Partida Rol por web

Las palabras y la actitud de Precious no dejaron lugar a dudas, no estaba de buen humor, aunque por fortuna la alegría de Lucy lo compensaba, aunque en el fondo parecía algo preocupada, quizás por el estado de ánimo de Precious.

-Pues se han ofrecido a llevarnos, la prisión está lejos y han sido muy amables con su ofrecimiento. Walter se puso triste al hablar sobre Alex. Ya se que no es un viaje de placer, hemos estado encarcelados un buen tiempo por todo ese lío y Alex está injustamente encerrado por hacer lo correcto y por protegernos a nosotros. Pero... ¿Como fue la conversación de ayer? ¿Conseguiste hacer valer tu posición frente a las autoridades para que lo liberaran? Me gustaría que esto fuera una recogida y no una visita de despedida.

Nadie le había dicho nada a Walter sobre que había pasado en la reunión, quizás porque no se sabía nada todavía o porque la situación no había cambiado. Sería duro tener que irse sin Alex. Sonrió a Lucy intentado, como ella, no parecer del todo triste.

-Es bastante grande, ya lo verás, y lo de los saltitos.... eso díselo a Ilia, ella es la que no lo sabía, pero creo que ya habrá aprendido que hay que ponerse el cinturón. ¿Verdad Ilia? Menos mal que los dulces no sufrieron un accidente.... Al menos aquello si le hacía sonreír un poco, aunque fuera a costa de la pobre Ilia, esperaba que esta no se tomara a mal sus comentarios.

Al abrirse la puerta, saludo a quienes esperaban afuera con un rostro serio, sin decir nada, como si la sola mirada bastase, era cosa de él, pero a medida que las palabras salían, observó el rostro de Walter y Lucy, prestando atención a sus palabras y sus gestos, además de los de su capitana. Un bufido escapo de sus labios, antes de acercarse a hablar con Precious.

- Perdone le falta de respeto, pero... - Volvió al frente, para mirar a las visitas, antes de mencionar, aún con un rostro serio, con la frente arrugada tras fruncir el ceño.

- Suficiente de basura hipócrita, ¿no creen? tengo trabajo que hacer, por lo que les agradecería que nos apresuremos, entonces... - Se gira hacia Precious, antes de cruzarse de brazos.- ¿Estamos listos para ir? - Se adelantó unos cuantos pasos para salir de la nave, y colocarse tras el resto.- ¿Donde esta ese transporte? Estamos perdiendo tiempo valioso.- 

El paseo en la "Furgo" se transformo de golpe en una obligación, y que prisas. Después de las fugaces presentaciones, y al parecer no nos mostrarían la nave, ni nos ofrecerían un té, ya se disponían a salir pitando peeeero Oldrich que fue el último en salir del aerotransporte y poniendo cara de pisar nubes de algodón dijo. 

Hola, miren no os importará dice mientras apreta el culo y se pone rojo como un tomate, he de ir a... una enorme ventosidad se oye justo cuento hace un paso direccion a la nave, pero percibe una sutil mirada de pocos amigos, "quizás era paranoia suya" aun así prefiere ahorrarse una discusión de media hora que si me dejas entrar que si no, es solo para ir al baño, vale pero no mires en el armario del mismo, y como la paranoia de Oldrich le estaba ya dando dolor de cabeza, sale corriendo hacia el wc más cercano del hangar con la mano tapando se el culo, ¿ donde tienen los servicios? y busco puerta tras puerta donde poder aligerar el lastre que le apretaba. Pasaron los minutos y aquel tipo variopinto no salía del wc, ¡voy creo que algo que he comido me ha sentado mal! Se refería a aquella barrita llena de moho que había rescatado durante la limpieza del vehiculo. Y cuando por fin salió, ignoró los primeros comentarios respecto a las prisas porque simplemete su experiencia divina del viaje de ida le hacía estar en su mundo.

Hola me llamo Oldrich, mucho gusto, y le da la mano. después de frotarse en la chaqueta, a Markus, a Lucy le da dos besos,(o lo intenta) un placer y entonces cuando miro a Precious ¿uis esto que es? le doy la mano, le doy dos besos... huy no estoy haciendo nada. Pues un placer contigo también, y levanta la mano a la altura del hombro como si intuyera que si se la daba podría salir mal parado.

