Partida Rol por web

- Fue real... Nuestro sensei perdió la cabeza y trajo un revólver. Hay que llamar a la policía - dijo mientras ayudaba a Aki a ubicarse en la camilla con la mayor suavidad posible.

La chica respiraba agitada como si hubiera hecho mucho ejercicio, pero realmente era su angustia lo que la llevaba a eso.

Una vez pudo dejar a Aki en la camilla, la chica comenzó a llorar. No sollozaba, pero las lágrimas no dejaban de salir.

Akane abrazó a su amiga con fuerza mientras sus propias lágrimas salían sin poderlo evitar.Aki,su mejor amigo,la persona en la que más confiaba para contarle todas sus tonterías casi muere por un loco con pistola ¿Por qué no hacían caso?La maldición era real y ya había habido demasiadas muertes

Por encima de la cabeza de Ika observó cómo curaban a su amigo aunque aún quedaba la duda de si le habría afectado o no al oído interno

Tras el abrazo de mi amiga Hanako me sentí un poco mejor, el compartir la carta con ellos había sido un poco duro pues había recordado lo que ponía en ella. Tenía pensado enseñársela a los demás pero por lo que estaba sucediendo lo mejor sería seguir a mis amigos para ver si podíamos ponernos de acuerdo todos de una vez por todas. Asi que guardo la carta y voy tras ellos.

- ¡Esperadme chicos!

El chico de la cinta*¹ tiene razón, debemos permanecer todos unidos, escuchar esa dichosa cinta y si alguien tiene algo más, también estaría bien que lo compartiera con el resto. Esto último lo dije mirando a una de mis compañeras, cuyo nombre no recordaba *² , que parecía tener una supuesta carta de algo.

y salgo con los demás tras el chico de la cinta*¹.

Todos empezasteis a correr escaleras arriba sin parar, algunos antes que otros tanto que algunos perdieron de vista a los que iban más avanzado.

Cuando finalmente llegasteis a la azotea, era demasiado tarde. El profesor estaba desangrandose por el cuello, a traves de una serie de agujeros que tenía en la garganta. Justo llegasteis a verlo cuando trataba de decir algo, pero apenas salieron las unas pocas letras, y finalmente su mano cayó al suelo inerte.

Alguien había matado al profesor, y lo peor, ninguno supo por qué estaba tan mal. La cuestión es... ¿Quien había sido? ¿El fantasma? ¿Un compañero?

La incertidumbre acudía más y más en la clase 3-3

El sensei muriendo trató de impartiles algo, pero llegaron demasiado tarde. La visión del profe desangrando era horripilante y Aki actuó como una máquina en la dinámica de la situación misma; pero ya sabía que una vez que la adrenalina se le habría pasado, tendría que pagar las consecuencias. Ya se puso ligeramente verde y un inicio de mareo brotó en su mente y sus sentidos.

El chico se agachó y viendo los agujeros en el cuello del sensei buscó al arma o herramienta que había hecho tales estragos. No lo tenía claro; ¿tal vez un cuchillo muy afilado y con una hoja particular?

Tras unos minutos de tratar la enfermera a Hikari, y vosotras esperar en una sala. Ya os dejó paso libre.

Hikari tenía vendada la oreja y parte de la cara, tapando también el ojo del mismo lado donde las vendas del oido. - Habeis tenido suerte de que sea doctora y no enfermera... lo malo ha sido no tener mejores herramientas. Le he taponado el oido izquierdo, probablemente haya perdido el 90% de audicion en dicho oido... sino entero. También la visión ha podido verse afectada un poco, pero la recuperara. Igualmente avisaré a sus padres para que lo lleven al hospital y le traten mejor. Podeis entrar a verle. Está un poco sedado lo único, y tratad de hablarle por el lado derecho.

Nada más abrir la cortina donde estaba Hikari, podiais ver a este un poco grogi con la cabeza vendada en la parte de la frente, para sostener el tapón, probablemente de algodon. El ojo también habia sido tapado por las vendas.
 

Los orificios del cuello eran triangulares. Una herramienta triangular había sido usada para este fin, además, los orificios habían sido hechos a pares y parecian estar alineados de alguna forma.

“Los orificios del cuello son triangulares. Una herramienta triangular ha sido usada para este fin, además, los orificios han sido hechos a pares y parecen estar alineados de alguna forma”, informó Aki en tono de falsa neutralidad, agachado sobre el profesor, a los demás, luego se alzó y se alejó, tambaleante. “Ahora no puedo pensar a nada.” Su cara se había vuelto más verde aún y le temblaron las rodillas.

Tras unos pocos segundos durante los cuales intentó en vano de controlarse, dio la espalda a sus compañeros, se dobló y vomitó copiosamente, reducido a una figura lamentable de desconsuelo, horror y confusión acurrucado en el suelo.

