Partida Rol por web

Arquitectos de Voluntad. Libro-5.I: Residuos del Dolor

Pabellón C (Arokham)

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01/02/2018, 09:42
-Residuos del Dolor-

La opinión de Eliannha... la mujer fruncía y relajaba el ceño con cada nueva frase. Pero, en resumidas cuentas, fue favorable a tu opinión y durante los dos días siguientes ayudó en tu tarea.

Primero, haciéndote preguntas que no dudabas en contestar. Se nutría con tus inquietudes y compartía muchos de tus objetivos sin importarle tener un papel de súbdita. Ella quiso poner su granito de arena. Sin duda, había preguntas que no podías contestar aún. El tema del "cómo", por lo que decidió ayudarte y buscar a gente que ayudara a la planificación de tus objetivos.

Dos días después, te encuentras en la torre de Roriarkas, con ella, aguardando a que llegaran los primeros que se unirán a tu causa.

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01/02/2018, 09:45
Reo 601

Estoy nerviosa.

Camino de un lado para otro de la planta baja de la torre, ya completamente reparada. -No tardarán en llegar- le digo a Nickar que aguarda con la paciencia de una reina. Le improvisé un asiento en un puesto de honor en la estancia. Un poco alto pero desde el que se puede abarcar con la mirada a todos los que allí se puedan reunir. -No ha sido fácil- le revelé -Muchos prefieren a Hernst, Comadreja o incluso estar a solas.- Inspiré y espiré -También he ensayado el discurso que he preparado para Roriarkas.- Crucé la mirada con ella -Tener el apoyo de los suyos sería algo muy bueno- desenrollé el pergamino y repasé los puntos importantes de nuestra estrategia. El primer objetivo, como ya sabía Nickar, era conseguir un grupo y estar a la altura de los líderes de la prisión. De ahí, una serie de escaladas estratégicas que ella tenía anotadas harían el ascenso de Nickar mucho más fácil.

De pronto, unos poderosos nudillos llamaron. Eliannha se acercó, haciendo el papel de "mayordomo del rey". Abrió, observó y regresó. -Nickar, te presento al primero. ¡Puedes pasar Amok!- Pese a ser un ogro (bastante feo) Eliannha no dejó de sonreír.

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01/02/2018, 09:50
Reo 642

Con pasos pesados accedo en la estancia -¿Es verdad?-. Pregunto con tono seco con la mirada fija en la tiflin -Dicen que puedes darnos la libertad. Dicen que puedes unificar los reinos. Dicen que puedes darme una banda con la que luchar y obtener prestigio y posición. ¿Por qué tú harías algo así?- el bruto se encoge de hombros.

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01/02/2018, 09:52
Reo 525

-Porque se lo ha propuesto, mi gran amigo- mi voz surgió tras el corpulento ogro. Con semejante bestia delante a mí apenas se me veía, cosa que me gustó pues pude "salir de la nada". Di varias zancadas para adelantarme al gradullón y me planté delante de Nickar.

-Jamás pensé que haría esto. Pero me has salvado la vida.- Hinqué la rodilla en el suelo de madera a modo de sumisión -Pido ser vuestro consejero y devolveros el favor ayudando en vuestros objetivos. Los días que he ganado desde la explosión os los cedo.- Aguardó a que la tiflin aceptara para plantear una pregunta que le había rondado la cabeza desde hacía tiempo. -¿Bajo qué nombre nos acogemos?¿Tenemos estandarte, símbolo, signo?- Formar parte de algo más grande que uno mismo era importante y un reino debía tener un emblema... aunque sus inicios fueran una banda entre rejas.

Sorprendentemente, Amok guardó silencio mientras "medio hombre" como yo habló.

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01/02/2018, 09:58
-Residuos del Dolor-

Nickar se aleja, desaparece entre las calles ajena a tu conversación.

El gnomo abrió muchos los ojos cuando hiciste la petición. -No hay fuego de alquimista en Arkhani... creo- luego sostuvo la mirada con la tuya -Pero lo averiguaré- sentenció y pudiste ver un brillo de ingenio e ilusión en su mirada. -Muchas posibilidades, muchas posibilidades- decía mientras realizaba los primeros bocetos de un barril al que añadía ciertas mejoras mecánicas improvisadas... alas, patas...

