Partida Rol por web

Audaces fortuna jubat

Segundo Acto: El Castillo

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08/06/2010, 23:50
Inés de Toledo

Una vez estoy lo suficientemente cerca y aunque sepa que es de mala educación hacer lo que voy a hacer, al ver que la gente sólo se preocupa de llenar el buche me dej de filingranas. Acerco mis labios a su oreja y le respondo en voz baja:

- Yo sí me he dado cuenta y no es de extrañar teniendo tantos amigos... ejem... de los que tiene. Algún lío puede que se lleve entre manos este Malaquías, no me extrañaría lo más mínimo...
- respondo sincera y en el oído del caballero.

Notas de juego

Privado para Hernán.

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09/06/2010, 00:23
Alejandro Zanjón

Me pregunto si estos catalanes guardarán alguna relación con los almogabars esos. Fornidos y peligrosos parecen desde luego.

A estas alturas me encuentro ya picoteando el queso y los frutos secos pero me permito regalarme la vista con el generoso escote de la Inés cuando esta se acerca a Hernán. En un susurro le digo: ¡Vive Dios, que buena pechuga se sirve en esta mesa! tras lo cual espero como mínimo respuesta mordaz y sin duda merecida. Pero como dicen los ancianos, que vean los cristianos lo que han de cenar los gusanos. Sin embargo tras disfrutar de la balconada mis ojos se centran en la otra mesa, a ver si alguien más se interesa por el postre.

Notas de juego

¿No se verá cierta marca que desconocemos con ese escote?

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09/06/2010, 11:19
Inés de Toledo

Levanto la vista arqueando una ceja tras hablar con Hernán en voz baja al escuchar las palabras de Alejandro y, a pesar de que me ha hecho gracia, no puedo evitar responderle mordazmente, como seguramente él ya espera pues me conoce bien:

- Alejandro, tú mira que la única pechuga que vas a probar es la que está servida en los platos. - le digo seria aunque intentando contener la risa. Incluso él sabe que su comentario me ha hecho gracia.

Notas de juego

Pues no lo sé, yo espero que no porque sino no me habría cambiado de ropa seguramente...

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09/06/2010, 11:59
Alejandro Zanjón

¡JA, JA, ja, ja!

La carcajada me sale de lo más profundo, sincera y poco acorde al ambiente de la otra mesa donde todo parece comedido, conforme a otra norma que ni conozco. Inmediatamente siento que he llamado la atención y bajo la mirada que hasta entonces ha estado examinando a los ocupantes vecinos con curiosidad.

Bajando mucho la voz contesto a Inés: No me tientes rapaza, hay sobre la mesa algunas bandejas donde cabes enterica e incluso sobra para poner guarnición. Su sonrisa contenida es contagiosa y me doy cuenta que el vino ha de tener algo que ver con mi alegre estado de ánimo.

Va siendo hora que abandone la mesa, me siento ya achispado y esta no es una taberna ni posada como las que tengo por costumbre hollar. Además siento que un eructo épico está a punto de pedir la libertad y este no es buen lugar ni compañía para concedérsela.

Y haciéndome caso a mi mismo me pongo discretamente en pie para abandonar la estancia.

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09/06/2010, 13:23
Hernán de León

Asiente con la cabeza mientras contesta.

- No era de extrañar dada su naturaleza mezquina y sus aires de misterio. Pero ¿ Negocios con los catalanes ? , Navarra queda lejos de Cataluña. Me intriga el motivos de tales desaires a los catalanes.

Pide a uno de los sirvientes que rellene su copa de vino.

- Más vino!

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09/06/2010, 18:24
Ramona Trescantos

Ramona no puede evitar esbozar una sonrisa al escuchar las palabras de Alenjandro.

Parece que todo va bien por aquí, hacía tiempo que no lo pasábamos tan bien -piensa para sí misma-.

Alejandro ya sabes que Inés no bromea con estas cosas... No sea que pierdas algo que más adelante vayas a necesitar...

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09/06/2010, 19:15
Alejandro Zanjón

Tranquila Ramona, que todo es chanza. La Inesica es la única toledana que no requiere acero para cortar, basta una mirada suya. Pero hoy lo único que me preocupa es si sabré dormir en cama tan blanda, no estoy acostumbrado.

Un pensamiento aterrador me asalta de golpe. Bajando de nuevo la voz para no ser oído fuera de nuestra mesa pregunto ¿dónde se evacuan aquí las aguas menores o mayores? No me veo haciéndolo en medio del patio de armas aun si lo encontrara y estuviera oscuro, que lo dudo. El pensamiento se convierte en angustia al imaginarme a mi mismo correteando por los pasillos del castillo cada vez más apurado para terminar mojado como un bebé y avergonzado hasta consumirme. O quizá siendo sorprendido en cualquier rincón en plena faena e igualmente avergonzado hasta derretirme. Seguramente la preocupación que me causa esta desazón me haya transfigurado el rostro que a la fuerza debe estar serio.

