Partida Rol por web

De vuelta al Big Rhino, esa entrada a los subterráneos orcos, esa basta extensión de túneles y cuevas donde impera la ley del más fuerte y ahí, el más fuerte tiene el control.

La zona estaba un poco tensa. Los lugareños, tras la pelea de bandas, estaban recelosos de los extranjeros y la presencia de los runners les hacía sentir incómodos.

El grupo estaba a punto de entrar en el Big Rhino cuando alguien llamó su atención.

—Qué pasa tíos, pensé que a estas horas os estarían metiendo un palo por el culo para encontrar algo y enchironaros —dijo Spike, siempre tan bromista—. ¿Cómo habéis conseguido que os suelten? Bueno... ¡qué más da! Tengo información fresca sobre se Turner al que venías a buscar. Algo se está cociendo en su garito pero no he podido averiguar qué. Pero si lo buscáis, lo encontraréis ahí, con toda seguridad. Pero el ambiente está algo tenso ahí dentro... parece que hay varios que quieren parte del pastel, sea cual sea ese pastel.

Spike levantó la vista hacia el Big Rhino.

—¿Seguro que queréis entrar ahí? Seguro que el viejo nos hace precio pero la tarifa ha subido, sabéis. Está el ambiente un poco caliente.

Bum bum asintió. -Ahá.- Y se giró a Loky. -¿Loky no querias habar con aquí el colega?

Loky74 asintió al comentario de Bum Bum.

—Tuve ciertos problemas en la Matriz y no pude perseguir al capullo que me intentó piratear. Tú estabas conmigo ¿sabes algo que me pueda ayudar a encontrarlo luego? Ahora tenemos otros asuntos pero no quiero despistarme del tema. No vaya a ser que ahora cualquier aprendiz de decker se las quiera dar de listo tocándome los cojones.

Luego se giró hacia el Rhinno.

—Bueno, si Turner está ahí igual obtenemos algunas respuestas para variar ¿no? Vamos.

Por fin Big estaba algo más contento. Obtener respuestas significaba que igual iba a partir algún cráneo. Eso siempre era bonito, le daba algún sentido a su vida.

—Venga, pues entonces vamos al Big Rhino. A ver qué pasa allí...

Bum bum iba a observar que a lo mejor alguien de dentro les recordaba de hacía un rato y no le hacía gracia su presencia... Pero se limito a comprobar sus armas y a seguir a sus compañeros. Total, con la racha que llevaban lo mismo hasta les contrataban para otra cosa.

Los runners se dirigían a la puerta del Rhino cuando una muchacha orca les interrumpió. No tendría más de 10 años pero se notaba que estaba curtida.

—¿Vais a entrar ahí vosotros solos? —dijo con desaire—. No duraréis ni un parpadeo. El tema está muy revolucionado ahí abajo, sabéis, y Pip sabe como esquivar a todos los los malos y llevaros a donde queráis. Llevo jugando ahí dentro desde pequeña, ¿sabéis?

El aspecto de Pip, como se había llamado así misma, era demacrado. Parecía sobrevivir malamente con lo poco que pudiera conseguir de aquí y de allá. Pero era joven y se la veía excitada con la posibilidad de ayudar a los runners.

El decker se giró hacia la jovencita. Una chica con iniciativa. Ya fuera para ayudarles o para llevarles a una trampa la actitud era la correcta para sobrevivir en este mundo, así que Loky74 no quiso ser condescendiente con su edad. Cuando él era chaval le habría pegado una patada en las pelotas a quien lo fuera.

—Ok jovencita, y estoy segura de que querrás compartir esa información con nosotros a cambio de unos creds ¿verdad? ¿Quiénes están dentro y por donde podemos entrar sin que nos vean? Eso sería muy útil para nosotros, la verdad.

Quería dejarle claro que si era una trampa él estaba dispuesto a pagar mejor. Y si no lo era estaba dispuesto a cumplir un trato justo.

—Depende a donde queráis ir. Eso es muy grande, ¿sabéis? Vosotros le decís a Pip dónde queréis ir y Pip os lleva por un camino que solo conocen las ratas. ¿No os dan miedo las ratas, verdad?