Dos días pasaron desde la explosión. Dos días en los que descubriste que Leixle Ir'van estaba allí, pero en niveles muy inferiores al Pabellón C. Para conseguir bajar debías conseguir mayor influencia o hacer que ella subiera (o mandara a uno de sus muchos Tannaruks u orcos que la servían).

Las reparaciones iban avanzando. Te encontrabas en las cercanías esperando a que Comadreja regresara y en esos dos días no tuviste noticias de nadie. Ni Comadreja volvió, ni el gnomo. Tampoco tuviste éxito en encontrar a alguien lo suficientemente "leal" para que le diera un mensaje a Leixle. No obstante, descubriste que Nickar estaba promocionándose como reina de todo que hará de todos los reinos uno sólo. Considera a todos sus súbditos y tiene a la curandera de Roriarkas, la que ayudó con los heridos en la explosión, buscandole seguidores... patético.

Caminabas por la plaza calculando dónde una explosión hará mayor destrozos cuando un resplandor en una vivienda cercana atrajo tu atención. Fue entonces cuando caíste en la cuenta de que ese edificio fue el primero en ser reparado, mucho antes que la misma plaza o "El Grosero". -¿De quién...?- la pregunta comenzó a dibujarse en tu mente cuando viste una sombra reconocible a través de los vídrios oscurecidos: Vannegar, el vampiro.

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01/02/2018, 10:09
-Residuos del Dolor-

El interior de ese edificio era sencillo, pero bien decorado. Una fachada elaborada con detalle. Allí aparecisteis. Vannegar se asomó a la ventana y, al otro lado de la plaza se encontraba "El Grosero". -Este edificio es tuyo- comentó -Entero- desde aquella primera planta podías ver la puerta de la posada y las labores de reparación de la misma, así como del cráter que Esderian dejó en el centro de la sala.

Los cristales estaban ennegrecidos por lo que resultaba difícil que te vieran desde cierta distancia. Pero Vannegar se había pegado a la ventana y, desde abajo, una figura lo miraba atentamente. Una figura con una horrible máscara: Pain.

-¿Cuántos días habrán pasado desde tu conversión?- te preguntaste. Si Pain estaba allí, puede que tu grupo (el de Roriarkas) haya regresado. Quizá también el de Comadreja.

Vannegar se giró y se apartó de la ventana -Hablábamos de tu primer criado- comentó con tono despreocupado pero supiste que era consciente de que Pain lo miraba e incluso que quizá lo conocía.

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01/02/2018, 13:07
Nickar

La tiflin a la que siempre le habían atraído los dragones, pensó durante los dos días que le ofreció Eliannha, sabía que la gente se sentía más preparada ante un símbolo, y le costó mucho pensar en algo que pudiera satisfacer a todos. Por un lado buscaba captar a gentes de todo tipo, pero si incluía una cursilería repelería a caóticos y malignos, asimismo asustaría a benignos con algo demasiado agresivo. Aun así no esperaba tan pronta la duda de aquel pequeño que se arrodillaba ante ella.

- antes de responder, alza tu rostro, y despega esa rodilla del suelo, no me debes servidumbre, y aunque lo aprecio solo espero seas mi seguidor, los cuales pueden alzarse orgullosos, pensar por si mismos y seguirme hasta donde lo deseen - el orgullo era el arma más poderosa de toda existencia, llegarían más lejos de lo posible si se sentían orgullosos de servirle, doblegar el orgullo también menguaría su disposición.

- no ha sido fácil pensar en un símbolo apropiado, pero hepensado en la cabeza del dragón de bronce, justo y a la vez guerrero, inteligente y fuerte, poseedor también de magia, no detesta la maldad de forma absoluta, y es capaz de seguir a alguien con sus propias opiniones, es estratégico, conoce la guerra y aprecia la paz, no exige pago a quien sigue, pero agradece ser recompensado. Creo que es un símbolo lo más neutral que se me ha ocurrido, por grupo, seremos el arca, por un doble motivo, el primero en nhonor a Roriarkas pues quiero dar a entender que acepto heredar su responsabilidad como líder, el segundo, para dar a entender que guardáremos todo, como si un cofre sin fondo fuera, razas, linajes, opiniones, todos merecen su sitio, desde el más puro al más agresivo, todos tendrán una parte del arca y todos tendrán como única ley respetar el hueco de cada grupo que se desee crear, adaptándose a las normas de cada sección establecida.

