Partida Rol por web

Antes de ir a la cabina, pase por mi mesa y recogi las hojas con la informacion sobre las naves, y mientras me dirigia a la cabina del piloto las estudie para localizar un laboratorio para el Doctor Baltar, o al menos un lugar apropiado para situar el mismo.

Hecho esto, entre en la cabina y me dirigi al capitan.

- Capitan, necesito comunicarme con la Galactica, ¿puede facilitarme un canal? y otra cosa ¿hay alguna noticia relevante sobre la situacion de la flota?

-Pe... pero puedes estar en mi mente porque sufrí un shock- el Doctor paseaba por los pasilloshasta llegar a su destino, apoyando su teoría- Eso es, me golpeé en la cabeza. Y claro, mi parte negativa se materializó en algo seductor, atractivo, pero venenoso y malintencionado.

Baltar estaba casi seguro de que esa era la razón.

-Porque si no fueras una alucinación fruto de mi subconsciente, ¿qué serías? ¿Un ente invisible para el resto menos para mí? Eso no es nada racional, "querida"

El capitán te saludó brevemente cuando entraste en la cabina. El trabajo de los pilotos era escaso ya que se componía básicamente en seguir estacionados en la misma formación junto a Ragnar. La imponente silueta de la Galáctica destacaba por encima del resto de naves civiles. Estudiando los informes de las naves supervivientes, tu conclusión más lógica es que la propia Estrella de Combate sería el lugar idóneo para que el doctor Baltar montase su laboratorio. Así de paso los militares podrían tenerle en custodia por si al final no resultase de fiar.

-Ya tiene el canal abierto, señor secretario -te informó el capitán-. Cuando quiera.

-Supongo que esa excusa podría servirte, Gaius. Pero me parece ridículo que creas eso ¿Un golpe en la cabeza? En cuanto a lo que soy o no soy ¿qué prefieres? ¿Una enviada de Dios? Una agente cylon remota? ¿Ambas cosas? -la mujer soltó una cantarina risa que te hizo sonreir débilmente a ti también.

-Bueno, mi explicación es más... racional, y por muy inteligente y manipulador que sea mi subconsciente debe de ser la opción correcta- decía, hablando solo con lo que fuese lo que tenía ante sus ojos, como si fuera lo más natural del mundo. Aunque procuraba que no hubiera nadie cuando pronunciaba la palabra cylon- Porque la idea del cylon remoto es algo enrevesada hasta para vosotros, y la otra alternativa, ¿una enviada de Dios? Eso es fantasía, además, ¿no querrás decir dioses? Creo que hay unos cuantos, a cual más poderoso.

Baltar no creía demasiado en la mitología, así que trataba este tema con escepticismo e ironía.

-Además, si yo me equivoco y tú tienes razón. Si eres una "agente" o un enviado celestial, tendrás un propósito, una meta, un objetivo o algo de mí. Pero solo escucho cosas negativas, sin duda soy yo mismo... mis miedos, los que hablan. Pero puedo acostumbrarme a eso, mi lado sabio ganará al de los impulsos y terrores.

Gaius seguía andando hacia su destino. La presidenta le había hecho una petición, y pensaba cumplirla, por confusa que estuviera su mente.

Mientras caminas por los pasillos de la Colonial One, con la mujer rubia a tu lado, caes en la cuenta de que el mejor lugar para desarrollar tu trabajo es la vieja Estación de Combate. Ninguna nave civil podría proporcionarte lo que necesitas en cuanto a material y suministros pero la Galáctica seguro sería el lugar idóneo ¿Estaría la Presidenta de acuerdo en trasladarte allí? ¿Y el comandante de la nave? Conocías a Adama de oídas. Un oficial de la antigua escuela, un perro viejo con demasiados años y batallas a su espalda. Pero que conseguía la admiración y el respeto de todos cuanto estaban a su mando.

El eminente científico deshizo sus pasos... pensó que lo mejor era pedir permiso a la presidenta para que le trasladaran al Galactica. Sabía que allí habría suministros que le vendrían bien, y lo más importante, tan rodeado de militares y defensa estaría a salvo de posibles ataques.

Al llegar al despacho de Roslin golpeó la puerta para pedir permiso y la abrió.

-Señora presidenta, ¿se puede? Creo que ya he decidido mi primer paso.

El silencio de radio comenzo a preocuparme por lo que pedi al capitan que informase a la Presidenta Roslin de que al parecer habia problemas en las comunicaciones con Galactica.

Billy regresó de hablar con el capitán y se reunió con la presidenta en el despacho improvisado. Entonces, antes de que pudieran seguir con su trabajo, Baltar regresó de nuevo:

-Señora presidenta, ¿se puede? Creo que ya he decidido mi primer paso.