¿Entonces donde vamos?, es que si podemos pasar por un speedfood de paso, si se refería a una cadena de comida basura de esa que olía tan bien. acto seguido y viendo las caras de los presentes añadió a regañadientes casi sin abrir la boca, ¿bueno si eso a la vuelta?

La mirada de Precious decía, mucho. El timbre de su voz más aun. Por suerte la sonrisa de Lucy iluminaba el resto de la escena. A Marck tampoco le pasó desapercibida la actitud del ingeniero.

Anselmo y Oldrich vienen en calidad de tripulantes de la Fenix Estelar. Lo mismo que imagino que hace Markus para la Nautilus. Y además hacen de chofer, lo cual es una ventaja para no tener que ir andando ni alquilando vehiculos.
¿Tienes algún problema con eso?

La actitud fue más ruda de lo que en Marck solía ser, pero no quería que hubieran equivocos al respecto. Apreciaba la ayuda de Precious, pero no estaba allí en calidad superior de ninguno de ellos. Por más que se lo tuviera creído.

Su actitud era clara, pero la actitud de llegar y entrar a la nave de Oldrich como quien llega y entra a su casa no le agrado para nada. Cuando se acerco a saludarle no le extendió la mano, simplemente lo fulmino con una mirada de desprecio. Odiaba a los tipos como él.

Lo otro fue Marck. Sonrío al escuchar sus palabras cargadas a propósito por un aire de suficiencia, se conocía a la perfección ese tipo de personas, aquellos que se les subía el rango a la cabeza y no tenían idea de nada. Había perdido la cuenta de la cantidad de líos y de la cantidad de naves de la que había bajado por ello. Se cruzó de brazos y se llevo la mano al mentón, para luego acercarse al sujeto con la mirada fija en sus ojos. ¿Quieres ser rudo? Pues bailemos entonces.

- Escucha rubio. No soy tu amigo, ni soy de tu tripulación, así que primero que nada me bajas el tono. Segundo, el papel forzado de capitán no te queda, así que ni te esfuerces en querer imponer orden, porque aquí solo sigo las ordenes de una persona. Tercero, puede que tu y tus compañeros sean unos hipócritas descarados, pero yo no, y si no te he dado un puñetazo en el rostro por permitir todo lo que esta pasando, es porque de verdad me gusta trabajar en la Nautilus, me importa una mierda quiénes sean tus irrespetuosos compañeros.- Esto ultimo era claramente una referencia a Oldrich.- ni en calidad de qué vengan, así que más vale que te dejes de preocupar tanto de mi.  Si Alex o como se llame sale de la cárcel no es precisamente porque ustedes le hayan salvado el trasero. Entonces, ¿hay algún problema con ello? - Dichas sus palabras, ni siquiera espero una respuesta, no lo valían.

Retrocedió hasta Lucy y Precious, tenía el ánimo bastante jodido. A la primera le dedico unas simples palabras.- Realmente espero que esa bola de grasa no sea tu famosa recomendación de Walter.- Se giró hacía el ingeniero, a quién observó con cara de muy pocos amigos. No estaba claro en su actitud, pero probablemente la capitana y la ex-piloto supieran que ya no veía a Walter como un colega.

Se acercó luego a Precious, se paro frente a ella, con las manos a la espalda en señal de respeto, como queriendo demostrarles al resto con su actitud que es lo que significaba la lealtad. - Capitana, pido disculpas si mi actitud la ha ofendido, pero no me arrepiento de lo dicho a la otra tripulación. Espero ordenes para proceder.- Quizás era un tanto exagerado, pero era la única forma que conocía de mostrar su apoyo a ella. Se ganara problemas o no, su conciencia estaba más que tranquila.

Precious y su ingeniero eran tal para cual, casi daba gusto verlos juntos. Casi.

No podía evitarlo, pero la sangre me hervía de indignación ante las palabras y el tono del tal Markus, no sé que tenía ese hangar que cada vez que me acercaba acababa enfadada y con un humor de perros.

Esa bola de grasa es nuestro artillero.- Aunque era cierto que Oldrich debería perder entre veinte y treinta kilos no me gustaba que nadie se metiera con uno de mis compañeros. - Y al igual que yo no te digo lo extremadamente ridícula que te queda esa perilla tú deberías hacer lo mismo con los kilos de más de Oldrich.