Miro a Amok - eso te incluye amigo, si deseas batallas y gloria, podrás hacer tu ejército, mientras exista mundo que conquistar habrá quienes se nieguen, y guerras que librar, e incluso si algún día se llegaran a unificar mundos y planos, crearía enormes coliseos en los que la gloria de los más fuertes siga existiendo sin fin. Nada que ver con los circos actuales en los que mantienen presos a sus combatientes, serían libres de vivir en paz cuando les plazca, y mostrar su poder en cuanto les apetezca, además de poder vivir en las ciudades sin ley previstas para quienes deseen dar rienda suelta a sus npensamientos más agresivos - se silenció unos segundos abriendo sus brazos - aunque hasta que todos puedan tener su sitio, pasará mucho tiempo creando y avanzando en todas las direcciones posibles. Y en ellas serán igual de importantes guerreros que estrategas.

Guerra y estrategia, sabiduria y poder, fuerza y magia, no se le ocurrió nada que reuniera todo mejore que el dragón de bronce.

- aun así, Nameoght si se te ocurre algo mejor, te escucharé encantada.

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01/02/2018, 22:44
Serge Leblanc

Serge sonrió al escuchar a Vannegar. Si al morir regresaba a reino de los vampiros para lamerse las heridas aquello definitivamente iba sonando cada vez mejor. Ah, pero ya sabía lo que dolía morir. No pensaba dejarse matar tan fácilmente, no señor. Aprovecharía todos sus recursos para fortalecerse al máximo y escalar posiciones en el clan Van Tassenick. Porque le había gustado mucho el mundo que Vannegar le había mostrado. Tal vez quedarse por ahí fuera la mejor opción dadas las circunstancias.

La primera parada fue para visitar a un viejo conocido de Serge Leblanc.

 -Ah, bonsoir monsieur. ¿Qué tal le va?

Al parecer Dádivo sobrevivió a su encuentro con Yzlin y Tizoc, pero no había salido indemne de él. Tras compartir saludos, Vanegar le entregó el estuche de las herramientas heredadas de Serge para repararlo. El ladrón ya había oído de magos capaces de restaurar objetos con su magia, pero jamás lo había visto en vivo y en directo. Y era mucho más maravilloso de lo que se había podido imaginar. El estuche de cuero de su madre había quedado como nuevo, suave y curtido, pero resistente como el primer día.

 -Perfecto.

Serge y su amigo vampiro se marcharon mientras éste último le contaba lo que sucedía con Dádivo. Ciertamente, aquellos hongos de sangre eran una herramienta tremendamente poderosa para tener comiendo de la mano a más de media ciudad. Y no era para menos, ¿quién diantres se resistiría a poseer la eterna juventud en la palma de su mano? Aparte de algún santurrón acérrimo que no tuviera intención de mancillarse con algo relacionado con vampiros, pero en aquel lugar, esos eran una minoría.

Lo siguiente fue visitar la armería, donde Serge pudo escoger entre una amplia variedad de armas para sustituir a las que había perdido. No encontraría una espada corta con el pomo con forma de mujer desnuda, pero seguro que algo interesante habría por allí. Finalmente optó por coger las armas más similares a las que había perdido que pudo encontrar. Cuantos menos cambios observaran sus compañeros, mejor. Poco después un criado trajo su nueva armadura. Tras equiparse, Vannegar alabó su aspecto.

 -Ciertamente me siento como si acabara de volver a naître. -se rio un poco mientras su amigo vampiro preguntaba acerca del criado que iba a contratar- Maña. Eso es lo que busco en un criado. Que sea anodino y con la suficiente habilidad como para moverse por la prison sin ser detectado o atrapado.

Y mientras hablaba, fueron juntos hacia una estructura que al parecer les llevaría de vuelta a la prisión. Fue tan súbito como inmediato. En un abrir y cerrar de ojos habían regresado a Arokham. O eso parecía, Serge no reconoció el edificio en el que estaban, aunque sí que le sonaban los alrededores.

