Partida Rol por web

James, de momento, decidió situarse cerca de Reese, un poco atrasado. Le miró de soslayo con una sonrisa de confidencialidad. Primero quería ver qué decían o Juggler o su compañero y si necesitaban ayuda ya intentaría decir algo. Mientras, creía que sería mejor dar únicamente apoyo moral.

Pero vista la reacción de Reese, decidió intervenir antes de que a Mordius le diera tiempo de tomar una decisión.

Señor, no tenga en cuenta a mi amigo. Sonaba con un tono poco habitual en él, amable y muy respetuoso Lo que quiere decir es que no ha estado bien mentirle pero, que si es Vd. piadoso y tiene en cuenta todo el bien que ha hecho mi compañero por la ciudad, podrá ver que el error ya está saldado. Parecía que tanto tiempo con vampiros estirados y con bohemios del arte le había servido para saber cómo hablarle a alguien de la alcurniade Mordius. Quiero recordarle que a pesar de que nuestra vida como vástagos ha sido breve hemos intentado servirle de la mejor de las maneras. No olvidará la protección que le hemos brindado a su chiquilla, ¿verdad? No pudo evitar mirar a Allicia durante un instante. Instante que tal vez para la situación en la que se encontraba era demasiado largo. No me cabe duda de que han obrado mal, pero sies que se merece mi compañero un castigo, este debería ser mínimo, teniendo en cuenta que el resto de sus actos ha sido intachable.

Entonces James calló, ya no tenía nada que decir y, la verdad es que estaba agotado por intentar mantener un tono al que no estaba acostumbrado. Esperaba que lo que había dicho fuera suficiente.

La mujer entra en la casa y rápidamente uno de los grandullones sirvientes recoge su abrigo, luego sin mediar palabra se encamina rápidamente hacia el salón. No hace falta que ninguno de los sirvientes le indique donde está el salón. ¿Conoce ya la casa? ¿quien sera?

Al pasar a tu lado te sonríe como saludo y se encamina con paso rápido al salón sin dar tiempo para que inicies una conversación.

El príncipe lanza una mirada fulminante a James. ¿Quién eres tú para entrometerte en la discusión? Pero Mordius permite que el rastafaria acabe su defensa de Resse. Puede que tengas razón. Su voz sigue sonando chillona e irritada. Pero esto no puede quedar así.

El grandullón se raca la barbilla, y lanza una mirada de aprobación a James, ¿y porque no puede seguir así? No ha pasado nada. La ingenuidad demostrada por Juggler en su respuesta es casi infantil. El príncipe mira enfurecido de nuevo a Juggler, y el silencio inunda la sala, la ira del príncipe esta a punto de descargarse sobre el grandullón. Pero….

Las puertas se abren de golpe y una mujer entra en el salón marcando el paso con sus tacones, viste un delicado traje de noche negro, que resalta su pelo rubio platino. Mordius enmudece de golpe y solo es capaz de pronunciar una única palabra. ¿Anabelle? La mujer sigue avanzando hasta esta a apenas unos centímetros del Príncipe y sonríe, esta espera hasta que Mordius con gesto torpe y nervioso le da un beso en la mejilla a la recién llegada. ¿Qué haces aquí? Pregunta con nerviosismo el príncipe. Anabelle solo responde con una sonrisa y agarra sensualmente del brazo al príncipe conduciéndolo hacia una de las puertas del salón, sonriendo cortésmente a todos mientras se marchan con el príncipe fuera del salón que la sigue con paso torpe y apresurado.

Anabelle, Annabelle Triabel. Como uno podría olvidarse de ella, pero la cuestión no era esa, sino: ¿Qué hacia uno de los antiguos más poderosos de Chicago en Gary?

Aunque Carmilla te hubiera abrazado en Gary, antes había pedido permiso a la primogénita del Clan toreador de Chicago, Anabelle. Apenas recuerdas nada de esa reunión fue fugaz, en ella la única que hablo fue Carmilla, Anabelle solo hizo un par de preguntas con marcado acento francés antes de aceptar tu abrazo y marchar.

La llegada de la rubia calma una situación lo suficientemente tensa. Y es de agradecer, al parecer el príncipe es un mero títere que sigue en su posición porque nadie es tan estúpido como para desear este principado.
No puedo evitar mostrar interés en la conversación que puede darse ahí dentro, así que me coloco en una posición adecuada y trato de escuchar algo.