Intenté calmarme pues entre la sarta de tonterías que habían salido de su boca había una en particular que no entendía y no entender algo nunca terminaba de gustarme.

¿De qué audiencia habla tu ingeniero Precious? Hasta donde yo sé tenemos hora en la carcél para ver a Alex.

- Hola buenos ... y a largar la mano para saludar es en lo que se quedó su presentación al ser introducido al grupo, pero al ver las tensión de la reunión retiró la mano y guardó silencio. Miró a Ilia y quedó satisfecho por la discursión. Era una mujer que sabe defenderse. Pensó para si. Al igual que el cariño no es precisamente lo que corre por estas cubierta.

Tras esto miró a Mark. Quería ver algún gesto suyo. Regresa al vehículo, o ... prepárate ... o algo. Estaba a la espera de una señal o una orden para actuar o regresar. Su rostro impasible era duro en este momento. Duro y a la espera de una orden.

Marck enarcó una ceja ante el comentario de Markus y la irada que le dirigió. No lo conocia lo suficiente para haberlo cabreado tanto. Y parece que tampoco lo iba a conocer, al menos en un futuro cercano.
Lo cierto es que no le gustó lo que Oldrich había hecho, pero le gustó aun menos el tono del ingeniero.

Se fijó en que Anselmo estaba un poco tenso, lo cual quería decir que como buen soldado estaba preparado para reaccionar con contundecia si fuera necesario. Desde luego no lo era, ni ahora, ni aquí. Tal vez en otro momento sí.
Mientras Ilia preguntaba por lo que había querido decir Markus, lo cual a él también le intrigaba, decidió que era mejor no tentar a la suerte.

Sr. Brok, Sr. Pat. Les agradecería que subieran a la "furgo" y nos esperen en ella. Al parecer hay cosas que discutir, y no me gustaría que se aburriesen mientras tanto.

Sin saber muy bien porqué Markus parecía haberse contagiado del mal humor de su capitana.

Afortunadamente Lucy no parece afectada por esta epidemia de rabia injustificada.

No entendía que sucedía, sabía que Precious siempre había tenido un carácter difícil y no le había sorprendido mucho su recibimiento, pero a Markus tan solo lo habían visto una vez y parecía enfadado con ellos.

Quizá no le gustó que entráramos en su sala de ingeniería... Pero le pedimos permiso antes...

Pero lejos de remitir, parecía que la tensión y los insultos se hacían cada vez más grandes y se extendían a todos los tripulantes de la Fenix, incluso a los que no conocían de nada. Finalmente decidió intervenir pues no le gustaba como se estaba tratando a sus compañeros sin razón.

-No se que mosca os ha picado a vosotros dos, supongo que todos tenemos días malos, aunque parece que unos tienen más días malos que otros. La verdad es que ninguno de nosotros os debe nada ni os ha hecho nada así que no entiendo esa actitud, ni tampoco tengo porqué soportarla. Markus, nadie te obliga a venir, de hecho eres el único de todos los presentes que no pinta nada allí. Al menos Anselmo y Oldrich les acercaban con el vehículo y seguramente a Alex le gustaría conocer a la gente que iba a enrolarse en su nave. Y menos si vas a seguir faltando al respeto a todo el mundo. Y nuestro capitán se llama Alexánder Raynor y es un honor haber servido a su lado todo este tiempo. Al menos era humano y hospitalario y trataba a la gente como personas. No le había gustado lo que habían hecho con Oldrich ni las palabras que le habían dedicado. Visto lo visto no recomendaría enrolarse en vuestra nave a nadie y tratando así a la gente dudo mucho que nadie esté interesado tampoco.

Se volvió hacia Anselmo y Oldrich y les hizo un gesto disculpándose por todo lo que estaba pasando pues se habían visto envueltos en una situación bastante incómoda sin merecerlo, aunque en realidad nadie merecía lo que allí pasaba.
Después se volvió hacia Marck e Ilia, en realidad de lo único que no tenía ganas era de seguir discutiendo y dudaba que consiguieran llegar a la solución civilizada que Marck intentaría encontrar como siempre hacía, pero suponía que no pasaba nada por que lo intentaran.

La hipocrecia emanaba de los poros. Tenía ganas de responderles la sucia clase reptante de personas que eran, pero no, se controló, se mantuvo fijo en su posición hasta las ordenes de Precious, ya se había salido demasiado del protocolo.