 -Veo que el Grosero sigue en pie. Tuvo más chance que yo…

Vannegar le dijo que aquel edificio era suyo totalmente. Eso sonaba muy bien, ya que necesitaba un sitio privado para descansar sin miedo a ser atacado por algún fanático de un dios de la luz. Sólo necesitaba… Un momento, ¿ese era Pain? Estaba mirando hacia él… No, hacia su compañero. ¿Les estaría viendo? Teniendo en cuenta lo tintados que estaban los cristales era difícil que así fuera, pero Serge ya no sabía qué esperarse de Pain. Con el ceño fruncido, el ladrón se alejó de la ventana para examinar la sala en la que estaban ahora.

 -Me gusta. Es acogedor. Y discret. Me mimáis demasiado, Vannegar.

Pero no era su nuevo hogar lo que ocupaba sus pensamientos. No, era su antiguo compañero Pain en el que pensaba. ¿Cuánto tiempo habría pasado desde que murió? No demasiado, ya que el Grosero no estaba reparado del todo. Pero si Pain había vuelto, ¿habría terminado ya la misión? ¿O habría muerto durante la misma? Era poco probable, pero claro, hasta hace poco tampoco era probable para él acabar convertido en un vampiro.

El amigo Vannegar volvió a sacar el tema del criado a colación.

 -Sí, como te decía, alguien anodino y hábil. Creo que pasar inaperçu es más importante que cualquier otra característica. Y que tenga labia. Si va a traerme presas, tendrá que convencerlas con belles palabras para que vengan. El género… Me es indiferente. Tengo suficiente experiencia en el monde criminal como para saber que tanto hombres como mujeres son igualmente aptos para este tipo de tareas. À propos, ¿cuánto tiempo ha pasado desde que morí aquí hasta que hemos regresado?

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05/02/2018, 19:01
Reo 525

-Somos "El Arca" y nuestro emblema es el dragón de bronce.- Se acarició la barbilla pensativo tras escucharte hablar -Tienes una gran ambición y dudo mucho que todos puedan identificarse bajo un mismo estandarte. Dicho esto, no debe preocuparte que haya un sígno que simbolice a todos, sino que te simbolice a ti- te miró de arriba abajo y le gustó lo que veía -Una espada, un estoque símbolo de la disciplina del combate y la finura, del honor y la lealtad. Cruzado con una maza, símbolo de la fuerza y la batalla.- A medida que hablaba señalaba las pertenencias de Nickar y, al final, quedó maravillado -Coronados encima por una flauta, símbolo de las artes y la sabiduría.- Sostuvo la mirada -En principio, ese puede ser tu escudo de armas personal. Luego, para ganar el favor de tus seguidores, deja que cada general, maestro mercader, alcalde o quien sea con el rango necesario elija el símbolo para que los suyos le sigan ya que él te sigue a ti.-

Allí mismo estaba el ejemplo, le había sugerido a Amok conseguir un ejército. -Amok se acoge a tu signo pero él elegirá el suyo para los que le sigan. Es una manera de recompensarle por su fidelidad. ¿Qué opinaría el gran Amok si le dejaran escoger su propio escudo de armas?- Miró al bruto y a expectativa parecía gustarle. Luego el mediano bajó la voz -El símbolo del dragón es demasiado descriptivo y puede atraer a... eso... dragones en desacuerdo con tus propósitos.-

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05/02/2018, 20:32
Vannegar

Vannegar sostuvo la mirada de su interlocutor durante unos segundos antes de contestar -Han pasado dos días desde la explosión- comentó haciendo un gesto con la mano como si no tuviera importancia.

Tras una pausa para que Serge digiriera esa información añadió -Ya sabes, ésta es tu casa y sólo el ganado al que invites tiene permitido entrar aquí. Otros no.- Parecía que sabía de lo que hablaba -Sé autoritario en tus dominios, él te estará viendo y no hay nada que deteste más que la inseguridad.- Después de los consejos se dirigió hacia la salida -Hace muchos años que no bajaba tanto. Voy a ver cómo está la prisión y si puedo sacar un buen candidato para que sea tu siervo aquí abajo. Tengo un nombre, pero pulirlo requerirá tiempo y si lo consigo, levantará ampollas en nuestros enemigos... Seguiremos en contacto.-

Hizo una reverencia y salió por la puerta.

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05/02/2018, 20:49
Nickar

Un estoque cruzado con una maza y coronado por una flauta, ni siquiera había pensado en algo que le identificara tanto, y eso le hizo sonreír.

