Partida Rol por web

- ¿Es el nombre meramente descriptivo? ¿O tiene algún tipo de leyenda asociada como otros tantos sitios en Potter's Lake? - pregunta Wilson con interés.

El Sheriff deja a un lado su plato a medio terminar, bebe un trago de su bebida y dice: - No, no hay ninguna leyenda que yo conozca... pero... - duda un instante y por primera vez algo rompe la máscara de estoicismo del hombre, suspira y con ojos tristes añade - ¿Les importaría acompañarme al otro lado del bar? Quiero enseñarles algo. Es aquí dentro mismo. Le diré a Sheila que vigile nuestra comida. - Y comienza levantarse mientras indica a Sheila que se acerque un momento.

Morgan atendió a la explicación del sheriff en silencio. Así que era un árbol y no el nombre de la zona en sí… Bueno, pero relacionado estaba. ¿Cuál sería la importancia de ese árbol?

Cuando el sheriff Bowman les pidió que le acompañaran, la forense dejó la servilleta con la que se había cubierto el regazo encima de la mesa.

 -Por supuesto Sheriff.

Se levantó y fue junto a Wilson al lugar en el que Darryl Bowman quería enseñarles algo relacionado con aquel misterioso lugar en el que parecían juntarse demasiadas cosas que se escapaban a su comprensión.

El Sheriff conduce a los agentes a la parte trasera del local, a un amplio pasillo que lleva a los baños y al teléfono público. En las paredes del pasillo los agentes se encuentran con una colección de fotos enmarcadas de adultos y niños, algunas con flores como margaritas, o pensamientos sujetas a los marcos. Sobre unas estanterías bajas y estrechas, situadas a ambos lados del pasillo, hay pequeños jarrones con más flores. Crisantemos, rosas, claveles, petunias, etc. llenan de color y aroma el lugar.

- Lo llamamos el "Memorial" - explica el Bowman -. Estas son las fotos de todos los que han desaparecido en el lago o en el bosque desde 1955, cuando Deke Richardson lo empezó con la foto de su hijo de dieciséis años. -

Mientras habla, el Sheriff mira con tristeza a una foto concreta. Los agentes siguen su mirada para descubrir que se trata de la foto de una sonriente niña de unos 12 años vestida de girl scout. Una plaquita al pie de la foto la identifica como Jenny Bowman, al lado del nombre está escrito el año 2011. Sujetas al marco de la foto están las flores que el Sheriff llevaba en la mano antes de comer.

Con voz grave, casi distante, Bowman relata - Jenny despareció en el bosque hace 5 años, durante una caminata de su grupo de Girls Scout. Iban todas bien vigiladas por gente de confianza. Un adulto por cada dos niñas. Pero de repente Jenny desapareció y no encontramos rastro de ella. Pasado un año alguien llamó a la emisora local y cuando estaba en directo dijo ser mi hija. Entre vaguedades mencionó la Garra del Diablo. Cuando escuché la grabación reconocí la voz de mi pequeña y peinamos la zona hasta el último agujero de ardilla sin éxito. -

El Sheriff se gira hacia los agentes y continúa - Por eso les preguntaba por su interés por el lugar. Si ese lugar está relacionado con estas muertes, podría ser que Jenny fuera la primera víctima del hijo o hija de la gran puta que está haciendo esto. Y en ese caso me gustaría unirme a la búsqueda. -

Brooke Morgan jamás se habría imaginado que el sheriff pudiera tener algo tan personal atándole al caso.

 -Lo siento mucho, Sheriff.

La forense no sabía qué más decirle, pero tampoco estaba realmente segura de que el Sheriff quisiera escuchar más condolencias o lamentos por la muerte de su hija. ¿Realmente tendría algo que ver con la oleada de asesinatos que les había traído hasta ese lugar?

Brooke miró a Wilson. Podían contarle al sheriff lo que había averiguado sobre el lugar, pero… ¿Y si era una trampa? ¿Y si aquel emotivo momento no era más que un cebo perfectamente elaborado para conducirles al fracaso? Morgan no quería arriesgarse a poner en peligro el caso, pero… Algo en su interior le decía que el Sheriff Bowmann estaba diciendo la verdad.

 -Volvamos a la mesa, sheriff. Le contaremos lo que sabemos de ese lugar.

El Sheriff asiente y accede a volver a la mesa. Cuando se acercan, Sheila se ofrece a volver a calentarles la comida si lo desean. Bowman rechaza el ofrecimiento argumentando que apenas han estado unos minutos alejados.

