Partida Rol por web

Te acostás en la cama. En lo que estas mirando al techo antes de dormirte ves dos ojos que te miran. Imaginas a Bones encima tuyo, tocándote y haciéndote suya. Durante unos momentos te estremeces pero luego te quedas dormida.

No sabes cuanto dormís, pero volvés a abrir los ojos mas o menos a las 4 de la tarde. Tu mama ya no esta acostada pero la oís abajo hablando con tus abuelos.

Ella se aleja sin decirte nada. Vos realmente estas exhausto. Todavía sentís su aroma en tu cuerpo haciéndote estremecer. Es una gatita deliciosa. Pero lo mejor seria descansar para el entrenamiento del día siguiente.

Te acostás, y no tardas demasiado en conciliar el sueño. Cuando volvés a abrir los ojos sabes que es de día, pero deben ser las 4:30 o 5 de la tarde como mucho. Sabes que en cuanto anochezca ella tiene que volver si es que tiene palabra.

Paso el resto del dia en ese duermevela que hay cuando uno está conscientemente esperando algo. Y al anochecer, me despierto contento, esperando que venga pronto mi gatita.

En lo que estas esperándola te preguntas si vendrá. Si se va a aguantar tu duro entrenamiento. Tenes planeado algo divertido. Escalar montañas con rocas pesadas para mejorar su fuerza, correr muchísimo kilómetros para su aguante. Pero lo mejor de todo es que vas a tener que sacarle esa timidez. Un cambio de vestuario, ropa provocativa para ser un bocadito rico para los vampiros, y el lenguaje guarro para que se le vaya la vergüenza. Por lo menos tiene un panorama prometedor, si es que viene...

Cat se levanta, con un dolor de cabeza descomunal.

Desde luego, a qué venían tales "imaginaciones"?

Escucha a su madre abajo, por lo que se viste, hace la cama, se lava, y baja junto a su familia.

-Mnas tardes...-murmura leve.

Tu madre te mira con una leve sonrisa.

-Buenos Días Catherine...¿Has descansado? Anoche has llegado tarde...-

Te dice tranquila.

Cat sonríe leve:

-Ah... Esto... Sí, es que mis amigas no me dejaban irme... Ya sabes... Estábamos realmente divirtiéndonos...-Sonríe amable.

-¿Todo bien por aquí?-Mira a sus abuelos sonriente aún.

Tu mama te mira fijo, antes de tomarte del brazo y sacarte de la cocina. Su mirada esta fija en vos, como si te estudiara.

-¿Has matado a alguno de esos monstruos Catherine?-

Te pregunta algo ilusionada esperando tu respuesta.

Cat mira a su madre sonriendo tensa...

-Eh... Bueno... Realmente anoche se me escapó la presa... Pero le estuve siguiendo, por lo cual tardé tanto, y creo que podré llegar a uno de "esos monstruos" de los poderosos... Uno que parece que sólo gusta de poseer a jovencitas... Alguien que realmente merece morir...-Señala seria, obviando de su cabeza a Bones...

-Por eso, no te preocupes... Ese monstruo vale como mil...-Añade, tranquilizadora.

Ella te sonríe y te asiente. Satisfecha.

-Muy bien Catherine...no lo olvides tu también posees a ese monstruo en tu interior que siempre intenta dominarte, no le dejes ganar...todos ellos merecen la muerte...-

Dice de manera acusadora.

Le mira intentando sonreír, pero apenas si puede...

Aquéllas palabras eran muy duras para salir de su madre.. Era como si la llamase indirectamente monstruo a ella también..

-Sí.. Claro.. No lo olvido, tranquila...-Evita un suspiro, y señala, dándole un beso frío a su madre:-Me voy a ir por ahí... Tengo que buscar algo de información y... Armas y esas cosas... Ya volveré luego. ¡Cuídate!

Y sin más se vuelve a su habitación, se prepara, arreglándose, y aunque fuese de tarde, se va de casa...

Ahora mismo no tenía ganas de estar con nadie. Se sentía bastante desgraciada.

Salís de la casa. Es bastante tardecito, aunque todavia falta para que anochezca. Sabes que tu mama siempre dice esas cosas aunque ella no sepa que te duelen.

¿Hacia adonde vas?

Se encamina hacia algún bar o heladería, un sitio en el que pudiese comer algo, puesto que tenía algo de hambre, y con el estómago vacío no lograba pensar...

En cuanto encuentra alguno, se sienta pesadamente, descansando...

Te sentás tranquila, mientras una camarera se te acerca para tomar tu pedido. Quedándose a tu lado para aguardar a ver si querés que tome nota. Te preguntas si el estará esperándote o habrá sido todo un sueño lo que ocurrió la noche anterior.

-Un croissant con jamón y queso, y un zumo de melocotón, por favor...-pide la pelirroja a la camarera. 

Mientras aguarda, apoya levemente el codo en la mesa, y la cabeza en su mano, evitando suspirar. 

¿Por qué leñes no había podido matar a ese vampiro estúpido?

Ojalá fuese un sueño...

Así se acabarían la mitad de sus problemas... 

La chica te asiente mientras se aleja preparando tu pedido. No sabes por que no pudiste matarlo, pero algo en tu interior te dice que tu vida no va a volver a ser como antes ahora que lo conociste y que vas a trabajar con el. Aunque también te sentís algo ansiosa por verlo, aunque lo niegues.

La camarera te trae el pedido a los diez minutos y se marcha. Dejándote sola con tu comida que tiene un aspecto genial. O tal vez tenes demasiada hambre.