- parece que ya me conoces más que yo misma, será un buen escudo de armas sin duda - miró a Amok sonreír, y lo que para otros podría verse una desagradable sonrisa, a Nickar le parecía artística, única y magnífica, ninguna sonrisa se dibujaba igual, y eran a la hora de identificar a farsantes, lo más difícil de imitar - Eliannha, piensa también cual será tu escudo, y cuentas con mi permiso para ayudar a amigos y enemigos, seguro que Amok se frustraría si se le acaban demasiado rápido.

Miró a su consejero, no necesitaba decir que si quería algún símbolo lo hiciera suyo también.

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06/02/2018, 22:19
Serge Leblanc

Dos días… ¿qué demonios habría pasado durante su ausencia? Eso era lo primero que tenía que averiguar en cuanto tuviera a su criado. O tal vez fuera a preguntárselo a Virming. Ciertamente, tenía que ir a hablar con él. Claro está, en privado. No quería ir venteando su nuevo secreto a más gente de la necesaria.

Vannegar le comentó lo importante que era mantener su nuevo hogar bien guardado. Al parecer “padre” le estaría observando. Bueno, no tenía intención alguna de decepcionarle. No teniendo en cuenta lo mucho que tenía que ganar en este bando. No pensaba perder lo que había ganado con su muerte. Si no sólo sería un nomuerto triste, solitario y débil.

 -Entendu. No creo que ninguno tengáis que preocuparos por eso.

Se despidió del vampiro y, tras tomarse unos momentos para explorar su nueva casa, salió a la calle para ir al Grosero a buscar a Virming.

Notas de juego

Que conste que salgo si puedo. Si el sol me va a convertir en una tostada francesa, me quedo dentro hasta que pueda salir al exterior.

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11/02/2018, 11:04
-Residuos del Dolor-

Nameoght se alzó y su rostro mostraba la satisfacción de haber sido útil a su salvadora. Amok, por su parte, había escuchado suficiente como para saber qué paso tomar. ¡Podía tener su propio estandarte! Debía encontrar presos que nutrieran sus filas y no tenía tiempo que perder. Si despedirse (acorde a sus modales) giró y salió de la estancia dando zancadas.

Por su parte, Eliana guardó respetuoso silencio aunque también su rostro mostraba la complacencia de apreciar que los planes salían bien. Sin embargo, Nickar pudo ver que sus ojos escondían una preocupación creciente. Algo normal, pues tenían un duro camino por delante. Escalar posiciones no es fácil y en una prisión, donde ya hay tres líderes que se disputan el poder, menos. Pero, pese a todo, el sentimiento era positivo.

Nameoght, negó con la cabeza antes de que nadie pudiera incluirle -En principio no quiero escudo de armas propio, ni emblema. Me basta con el tuyo, Nickar. Luego, el tiempo dirá- Dijo con la misma expresión de satisfacción. Eliannha, por su parte, añadió un argumento parecido -Opino como él. Me quedo a tu lado.- Así, el reinado de Nickar podía contar ya con dos consejeros y un "general de la guardia" bastante bruto. No era un mal comienzo, ni mucho menos.

-Herst, Comadreja y Roriarkas no tardarán en volver. ¿Cuál es el siguiente paso?- preguntó Nameoght. En su mente se abría un abanico de multitud de estrategias y prefería conocer el próximo objetivo de importancia para elegir una y aconsejar.

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11/02/2018, 11:14
-Residuos del Dolor-

Vannegar salió con rapidez, escurriéndose entre las sombras para no ser visto y pronto desapareció entre los callejones.

Tu exploración de la vivienda dio sus frutos. La planta de arriba (la segunda) está compuesta por cinco habitaciones y un gran salón con cocina (bastante vieja y en desuso) y un baño que, aunque se encuentra en mejor estado que la cocina, no llega agua hasta él desde hace muchos años. Las habitaciones cuentan con camas y mobiliario para hospedar a varios huéspedes, de las cinco habitaciones cuatro son individuales y una doble (la del fondo).

En la primera planta (donde os encontráis) hay un salón y dos habitaciones más. Con otro baño de idénticas características al de arriba.

Para salir sólo hay una escalera que desciende a la planta baja. Puedes comprobar que el "sol" de Arkhan es ficticio relativamente. No te causa el dolor (y la muerte) que te causaría el sol en la superficie pero es muy molesto. La piel te escuece allá donde sus rayos lamen, pero es un escozor soportable. Los ojos tardan mucho más en acostumbrarse a la luz (demasiado). Todo brilla insoportablemente.