Una vez sentados, el Sheriff dice: - Yo puedo poner a su disposición todo lo que tenemos sobre la desaparición de mi hija. No es mucho y fue hace mucho tiempo, pero nunca se sabe. -

Wilson asiente y añade: - Si puede conseguirnos las grabaciones originales de la llamada a la emisora, podría sernos de ayuda ayuda. - 

- Sin problema. - dice el Sheriff tomando nota en una pequeña libreta que lleva en el bolsillo. Luego permanece atento a lo que le tengan que contar los agentes. Parece haber perdido el apetito y apenas toca su comida.

Morgan se quedó un rato en silencio, sin saber muy bien por dónde empezar.

 -Verá sheriff, lo que nos mueve a investigar ese lugar concreto es una teoría. Mi compañero Wilson ha descubierto que al parecer hay una convergencia de líneas de energía en esa área concreta. Líneas de ley eran, ¿no es así Wilson?

La verdad es que era un tema que no dominaba en absoluto, pero por suerte contaba con su compañero para corregirle los errores que pudiera cometer.

 -Creemos que el asesino también conoce la existencia de esas líneas. Y que por eso ha elegido este pueblo para llevar a cabo sus actos. No sabemos lo que pretende hacer con las partes de los cuerpos de las víctimas, pero sea lo que sea, parece que pretende aprovecharse de esas líneas de Ley.

Otra pausa para dejar que la información fuera bien asimilada por el Sheriff Bowmann.

 -Sé que puede sonara  locura, pero… Viendo la cantidad de cosas que desafían a la lógica que suceden en este pueblo, yo ya no sé qué creer a pies juntillas.

Wilson asiente confirmando la explicación de Brooke.

Por un instante, el Sheriff parece sorprendido por una explicación tan inusual, especialmente por la última frase de Brooke. Luego, asiente y responde - Entonces, según su teoría, el autor de los crímenes cree en estas líneas Ley y es posible que haya estado por los alrededores de ese punto de convergencia. Tiene sentido. - El tono en que pronuncia las palabras "cree en estas líneas Ley" deja claro que el Sheriff no cree en tales cosas. 

- La lista de cosas que "desafían a la lógica" a la que nos enfrentamos en nuestro departamento cada día - continúa -, es mas larga que la barba de Matusalén. Pero las leyes no están escritas para considerar ese tipo de cosas, así que trato de huir de explicaciones esotéricas todo lo posible. -

Wilson, incómodo, carraspea y se remueve un poco en el asiento. El Sheriff lo nota y añade - Me tienen que disculpar por mi falta de fe, pero los jueces no son muy amigos de las explicaciones fuera de la lógica. Sin embargo, es innegable que este tipo de creencias sirven de motivación para mucha gente, y tal vez eso incluya a quienquiera que está cometiendo estos asesinatos. -

 -Sé lo que quiere decir sheriff. Yo tampoco soy de las que se creen lo primero que ven sin cuestionarlo científicamente, pero… Hay dos hechos que no puedo negar. Uno, que he visto cosas en esta ciudad que jamás habría pensado posibles. Dos, que el asesino no piensa como nosotros. Muchos asesinos en serie tienen pautas de comportamiento que responden a determinadaas creencias o costumbres firmemente arraigadas en ellos. Creemos, no, estamos bastante seguros de que ese lugar concreto tiene para él un significado especial.

Morgan miró a Wilson y le sonrió con confianza.

 -Por eso iremos allí a investigar. Y si quiere acompañarnos, será más que bienvenido sheriff.

Wilson le devuelve la sonrisa a Brooke.

El Sheriff asiente ante el segundo motivo y respondo - Les acompañaré con gusto y dirigiré al equipo de búsqueda, de esa forma ustedes pueden centrarse en su trabajo. -

La radio del Sheriff cobra vida y se escucha la voz de Michelle del otro lado.

- ¿Jefe? ¿Está usted ahí? -

El Sheriff descuelga su walkie del cinturón y responde - Aquí el Sheriff Bowman. ¿Qué ocurre Michelle? Estoy en mitad de una reunión con los agentes Brooke y Horschel. - 

-Lo se jefe, y siento molestarle - se disculpa Michelle -. Solo es para decirle que se pase por aquí cuando termine. Amanda Fitzhugh está a la puerta de nuestras oficinas reclamando que se mantenga a la prensa informada. Está montando mucho alboroto y ya tenemos a unos cuantos curiosos atraídos por el escándalo pidiendo más información - el Sheriff va a decir algo, pero no le da tiempo -. Antes de que me lo diga, ya le he dicho que se vaya, pero me ha soltado una charla sobre que la prensa libre es uno de los pilares de la civilización moderna y se ha negado en redondo a irse. Me parece que sólo le hará caso a usted. -

El Sheriff se lleva la mano a la frente, como si la sola mención del nombre de Amanda Fitzhugh le diera dolor de cabeza.