Estaba a punto de contarle a la presidenta lo ocurrido, cuando entro Baltar y decidi guardar silencio. Sencillamente le dedique una sonrisa y un saludo respetuoso, mientras esperaba a que Laura me indicase si quedarme o irme.

El Doctor ni siquiera dio tiempo a la presidenta el decidir si su ayudante se quedaba o no, a él poco le interesaban los protocolos políticos, solo tenía algo que decir.

-Apruebo los planes que tiene usted preparados para mí, Sra. presidenta, y le agradezco que quiera buscarme un hueco dentro de la flota- Baltar hace una pausa para pasar a la petición que tenía preparada para la presidenta- Pero he estado pensando. El mejor sitio para realizar mi trabajo no sería en un laboratorio acondicionado en una de las naves civiles, sino en la estrella de combate. Sin duda allí tendrán todo lo que necesito, y por eso hablo con usted. Querría ver si le parecía bien y si podría hablar con el Comandante- se paró un segundo para recordar el nombre de la persona que estaba al mando y de la que tanto hablaban- Adama para que me admita.

Gaius se queda junto a la puerta esperando la respuesta de Roslin.

Cuando Baltar menciono a Adama negue con la cabeza.

Roslin estaba a punto de pedir a Billy que se quedara cuando oyó la precipitada propuesta de Baltar. ¿Este hombre no sabe qué es el respeto? pensó enarcando una ceja. Miró de reojo a su ayudante, sacudió levemente la cabeza para sacarle hierro al asunto y no enojarse y se dirigió al científico.

- Dr Baltar, valoro sus opiniones como científico con el peso que merecen, pero ¿como sabe que en la Galáctica tendrán el equipamiento que necesita? ¿Ha estado allí y lo ha comprovado?- le preguntó con perplejidad- En caso afirmativo, tendré en cuenta su propuesta y yo misma lo negociaré con Adama, puesto que no es adecuado que lo haga usted; pero recuerde que en lo que a la estrella de combate se refiere, el comandante tiene la última palabra- añadió, esperando con curiosidad la respuesta de Gaius.

-Señora presidenta- prosiguió el científico, sin apenas caer en la cuenta de que el ayudante de Roslin estaba en la sala- no creo que sea necesario decir que es algo en extremo obvio. Una nave de combate seguramente tenga de todo, suministros químicos y medicinales, salas seguras en las que hacer experimentos y algunos materiales que podrían ser volátiles. Además, tenga en cuenta que usted me ha pedido que estudie una posible defensa para enfrentarnos a los cylons. La mejor forma de hacerlo es conociendo la principal baza que tenemos para salir victoriosos, y eso es el Galactica, por lo que combinar mis estudios con su defensa es, no creo que haga falta que se lo diga, la mejor opción.

Y luego estaba otro motivo importante, solo ahí se sentía seguro, pero no quería dar la impresión equivocada de que lo hacía por cobardía.

-Porque no se ofenda, creo sin duda que la flota civil está preparada para sobrevivir al viaje, pero quizá no para resistir al fuego enemigo, y lo único que tenemos hasta ahora es lo que yo pueda demostrar en el laboratorio. Y la estrella de combate es el sitio más seguro que tenemos. Y creo que mi trabajo será necesario y útil, no podemos arriesgarnos a perderlo en un ataque cylon. Sin embargo, en Galactica el trabajo estaría más a salvo.

- Ejem

La conversacion estava subiendo de tono, y decidi que era el momento de intervenir antes de que los animos se crispasen mas.

- Perdonen que les interrumpa - dije con el tono mas respetuoso que pude - Pero eso va a ser imposible, al menos en este momento.

Cuando ambos se giraron para saber de que estaba hablando, mantuve la vista alta, pero no habia ninguna sonrisa en mi rostro.

- No podemos comunicarnos con la Galactica.

Dudando si continuar o no mire a Laura, esperando que me indicase de alguna manera que prosiguiese o que despachase al doctor Baltar.

Cita:

-¿Viaje? ¿De qué viaje hablas Gaius? ¿Os vais a alguna parte? -te susurró la mujer junto a tu oído derecho.

-Porque supongo que eludiremos a los cylons por un tiempo - le dijo a la presidenta, aunque parecía que miraba a alguien más- Hasta rearmarnos y saber más sobre ellos y sus defensas, ¿no?

Entonces es cuando el Doctor cayó en la presencia de su ayudante. Tenía problemas en comunicarse con el Galactica. Suponer que todo iría bien era mucho pedir.

-Vaya, así que no tenemos comunicaciones con la nave. ¿Puedo ayudar en eso? Aunque aviso mis conocimientos de mecánica se centran en aparatos sofisticados y complejos.

"Y no he visto mucho de eso desde que he estado aquí"- pensó Baltar,