Junto a la puerta que da a la vivienda hay otra entrada bastante más ancha que también pertenece al edificio. Puedes acceder a ella (recordatorio: llamar a un cerrajero). Es un local con los restos de lo que antaño había sido un mostrador a la derecha. Con estantes y muebles destrozados -Una tienda-. Al fondo a la izquierda una pequeña habitación (sin duda una despensa) cerrada con una puerta metálica antigua, pero no tan vieja como el resto de la casa. Esa puerta sí está cerrada y tu experiencia delata que posee una cerradura de calidad exquisita.

Ya habrá tiempo de explorar esa habitación. Ahora, tras dos días, necesitas información para conocer cómo están las cosas en la prisión, y el mejor lugar es El Grosero.

Cruzas a paso rápido ignorando al ausente Pain que se encuentra vagando por la plaza y accedes (no sin placer) al cobijo de las sombras de la posada. En el interior aún están inmersos en las labores de reparación. El posadero alza el mentón hacia tu dirección -¿Has venido a ayud...?- cuando tu mirada se cruza con las suya su voz queda atorada en la garganta y no termina la frase. Baja la mirada como movido por el instinto que le grita "depredador" y sigue martilleando la barra con madera de roble nueva. Todo está mucho más limpio que antes.

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11/02/2018, 21:21
Nickar

El siguiente paso debía aportar reconocimiento, acoger a los 3 bandos y mostrarles sus saludos, en el caso de Roriarkas sería la excepción, sabía que estaría encantado de dejar el cargo en sus manos. Debía acoger a otro general especial, encargado de aquella zona más compleja para ella, no tenía mucha idea de dimensiones, poco más allá de saber que existían, Roriarkas era necesario en ese aspecto.

- deberíamos recibir a Comadreja y Herst, y esperar que vuelva con nosotros Roriarkas - si quería vivir tranquilo, también tendría su sitio, un rincón en el que su habilidad no necesitara ser demasiado utilizada si no era por elección propia.

Miró a sus consejeros - debemos también averiguar que es lo que está por ocurrir sobre nosotros, como prevenir daños posibles en nuestros dominios y contraatacar antes incluso de recibir algún problema. Esto último será lo más complicado, puesto que antes necesitamos saber el qué y el como. Antes de agrandar nuestro territorio, debemos protegerlo y asegurarlo, y asimismo saber como extenderlo arriesgando lo mínimo posible.

Se incorporó batiendo sus alas a modo de decisión. - aseguremos un margen de espacio por si juegan alguna nueva mala arte para destruirnos.

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12/02/2018, 20:19
Serge Leblanc

Nada más salir a la calle tuvo que cerrar los ojos y hacer sombra sobre la cara con la mano. El sol… Vannegar había salido sin problemas sin advertirle que no saliera bajo ningún concepto, así que, el ladrón había decidido salir a respirar el apestoso aire de la prisión una vez más, tras haber explorado su nuevo hogar. Y nada más cruzar el umbral de su casa se había arrepentido de hacerlo.

No sentía dolor, no estaba ardiendo por efecto de los rayos solares, pero aquel pálido reflejo del astro rey bastaba para para hacerle sentirse tremendamente incómodo. La piel que tenía descubierta le hormigueaba como si tuviera el más molesto de los sarpullidos y sus ojos estaban casi totalmente cegados por la luz. Benditos vendajes que le cubrían casi todo el cuerpo…

Serge avanzó a paso rápido por la calle, intentando pasar el mínimo tiempo posible bajo aquel maldito sol. Debería haberse quedado en casa, intentando abrir aquella misteriosa puerta cerrada en lugar de ir corriendo a buscar información donde Virming. Pero bueno, ya había salido de casa, así que no iba a volver ahora. De hecho, ya había llegado al Grosero.

La escasa sombra del interior del local fue tan refrescante para sus ojos como un paño frío en la frente de un enfermo con fiebre. Serge sonrió y miró al primer hombre que le dirigió la palabra. Le gustó su reacción. Le hizo sentirse poderoso. Una cosa era despertar a tu nueva vida rodeado de seres como tú y otra muy diferente era caminar con tu nuevo poder entre meros mortales. Olidammara sabía cuánto estaba disfrutando aquello.