Sebastian siguió con la mirada a Anabelle, con interés apreció cada detalle de la vampiresa, su porte, su talante, todo era impecable, así que o la habían enseñado a conciencia o tenía mas de 50 años. la curiosidad por conocer y el suficiente sentido común añadido por Danov le sugerían que debía medir sus palabras con esa mujer, sin embargo como un aguila a la espera de un ratón se acercó a su cuadrilla y se puso al lado del "chico maravilla"

-esto es interesante ¿quien sera esa Anabelle....es preciosa....esos rasgos nordicos....parece una muñeca de porcelana....debe de ser tan peligrosa como atractiva.-dijo emocionado agarrando a Resse por su brazo ciclado.

al vastago casi se le va el tema principal mira al rubio vigorexico y le da un pequeño plácaje

-¿ves lo que te decía? nada que temer, eres un respetado neonato de esta ciudad, has echo cosas que no se pueden negar por el príncipe y su progenie, y la culpa es de tu sire no tuya.

eso me recuerda que...

el psicologo se giró hacia James como un fan hacía una estrella

James, lo que has dicho antes a sido....Impresionante, no solo lo que has dicho sino como lo has dicho, desde la puerta me a llegado tu voz, tu tono tu actitud...a sido como ver a Keanu Reeves en la pelicula que interpreta con Alpacino, no solo eso, puede que no te hallas dado cuenta pero al quedarte con Resse has añadido fuerza a su defensa, has mostrado la contrariedad al príncipe y has dejado patente su falta de actitud hacía el cargo...-Sebastian gesticulaba a la vez que hablaba símbolo patente de que estaba disfrutando al máximo.-¡A sido una defensa Magistral! mas tarde salgamos a cazar juntos...en tu honor-miro a Resse con una mirada complice-¡se lo a ganado! ¿o no?

James respoló profundamente. Miró a Reese y le dió una palmadita en el hombro Bueno, parece que ha ido mejor de lo que esperábamos. Después se acercó con disimulopara escuchar parte de la conversación entre Anabelle y Mordius, conversación que le interesaba de verdad.

James miró sorprendido a Sebastian. Se tomó un tiempo para responder. ¿Le estaba vacilando el colega o le estaba dando una enhorabuena sincera?. Ciertamente no lo tenía muy claro porque nunca había visto a su compañero tan eufórico. Decidió darle un voto de confianza y pensar que en el fondo no era tan, como él diría, cabrón.

Bueno, por suerte o por desgracia empiezo a acostumbrarme a estar con gente... ya sabes. James volvía a ser el mismo de antes: hombros caídos, mirada mal encarada y las manos en los bolsillos, en una postura poco elegante. Al fin y al cabo no iba a ser "cenicienta" por siempre.

En cuanto a Anabelle, yo la conozco. Es de Chicago, una Antigua o como se diga. Es... esto... la primogénita del clan Toreador allí.

-Muchas gracias James... has estado espectacular. Espero que el príncipe atienda tu alegato.

Estaba emocionado por contar con un amigo que lo hubiera defendido y hubiera ensalzado su labor en la ciudad.

Si la verdad que se merece una plaza en el despiporre que llamamos caza.

Sonríe un poco. Si ahora mismo no le importaría irse a una de esas orgias de sangre y sexo. Se sentía amenazado por estar en medio de lo que sea que se tramara aquí.

Por cierto la primogénita ha ninguneado a nuestro príncipe.

Simplemente prestando algo de atención se pueden oír los gritos de Mordius al otro lado de la puerta, el carácter irritable del príncipe hace acto de presencia. En cambio oír la voz de Annabelle es algo mas complicado, su voz es apenas un susurro con marcado acento francés.

Me han pedido que te entregue esto.

Ruido de papel, y unos minutos de silencio.

¡CÓMO OSA DARME ÓRDENES DE ESTA FORMA! No lo toleraré, por muy príncipe que sea. Se escucha como alguien rompe una hoja de papel.

Su lenguaje es algo fuerte, pero debes hacer concesiones

¡NO! Lodin puede regir sobre su territorio pero, pero ¡Gary es MIO!

Deberías de ceder, una presentación formal de los nuevos vástagos al príncipe vecino no es una claudicación

¿CÓMO? Está pidiendo que me humille, que me incline ante él, primero empezara con minucias como esta para que finalmente acabe bebiendo de su sangre.

Lodin, no ha pedido que te arrodilles.

¡Sí que lo ha hecho! ¡ESTÁ TRATANDO DE SUBYUGARME!

Envía a tus neonatos a Chicago y que se presente ante él, y si Lodin hace alguna estupidez podrás apelar a las más altas estancias de la Camarilla.

¿Una trampa? Si eso me gusta. Si Lodin se excede, todo el peso de la justicia caerá sobre él.

Además podrías enviar a los neonatos con una carta con tus propuestas.

Si, de esa manera no estoy siguiendo las exigencias de Lodin.

La conversación se tranquiliza y se aleja de la puerta volviéndose inaudible.