Parecía que Precious necesitaba tiempo de digerir todo, por lo que aprovecho para murmurar despacio a Lucy.- Son perfectos para ti.

El espectáculo que se presento a sus ojos cuando pregunto por la tripulación que se habían traído ahí sin previo aviso, escapaba a toda lógica, primero uno de ellos como sacado de un show cutre para las masas empezó a hacer tonterías de un lado a otro hasta que encontró el servicio del hangar ante la imposibilidad de acercarse a su nave, cosa que en un primer momento parecía querer intentar.

Pero de ahí en adelante la tripulación de la Fenix se mostró cada vez más desagradable, reconoció por su maneras que uno de los invitados era un mercenario. Otro gran gesto de diplomacia de la marca Mark, a este ritmo los capitanes de la Fenix iban a durar cada vez menos. En cualquier caso eso ya no era asunto suyo, ella vino a planeta acudiendo a la solicitud de ayuda de sus viejos compañeros, y estaba claro que ahora se veían bastante bien resueltos.

Agradeció a su ingeniero con un sencillo gesto de asintiendo lo que hizo, mientras este volvió a su posición. 

-No hay nada que discutir, Mark. Hemos venido ante vuestra solicitud de ayuda, ahora eso esta resuelto, iremos a ver a Alex, por deferencia a él. Pueden marcharse ya, nos veremos en la prisión. Lucy puedes marchar con tus nuevos compañeros. 

Tras esperar a que la tripulación de la Fenix se marche, agradece a Markus su apoyo, y parte a la prisión. 

Inclinó la cabeza ante el gesto de Precious, por su actitud en general esperaba llevarse alguna reprimenda, y aunque no fuese inmediata, algo le hacía sentir que pronto llegaría. Sus palabras de verdad le agradaron, no quería mantenerse cerca de personas de esa clase. 

Y al parecer irían por separados, lo que era una alivio, seguirían yendo, aunque no quisiese hacerlo, pero bueno, no se puede conseguir todo en esta vida. Estar ahí de pie con el grupo de la Fenix lo demostraba. 

Pero no quería dejar zanjadas ahí las cosas, dio un paso al lado antes de voltearse hacía los de la Fenix, tenía unas ultimas palabras para ellos.

- ¿Ila? ¿Ilia? Da igual... Mira, si quieres mostrar fuerza y liderazgo, o al menos un poco de madurez, el comentario sobre mi perilla de más. Bienvenida a mi nivel.- Se llevó la diestra al mentón, para acariciarlo con los dedos pulgar e indice y luego guiñarle un ojo a la mujer. Luego venía Mark.

- Eso casi suena como un capitán... Continua así, y no olvides mi consejo, puede que algún día te vean como lo que eres, y no como un suplente.- Le guiño un ojo también a él. En cierta forma le caía bien, le recordaba a un antiguo jefe que no tenía idea de lo que hacía, un bocon sin ninguna aptitud de liderazgo, pero compinche del capitán de la nave. 

El ultimo era Walter, el que más le sorprendía.- Walter, podrías fingir sorpresa con cualquier otro, incluso mentir bien, pero no con alguien que se fije en los detalles como quienes desempeñan nuestra profesión. ¿Sabes? Podrías haberme agradado, pero la hipocresía.- Hizo una pausa y miro a un lado, ¿cuantas veces ya había mencionado esa palabra? Y seguían ahí, tan panchos como si nada, aquello le rompía las bolas. Como sea, volvió su mirar al ingeniero del otro grupo.- ¿Ahora no recomiendas a nadie? - Se río, y negó con la cabeza.- Mira, me importa una mierda quien sea Alex, y no dudo que para ti haya sido un honor haber trabajado para ellos... Pero de haber estado yo en la posición de él, habría estado decepcionado de las mascaras que usan.- Un ultimo golpe.- Bueno... tengan buen viaje. Disfruten la libertad.- Guiño un ojo ahora a Walter, una cosa era que fuesen mojigatos, pero no los creía tan tontos para no pillar la referencia.

Dio un paso hacía atrás, había terminado con ellos. Volvió a ingresar a la Nautilos, si mencionaron algo no les presto atención. 