Sin molestarse en hablar al trabajador de la barra, Serge avanzó hacia la puerta del escondite de Virming. La taberna seguía oliendo mal, pero bastante menos de lo que recordaba. No, si al final esa explosión habría sido más beneficiosa que dañina. Excepto para Esderian, pero bueno, si los vampiros no le habían traído de vuelta, algún otro nomuerto poderoso lo habría hecho ya, tampoco merecía la pena gastar energía cerebral pensando en ello.

Ya cerca de la puerta secreta, el ladrón sólo tuvo que tomarse unos instantes para examinarla y abrirla. No sólo recordaba su posición y lo que el Comadreja había hecho para abrirla, sino que ahora podía ver la depresión que marcaba el lugar en el que se encontraba la trampilla. Sonrió y abrió la puerta, bajando por aquellas escaleras por las que ya bajó en su día. Al llegar al salón donde Yzlin, Pain y él comieron con Virming, dijo:

 -Bonne journée, mes amis. ¿Dónde está el bribón del jefe? Tengo un par de cosas que hablar con él.

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19/02/2018, 20:25
-Residuos del Dolor-

Pero el jefe aún no había llegado. La habitación donde se sirvió el desayuno estaba cubierta de polvo y el empuje del estallido revolvió los muebles lanzándolos hacia un lateral, aunque sin destrozarlos. Sólo la mesa se había puesto de pie y, junto a ella, una silla que alguien (conocedor de aquella guarida) había dispuesto para sentarse.

Una sola inspiración te bastó para captar el aroma de la criatura que no respondió, sino que se ocultó en las sombras cuando accediste a aquel lugar. Un olor a sudor acre muy particular.

Quizá fuera el cambio de expresión, quizá la postura. Algo tuvo que percibir la criatura pues decidió salir del hueco donde antes estaba la cocina, no sin golpear algunos cazos que sonaron estrepitosamente.

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19/02/2018, 20:29
Mosuk Caracuero

-Uh!- Exclamo al golpear el cazo -¡Eh!¿Eh?- salgo a la sala común algo encorvado pues, pese a que cualquier humano podía estar allí erguido, para Caracuero, con sus más de dos metros y medio de altura las vigas del techo que sostenían el suelo de El Grosero resultaban dolorosamente bajas. -Zoy Caracuero. Zaludoz colegha- Se presentó con su voz particular, aguda pero áspera a la vez. Saltaba a la vista que era un trol bastante torpe. Más alto de lo normal para su raza y tan delgado que parecía un junco tambaleante en el lecho de un río de corriente embravecida. En los cuatro pasos (o mejor dicho zancadas) que dio desde la zona de la cocina a la mesa giró tres veces sobre sí mismo, tropezó dos veces más y a punto estuvo de golpearse con una de las vigas.

-¿Quién erez?- preguntó agarrándose a otra viga y proyectando el cuerpo hacia delante para mirar al hombre envuelto en vendas que acababa de entrar.

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19/02/2018, 20:34
Reo 525

-En eso, sí que puedo ayudarte- contestó Nameogh con una sonrisa -Iré a El Grosero y me mezclaré con el populacho. Escucharé las conversaciones y pincharé aquí y allá para sonsacar qué opinión hay sobre ti y sobre lo que estás haciendo pues, no me cabe duda, que los rumores ya se han extendido.

Pero antes de ello, debo preguntarte. ¿Qué has pensado hacer con los niveles inferiores de Arkham?-

Antes de que pudiera contestar, la puerta se abrió y Nameogh se giró para mirar que nuevo recluta acudía.

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19/02/2018, 20:36
Cisco

-...por las escamas de Kurtulmak. Qué ganas tenía de volver.- Cisco se escurrió al interior sin mitigar el asco en el rostro. Se detuvo al ver a Amok y emitió un siseo de amenaza. Luego sus ojos se pararon en Eliannha y en el mediano Nameogh, pero sonrieron con Nickar. -Ya he vuelto- anunció como si no fuera evidente y con sus palabras retiró la capucha y se estiró. Allí pareció tan alto como Nameogh (algo que, de ser verdad, supondría que Cisco ha crecido unos cinco centímetros). -¿Me he perdido algo?- Preguntó con cierto tono suplicante.