Simplemente prestando algo de atención se pueden oír los gritos de Mordius al otro lado de la puerta, el carácter irritable del príncipe hace acto de presencia. En cambio oír la voz de Annabelle es algo mas complicado, su voz es apenas un susurro con marcado acento francés.

Me han pedido que te entregue esto.

Ruido de papel, y unos minutos de silencio.

¡CÓMO OSA DARME ÓRDENES DE ESTA FORMA! No lo toleraré, por muy príncipe que sea. Se escucha como alguien rompe una hoja de papel.

Su lenguaje es algo fuerte, pero debes hacer concesiones

¡NO! Lodin puede regir sobre su territorio pero, pero ¡Gary es MIO!

Deberías de ceder, una presentación formal de los nuevos vástagos al príncipe vecino no es una claudicación

¿CÓMO? Está pidiendo que me humille, que me incline ante él, primero empezara con minucias como esta para que finalmente acabe bebiendo de su sangre.

Lodin, no ha pedido que te arrodilles.

¡Sí que lo ha hecho! ¡ESTÁ TRATANDO DE SUBYUGARME!

Envía a tus neonatos a Chicago y que se presente ante él, y si Lodin hace alguna estupidez podrás apelar a las más altas estancias de la Camarilla.

¿Una trampa? Si eso me gusta. Si Lodin se excede, todo el peso de la justicia caerá sobre él.

Además podrías enviar a los neonatos con una carta con tus propuestas.

Si, de esa manera no estoy siguiendo las exigencias de Lodin.

La conversación se tranquiliza y se aleja de la puerta volviéndose inaudible.

Simplemente prestando algo de atención se pueden oír los gritos de Mordius al otro lado de la puerta, el carácter irritable del príncipe hace acto de presencia. En cambio oír la voz de Annabelle es algo mas complicado, su voz es apenas un susurro con marcado acento francés.

Me han pedido que te entregue esto.

Ruido de papel, y unos minutos de silencio.

¡CÓMO OSA DARME ÓRDENES DE ESTA FORMA! No lo toleraré, por muy príncipe que sea. Se escucha como alguien rompe una hoja de papel.

Su lenguaje es algo fuerte, pero debes hacer concesiones

¡NO! Lodin puede regir sobre su territorio pero, pero ¡Gary es MIO!

Deberías de ceder, una presentación formal de los nuevos vástagos al príncipe vecino no es una claudicación

¿CÓMO? Está pidiendo que me humille, que me incline ante él, primero empezara con minucias como esta para que finalmente acabe bebiendo de su sangre.

Lodin, no ha pedido que te arrodilles.

¡Sí que lo ha hecho! ¡ESTÁ TRATANDO DE SUBYUGARME!

Envía a tus neonatos a Chicago y que se presente ante él, y si Lodin hace alguna estupidez podrás apelar a las más altas estancias de la Camarilla.

¿Una trampa? Si eso me gusta. Si Lodin se excede, todo el peso de la justicia caerá sobre él.

Además podrías enviar a los neonatos con una carta con tus propuestas.

Si, de esa manera no estoy siguiendo las exigencias de Lodin.

La conversación se tranquiliza y se aleja de la puerta volviéndose inaudible.

Los minutos pasan lentamente, y en el salón vuelve la calma. El nosferatu y Lucian comienzan a hablar del tráfico de mercancías en el puerto después de que Lucian rechazara el tema de conversación propuesto por el nosferatu, la salvación espiritual. La vampiresa y el Yonki, parece estar jugando a un tres en raya con la libreta de esta, siguiendo los consejos de Resse. Y Juggler… ¿Dónde está el vigoréxico? Ya no hay rastro del musculoso rubio, ha debido aprovechar la confusión creada por la entrada de Annabelle para escapar de la reunión.

Resee suspira -Nuestro principe es arcilla en las manos de todo el mundo, mi sire es un escapista y me temo que en breves nos vamos a Chicago. Todo "perfecto", otro marrón más.

James asintió lentamente. Parecía que su compañero también había oído la conversación. Míralo por este lado, seguro que es tu misión de "redención". La verdad es que será pan comido. Ir presentarse y de vuelta a casa... O eso espero...

Sebastian miró a sus compañeros extrañado

-¿como?

-La "fen fatal" esta reclamándole a Mordius que mande a los neonatos a presentarse ante el príncipe de Chicago y una vez más como nuestro gobernante es como arcilla en manos de un alfarero. (Se pierde unos segundos imaginándose a sí mismo en manos de la pelo platino). Parece que encima tendremos que leerle una carta con las exigencias de Mordius al principito de chicago para que aunque hace lo que le manda parezca que es una idea suya.

Resee está sorprendido de que Sebastian no este haciendo oreja de lo que ocurre en la otra sala.