Vaya, volvió sin la cara de restreñido, tranquilo y sorprendido por las maneras y las formas, por dios, donde ha quedado la cortesía, donde esta la empatía, que pasado tan desagradable les había de preceder a esa gente que se dedica a mal hablar y despreciar gratuitamente, y como no había venido a dar consejos y ni tan solo supuse que fueran apreciados, decidió hacer lo mejor que se puede hacer con las palabras necias e hice oídos sordos, de desagradecidos el mundo esta lleno, y si en un principio hubieran sido aceptados a hacer una excursión que compartiendo amablemente el transporte, ahora que ya habían rechazado el ofrecimiento solo cabía pensar pues mejor, y de entre ello le llamo la atención a la patada en el culo que le dio a Lucy, vaya era la única de esos tres que no había escupido veneno por la boca.

Por dos veces no quisieron sacar del medio, pidiendo que entrase en el trasporte, pero claro con esa actitud tan arrogante por parte de todos, esperó a entrad con la mano en la puerta del trasporte pero seguía escuchando.

bienvenida, ¿Lucy? parece que vienes con nosotros, cuando la tuvo cerca le susurro.... 

tranquila, que aquí no mordemos, por cierto estos dos, les han tratado ya la hemorroides, porque ahora no se me ocurre otro motivo que genere tanta frustación y mala ostia. jeje

Esta vez en el transporte, Oldrich olvido de atarse el cinturón adrede y que gran desilusión la suya que Anselmo no hizo ni un solo quiebro violento, pese a que el se había puesto estrategicamente para abalanzarse con gran disimulo, y aprovecho el corto viaje para interesarse por esa persona nueva que les acompañaba.

Entrando en una conversación banal de el tiempo. solo para romper el hielo.

La escena del hangar os deja a todos sin muchos ánimos de hablar de camino a la prision, Precious y Markus llegan en taxi mientras Anselmo aparca el transporte...

Tras pasar varios minutos de tension por los controles de seguridad, accedeis a una sala con una gran mesa de metal y tantas sillas como los presentes mas una...

La puerta se cierra cuando el ultimo de vosotros entra y otra puerta se abre permitiendo entrar a Alex que os mira a todos y esboza una sonrisa complacido - Hola!!! - se limita a decir mientras indica que tomeis asiento..

Asintió a la orden de su capitán e hizo suya de inmediato. Una flexión de cabeza siguió a un apollo educado. Anselo ayudó a Maese oldrich a subir a la furgo tras su "apretón". Le preocupaba que llegase a la prisión con algún morado o mella que puediera cusar algún tipo del malentendido.

- Jefe, siento que la reunión hubiera salido así de incómoda.

Preguntó que si todos tenían los cinturones y cuando todos dijerons que si, empezó a circular. Su delicadeza había aumentado un poco, pero aún se le veía luchar con los controles en más de una ocasión. Esta vez no fue tan brusco, pero ... podría mejorar. Parecía un novato que aún portaba la "L".

Ya en la carcel, tras aparcar y reunirse con todos se presentó a LUCY, esperando que alguien, en concreto, ella mismma, le dirigiera la palabra. Rezaba por un trato cortés, ya que tras la visita a aquella otra nave, la tensión se podría cortar como una tarta. Qué pena. Pensó para si.

Lucy había permanecido en silencio durante casi toda la discusión. Al principio había intentado poner paz, pero cuando el volumen de los insultos empezó a crecer, la situación la sobrepasó y se bloqueó. Estaba molesta con Markus, pues no tenía ni idea de lo que hablaba, pero aún así no mostró ninguna reacción más que la mirada perdida. Ni siquiera cuando Oldrich la saludó y le dirigió unas palabras. Tenía la cabeza lejos. Esa no era forma de dejar una nave.

Una vez en la prisión, Anselmo se presentó más formalmente a la piloto, en un ambiente más relajado. -Encantada, le contestó ella, y tampoco conduces tan mal. Este par son unos exagerados... se permitió relajar un poco más la situación. 

Ya dentro, la chica recuperó la sonrisa a medias al ver a Alex. Por lo menos parecía que estaba bien. -Hola, Alex, como estás? Lucy fue una de las primeras en sentarse.