Parecía que la joven orca había hecho ese discurso muchas veces. Probablemente fuera la forma de ganarse la vida. Coger topsiders¹ y llevarlos a donde quieran ir por algunos nuyens. Los alrededores estaban tranquilos. Hacía poco que se había montado una gorda ahí afuera y los comerciantes vigilaban sus negocios desde dentro. Incluso los que deberían de estar cerrados a esas horas. Si había era una trampa, Pip no era consciente de ella.

—Y no os costará mucho —vaciló un instante antes de dar una cifra—. 100¥ a cada uno.

-¿¡Cuatrocientos neo..!?- joder con la cría -Por ese precio espero que incluya el servicio premium...- En la voz de Bum Bum se podía notar simpatía hacia la chavala. Ahí abajo sobrevivir no era fácil. Ahora, una cosa era que te cayera bien la osadía de la mocosa y otra que te atracase...

Sin embargo lo del regateo seguro que se le daba mejor a Magosto, así que se limitó a observar los alrededores por si alguien estaba atento a la escena...

Al viejo aquello no le gustaba un pelo y la llegaba providenial de la chavala orca era ideal. Necesitaban ser discretos, aunque con alguien como Big Cojones podría ser complicado, también era posible que en aquel agujero de mierda él fuera el que más llamara la atención.

En su larga vida había tratado con gente como Pip. Chavales independientes que les gusta sentirse mayores, y aunque en el fondo querrían el cariño que se les ha negado, han convertido esa autosuficiencia como una armadura para enfrentarse a la vida. Pedía demasiado y hasta ella era consciente de eso.

- 300 los cuatro. La mitad ahora. La otra a la vuelta. Es un precio generoso, por lo que no es para un viaje, sino para que nos hagas de guía para varios sitios.- Ofreció el mago. No podía parase a discutir detalles con sus asociados, pero necesitaban cerrar un trato. Quizás era demasiado, pero quería a una niñera leal.

Le ofreció la mano para cerrar el trato.

—Por ese dinero estoy pensando en bajarme yo una simulación virtual y guiarte de forma personal viejo. ¿Sabes la de software que me puedo comprar con esa cantidad?— Loky74 miró a la niña —Aprovecha que el viejo está senil y coge la pasta pequeña, pero como nos la juegues no vas a disfrutar de ella. Los neoyens los pone él— dijo recalcando quien soltaría una cantidad de dinero tan desorbitada por una guía infantil —Pero el cuello nos lo estamos jugando todos. Y ahora te incluyo a ti en el paquete, por si tenías alguna idea rara.

Una cosa era que la niña tuviera actitud y otra que pensase que trataba con unos pringados. Dando por hecho que la niña entendería que le había tocado la lotería y no pondría pegas añadió:

—¿Quienes son los que están dentro del Big Rhinno? ¿Conoces a un tal Turner? ¿Qué nos puedes contar de él? Y no, no me dan miedo las ratas. Estoy acostumbrado a cargármelas sin piedad.— concluyó rememorando su reciente batalla en la Realidad Virtual.

Al oír a su espalda al viejo, Bum Bum abrió mucho los ojos, casi mejor que a la próxima regateaba él porque el viejo estaba soltando dinero como si le sobrara... 

Así que volvió a repasar la zona no fuera que alguien hubiera oído semejante arranque de generosidad y corriera la voz de que alguien forrado estuviera de camino a la cueva de ladrones a la que se dirigían...

El mago pensó en quejarse al decker, y decirle que él no confiaba demasiaod en le mundo virtual y que una niña orca iba a tener las últimas actualizaciones que muy posiblemente un software frñio no iba a tener, o a explicarle las ventajas de las relaciones interpersonales, pero prefirió no decir nada.

Él siempre había confiado en las personas, y una cría orca se merecía algo de empatía. Una cosa que seguro que había tenido una gran escasez en su vida. La vida de los metahumanos orcos jamás era sencilla.

-Yo pago... Por esta vez.- Murmuró ante las quejas de los runners.- Los espíritus me han hablado. Confío en ella.- Añadió dirigiéndose a sus compañeros, pero clavando su mirada en la chavala, aún con la mano extendida. 

