Partida Rol por web

Sin dejar de mirar al indio digo a Nathan:

-Te acaban de llamar necio. Fonçi, dile que mañana mismo iremos al nuevo emplazamiento, y pregúntale que ¿sin ayuda se refiere a nuestras armas?

Espero la contestación.

-¿Qué es el Yeye-ga? También deberías preguntarle si podemos usar la cámara de fotos.

Miro un momento a Jack, pero aguanto una contestación. No era cuestión de parecer inmaduros delante del brujo.

- Sin ayuda de un nativo- contestó Fonçinho a Jack. Después miró a Nathan- Nada de fotos hasta que seais miembros "honorificos". La Yeye-ga es el alma del pueblo Yamirogami. Es lo que hace sabios, lo que realmente les diferencia de los animales. Pero la Yeye-ga sólo pueden probarlo los hombres auténticamente sabios, no los necios. Porque la Yeye-ga hace sabio al hombre sabio y necio al necio.

-Dile que será un honor ver el Yeye-ga.

"Necio al necio, ¿eh" Suena como lo que sintió el explorador de los libros.

La yeye-ga, eso me suena, es una canción, mmmm, no, es la droga de la que nos han pedido una muestra. Demasiado fácil...

-Tu amigo el salvaje acaba de insinuar que mañana serás necio necio, jajajaja. No se si es buena idea que la probemos los dos, igual mejor que lo haga yo solo, que soy mas espiritual,  de paso sólo serás necio a secas... Dejaremos que me invada el esíritu del jaguar, jajajaja. Fonçi, dile que aceptamos, y que mañana partiremos.

-Claro que yo también lo haré, Jack. De todas maneras, cuando acabes viendo elefantes rosas, no podría tirar contigo.

Aguanté un suspiro de exasperación, adoptando una postura severa.

-No te pongas ne mi linea de tiro...

A las siete y media de la tarde, los Yamirogami se reunen para cenar de forma comunal formando un círculo. El menú consiste en pescado y mono asado. Durante la comida, un jóven con una vasija de barro llega a la aldea y desaparece junto con el hechicero, rumbo a la cabaña de este. Media hora después, al concluir la cena, el brujo y un elegido se dirigen hacia la cabaña que está separada de los demás. Lleva una larga caña decorada con plumas en una mano y una bolsa tejida con algo parecido a hojas secas en la otra. Tras unos diez minutos, vuelve al centro del poblado. A las nueve se pone el sol y empieza la ceremonia en la que las mujeres de la tribu prueban la Yeye-ga

Para ello los Yamirogami forman dos circulos concéntricos. En el interior, las mujeres. En el exterior, los hombres. El hechicero, junto al fuego, musita algo parecido a una plegaria, se frota las encias con una pasta verdosa y tras unos minutos parece entrar en trance. De repente empieza a gritar

- Ha hablado con la diosa Gami, que le ha ordenado que hoy todos, hombres y mujeres probarán la Yeye-ga. Vosotros también. Antes de que cambie la Luna la diosa madre hará que bajen las aguas. Sus hijos han de estar preparados para ese momento- os traduce en todo momento Fonçinho- ¡Hijos mios! ¡Nuestra madre Gami ha hablado! ¡Igual que lo ha hecho siempre su manto nos protegerá de todo peligro! ¡Las aguas se retirarán pronto, antes de la nueva luna, antes de que el Hermano Jaguar regrese a la montaña! ¡Esta noche todos nos uniremos a Yeye-ga para preparar nuestros espíritus! ¡La Madre va a llegar y tenemos que recibirla! ¡Hoy, Yeye-ga nos traerá el poder de la Diosa y los Antepasados! ¡Y los extranjeros que han llegado buscando sabiduria la probarán también porque Yeye-ga nos dirá si son nuestros hermanos o no! ¡Alguien va a venir antes de que salgo el Sol y pudieran ser ellos! ¡Que se unan a nosotros esta noche porque mañana, mañana hijos mios, veremos como la diosa vence a las aguas!

A continuación, empiezan a administrar la Yeye-ga a las mujeres. Introducen la caña en la boca de quien va a consumirla y luedo se escupe con fuerza. Vosotros la probais después que lo hayan hecho las mujeres.

- Teneis media hora hasta que os toque- os dice Fonçinho- Si vais a algun sitio estád aqui antes de que pase ese tiempo

Asentí, intentando relajarme. No puedo decir que fuera mi primera experiencia con sustancias que alteraban el SNC, pero no saber qué iba a pasar después me ponía algo nervioso. Aunque si la gente había salido con vida todo este tiempo, era buena señal. Respiré hondo, intentando interiorizar lo de la diosa.

-¿Crees que podremos preguntarle a alguien sobre sus creencias religiosas?

-Pregúntales, pero siendo por esta zona no conocermos ni a sus dioses, incluso difícilmente lo podremos pronunciar. -en voz baja- busca algo de plástico, un precinto o lo que sea para que escupas un poco de la droga... yo la consumiré toda, tengo mucha curiosidad de ver que pasa, y si es alucinógeno pueden pasar cosas muy divertidas, necio necio... y porrero, que no me olvido...

Dios, dame paciencia... 

-¿Qué dices, Fonçinho? Ya sabes que yo no sé comunicarme con ellos. ¿Has tomado tú Yeye-ga?

- ¿Escupirla?- dice ofendido Fonçinho- Os podrían matar por eso, es una ofensa para ellos. Todos están pendientes de la ceremonia, ahora no es momento para hablar con ellos. No he tomado Yeye-ga, la diosa por fin dejará que la tome

La diosa dejará... Eso había sonado extraño. Alzo las cejas.

-Fonçinho, ¿qué sabes de la diosa Gami?

Me crucé de brazos a la espera de una respuesta. Sin duda ese hombre sabía algo.

Miré mal a Fonçi por escuchar nuestras conversaciones privadas.

- Es la única y verdadera Diosa

Decidí guardar silencio y no hablar mucho con Fonçi, parecía un fanático ahora mismo, y había cosas que yo decía que no querría que el brujo se enteras...

Asentí, asimilando la frase.

-¿Y es una diosa de los muertos, de la naturaleza...? ¿Crees en ella?

- No es una Diosa... es LA Diosa, la Diosa de todo. ¡Claro que creo en ella!

Asiento, esbozando una sonrisa amable.

-¿El Hermano Jaguar... es el esposo de la Diosa Gami? ¿Y cómo el Yeye-ga consigue que contactemos con la Diosa? -la verdad, todo esto me recordaba a algunas culturas que había leído en los libros de antropología de Martin Harris.- ¿Y cómo vencerá la Diosa a las aguas?

Cuando escucho lo del matrimonio con le jaguar casi se me escapa una risa:

-Pffff...