Releche, que no es para broma la cosa. ¿Sabéis dónde hay que acudir? Pero veo entrar y salir a los sirvientes y seguro que ellos saben indicarme donde aliviaré mi problema, eso me consuela. Iré a la caza y captura del apestoso lugar, no temáis, pronto podré retirarme satisfecho y aligerado. Diciendo esto me alejo en pos de uno de los criados que sale en ese momento, con intención de interrogarle.

Notas de juego

Si no ha de suceder nada extraordinario aliviaré las necesidades y me retiraré a dormir o intentarlo al menos.

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09/06/2010, 23:28
Roberto Alvarez

Espero tranquilo disfrutando de los momentos de paz, de comida y de la compañía sin perder detalle de las actitudes de los recién conocidos. Observo sorprendido la partida de Alejandro.

- ¿ahora te vas? Que parece que se pone interesante esto. Seguro que alguno de los nuevos comensales cuenta algunas nuevas de su lugar de origen

Continuo sopesando con calma la reacciones de los catalanes sin mirarles descaradamente pero agudizando el oído para intentar captar alguna de sus palabras.

- Tiradas (1)

Tirada: 1d100
Motivo: Escuchar
Dificultad: 25-
Resultado: 26 (Fracaso)

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10/06/2010, 18:24
Director

La cena prosigue sin acontecimientos dignos de mención, un criado tira un par de jarras ante las chanzas de varios de los presentes. Otro de los hombres cae de la silla y lo tienen que subir a dormirla.

Alejandro sale al patio trasero, detrás de las cocinas a aliviarse, previa indicación de uno de los criados. Servidos los ricos postres, un pastel de frutas bastante rico aunque demasiado caliente para vuestro gusto, el conde se retira y los criados empiezan a retirar las mesas. Los demás invitados hacen lo propio, y varios criados os acompañan a una gran sala con varias placas de madera a modo de separación entre jergón y jergón con un pequeño espacio con un baúl en algunos y una silla en otros para guardar la ropa.

Son más de las doce y justo cuando vais a meteros en vuestras camas y gozar de un merecido descanso ois como los centinelas dan la voz de almarma. AL- ARMA !! ESTÁN INTENTADO TOMAR EL CASTILLO!! Sobresaltados y a medio vestir os ponéis en pie de un salto y escucháis en el pasillo a gente corriendo, también oís una campana y gritos en el exterior.

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10/06/2010, 21:22
Ramona Trescantos

Madre del amor hermoso! -se exclama Ramona- ¿Habéis oído lo mismo que hoy? Están intentando tomar el castillo. ¿En qué berenjenal nos habremos metido? -dice sorprendida y asustada a la vez-.

Dicho esto, se vuelve a colocar la ropa que llevaba, ya que prácticamente ha tenido tiempo de vestirse para ir a la cama, coge el arco y las flechas y todas sus hierbas y utensilios de curación, con intención de pertrecharse para la ocasión, esperando que sea sólo un susto.

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10/06/2010, 22:04
Alejandro Zanjón

El grito me despierta pero aún necesito unos segundos para asimilar lo que ocurre y reaccionar. Mi primer pensamiento es el habitual ¡Los moros! Pero ¡quiá! no hay moros por aquí, hace muchos años que no se ven más que moriscos, mozárabes y conversos, ni un guerrero. Los tiempos de Al-mansur pasaron ya.

No entiendo nada pero hasta que nuestro contratador y señor se pronuncie deberé prepararme, por si acaso. Anda Ramona, déjate de madres del amor y ayúdame a atar el peto mientras sujeto la tizona al cinto. Alguien debería localizar al Malaquías y que diga qué hacemos, que él es quién paga y a quien debemos proteger. Estos últimos tiempos mercenarios me han habituado a estas cosas.

Afortunadamente me cuesta poco prepararme, pues duermo vestido como es normal en casa ajena y sin yacer con hembra.

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10/06/2010, 22:15
Roberto Alvarez

Cuando me disponía a quitarme la ropa para echarme a la cama oigo la voz de alarma.

¿Pero que diablos? Están atacando la fortaleza. Ahora es una ocasión ideal para aprovechar la confusión para encontrar algún botín… pero eso se puede hacer más tarde y puede que el conde este agradezca nuestra colaboración con alguna recompensa. Además tengo ganas de cortar algún gaznate. A ver si me equivoco y confundo a Tobías con un asaltante.
Pienso mientras una sonrisa maliciosa se asoma en mi boca y un brillo cruel ilumina mis ojos. Me acomodo bien el cuero que visto y me pongo el casquete de cuero. Ato mi escudo de rodela a mi antebrazo izquierdo y desenvaino la espada corta apretándola con fuerza en mi mano derecha.
Estoy en alerta, estoy de caza, los efluvios del alcohol han pasado a segundo plano, dejando paso al instinto guerrero. Me asomo por la ventana con cuidado intentando discernir al enemigo a pesar de la oscuridad de la noche y de las luces del castillo.

