Partida Rol por web

Horrenda es la palabra, en efecto. Por cierto, Hugash, te veo mucho mejor... Tus heridas muestran que no era la mejor estrategia correr tras el trasgo... Sin embargo, eso indica que estan organizados... Acabaron con todos? O podemos hablar aùn de una amenaza latente?

Pregunta Magnus serio, pero no en plan reprimenda, sino como cosa del pasado.

Vaya... Creo que Crotar se està demorando más de la cuenta. Ya al iniciar mi guardia no estaba en el campamento... Calculo que estará de caza... Verdad?

Dice preguntando a Nathan.

Durbara durmió a ratos. Aunque gozaba del proverbial aguante físico de los enanos, el pasar la noche al raso la ponía de muy mal humor. Gruñó al levantarse y recogió su petate en silencio con la mirada perdida. Cuando hubo terminado, se puso la armadura con la soltura de alguien que lo hace todos los días.

--El piel verde no va a volver --contestó Durbara al clérigo. Ya había pasado por esto antes, cuando se lo dijo a los que estaban despiertos. Pasar otra vez por lo mismo la crispaba los nervios--. Cuando regresaron del ataque, lo maldije por echar a correr como una gallina descabezada cuando las órdenes que nos habían dado eran las de permanecer unidos. Si no fuera por su culpa, Hugash no habría caído. Él me provocó llamándome cobarde y le reté a que lo volviera a repetir. Pese a que sabéis que no le tengo ningún aprecio a esas criaturas, hubiera dejado el asunto zanjado ahí. Pero él lo repitió. Y no sólo eso, también dijo que iba a violarme. 

La enana hizo un gesto de asco y si hubiera sido un varón hubiera escupido al suelo.

--Si os sirve de algo, él se abalanzó sobre mi primero.

Guardó silencio unos momentos para posar la mirada en el bárbaro.

--Sé que érais camaradas --Durbara rechinó los dientes, como si lo siguiente que fuera a decir le resultara un esfuerzo ímprobo--. Siento que todo haya acabado así.

De eso, aún nada explorador. Contestò a Samir cuando dijo de irse...

Luego fue Durbara la que rompio su torbo silencio...y...

Magnus abrio los ojos lo màs que pudo, sorprendido, como descreìdo de lo que escuchaba... Tanto asì que no atino a mediar palabra... Y clavo los ojos en Hugash, temiendo lo peor...

La luz del sol alcanzo mis ojos haciendome despertar, la mañana sin duda habia llegado y era tiempo de levantar el campamento para seguir nuestro camino.

Las voces de Magnus, Hugash, y Nathan, me recuerdan que todavia hay un pequeño asunto que zanjar. La enana no se anda con rodeos para contar lo sucedido, y la cara del lider lo decia todo... definitivamente Magnus se estaba enfrentando a su primera prueba como lider, seria divertido ver como afrontaba esta situacion. Aunque todavia faltaba lo peor... el barbaro habia simpatizado con el semiorcio, y ahora se estaba enterando de la muerte de quien salvo su vida... y nada menos que a manos de una compañera.

Una leve mueca divertida asomo por mis labios, pero la escondi bajando la mirada hacia mis cosas, este era el momento donde la "rectitud" y frontalidad de la enana iban a rendir sus frutos.

Bajo la mirada cuando Magnus me pregunta por Crotar, pues ésa era la parte a la que me referí a horrenda. Durbara rompió el silencio y contó lo acontecido, e inmediatamente después dirijo la mirada hacia Hugash, temiendo un enfrentamiento a primeras horas de la mañana.

- Durbara me lo contó en cuanto regresó, y me quedé igual de sorprendido que vosotros - miro hacia el bárbaro - No creo que te sirva de consuelo, pero me encargué de enterrar su cuerpo. Me parecía mal dejarle ahí tirado siendo un compañero, y más cuando acordamos que el dinero de los caídos serían para pagarle la sepultura...

Meneo la cabeza desaprobando la situación.

"No me gusta nada cómo se está poniendo esto..."

El bárbaro de quedó blanco no podía creer lo que oía en esos momentos, por la mente del bárbaro pasaron miles de pensamientos, y cada uno de ellos no podía detenerse, puesto que imágenes a una velocidad escalofriante viajaban ahora delante del bárbaro. La enana se había salido con la suya, había acabado con la vida del pobre Crotar... No podía pensar, puesto que ya se había levantado y cuando las personas presentes se fijaban en él cuando recibió la noticia, solo vieron como el hombretón se abalanzó sin pensarlo contra la enana, sin armas nada más que sus fuertes puños, pues ahora era fruto de la rabia y desesperación, habían matado a un ser con el que se sentía algo unido... A pesar de su raza... Ni tan solo había escuchado las palabras del paladín...

Y lo que se esperaba, sucedió... Hugash como una fiera se incorporo para dar una golpiza, sino matar a Durbara. Y como era de esperar, la enana esperaba atenta tal reacción...

Repentinamente, los pàjaros en el ramaje de los árboles circundantes alzaron vuelo... Sangre habría de derramarse, posiblemente... Al menos si nadie podìa evitarlo.

ALTO HUGASH NO LO HAGAS!

Magnus se preparò. No dejaría que aquello pasara aún a peores, y agradeció a su dios el que Hugash hubiera dejado su espadón en el campo de batalla de la emboscada nocturna...

Alto ! Grito Samir mientras preparaba un tiro con su arco, cerro un ojo mientras con el otro comenzo a apuntar.... - Detente no vovlerre a repetirlo! - aseguro el explorador con voz firme

El explorador que había dado el puntapie inicial (sin quererlo) para que los acontecimientos terminaran en la situación actual, ahora se movìa como para interceptar al bàrbaro, al tiempo que preparaba su certero arco para "detener" la carga.

La hermosa ladrona por su parte, miraba interesada* el como se desarrollaban los acontecimientos...

- ¡Hugash, detente! ¡No cometas una locura! - exclamo, a la par que me muevo para ponerme en medio entre el bárbaro y Durbara