- Está bien - responde el Sheriff a regañadientes -. Tan pronto como terminemos aquí, iré para allá. ¿Te has puesto en contacto con los cazadores? -

- Si jefe. - responde Michelle, están a la espera de que les digamos una hora para venir.

- OK - dice el jefe despidiéndose -, intenta mantener la situación bajo control hasta que yo llegue. Cambio y cierro. -

Darryl vuelve a colgar a radio de su cinturón y se disculpa ante los agentes. - Perdonen la interrupción, pero Amanda Fitzhugh ha sido un grano en el culo desde el primer día de esta investigación. Cree que con esta historia va a conseguir algún premio de periodismo y no deja de incordiar y entorpecer. -

Y con la prensa habían tenido que toparse…

 -No se preocupe, es algo con lo que los agentes del orden siempre tenemos que lidiar. ¿Cuánta información se le ha facilitado a la prensa sobre este caso, Sheriff?

Porque si se habían filtrado determinados datos, el asesino a poco que leyera el periódico o viera la tele se enteraría de todo. Y eso podía suponer un obstáculo tremendo en la investigación. No había anda que un criminal que conoce lo que la policía sabe de él o planea hacer para detenerle.

- Desde nuestra oficina la mínima posible - responde el Sheriff -. La identidad de las víctimas, el lugar donde se han encontrados sus cuerpos y el estado en que se encontraron, eso es todo. Pero esto no hace sino incrementar interés el interés de la señora Fitzhugh en el caso y, a falta de información oficial, ha acabado entrometiéndose en la investigación para obtenerla. La difunta agente Parker y el agente Sanders ya tuvieron que aguantarla mientras estaban investigando. En alguna ocasión ella había hablado con los testigos antes que sus compañeros. Y cuando se encontró el cuerpo de la agente Parker, consiguió ser una de las primeras en enterarse y la encontramos rondando la zona antes de que termináramos de inspeccionar el lugar. - 

Vamos, que aquella mujer era una metomentodo profesional de las buenas. Brooke Morgan ya presentía que les daría más de un dolor de cabeza.

 -Bueno, podría ser peor. Al menos los datos que tiene no son muy diferentes de los que cualquier periódico tendría dada la naturaleza del caso.

Porque de haber sido un asesinato múltiple en Las Vegas, Miami o Nueva York, la prensa estaría divulgando todo eso y más desde el minuto cero.

 -Bastará con intentar mantenerla apartada a base de advertencias. Y si sigue empeñada, siempre se la puede meter en el calabozo 24 horas. Aunque igual es excesivo… La verdad es que no estoy muy acostumbrada a lidiar con una reportera insistente, así que no sé demasiado bien lo que hay que hacer para lidiar con esta situación.

- No se preocupe, nosotros nos encargaremos de ella si lo prefieren. - dice Darryl mientras hace una señal a Sheila para que le traiga una caja en la que llevarse el resto de su comida y apunte el importe de la comida a la cuenta del departamento.

- ¿Quieren acompañarme a la oficina ahora? Como han escuchado ya estamos listos para convocar a los cazadores. Si le doy el aviso a Michelle ahora, no tardarían mucho en venir. -

Brooke, que apenas se había comido un tercio de lo que había pedido, hizo como el sheriff y pidió una caja para llevarse el resto.

 -Me parece perfecto. Mientras vienen aprovecharé para terminarme el sándwich en comisaría.

Porque interrogar con el estómago vacío estaba desaconsejado por todos los médicos del mundo. Y si no lo estaba, debería estarlo.

 -Cuanto antes empecemos con esto, más tiempo tendremos para analizar la información que nos den.

Wilson también pide una caja para llevarse su almuerzo. Sheila trae unos contenedores de poliexpan para los tres y el Sheriff le deja una generosa propina. Una vez que todos han transferido sus almuerzos a las cajas, se levantan y abandonan el local que está igual de abarrotado que cuando llegaron. Luego se dirigen en sus vehículos hacia la oficina del Sheriff.