Partida Rol por web

Hice una mueca, para ser una enana, Durbara era bastante inteligente. Y ahora tendríamos que esperar si es que había convencido a los demás con sus argumentos.

-Claro, tenemos todo el tiempo del mundo. ¿No se aburren de esperar?

Yo si me aburría y mucho pero haría lo que dijera la mayoría.

El bárbaro estaba algo cansado de esperar de echo no entendía por que había tantas complicaciones, pero no dijo nada, pues su trabajo no era el pensar, de seo debían encargarse los demás, así que cuando asumieran una desición la acataría, pero empezaba a perder los nervios por momentos...

 - Decidid lo que sea, pero cuanto antes, esto de estar parado no es lo mío...

Magnus escuchó con atención la explicación de Durbara. Era un fastidio que no pudieran entrar, pero no se podían arriesgar a poner sobreaviso a los trasgos.

Muy bien. Pues si no podemos entrar tendremos que esperar. No estoy del todo seguro de que haya una patrulla por aquí fuera, pero sin duda tendrán que hacer un cambio de guardia en algún momento.
Con lo que en cuanto se habrá la puerta tendremos que cargar para asegurarnos de entrar. Si Durbara está en lo cierto, desde que entremos ya podremos asegurar la roca.

Ahora, solo hacer incapié en la capacidad de tu cerebro para haber almacenado algún detalle inconcientemente puede arrojarte alguna pista extra...

Ven a la semielfa con los ojos cerrados y la cabeza gacha, haciendo un esfuerzo monumental por exprimirse la cabeza en busca de algún detalle... Algo que se le haya escapado cuando espiaron a los trasgos entrar con los odres...

...Sin embargo, su cara de frustración denota que no ha logrado desentrañar los laberintos de su mente...

Escucho el comentario de Magnus y asiento con la cabeza. En cuanto abran la piedra habrá que cargar rápidamente antes de que cierren y eliminar lo que haya dentro antes de que den la alarma. Acto seguido miro a la pícara, mientras se devana los sesos la pbore, frustrada.

- No te tortures más - digo a la pícara - Nos ocultaremos en el bosque y esperamos a alguna patrulla. Además, igual mientras esperamos recuerdas algo que nos ayude.

Haciendo caso omiso de las palabras del paladín, la "especialista en seguridad" se acuclilla al lado de la piedra, y la recorre milímetro a milímetro... Mirando por debajo, tocando por la rendija que entre piedra y suelo pudiera haber... Se toma cerca de dos minutos en su pequeña pero minuciosa exploración... Luego se arrodilla del lado en que el cesped está ralo, y se pone (no sin cara de molestarse por tener que tocar la tierra de lleno) como si fuera a realizar flexiones de brazos... Luego repite el procedimiento del lado inverso... Y finalmente se incorpora, se sacude la tierra de las ropas, y, sonríe satisfecha.

En tu riguroso análisis caes en la cuenta que no hay absolutamente nada entre la piedra y la tierra, es decir, ningún tipo de mecanismo de trampa o alarma para disuadir a posibles incursores...

Tras limpiarme la suciedad y con una sonrisa en la cara me vuelvo a incorporar. Miro primero al paladin y luego a nuestro lider, no me apetecia perder el tiempo y si esperabamos mucho podriamos encontrarnos con cosas inesperadas.

-Acabo de revisar y no hay ninguna trampa ni mecanismo de deteccion de intrusos. Creo que seria una perdida de tiempo esperar a que alguna patrulla entre, para tener que luchar contra los trasgos de esa patrulla mas lo que vengan a abrirles, etc... podemos utilizar el cayado de la maga o alguna rama fuerte para correr la piedra y entrar de una vez.

Luego hago una pequeña pausa y camino algunos pasos hacia Magnus, pasando a su lado y quedando a la altura de su hombro. Mirandolo de costado y con una ligera sonrisa agrego.

-Aunque tu eres el jefe...

Con esas palabras termino mi discurso y sigo un par de pasos mas hasta quedar cerca de la maga y la enana que nos habia dado una leccion sobre rocas y piedras.

- Vaya... si no hay ningún mecanismo o trampa segun dices, sería tontería perder tiempo...