Ika esperó pacientemente junto a Akane a que su amigo estuviera mejor y, con sorpresa, escuchó lo dicho por la doctora. ¿Tan terrible había sido? Afortunadamente, estaba vivo y eso era lo que realmente importaba.

Entonces, pasó y trató de contener las lágrimas. Se sentía muy preocupada porque no sabía qué tan malo había sido, pero se sentía feliz de saber que al menos el daño sufrido podía ser algo que no le impediría vivir del todo.

La chica se acercó con cuidado a Aki con lágrimas en los ojos. Puso una mano en su hombro para que él supiera que se encontraba allí y le habló, procurando estar por el lado derecho para que pudiera escucharle.

- Aki-kun, ¿cómo te sientes? - sonrió cálidamente.

Se giró hacia la doctora una vez más - ¿Él ya lo sabe, Sensei? -.

La doctora rió ante tu pregunta - Sinceramente lo dudo. Estaba muy aturdido mientras se lo mencionaba, y con el calmante que le he dado tampoco creo que haya estado muy atento. Si quereis decirselo vosotras mismas adelante, pero no os preocupeis de ese tema por ahora. - Trató de sonreir para tratar de calmaros un poco tras aquellas palabras.

En algún momento he recuperado la vista y el pitido se ha hecho más leve.

Pero no cesa, es como un constante zumbido que amenaza desde detrás de la nuca. No puedo evitar llevar mi mano a mi rostro para tocar el lateral del ojo vendado.

¿Qué diab...?

No llego a terminar la frase en mi pensamiento. Escucho voces, difusas, antes de descorrerse y ver a mis amigas, dibujo media sonrisa en mi rostro, pues el dolor no desaparece de un momento a otro.

¿Qué hay que decirme?

Pregunto, con cierto interés.

Llegaron a la azotea pero Hanako no esperaba encontrarse aquello. Sobre todo por lo que significaba. Quien podía haber hecho aquello? No le dio tiempo a responder nada pues sintió cómo su mano se soltaba de Tetsuo y su cuerpo se quedaba arrodillado en el suelo, para luego caer de lado, ajena a lo que sucedía a su alrededor,envuelta en la bendita inconsciencia.

Al ver que Aki les hablaba, Ika comenzó a llorar otra vez. Era bueno verlo bien después de tanta locura. Puso una mano sobre la de Aki para tomarla con delicadeza y envolverla con sus dos manos.

- El oído derecho ha sufrido daños, Aki-kun. Es posible que hayas perdido la audición por este, o al menos la mayor parte. Tu ojo también se vio afectado, pero es muy posible que sea temporal - solo hay que darle tiempo.

Seguía llorando por la preocupación, pero al menos estaba fuera de peligro.

- Llamarán a tus padres para que puedan llevarte a un buen hospital. Estarás mejor - a pesar de su sonrisa, Ika no hbía dejado de llorar. El solo pensar que pudo haber muerto...

¡Hanako-chan!

La visión del profesor era horrible y revolvía las tripas, pero todo eso quedó en segundo lugar cuando su Hanako le soltó la mano y comenzó a desplomarse.

Tetsuo reaccionó rápido y recogió el cuerpo de la chica antes de que golpeara el suelo de la azotea. La levantó em volandas cargando con ella. Mientras le hablaba.

¡Hanako-chan! ¿Estás bien? Respóndeme Hanako-chan - Lo más lógico era pensar en un desmayo por la impresión, pero en un contexto de muertes inexplicables, el corazón de Tetsuo latía con fiereza al ver a la chica perder el sentido.

Tras cambiarse a toda prisa, las tijeras acabaron en la basura cercana a los casilleros, puesto que tenía otras tijeras no le preocupaba mucho perder unas.

Sin perder tiempo subió a la azotea y ahí vio el vomito repulsivo de uno de los alumnos, se tuvo que llevar la mano a la boca asqueada, mientras pensaba en que si se iba a suicidar, que más daba que muriera solo un minuto antes, "pse" solo había descargado su rabia ¿que había de malo en ello? Aquel tipo se lo había buscado, y aun así ahora le tocaba desviar un poco el problema de lugar. Que cosas tan molestas tenía que aguantar...

Llegó tras sus compañeros a tiempo para ver el panorama, el profesor muerto y un alumno vomitando. Se llevó la mano a la boca, no era una visión muy agradable. Dio un paso atrás tragando saliva.

- ha-habría quedado con alguien aquí arriba?

¿Tal vez de verdad iba a saltar? ¿O porque estaba allí? - esto sigue pareciendo obra de asesinos... Tendríamos que escuchar esa maldita cinta para ver si nos dan alguna pista...

Aquel juego ya duraba demasiado, tenían que averiguar como detener a la maldición o a los asesinos antes de que fuera demasiado tarde.