Una vez dentro de la sala, sabía que habían de sentarse y el por educación intento acomodar a cada una de las presentes, tanto a Ilia como a Lucy les retiro la silla y las acomodo como había leído que se hiciera en su manual de buenos modales vintage. Claro allí nació de nuevo esa duda en la mente de Oldrich ¿y Precious que es una capitana o es asexual? por su pequeña experiencia en materia de bots, subbots, replicantes y demás productos que inundaban la glaxía, algunos si se les dotaba de eso y a otros se les dejaba sin eso. ¡Claro! ya se esta mal follada, como no me habré dado cuenta antes. pensaba mientras finalmente se sentaba en su silla que era la que sencillamente se había quedado libre.

Inclino la silla atrás y levanto las dos patas delanteras de la silla, y durante lo discursos de los presentes estubo un rato balanceando su silla adelante y atrás, primero muy levemente, y poco a poco y  causa de su aburrimiento, fue hiendo a más poco a poco, jugando se en cada saltito un poco más el fisico, con la emoción y la pequeña subida de adrenalina de cuando llegaba a ese punto de no retorno y solo el contrapeso de sus pies que se levantaban lograba evitar una estrepitosa caída. Como gozaba con ese juego desde hacía tiempo y sobre todo en la academia donde ya no podía seguir experimentando esa emoción sumada a la de si le pillaba la profe y aquí parecía que a nadie le molestara demasiado pues sus asuntos eran bastante importantes como para preocuparse de lo que un mono con un mono negro de astroartillero fuera haciendo.

Sonrió tímidamente y le comentó: - Prefiero las ruedas y cadenas. Me gusta eso de tener contacto con lo que toco. Y sonrió otra vez tímidamente. De todas maneras eso no era correcto del todo. También volar. Ella era piloto y lo tenía que entender. Aprendería mucho de ella.

Esperó que alguien le introdujese en aquella visita al penitenciario. ¿Recuperarían pronto a aquel compañero?

Miró a su amigo y viendo que jugaba con fuego le reprimendó - Maese Oldrich, deja las sillas antes de que alguien se haga daño.

Alex se dirige a todos, de pie frente al numerosos gropo, vestido con un mono azul de la penitenciaria y unas zapatillas sin cordones...

- Lo primero es agradeceros a todos que esteis aqui, me alegro mucho de poder veros una ultima vez... a aquellos que no nos conocemos... yo soy Alexsander Raynor, antugüo capitán de La Fenix Estelar y antigüo socio de Precious... es un placer conocerles y os agradezco vuestra asistencia... su cara cambia a extrañeza, al ver a Oldrich y no puede evitar preguntarle en voz baja a Marck - le pasa algo a este hombre? parece como ausente o algo disperso ¿no?... pero no le presta mayor atencion...

Una vez todos sentados - Lo segundo es...  agradecerte a ti, Precious que hallas dejado todo para venir a ayudar a tus antiguos compañeros, se que en el pasado tuvimos nuestras diferencias y quiero disculparme por como me comporte, pues al margen de tus formas... tenias razon en muchos aspectos... y mirame!!! aqui encerrado por no preocuparme en lo que trasportaba en la bodega de carga...

El capitan de la Fenix se dirige a todos... - Ilia me conto muy por encima lo que sucede y la oferta de Precious... no se como quedo, si se a hablado mas sobre el tema o que, pero me alegro de veros a todos y aunque pueda parecer una reunion familiar esto no es mas que una advertencia para todos vosotros...

- su mirada se endurece - no voy a salir vivo de este planeta, lo se, pero eso no me preocupa... lo que si me preocupa es que los mismos que quieren verme muerto, tambien quieren haceros daño a vosotros...- refiriendose a la tripulacion de la Fenix... - A la Arcologia no le hizo mucha gracia que entregara la carga a las autoridades y por eso piden sangre y por eso creo que mas que nunca debeis permanecer alerta en todo momento... os perseguiran por muy lejos que os valláis 

Precious, tu y tu nave no correis peligro, ya que es imposible que te relacionen con lo sucedido, pero nunca esta de mas ser precabídos, en eso tu sabes que hacer... esto me lleva a la siguiente cuestion, que es esa asociacion que teneis a medio concretar ¿no es asi?... creo que lo que se debe tener en cuenta es que de las dos naves la Fen... - Alex comienza a hablar pero se detiene al ver vuestras caras... algo no va bien entre vosotros y se da cuenta de eso...  sucede algo?...