- Tiradas (1)

Tirada: 1d100
Motivo: Otear
Dificultad: 50-
Resultado: 100 (Fracaso)

Notas de juego

Lo pongo en solo para el director por si se aplica pifia.

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10/06/2010, 23:10
Director

Al salir del cuarto, en el pasillo todo el mundo corre de aquí para allá, varios de los invitados que visteis en la cena salen a medio vestir de sus habitaciones. Los hombres bajan las escaleras algunos de ellos armados, mientras que las mujeres corren hacia el pasillo contiguo que da directamente a las almenas. Al asomaros por las ventanas lo véis claramente, varias decenas de antorchas a las puertas del castillo. Varios de los hombres del conde ( no más de diez ) intentan contenerlos e impedirles el paso.

De Malaquías y Tobías no hay ni rastro por ningún lado, ni en sus jergones ni en los pasillos y desde luego, tampoco los véis en el fregado.

Notas de juego

No hay pifia en este caso Rafael.

Necesito saber quienes de vosotros se unen a la lucha e intentan ayudar, y en caso de uniros ¿ Qué actitud tomaréis ? Valiente, normal o cobarde?

El que se quiera unir a la lucha que tire 1d10

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10/06/2010, 23:15
Hernán de León

No lo duda ni por un momento y tras levantarse de un salto de su jergón se cala su armadura , se pone el casco y toma su espada. Tras asomarse por las almenas asiente con la cabeza. Se arrodilla y se persigna.

Dame Fuerza señor

Se levanta y baja corriendo las escaleras mientras grita: - El Que quiera ayudar que venga conmigo, debe de haber una multitud ahí fuera y todas las espadas son pocas!

- Tiradas (1)

Tirada: 1d10
Motivo: batalla
Resultado: 9

Notas de juego

Escojo actitud valiente

3 encuentros

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10/06/2010, 23:19
Director

Notas de juego

Alejandro y Ramona podéis usar vuestras armas a distancia desde las almenas aunque con las penalizaciones pertinentes.

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10/06/2010, 23:42
Inés de Toledo

¡Maldita sea! - alcancé a gritar ante la señal de alarma dada por los centinelas del castillo. Apenas acababa de volver a ponerme mi ropa ordinaria y guardar mi querido vestido elegante mientras oíqa los ronquidos de Alejandro en su cama.
Desde ese momento todo fueron prisas, ir y venir de gente y soldados del Conde, gente asomándose por doquier para ver a los intrusos que querían entrar en el castillo... Y no había pistas ni huella alguna de Malaquías o Tobías lo cual me daba muy mala espina.

Tras ver como algunos de mis compañeros se echaban a la batalla por diferentes medios y conocedora de que yo no podría ser de ucha ayuda ni abajo en la puerta ni en las almenas, me separé del resto muy a mi pesar en busca de nuestro comerciante... y pagador.
No me hacía gracia tener que ir sola en tal situación y más después de lo ocurrido en el bosque pero en batalla no sería más que un incordio...
Y quizá encuentre algo de valor que poder llevarme... pienso intentando sacarle el lado bueno al asunto.

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10/06/2010, 23:49
Ramona Trescantos

Aunque Ramona no era precisamente proclive a la violencia, más bien todo lo contrario, sabía muy bien que en casos desesperados la cosa se simplificaba a un simple "o te mato yo o me matas tú" y no quería ver a nadie de sus compañeros muertos en ningún caso.

Pensó en Inés y en cómo alejarla de la batalla cuando de repente se dio cuenta de que ya había abandonado la sala.

Sin duda será capaz de arreglárselas sola... Espero que no le pase nada...

Salió presta con sus compañeros para ver el percal y decidir como actuar.

Notas de juego

En principio ayudará con el arco a disparar (actitud normal), pero si ve que alguien cae herido y necesita asistencia se irá rápidamente a socorrerlo (actitud valiente sin dudarlo si se da el caso).

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11/06/2010, 00:09
Director

Notas de juego

Voy a ser más claro, hay tres opciones:

1º Quedarse en el sitio o deambular por el interior del castillo

2º Aquellos que tengan armas a distancia usarlas desde las almenas

3º Bajar a luchar con armas a cuerpo a cuerpo o con armas a distancia

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11/06/2010, 00:15
Inés de Toledo

Notas de juego

Me quedo con la opción 1ª y deambulo en busca de Malaquías, de Tobías y de alguna cosa de valor pequeña que poder hurtar y esconder bajo mis ropas.

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11/06/2010, 08:23
Roberto Alvarez
Sólo para el director

yo bajo a luchar cuerpo a cuerpo... sobre la actitud... estoy entre normal y valiente... pero más que valiente me gustaría calificarla de cruel o barriobajera :)

- Tiradas (1)

Tirada: 1d10
Motivo: Lucha
Resultado: 6

Notas de juego

2 encuentros