Empiezo a buscar con la mirada alguna trama gruesa con la que hacer palanca y mover la piedra

--Sería una tontería, desde luego --bufó Durbara, antes de objetar--, a menos que el mecanismo no sea visible desde donde nuestra experta en seguridad esté mirando. Que dicho sea de paso, no es que tenga mucho ángulo de visión.

El bárbaro estaba cansado de esperar, y por lo visto la mujer había encontrado una manera de abrir esa dichosa roca, así que sin más el bárbaro sacó su hacha y se acercó a la roca...

 - Bien, donde hay que hacer palanca para que se mueva...

El bárbaro esperaba las indicaciones de la mujer que había inspeccionado minuciosamente la roca, para ejercer palanca en el sitio adecuado con la madera de su hacha...

Miro directamente a la enana cuando escucho su comentario, nuevamente esa leve sonrisa picara emerge en mi rostro.

-No te preocupes Durbara yo estoy bastante segura de mis habilidades, aunque si estoy de acuerdo contigo en que tu tendrias un mejor "angulo de vision".

Las ultimas palabras resuenan con marcada ironia. Luego escucho las palabras del barbaro y enarco una ceja ante su pregunta.

-Lo siento, pero yo no soy arquitecta, aqui nuestra compañera durbara puede guiarte mejor con su angulo de vision...

Nuevamente esa frase tan pegadiza que rescate de lo que dijo la enana, unas palabras nunca mejor empleadas. No pude evitar volver a sonreir con cierta malicia.

Niego con la cabeza al ver cómo la enana y la semi-elfa están a punto de enzarzarse nuevamente en un intercambio de palabras.

- Chicas, no empecemos otra vez...

Parece que la pícara disfruta con ello y me he dado cuenta de ello al ver cómo sonríe con picardía tras soltar aquella indirecta.

"No tengo muchas ganas de hacer de canguro de ambas, si prefieren intercambiarse palabras cariñosas, que lo hagan"

Posteriormente me acerco a Arshade y observo su cayado.

- Arshade, amiga mía... ¿crees que tu cayado soportaría el hacer de palanca para mover esa piedra?

Durbara le prestó menos atención a la pícara que a un gusano moviéndose en el fango.

--¿Decías, querida? --dijo al fin.

A Magnus no le acababa de convencer el tema de mover la piedra. No es que desconfiara de las aptitudes de Lorethel, pero estaba de acuerdo con Durbara de que no podía estar tan segura sin ver lo que había en el otro lado.

Por otra parte quería comprobar una cosa. Además esperar era bueno para las heridas de Hugash, aunque él mismo no se diese cuenta de ello.

No, esperarían a que se abriese la roca.

No quiero arriesgarme a activar nada. Esperaremos a que salga alguién y entonces nos lanzamos a la carga a la entrad para impedir que cierren. Además, no se esperaran una acción así. En cambio si activamos algo al mover la roca nos pueden emboscar dentro, ya que ellos conocen la cueva y nosotros no.

No creo que haya ninguna patrulla por fuera, aun así alguien tendría que ir al lugar donde estaba el trasgo de guardia y vigilar.
Lorethel, ves con Arshade. Sois las que más rapido os moveis si tuvierais que venir a ayudar. Nosotros nos parapetaremos aquí.

 La enana se hacia la indiferente simulando una actitud de superada, nada que me divierta mas en estas situaciones.

-Oh claro, mis disculpas, a veces olvido que tengo que hablar hacia abajo.

Le contesto pero nisiquiera la miro dando por zanjado el tema. Las palabras de nuestro lider son las que mas me preocupan, pero lamentablemente el era quien nos guiaba y asi lo habiamos dispuesto entre todos.

-No activaríamos nada al mover la roca, pero si tu estas seguro que ir a la carga contra una patrulla de trasgos y sus aliados que esten abriendoles el paso a su guarida es mas seguro que entrar cuando no hay nadie... en fin es tu decision como lider.

Ya con mi punto expuesto sigo caminando hacia la maga sonriendo inocentemente.

-Bien querida, vamos por lo nuestro?

Mi sonrisa expresaba mas diversion que burla, solo esperaba que las cosas no se complicaran demasiado.