El troll se encogió de hombros. Mientras a él no le costase dinero, que el viejo hiciese lo que quisiese. Además, pagar como si no costase seguro que atraería la atención de la gente. Y eso siempre era divertido.

Big se encendió un nuevo puro mientras ajustaba su hacha en su espalda, para decir—. Ya tienes lo que quieres, niña. Ahora vamos al lío.

Bum Bum echó a andar con sus compañeors, se colocó la gabardina de cuero con un movimiento fardón y miró con curiosidad a Big -Oye, ¿cuantos puros fumas al día tío? Porque te tienen que salir por un pico...

—No creas —respondió Big al otro mercenario—. Tampoco es que sean una maravilla, pero me saben a mucho más que los cigarrillos normales.
 

La niña estrechó la mano del viejo mago tras un segundo de duda. Lo hizo justo después de que Magosto pareciera hablar con los espíritus para validar su aptitud.

—Está bien —dijo con un mal disimulado a regañadientes.

Inmediatamente después de puso a hablar, sin esperar el anticipo del pago que Magosto le había prometido.

—¿Dentro del Big Rhino? Pues no se... solo conozco al viejo Randall. Le pagan por vigilar la entrada y a su vez él cobra un peaje a los idiotas que quieren entrar por ahí. Pero a mi me dejará pasar... y a vosotros también si vais conmigo. El resto son sus matones. Tiene muchos contactos así que es mejor no tocarle mucho las narices. Además, tiene contacto directo con algún caudillo de ahí abajo.

Paró un instante para mirar al viejo y alargarle la mano para recibir el pago.

—En cuanto a ese Turner... sí, lo conozco. Trafica con BTLs y hace poco he oído que la cagó. Quizá por eso los caballeros¹ han montado ese follón. Se llegar hasta la Cala del Pirata... son unos muelles antiguos donde Turner tiene su base de operaciones. Lo malo es vuestro amigo —dijo señalando a Cojones—. Es demasiado grande para ir por el camino fácil... y el camino difícil está vigilado por los Skraacha. Si nos ven nos harán pagar un peaje para pasar por ese sector. No se... vosotros mandáis.

Bum Bum parpadeó dos veces. Hasta el momento, el tamaño de Big le había parecido toda una ventaja, era chocante que de repente fuera un problema... -¿Alguien recuerda si la granada se la tiré a los Chacachaca o a los de la realidad? No sea que se acuerden...

—La ventaja del tamaño de Big Cojones es que precisamente gracias a él todos los caminos se simplifican.— sentenció Loky74 —Entonces entiendo que Turner no está en el Big Rhino. Pues entonces vamos directos a sus muelles para hablar con él. Yo ya he tomado un vodka hace nada y no necesito más para ponerme a tono.

Hizo la transferencia prometida a la orca y escuchó con atención todo lo que se iba diciendo.

- Sí, desde luego el sr. Big no es un activo que se pueda dejar atrás. ¿Ahí abajo cómo se desplaza la gente? ¿Hay algún tipo de transporte?.- Le preguntó a la chavala. No tenía ganas de ir arrastrando su cuerpo senil por túneles, cloacas o lo que coño fuera aquel complejo de allí abajo. Si era tan grande como decían seguro que había mil maneras de moverse, y quizás había alguna lo bastante voluminosa como para ocultar incluso a alguien del tamaño de Big Cojones.

- El acceso del Big Rhino es ideal para entrar allí abajo. Hay un rastro astral que he de seguir... Bueno, de hecho lo hará algún amiguito mio astral. Así puedo ir con ustedes, caballeros, a ver a ese tal Turner. Algo me dice que seguramente rastro y Turner van a confluir, pero no está de más asegurar la jugada.- Hizo una pausa, como recordando algo.- ¡Ah! Y la llamada de Craig a su padre... Quizás no es nada, o quizás puede tener una clave. LLamar a tu padre antes de hacer algo importante... Loky, ¿Es posible acceder al audio de esa llamada?- El viejo no sabía un pijo de esas movidas, pero en las pelis de su época joven, cuando se fantaseaba con el mundo donde ahora vivía, hacer cosas así era posible.