta oir tus hazañas y se admiran de la adquisición de tus señorios.

Te hubiese encantado mantenerte más rato con ello gozando de su compañia y hospitalidad, pero el invierno no dista tanto, y el viaje es más largo aun que antes.

Antes de marchar tienes unas cuantas cosas que solucionar:

1. ¿ te llevaras a tu feudo a tu madre?
2. ¿ qué ejercito contrataras definitivamente?